MAIVËLAER CALIMON, GUARDÍAN DÚNADAN
Agmar escribió:
El tiempo de partir se acerca.
Con un pie sobre la dura y fría piedra del muro que conforma una de las barreras de protección de aquel castillo al que ha llamado hogar durante toda su corta vida, Calimon mira hacia el horizonte nuboso y ahora gris por la fina lluvia que cae desde el encapotado orbe.
Un viento cortante lo obliga a protegerse con su capa de invierno, pero aun así, el frio tiene maneras de colarse calando en la piel profundamente, como una daga afilada.
Nacido por la lujuria de un padre amante de los excesos que la vida puede brindar a aquellos que tienen poder, Calimon es uno de los hijos del señor de Arthedain, uno bastardo claro, pero reconocido por este ante aquellos que murmuran entre los oscuros pasillos de piedra de la fortaleza.
La madre de Calimon, mujer dulce y campechana, vive en el valle junto al resto de su familia, la misma que hace tiempo no ve, ocupado como ha estado todos estos años esforzándose entre los muchos aduladores y aguerridos guerreros que conforman corte y ejercito de los últimos Dunandan.
No ha tenido una vida holgada ni ostentosa cosa merecida por sangre pero negada por procedencia, mas, contrario a lo que muchos podrían presuponer Calimon no es huraño y resentido, al contrario, trata a todo el mundo con respeto y bondad merced de un corazón cálido que ama la vida y a todas las criaturas sintientes que pueblan el mundo.
Hábil con la espada y el escudo, este joven guerrero ha formado parte de muchas batidas de exploración, he incluso durante algunas temporadas tuvo a cargo la protección de Bree.
Un cargo mas ganado por sus lazos de sangre que por su experiencia en verdad, pero bien aprovechado por el activo muchacho, quien valiéndose de la ayuda del anterior guardián de esas tierras como consejero intento llevar la paz y la ley a las apacibles tierras bajo su cargo.
Durante su estadía en dicho cargo, se dedicaba a diario a realizar múltiples tareas, algunas no oficiales, como patrullar, ayudar en los litigios leves, e incluso como asistente de parto para alguna vaca cuyo ternero venia cruzado al mundo para alivio de algún granjero hobbit.
Lo que se dice, un corazón bondadoso y predispuesto. Y de ahí su nombre en Quenya “Calimon”, que traducido significa luminoso o el que brilla.Un nombre que ha adoptado y que antepone al dado al momento de su nacimiento “Maivelaer”, que significa espada cantarina, o aquel que esta siempre predispuesto para el combate.
Fue muy feliz durante su estadía en Bree, pero todo lo bueno siempre termina pronto, o no como uno quisiera, y lo mismo paso para el. Su padre, quien tuviera el hijo que su esposa tardo tanto tiempo en darle, le había llamado para ponerle como guardia y mentor de su vástago legal.Calimon podría haberse sentido ofendido, incluso podría haberse negado ante lo que otros considerarían un insulto.
Pero no esta en el corazón del muchacho la oscuridad necesaria para tales planteamientos, así que dejando con pesar su cargo, volvió a las frías piedras del castillo y a sus gentes mas parcas, durante casi seis años, tiempo en el que siguió a sol y sombra a su joven hermano, cuidándolo y enseñándole todo lo que el sabia, pero mas importante aun, tratando de contagiarle un poco de bondad con la esperanza de que en un futuro fuese un rey querido y recordado con bien por sus súbditos.
Y aunque esta labor fue menos esperada que la anterior, llego a amar todo lo que hacia en favor de aquel hermano que heredaría el trono, aunque el quedase siempre a su sombra y no se recordara de el mas que un ligero trazo en algún polvoriento libro de registros perdido.
Siempre supo que no habría loas para el en esta empresa, pero nunca que acabara de esta manera.
Ese momento. Es hoy.
Su padre ha decidido poner a su hermano en manos más “hábiles”, quiere que su vástago crezca más allá de la bondad y contemplación, a la que Calimon lo ha acostumbrado.
Las tierras que heredara necesitan a un hombre fuerte, con habilidad para las armas y el liderazgo de levas y milicias.
No un paladín, sino un guerrero.
Como recompensa a todos los años de servicio Calimon ha recibido del tesorero real las armas y la armadura que llevase todo este tiempo y que sacase de la armería del castillo por ocupar el puesto de guardia, sus pocas ropas y algunas monedas que ha juntado en todos estos años.
Y claro, unas breves palabras de agradecimiento de puño y letra de su padre.
Esta libre de su encargo y puede partir hacia donde quiera marchar, también puede solicitar unirse a las milicias de exploradores, e incluso intentar ganarse su lugar como guardia del castillo.
O partir.
Hace frio, y el viento parece cantarle al oído una triste melodía, allá arriba en las murallas de piedra.
Calimon mira con nostalgia el horizonte, quiere memorizar tanto como pueda, porque hoy.
Partirá de su hogar.
