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Héroes de Alquiler

[CERRADA] 2.0 - SELECCIÓN DE PERSONAL - GRUPO 4

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26/09/2012, 13:54
Director

El transporte se detiene por fin con un suave ronroneo. El motor deja de vibrar y se escucha una puerta abrirse y volver a cerrarse. No había sido un viaje demasiado largo, pero si lo suficientemente incómodo como para desear que se acabara de una vez. Nadie conocía a nadie y se les había dado a todos los pasajeros instrucciones bien claras: Nada de interaccionar entre ellos. Ya llegaría el momento de conocerse.
Solo media hora antes habían embarcado en una de las cocheras que la Corporación poseía en el corazón de Boston. El transporte era un enorme camión blindado con capacidad para seis pasajeros, el conductor y el copiloto. Una pantalla de seguridad polarizada dividía a unos de otros de forma que no habría contacto entre ellos. Parecía tanto un transporte militar de tropas como un furgón de detención y levantaba alguna que otra sospecha sobre la naturaleza de la Corporación.
No todos los aspirantes habían sido reclutados o habían acudido a las oficinas de Jericó de aquella ciudad para presentar sus solicitudes, pero dado que sería allí dónde operarían de ser contratados, allí sería dónde llevarían a cabo la selección de personal. Cuestiones de logística, les explicaron. Transporte gratuito hasta Boston en clase business y taxi desde el aeropuerto hasta la sede. Todo muy limpio y legal, sin problemas en los accesos o salidas. Y la promesa de ser devueltos a sus lugares de origen en caso de no resultar aptos.
Un hombre en traje de chaqueta y corbata, tan anodino como podría ser cualquier encargado de logística de una multinacional, les había indicado que serían movilizados en un transporte blindada hasta las instalaciones secretas de entrenamiento que poseía la Corporación en algún lugar de las afueras. Por supuesto no atendió a consultas o dudas, ni escuchó sugerencias sobre dónde podía meterse su actitud. Simple y llanamente les indicó que si querían seguir adelante, debían subir al vehículo, mantener la boca cerrada y esperar llegar a un destino dónde les explicarían todo lo necesario. Si tenían alguna queja, podían dar media vuelta y regresar por dónde habían llegado.

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26/09/2012, 13:54
Carbono

Las puertas laterales del furgón se abrieron con un siseo hidráulico. Una voz metálica les invitó a bajar y, cuando estuvieron todos en tierra, su propietario les tendió a todos una carpeta con una sola hoja de papel a la vista, cogida con un clip y acompañada de un bolígrafo. Con una altura de dos metros la máquina humanoide que les había atendido esperaba paciente a que leyeran el contrato de confidencialidad que les ataba a mantener en secreto, bajo pena de demanda judicial, todo lo que iban a ver, oír o experimentar a partir de ese punto.

El color gris mate del material con el que iba blindado aquel ser, combinado con una serie de circuitos de luz azulada de aspecto futurista era toda una declaración de intenciones. Se acabaron las formalidades y los hombres en traje de chaqueta, había llegado el momento de las maravillas.

- Permítanme presentarme - Comenzó con voz átona - Mi nombre en clave es Carbono y seré su supervisor a partir de este punto. Han sido transportados a uno de los campos de selección de personal de la Corporación Jericó. Como deben entender, personas excepcionales como ustedes requieren medidas excepcionales de seguridad y en la Corporación no queremos que nadie salga herido. Somos una empresa consciente de nuestro lugar en el mundo y conscientes de que la población en general no posee las capacidades de las que ustedes pueden hacer gala. Es por este motivo que contamos con instalaciones únicas, controladas en todo momento por especialistas y observadores del gobierno, para garantizar su seguridad, la nuestra y la de aquellos a los que prestaremos servicio, los ciudadanos de a pié. - El tono de grabación con el que decía todo aquello hacía que ese discurso fuera desapasionado y frío. No invitaba a empatizar de ninguna forma.

Estacionados bajo un potente foco de luz que provenía de algún punto sobre el grupo, no había forma de ver nada mas allá de unos metros, pues todo lo demás permanecía en la más completa oscuridad.

- Se trata de un mero formalismo, pero antes de continuar deben firmar todos el contrato de confidencialidad. Si alguien se niega, puede subir de nuevo al transporte y se le llevará de vuelta a Boston, desde dónde podrá regresar a su casa. - Hace una pausa en la que no mueve ni un solo centímetro de su cuerpo aunque todos los presentes tienen la sensación de que los ha observado uno por uno, estudiando sus rostros - ¿Alguna negativa? ¿Alguna pregunta al respecto?

