Al escuchar que los golpes provienen del viejo bahúl, sin pensarlo Juárez se dirige hasta alli para abrirlo. Esta gente esta loca, tienen a alguien secuestrado. Quita los pestillos sin dudarlo y lo abre.
Parece que ese bahúl lleva mucho tiempo cerrado, quizás demasiado... puedes ver que el cerrojo bastante oxidado, se te resiste, a pesar de tu físico. Echas un rápido vistazo a tu alrededor, buscando algo que te ayude a abrir ese cerrojo. Afortunadamente el trastero está lleno de muebles viejos, entre los que pronto distingues una antigua lámpara de pie, cuyo sopote es de hierro forjado. Sin pensarlo dos veces, le quitas la pantalla quedándote tan solo con el pie y golpeas la cerradura, empujando golpe tras golpe, el pasador hacia un lado. Tus golpes han hecho que lo que sea que esté dentro haya cesado con los suyos.
Posteo lo de la lámpara como me has comentado por chat.
Juárez un poco asustado y con el hierro en la mano se acerca poco a poco al bahúl. Se coloca enfrente del mismo y con uno de los extremos del hierro intenta levantar la tapa.
Que gente mas desalmada, encerrar a alguien dentro de un bahúl.