FICHA
http://www.filejungle.com/f/RsFFtx/Maivëlaer Calimon, Guardián Dunedain.ods
LISTAS DE HECHIZOS
Maestría de los Caminos, básica de Montaraz. Página 46 del Manual de Canalización
Formas de la Naturaleza, básica de Montaraz. Página 44 del Manual de Canalización
MANUAL DE CANALIZACIÓN
ALDO TALABARTA, HOBBIT ALBO LEGO
Nagredog escribió:
Curtido en el trabajo sus brazos eran consistentes y fibrosos, y sus manos aferraban con fuerza las herramientas que usaba. Media algo mas de un metro de alto, y se le consideraba alto entre sus congeneres. Su altura y forma física lo convertía en un joven portentoso. Ese fisico lo habia consdguido a base de trabajo y en las largas caminatas con su amigo Perkin y su fiel Puk, un pequeño Beagle de caza que lo seguia a todos lados.
El pelo rizado de Aldo era del color de las castañas maduras, como el de su madre. No había heredado el muy negro pelo de su padre, bueno si, en los pies, que estaban cubiertos de un pelaje oscurísimo y tupido, que mantenían sus pies bien calientes.
Aldo suele vestir de marrón y verde cuando no esta trabajando. Unos pantalones anchos de un marrón oscuro que sujeta con un cinturón, de cuero como no podía ser de otra manera, que el mismo se había hecho. El cinto estaba hecho de tiras de cuero de diferentes colores entrelazados y trenzados entre si. Una bonita filigrana de cuero en forma de hoja de roble, teñida de verde, hacia las veces de broche del cinturón. Una camisa de lino verdoso y una casaca a juego completaban su indumentaria. además en el frío invierno solía ponerse una capa marrón oscuro de lana, de esas con capucha, que le calentaba en sus viajecitos a la taberna o al bosque. En el trabajo se pone ropa blanca y un enorme delantal. Rara vez usa guantes, pues necesita sentí el cuero entre los dedos.
Puk. Mascota de Aldo, raza Beagle.
Otro dia de trabajo le esperaba al bueno de Aldo. Trabajaba en el negocio familiar, su padre, su madre y sus dos hermanos también lo hacían. El tatarabuelo Elzas Piedralasca llego a Combe para asentarse definitivamente y montar su negocio. El era guarnicionero, aunque no solo se dedicaba a los arreos, fabricaba cualquier cosa, todo con cuero. Cuando se instalo monto su casa cerca del río, al contrario que casi todos sus vecinos, que “empotraban” sus casas al mas puro estilo smials. El viejo Elzas necesitaba tener el agua cerca, para curtir y preparar las pieles que mas tarde trabajaría. Así, junto al río Juncales mando construir su casa de piedra, de dos plantas, en la que la inferior servia de taller. Arriba, varias habitaciones daban algo de intimidad a los miembros de la familia. Con el paso de los años se cambio el apellido, nadie le conocía por Piedralasca, si no por el de su oficio, era talabartero, el artesano del cuero. Desde el nacimiento de su primer hijo, el abuelo de Aldo, el apellido familiar paso a ser Talabarta.
El hijo de Elzas primero y el hijo de su hijo, el padre de Aldo, después, se habían hecho cargo del taller. Ese taller tenia dos zonas muy diferenciadas. La parte mas cercana al río tenia varias piscinas donde la piel era limpiada, curtida y preparada. De ello se ocupaba la madre de Aldo, Genara Pieancho, hija de una familia de la cuaderna oeste de la comarca, junto con el hijo menor y dos vecinos mas que estaban asalariados. La otra parte del taller estaba lleno de herramientas, bancos de trabajo, mordazas, moldes y pizarras, en las que su padre dibujaba los adornos antes de traspasarlos al cuero. Allí trabajaba Aldo, junto a su padre Benjamin Talabarta y otro hobbit, el bueno de Perkin Villaseca. Perkin además era el mejor amigo de Aldo, y juntos pasaban prácticamente todo el dia. Su perro Puk era un pequeño beagle, un cazador nato que levantaba a las mil maravillas los conejos cuando iba a cazar. Aun era joven y no siempre hacia caso, pero en general era un leal amigo.
Aldo trabajaba desde la salida del sol, hasta que este ya es escondía. Los grandes ventanales del taller dejaban entrar muchísima luz. En invierno el trabajo, como las horas de luz, bajaba y disponía de mucho mas tiempo libre. además de que todos los sábados, y domingos no se trabajaba, una norma que sabiamente dispuso su tatarabuelo, y de la cual Aldo estaba mas que orgulloso. Bueno realmente ellos no lo hacían, pero su madre y su padre si que iban al mercado dominical de Bree para vender sus productos y recoger pedidos. Un dia, hacia mucho tiempo ya, su familia se entero que una gran caravana que viajaba hacia el sur, llegaria a Bree en apenas un par de dias. Fue la unica ocasion en que su padre y su madre le pidieron que los acompañase para las ventas. Llegado el dia se personaron cerca de El Descanso del Rey para montar un tenderete y esperar asi a la ingente cantidad de viajeros que despues resultaron ser. Mas de cincuenta personas llegaron ese dia. Vendieron todo lo que pudieorn hasta agotar las existencias, e incluso tomaron notas de pedidos especiales de gente que pasaria alli varios dias. Entre las ventas, Aldo consiguio un trueque, para el hobbit muy bueno. Cambio una sencilla capa de lana por una mochila de cuero.