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26/09/2012, 18:06
SteelBlade

Al final, lo habíamos conseguido. Todo había empezado hace no demasiado, como una manera para conseguir un sobresueldo para mejorar las investigaciones, y el día culminante era aquí y ahora. Contemplo el edificio que tengo frente a mí antes de descender de la posición elevada a la que me he subido y avanzar como si nada hasta que un cualquiera me informó del siguiente paso, esperar y subirse a un vehículo, sin charlas, presentaciones ni nada por el estilo. Como si eso me importase, más allá de la espera. El interior del vehículo huele a transporte cerrado la primera vez que entro, y a partir de ahí decido activar el filtro del casco para al menos no tener que aguantar ese olor de manera permanente. Varias personas de peculiar aspecto me rodean, como cabía de esperar ante una oferta así. Y el silencio no es problema para mí, pues mientras la gente calla yo noto cómo mi metal vibra en resonancia ante la perspectiva del trabajo. Y eso es mucha mejor conversación que la que tendría con cualquiera de ellos.

El tiempo pasa y el vehículo se detiene al fin, así que me pongo en pie para estirar las piernas, justo antes de que un contestador automático nos invite a bajar. Y vaya que si bajo, por muchos focos que me pongan delante yo esto no me lo pierdo. Mientras la gran lata reparte las carpetas, trato de ver más allá de todas las luces que han puesto para que no lo hagamos, y solo cuando de verdad veo que no voy a ver nada, y que para saciar la curiosidad voy a tener que leerme el papel, me pongo con todo el papeleo legal. Mientras el contestador sigue sonando, voy leyendo el contrato de arriba abajo, en profundidad. Este es el momento perfecto para activar la cámara de grabación del casco... o lo sería si la tuviese, pero nunca acabo de acordarme en el taller de instalar una. Vuelvo a dejarme un memorandum mental que olvidaré, y al terminar de leer firmo en donde me lo indican con las iniciales de SB usando la otra mano como apoyo. Considerando que he realizado todo el asunto desde un apartado postal que tengo para cuestiones de heroicidades, más les vale aceptar esa firma y no preguntar otra si no me aceptan. Por un momento, me siento tentado de decir algo, pero luego considero mi situación y cierro la boca antes de soltar nada. Con el papel todavía unido a la carpeta con el clip, se lo ofrezco al gigantón por si se los va a quedar él o algo por el estilo.

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26/09/2012, 22:08
Robert Jones

El caballero, porque esa es la palabra que le definiría, de pelo casi blanco y traje claramente a medida, comprado en esas sastrerías que no tienen precios en los maniquís ni salen en las guías de teléfono con un tipo gordito hablando sin parar en italiano o griego mientras toma las medidas, bajó de su taxi hacia las cocheras como si estuviese yendo tranquilamente a la oficina; por supuesto, en el edificio de oficinas que él mismo poseería.

Nada de interactuar, sin problema.

Sacó de debajo de su brazo el Financial Times y empezó a ojear los valores del día sin volver siquiera a echar un vistazo a los otros acompañantes que viajaban con él.

Cuando llegaron a su destino, descendió del furgón, de nuevo como si viajara él solo, sin hacer el más mínimo caso a los demás, y tomó la carpeta que Carbono les tendía.

Un rápido vistazo por encima, sin tantos miramientos como el tipo ese que había bajado primero, y sacó su propia pluma Mont Blanc para firmar con una pulcrísima letra.

Para acto seguido tender la carpeta a su nuevo supervisor con un Ninguna, caballero.

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26/09/2012, 22:48
Yandr0s

No me sentia comodo. El vehiculo estaba repleto de gente y aunque ninguno de ellos me habia mirado, me sentia observado, como si mis cualidades estubieran siendo analizadas antes de tiempo. Yo solo queria ayudar a la gente... ¿Porque no seleccionan a todo el mundo? A los que no elijan seran la gente contra la que se tendran que enfrentar a los que elijan...

Al bajar del coche un rostro metalico me trajo recuerdos de un pasado no tan remoto y crei poder encontrar en el algo de afecto. Pero solo recivi indiferencia. Estaba fuera de lugar, firme el contrato que nos ofrecia Carbono y me quede en segunda fila, intentando llamar poco la atencion.

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26/09/2012, 23:23
Eartho

A diferencia del resto, no cabía en un taxi normal, por lo que acabó llegando en un coche un tanto más espacioso. La furgoneta, por llamarla de alguna forma, estaba hundido. Los guardabarros casi rozaban las ruedas y la parte baja distaba apenas unos pocos centímetros del suelo.

Las puertas traseras se abrieron y el coche se hundió más por la parte trasera, llegando a levantar el frontal del vehículo un par de palmos. Cuando se bajó, el coche volvió a su posición normal, incluso volvía a tener la separación reglamentaria respecto al suelo.

