Yo no estoy enamorada de nadie, me debo a mi don. Dice con resignación.
Miro a Lautaah con cariño y haciendo un desden hacia el lugar donde estaba Belphegor digo: No se cansa de mentir...
-Puedes creer lo que quieras Akor, el poder del caos se traspasa cada vez que cambias tu poder si el receptor tiene un poder oculto, he sido cupido, ejecutor, torturador, y necrofilo, aunque lo ultimo no lo he puesto a prueba, es lo que me ha dado nuestro orco torturador aparte de su titulo publico.- Dijo Belphegor tumbandose en el suelo.
-Bueno, yo creo que al final vamos a ser los cuatro inocentes, pero los votos son los votos, adelante, matadme no me resistire.- Añadio el no-muerto.
-Ah y ya que te debes a tu don, preguntale al orco si tenia pasiones por los muertos, veamos que te responde.- Dijo de nuevo con una sonrisa.
Pero vamos a ver, alma de cántaro. Dice Bayard dirigiéndose a Belphegor. ¿Cómo vamos a ser todos inocentes? Si no hubiera aquí un traidor pues habría pasado algo, podríamos salir, habría fuegos artificiales... No sé, algo pasaría, seguro. Si seguimos aquí encerrados es porque alguno está mintiendo que te cagas de bien. Y a mí con todas estas películas raras que nos cuentas me da que eres tú, qué quieres que te diga...
Bueno pues parece que está decidido, con 3 votos Belphegor sería nuestro elegido. Espero que estemos en lo cierto
-Imaginate, que tal vez solo existia la encarnacion de Azidahaka, han muerto incontables personas y ninguna ha dejado muestras malignas mas que el goblin, imaginaos que no somos nosotros los traidores sino el templo, o alguien que habita en el, ¿no seria impresionante, que hubierais matado a sangre fria a tantos inocentes?, si esperas fuegos artificiales, o que algo ocurra, bienvenido al mundo real, donde solo la sangre y la muerte es lo que se obtiene de luchar con Azidahaka, no obtendras recompensa, no obtendras gloria, solo estos bellos recuerdos de brutalidad sin sentido, pero en fin, ¿me matais ya o que?, me aburro.- Hablo nuevamente el no-muerto.