Aldo estaba encantado con la capa nueva, su padre sin embargo le reprendio por haber sido estafado. Asi hubiera sido, cambiar un articulo como una mochila por un pedazo de lana no parecia un gran trato. Pero la capa no era normal, tenia algo, no sabia que, seguramente algun filamento o tinte especial. Solo sabia que cuando cazaba con ella los animales casi no podian verle, ademas era como si apagara los sonidos de sus pisadas. Por supuesto nada dijo a su padre, pues lo hubiera tomado por tonto, o loco.
Ese tiempo libre lo pasaba siempre con Perkin, a ambos les gustaba pasear por el bosque durante mucho tiempo, colocar algunas trampas para conejos, e incluso se atrevían a cazar algún animal, como jabalíes o venados, con arco y flechas o con su honda. Puk lo ayudaba sobremanera en esas tareas. Eso además de comida para casa traía también materias primas para el trabajo. Después de varias horas deambulando por el bosque, siempre acababan en la Trucha Azul, la posada del pueblo. también les gustaba hacer visitas a otros amigos de Entibo o de Archet. Tanto él como Perkin se habían fabricado sendas hondas de cuero, preciosas tiras de cuero fino trenzado con una cesta, también de cuero. Juntos solían practicar con ese arma, llegando a matar incluso conejos con ella. La honda de Aldo, en particular, la tenia desde hacia muchisimo tiempo, y habia logrado perfilar una tecnica, algo extraña, con la que era capaz de lanzar y lanzar piedras como si estas nacieran en la cesta del arma. Esto era gracias a que se la habia hecho a medida, una medida perfecta para la longitud de su brazo y su altura.
Aldo aun no había cumplido la mayoría de edad, aun le faltaba un año entero para hacerlo, con veintinueve años era un joven apuesto y bien formado. Cuando cumpliese la mayoría de edad su padre comenzaría a instruirle en los quehaceres ocultos de mantener un negocio como aquel en marcha. Como hijo primogénito tenia el deber de mantener la tradición y cerciorarse de que la talabartería continuaría en funcionamiento.
Diariamente la familia Talabarta desayunaba junta en el comedor de arriba, y después bajaba charlando hasta el taller. Así pasaban toda la jornada, hablando mientras hacían sus trabajos, charlando de todo un poco y cotilleando sobre los vecinos. En el taller había varias paradas, aparte de las tres comidas principales, había dos descansos cortos por la mañana y dos por la tarde, en las que todos aprovechaban para meter algo al estomago.
Aldo había pedido a su padre, antes de comenzar su instrucción para llevar el negocio, permiso para ausentarse casi un año completo. Deseaba ver el mundo exterior, mas allá de Bree y de la comarca. Quería conocer enanos, elfos y dragones. Por supuesto su padre le intento persuadir, alegando que esas cosas no valían para nada, pero Aldo insistió tanto que su padre tuvo que dejarlo, con la condición de que el dia de su trigesimo cumpleaños estuviese allí de nuevo y comenzara su aprendizaje. El mismo dia que Benjamin Talabarta dio permiso a su hijo Aldo para ausentarse por prácticamente un año, el muchacho cogio su mochila de cuero y su bastón de caminar. Ademas desenterro todo el dinero que poseia, y que su abuelo le habia dejado "Que no se entere mi hijo, es todo cuanto tengo, guardalo bien", le dijo antes de entregarle una bolsita de cuero con cuatro brillantes monedas de oro. La cogio, la ato al cinto e introdujo la bolsa por dentro de los pantalones, y enfilo casi con lo puesto hacia Bree, con la idea de mezclarse con los caminantes del camino, no sabia de cual, pero de uno de ellos. Allí se dirigía, pero antes pasaría a despedirse de sus amigos. Su hermano Galu le salio al encuentro. Le traia un regalo, un tabardo de cuero marron, perfectametne tratado, con ribetes de cordon de cuero negro y adornos florales teñidos de verde en bajorelieve. Al parecer el bueno de su hermano ya temia su partida, pues largo tiempo tuvo que trabajar en la prenda, y se notaba el cariño de su manufactura. Entre lloros agradecio a Galu la prenda y se despidio para emprender su camino.
BREGOR BRUINEN, DESVALIJADOR DE ORIGEN DESCONOCIDO
thorom escribió:
Es un joven alto y delgado, de ojos negros y pelo rizado también negro como el azabache. Es un chaval de unos 18 o 19 años, zarrapastroso y con una incipiente barbita propia de su edad. Sus ropajes acentúan su apariencia de vagabundo. Lleva una capa oscura ribeteada con piel de marta, que aunque está bastante ajada por las inclemencias del tiempo y la vida en el bosque, parece que antaño fue bastante buena. Demasiado buena para alguien como él. Debajo de la capa se pueden ver unos ropajes sucios y descosidos, harapos también gastados y mil veces remendado.
Bregor. Eso es lo único que conoce de si mismo. Ese nombre y que nació en algún lugar cerca del río Bruinen.
Una familia que emigraba desde el este hacía Arthedain lo encontró en El Angulo, a orillas del río Bruinen, cerca de donde este río desemboca en el Fontegris. Era apenas un niño de tres años solo y asustado, y de no haber sido por aquellas gentes hubiera muerto a no mucho tardar. Lo llevaron a Bree donde lo criaron y educaron lo mejor que pudieron. No lo trataron como un hijo, pero si como un sobrino. Nunca le ocultaron quien era, y tampoco le dieron su apellido. Durante su niñez, su familia adoptiva y sus amigos en Bree le llamaban Bregor el del Bruinen. Y pronto eso paso a ser Bregor Bruinen, como si se tratase de un apellido. Un apellido que nació con él.
Cuándo cumplió 14 años sus padres adoptivos murieron y todo lo que tenían lo heredaron sus hijos, que tuvieron que empezar a trabajar para mantenerse. Y dado que sus hermanastros tenían lo justo para sobrevivir, nadie se pudo hacer cargo del muchacho. Bregor tan solo había recibido un estoque, una especie de espada pequeña que sus padres adoptivos habían encontrado junto a él y que habían guardado hasta ese momento.
El joven Bregor tuvo que buscarse la vida lo mejor que pudo y se alejó de Bree, vagabundeó por los bosques cercanos de Chet alimentándose de lo que podía cazar y durmiendo en las cuevas que consideraba seguras, y algunas veces en un molino cercano.
Durante esos cuatro años se las ingenió para colarse en la ciudad siempre que quería y recorrer sus calles, robando en alguna casa o a algún viajero confiado. Al principio lo hacía por necesidad: cuándo el primer invierno en el bosque se volvió duro y la caza se hizo imposible fue mendigando algo de pan y ropa pero nadie le quiso dar mucho. Fue entonces cuando robó en las cocinas de la posada El Descanso del Rey, y a uno de sus huéspedes le quitó una capa de lana gorda ribeteada con piel de marta. Aquel día no pudo dormir, pese a que la capa le daba calor suficiente, estaba muy asustado. Pensaba que en cualquier momento entrarían la guardia de Bree a su cueva y lo colgarían por ladrón. Pero eso no sucedió.
Pronto volvió a las andadas, nuevamente por necesidad, pero pasado un tiempo llegó a divertirse con ello. Incluso a veces provocaba a los guardias para que trataran de atraparle. Claro que alguna vez le pillaron y se llevó más de una reprimenda, pero Bregor sabía apañárselas en aquella ciudad llena de viajeros, que sin duda alguna eran su presa preferida.
Robó varias cosas más, una rodela, una ballesta que utilizaba para cazar... Hasta una vez robó un hilo dorado que le servía para remendarse las viejas ropas desgastadas que llevaba.
FICHA
http://www.filejungle.com/f/AvmcgZ/Bregor Bruinen. Desvalijador de Origen Desconocido .ods
LISTAS DE HECHIZOS
Influencias, básica de Indagador. Página 38 del Manual de Esencia
Sentidos, básica de Indagador. Página 43 del Manual de Esencia
MANUAL DE ESENCIA
FËRENDIL, ELFA SILVANA CAZADORA
Rakasa escribió:
Fisica: Mide 1.75 y pesa 73 kg. De complexión delgada y sutil. Piernas largas y esbeltas, fuertes de vivir en los bosques. Tiene el pelo larguísimo, hasta por debajo de las caderas, de color rubio dorado, sedoso y brillante, que siempre lleva en una larga trenza con flores, aunque le caen algunos mechones hacia la cara. Ojos grises del color de la piedra con un tenue fulgor.Posee unas manos ágiles y finas. y su color de piel es muy pálido.
Psicológica: Fërendil es una elfa curiosa y decidida. Bastante enamoradiza y muy amiga de sus amigos. Le cuesta mucho relacionarse con la gente que no conoce, pues suele desconfiar de los forasteros. No duda en luchar por aquello que ama, aunque es pacifica por naturaleza. Le encantan los animales, la música y escuchar historias pasadas de boca de sus mayores. Es atenta, muy despierta y locuaz. Puede hablar de cualquier cosa, ya que es sabia y divertida, pero sólo aquellos que gocen de su confianza podrán disfrutar de sus largas horas de charla. Amante de la buena comida. Es dulce y risueña. Le gusta tener sus momentos de soledad. Siempre la verás concentrada y observadora., le gusta pensar lo que hace, no toma decisiones a la ligera, le encanta el silencio y meditar. No se separa nunca de su flauta, que le anima en situaciones tristes y la acompaña en momentos en que lo necesita.
Mi nombre es Fërendil. Soy una elfa Silvana, también nos llaman elfos de los bosques. Nací en Rhovanion, en el bosque negro; tengo 620 años y procedo de largas y largas dinastías de elfos que protegen los bosques, la naturaleza y nuestras costumbres.
Cuando era más pequeña, con lo único que soñaba era con ser más ágil y rápida, con conseguir ser como mis hermanas, con llegar a ser una auténtica exploradora, una auténtica cazadora. Rodeados de peligros por todas partes, temiendo a dragones y extraños, sólo pensaba en ser más fuerte. Eso queda demasiado lejos ahora...cuanto tiempo ha pasado desde entonces ya no soy capaz de saberlo, pero sigo sintiendo lo mismo cuando veo el atardecer, cuando me adentro en los mismos bosques que me regalan la comida que me alimenta, el aroma que me impregna, la luz que me guía…
Crecí reconociendo los sonidos que me rodeaban, distinguiendo las voces de los animales, haciendo remedios naturales para distintas dolencias y preocupándome de los míos más que de mi misma.
Cuando tuve la edad suficiente comencé a salir de caza con los mayores para observar y practicar, y así he conseguido llegar a ser lo que hoy soy, aprendiendo de los que me rodean.
No hay rastro que no pueda seguir, ni montaña que no consiga escalar, ni árbol que me suponga obstáculo. Sólo nosotros somos capaces de recorrer las sendas que discurren por este bosque con total seguridad, pues conocemos sus peligros y podemos esquivarlos, estamos preparándonos para ello desde que nacemos. No se trata de un lugar peligroso, no hay que temerle si eres uno de los nuestros, es el hogar más acogedor.
Aun siendo así, cierto día, uno más entre tantos me di cuenta, gracias a las historias que me contaban por las noches rodeada de luciérnagas y con el ruido de las ramas al bailar, que realmente había mucho más mundo más allá de nuestras leyes y costumbres, más allá de nuestras casas en las ramas de los centenarios árboles, de las cuevas que se convierten en refugio en tiempos turbulentos, y pensé que no debía ser tan malo ir a explorar un poco afuera, ir a conocer algo más. Sabía que acabaría volviendo a mi sitio, a mi hogar, en algún momento, lo que no sabía era cuando llegaría ese momento. Mi curiosidad, ese animal inquieto que vivía dentro de mi podía mas que cualquier otra cosa.
Y así lo hice, me lancé a la aventura con poco más que mi arco, mi flauta, unas cuerdas y mi decisión. Empezaba a andar mi camino y a escribir mi propia historia. Quizá algún día algún longevo elfo cuente a la fresca, en una rama de un árbol, mi historia a mis descendientes.
FICHA
http://www.filejungle.com/f/rre4xn/Fërendil. Elfa Silvana Exploradora.ods
HECHIZOS
Evasión de los Ataques. Abierta de Mentalismo. Página 8 del Manual del Mentalismo
Ocultación. Abierta de Mentalismo. Página 11 del Manual del Mentalismo
MANUAL DEL MENTALISMO
FINWË, LUCHADOR ELFO NOLDOR
Wolf_Metal escribió:
Física:
-Cabello: Largo y plateado
-Ojos: Azules
-Altura: 1´99
-Peso: 85Kg
-Complexión: Delgada y atlética
-Edad: 256 años
-Piel: Extremadamente pálida
Finwë, el cual ha heredado el nombre del primer gran rey en la historia de los Noldor es un elfo alto, aunque nada especial entre los de su raza, rasgos bellos y finos...los dedos de sus manos, largos y delicados, tiene un aspecto elegante, como sus movimientos...y parecr frágil a simple vista, sus ojos son azul celeste, casi tan claro como el color de su pelo, plateado como la luna llena, corto el flequillo, hasta la cadera el resto, algo sin duda raro en los Noldor, que suelen tener el pelo negro o como muy claro rubio dorado. Su piel es pálida, casi blanca, apenas tiene color en los labios que son de un rosado muy tenue, lo único que tiene de un color oscuro es el vello de las cejas.
Psíquica:
Finwë es un elfo distante, apartado y orgulloso. Quizá esto últimos sea su mayor defecto, pues también es calculador. Estas dos cosas mezcladas hacen de Finwë alguien rencoroso, pues si recibe un insulto no lo devolverá al instante, si no que esperará al momento adecuado para hacerlo, haciendo ver mientras tato que deja pasar la pulla. Su orgullo es sólo superado por el odio que tiene a los orcos...no hay criaturas a las que deteste más. Es joven...muy joven para los estándares de los elfos, y más de los Noldo, de hecho muchos se extrañaron de su nacimiento hace 256 años esto hace que sea impulsivo, que, al contrario de la mayoría de los elfos no piense antes de actuar. Representa la viva imagen de la juventud élfica, la cual es rara ver ya en la Tercera Edad del Sol, arrojado, valiente y orgulloso...los que le conocen esperan que esto no le lleve al destino que muchos otros elfos así han sufrido.
Sueños y motivaciones:
Finwë sólo esta obsesionado por una cosa...encontrar a su hermana, nada más le importa. Ignora las insistentes voces de sus congéneres que le instan una y otra vez a superar la pérdida de ésta. Lo más probable es que esté muerta...pero él nunca se dará por vencido...nunca irá a Válinor si no es con ella o por el filo de una espada atravesando su carne.
Historia:
La luz del Sol iluminaba el rocío de los Mallorn, que con sus ojas doradas hacían un espectáculo digno de ver para cualquier persona,mas no para Finwë...cansado del bosque, cansado de tanta tranquilidad.
Es un elfo joven...no sabe lo que quiere, pero ahía esta su hermana para guiarlo, ella quinientos años mayor que él había criado al joven y orgulloso elfo desde que había abierto los ojos por primera vez. Elanor, las flores doradas adornaban la colina donde él se encontraba, siempre con su espada, nunca se separaba de ella, aunque nunca la había utilizado en un combate real.
Eso era lo que más detestaba de Lothlorien...sus arqueros, todos los elfos tenían fama de grandes arqueros, pero Finwë odiaba el arco...no podías sentir la fuerza del enemigo al detener uno de sus golpes...no veías la muerte venir de cara cuando habías cometido el más mínimo error al no haber matado a tu enemigo cuando tuvistes la oportunidad propicia.
Así pensaba Finwë, no soportaba los arcos y las patrullas de Lorien estaban formados por arqueros...vivía en uno de los parajes más bellos de la Tierra Media pero él no apreciaba esa belleza. Su hermana Fëanir se daba cuenta y temía que esos pensamientos lo llevasen lejos de Lorien...para nunca regresar.
Muchas veces habían pasado los pensamientos de partir al oeste por la mente de Finwë, pero su hermana siempre encontraba palabras para detener sus actos antes de que los emprendiera, pero su hora se acercaba...sentía que tenía que irse, Fëanir partiría hacia los puertos grises y Finwë quería acompañarla.
-Déjame que te acompañe, no es justo que tú puedas salir de aquí y yo no- Su hermana lo miró seria como siempre que él decía alguna tontería que no tenía sentido alguno -Sabes que no...aún eres joven, y te quedan muchas maravillas por ver en esta Edad...antes de qu ellegue tu hora de partir hacia Aman querido hermano-
-¿Qué cosas?- Replicó el joven frustrado... -Aquí no hago más que ver árboles y más árboles...elfas tejiendo o cantando y arqueros...no, quiero marcharme de aquí- Dijo enfadado...
-No, mañana partiré yo...tú te quedas- Fëanir se dió la vuelta de regreso a casa...Finwë la miró desesperado...¿es que nadie comprendía su postura?
Al día siguiente Fëanir partió, tal y como había dicho, en ese tiempo a Finwë le había dado tiempo de replicarle ciento dos veces exáctas de la decisión de no llevarlo consigo, ella no dió su brazo a torcer.
Finwë es joven...es arrojado, no piensa...solamente actua, así...una semana después, robó un caballo y salió de Lorien sin permiso alguno, engañando a las patrullas y sin importarle lo más mínimo las consecuencias que los integrantes de estas estas recibirían por culpa suya.
Fué hacia el oeste, rodeando las montañas nubladas por el territorio que más adelante se conocería como Rohan, cabalgó sin descanso siguiendo su rumbo buscando Rivendel, donde sabía que su hermana pararía a descansar.
No lo encontraba...no encontraba el valle, fatigó a su caballo sin reparos, hasta que un elfo lo encontró y apuntándole con una espada preguntó -¿Quién eres tú?- Finwë ni respondió a la pregunta -Busco a Fëanir, mi hermana-
-Así que eres Finwë...tu hermana no paraba de hablar de ti...partió hace dos días ya- Dijo el elfo -Me llamo Glorfindel, es lo apropiado decirte mi nombre ya que...- Finwë no escuchó más...partió con su caballo fatigado hacia los puertos.
Tardó en llegar...para enterarse de que su hermana no había llegado aún, estuvo esperando a su hermana durante más de un año...al final partió en su busca desoyendo los consejos de los demás elfos.
Volvió a recorrer el camino de los puertos hacia Rivendel, esta vez a la inversa, no encontró nada...volvió a los puertos...ella aún no había llegado...los elfos le decían que debía asimilarlo, ella no volvería ya...no la encontraría.
Pero Finwë no se rendía...siempre recorría el camino de los puertos a Rivendel, de Rivendel a los puertos, muchas veces ia hacia el norte...otras hacia el sur...cada vez iba a sitios más raros, a los más improbables que hubiera pasado su hermana...treinta años han pasado desde que comenzaran sus viajes sin sentido...aunque para él si lo tenían...y ni rastro de su hermana...él sigue recorriendo el camino una y otra vez.
YRINVAN, ÉOTHÉOD CABALLERO RENEGADO
Dadilaer escribió:
Físico: Yrinvan es un hombre de unos 30 años, en perfecta forma física. Tiene un físico bastante llamativo, alto (1'85 aprox) y robusto. Sus brazos y espalda son anchos. Tiene el pelo largo hasta los hombros, mirada de ojos negros penetrante y rasgos duros, marcados. Personalidad : Es educado, aunque algo orgulloso y altivo, cómo no podía ser menos. Hombre de pocas palabras, valora el silencio. Es leal y su honor es lo que le conduce. Su palabra, quizás, sea su mayor valor, al menos para él. Apariencia: Pese a ser un hombre que cobra por proteger a pequeños comerciantes, se nota el orgullo en su forma de moverse. Va vestido como un buen caballero, armadura y armas limpias. Aunque la barba y la falta de brillo en su armadura le dan un aire... de desencanto
Señores de los Caballos, Éothéod, ese es su pueblo. Nacido en un pueblo nómada, su madre murió cuando él nació y su padre cayó en combate cuando él era joven, por lo que fue criado por el pueblo, por la tribu. Recibió la educación de todo señor de los caballos: los caballos, la guerra y la caza. Esas eran las tres cosas mas importantes. El honor, la lealtad y el valor, los objetivos que hacían grande a un hombre. Alumno aventajado, bueno en la carga a caballo, con espada y lanza. Era uno más de la comunidad, pero su entrega y entusiasmo le hacían crecer dentro de ella, empezaba a hacerse notar y se hablaba de su coraje, de su valor y de sus habilidades. Yrinvan nunca había querido ser uno más, no era ambicioso, era algo mas, tenía fe en si mismo, le gustaba la responsabilidad, los retos. Cómo en todos los pueblos, un hombre sin familia no era nadie. Todos estaban de acuerdo en que era un gran muchacho, un fiel servidor y un gran activo, pero nada más. Veía como otros compañeros se convertían en miembros mas útiles de la sociedad, avanzaban, salían a las expediciones... No se quejaba, no al principio, pero pronto empezó a mostrar ciertos desacuerdos, lo que no le ayudó en absoluto. Solo os contaré, por ahora.. que no acabó bien. Yrinvan, Señor de los caballos, joven Éothén, fue invitado a marcharse, a dejar su pueblo, fue desterrado. Una vez fuera de sus tierras y, sobretodo, de su comunidad, su vida cambió por completo. En su mente no cabía otra cosa que no fuese el recuperar el honor perdido, el respeto de los Señores de los Caballos. Divagó entre caminos y ciudades. No tenía familia, no tenía tierra, no tenía pueblo. La vida se volvió dura y tiró de lo único que sabía hacer: batallar. Empezó a aceptar pequeños encargos como acompañante de comerciantes, le pagaban poco y mal, pero le daba para comer y dormir caliente en más de una ocasión. Empezó a comprender el trabajo de mercenario y a aprenderlo. No era algo que le gustara demasiado, la gente siempre quería regatear y en muchas ocasiones tenía que proteger a gente cruel, avara y despreciable; pero empezó a tener un cierto nombre y podía viajar de aquí a allá sin dar explicaciones a nadie. Estaba en su sangre, era un nómada. Su último trabajo, sin demasiada importancia, era acompañar a un comerciante hacia Bree. Como siempre, su caballo y su espada le acompañaban. El camino se hizo sin problemas, tenía ganas de llegar, había oído que en El Descanso del Rey, la posada de Bree, realmente se comía bien y le apetecía dormir a cubierto, bajo un techo y sobre una cama blanda, sólo, sin tener que escuchar historias y bromas absurdas - otra parte que no le gustaba de su trabajo-. A lo lejos.. Bree aparecía.
YAIDOKIL, CURANDERA LOSSOTH
Ajuas escribió:
Yaidokil no es común entre los Lossoth. De complexión relativamente delgada para lo normal en su tribu, mide 1,65 metros, más que muchos hombres, y pesa 65 kilos. Su pelo es de color rubio con ojos claros y piel blanca. Va vestida con un traje hecho de cuero de reno, adornado con diversos collares de conchas marinas. Normalmente tiene guardado un chaquetón hecho con telas de diversos colores y un forro de pelo de reno, lo que lo hace muy cálido (en este clima no lo necesita). El chaquetón está acabado en una capucha cónica, ideal para andar por la nieve.
La joven Yaidokil estaba inclinada sobre un hombre que estaba tumbado en una cama. Su herida no parecía excesivamente profunda, pero ella sabía que si no se cuidaba, se agrabaría. Poniendo sus manos sobre la herida, esta se empezó a cerrar. Cuando hubo acabado, miró al hombre.
- Deberías tener más cuidado, Fmokey. Un arpón clavado en una pierna no es algo trivial.
-Lo sé, pero yo nunca había pescado. Pero la necesidad obliga... tú lo sabes.
Yaidokil se limita a asentir, de sobra lo sabía. Las cosas no marchan bien en tierras Lossoth
--------------------------------------------------------------------------------------
Yaidokil se encuentra en la tienda, con su maestra, la gran animista Farwandian.
- En el pueblo se está hablando mucho de la situación de los alces...
-Lo sé, mi joven aprendiz, lo sé.
Parece como si Farwandian fuera a decir algo, pero se queda callada, retorciendo sus manos. Yaidokil conoce ese gesto, algo importante va a decirle, así que espera.
-Yaidokil, sabes que te quiero como si fueras mi hija. Tú naciste con el don, y tus padres me trajeron para que te enseñara. Pero no sólo te he enseñado, también te he educado. Pero ahora... ahora tengo que mandarte lejos. Recibí anoche una visita de Elohim, el dios reno... al menos, eso creí.
Yaidokil asiente, sabe perfectamente que los dioses animales suelen usar formas como esa de comunicarse con los mortales.
-Él me mostraba una imagen, un fuerte o pueblo... De mis anteriores viajes, hace tiempo, lo interpreté como fornost. Pero, cuando intentaba avanzar hacia allí, no podía. Entonces te miré, estabas a mi lado. Tú diste un paso, luego otro... y llegaste hasta el pueblo. Creo que tienes que dirigiste allí...
-¿Yo?
De golpe, sobre Yaidokil cae el peso de lo que le está diciendo su maestra
-Pero... hay otros mejor preparados...
-Es la voluntad de Elohim. No podemos hacer nada. Deberás dirigirte a Fornost. Allí, busca a Zhukovski. Fue el nombre de la persona con la que te vi hablar... no sé como lo sé.
Farwandian abre un cofre y rebusca en él. De pronto, saca un bastón-lanza.
-Este es un objeto que me ayudó mucho cuando hice mis viajes, cuando era joven...
La vista de Farwandian se pierde en el vacío. Yaidokil se queda mirando el bastón. Es impresionante, con una esfera que tiene como copos de nieve flotando dentro. Desde luego es un objeto muy hermoso. Al día siguiente, Yaidokil había recogido sus escasas pertenencias y se había puesto en marcha.
Yaidokil se acordaba del camino que acababa de recorrer. Al principio tuvo miedo, pero siempre había querido ver que había más allá de su tierra. Así pues, pronto se relajó y empezó a mirar todo curiosa. Vio muchos tipos de humanos en su camino, altos, bajos, gordos, delgados... También vio otras razas. Unos, pequeños, parecían ser o parientes muy lejanos o dos razas muy distintas. Los unos, con barbas, a los que llamaban enanos, parecían musculosos y huraños.
Cuando llegó a Fornost empezó a ver a otros seres, incluso más pequeños, pero rechonchos y de aspecto agradable, y trato igualmente agradable. A estos los llamaban Hobbits. Yaidokil aun duda si estos hobbits son de la misma especie que los llamados enanos o no. También vio unos seres altos y estilados, de orejas puntiagudas. Elfos, les llamaron los comerciantes que la acompañaban. En cierto modo, eran bastante intimidadores, mirando todo con un desdén difícilmente cubierto.
Zhukovski no había resultado ser lo que ella se esperaba de un vidente. De aspecto joven y amable, la estaba esperando a la puerta de su casa y la hizo pasar. Ella quiso explicarle lo que pasaba, pero él hizo un gesto con la mano para que se callara. Ya sabía a lo que venía.
-La solución a vuestro problema se encuentra más al sur. Irás a Bree y allí te encontrarás con un grupo de personas de distintas razas y aspectos. Ellos serán los que te ayuden.
Así pues, allí estaba Yaidokil, frente a la posada que la habían recomendado, El Descanso del Rey. Esperaba encontrar a sus acompañantes aquí...
FICHA
http://www.filejungle.com/f/tyKqKC/Yaidokil, Curandera Lossoth.ods
LISTAS DE HECHIZOS
Maestría de la Conmoción. Lista Básica de Curandero. Página 26 del Manual de Mentalismo.
Maestría de los Huesos. Lista Básica de Curandero. Página 28 del Manual de Mentalismo.
Maestría de la Sangre. Lista Básica de Curandero. Página 27 del Manual de Mentalismo.
Maestría de los Músculos. Lista Básica de Curandero. Página 29 del Manual de Mentalismo.
Presentimientos. Lista Abierta de Mentalismo. Página 12 del Manual de Mentalismo.
Investigación. Lista Abierta de Mentalismo. Página 10 del Manual de Mentalismo.
MANUAL DE MENTALISMO
BREGOR BRUINEN, DESVALIJADOR DE ORIGEN DESCONOCIDO(NIVEL 2)
http://www.filejungle.com/f/d9dQJS/Bregor Bruinen. Desvalijador de Origen Desconocido Lvl2.ods
Ala, para que tengas aliciente para reengancharte después de las vacaciones.