Con pesados pasos y sin decir palabra alguna, se dirigió al nuevo vehículo, aunque en este no tenía el espacio suficiente como en la furgoneta. Encerrado en ese cubículo, entrando a lo justo, hizo todo el viaje sin poder moverse. La postura no era incómoda, pero la situación si.

Tras bajar del transporte, miró a quienes habían viajado con él y al tipo metalizado que había comenzado a hablar. Formalidades, en todos sitios eran igual. Avanzó hacia su posición para recoger el formulario. Medía casi como el supervisor, Carbono, aunque le sacaba unos cuantos kilos.

A la hora de firmar, el bolígrafo se veía ridículo en sus enormes y pétreas manazas. Como pudo hizo una pequeña y poco vistosa marca.

-Espero que sea suficiente -dijo con una voz gutural-

Notas de juego

Me he tomado una pequeña licencia con el tema del transporte, espero que no te importe.

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27/09/2012, 02:01
R de Rorschach

Nuevo Diario de Rorschach. Entrada 001.

Fue un viaje largo y pesado, como todos los que podían merecer la pena. Encerrado como un criminal en una celda portátil, todo se veía de forma más nítida. Se nos encerraba por seguridad, porque suponíamos un peligro. Era lógico. Yo era solo humano, excepcional, pero humano, y aún así podía suponer una seria amenaza. Aquel dinosaurio fosilizado que tenía lava por venas y antorchas por cerebro había hecho bien en viajar separado. Un giro brusco y si si el vehículo se desestabilizaba el peso de esa cosa hubiese hecho el resto.

Era un mal grupo. Un hombre educado, podrido bajo montañas de dinero. Una máquina. Otra máquina. Un monstruo salido de los volcanes de Hawai. Un desconocido. Y un psicópata antisocial. Era juzgar precipitadamente a la gente, pero por lo general, las criaturas humanoides habían demostrado tener muy poca capacidad de subterfugio. Bastaba con que les dieses fuerza y poder para que se volviesen débiles por dentro. De seguro que aquella masa de roca no era capaz ni de hacer el pino, si bien su fuerza y resistencia debían ser su utilidad.

Cogí el papel, y lo leí concienzudamente. Era un contrato de confidencialidad. Suena absurdo, lo sé. Yo también lo pensé, pero no me reí porque pensaba que el trabajo, a expensas de aquellas patochadas podía ser interesante. ¿Quién necesita un contrato de confidencialidad cuando tienes a un ejército de élite? Jericó tenía la fuerza, no necesitaba papeles burócratas salvo para seguir el podrido juego de un sistema infecto que se reía en la cara de los ciudadanos mientras les untaba bien en vaselina. Uno de los miembros del equipo tenía pintas de pertenecer a ese sistema. Aunque bueno, también parecía pedante, y anciano, aunque eso último realmente no importaba. Ese crónico a las puertas de la jubilación bien podía lanzar rayos gamma por la billetera.

No quería decir nada, pues lo consideraba innecesario. ¿Abrir la boca para decir un simple "no"? Lo hice, pues los demás parecían hacerlo. Tenía prohibido relacionarme con ellos, seguramente para mantener el experimento en condiciones de laboratorio, pero decir algo en voz alta tras tantas horas me haría bien. Partir huesos y escuchar gritos helaba el alma. Bien valía soltar la carga.

- No.

Con una voz grave, distorsionada por la máscara y mi propio tono forzado, era una voz tétrica, propia de una persona que se reía de los habitantes del manicomio. No hablaba así para intimidar, sino por un trastorno mental crónico. Bajo esa máscara aquella era mi única voz, lo quisiese o no. Era la voz del justiciero a dos colores, no la del hombre.

Firmé y le devolví la hoja. El brazo, flexional hacia delante, brindaba aquel vacuo papel que se extendía más allá del guante marrón, ligeramente envejecido por el agua y la suciedad. Los había limpiado, pero las manchas nunca salían del todo, ni falta que hacía. Eran las marcas de mis pecados.

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28/09/2012, 17:18
Carbono

- Magnífica pluma, señor Jones. Realmente magnífica. - Un brillo en el interior de los visores de sus ojos indica que realmente parece apreciar la MontBlanc de diseño exclusivo - Nos advirtieron de su interés en formar parte del Departamento. Sinceramente, espero que esté a la altura. Me gustaría tener a alguien de su nivel entre nosotros.

Carbono recibe todos las carpetas con las firmas y un tipo en traje de chaqueta, aparecido desde más allá del círculo de luz que proyecta el potente foco, las recoge y se las lleva saludando a los aspirantes con un gesto de cabeza. Se detiene por un segundo sobre la figura de Robert, como si lo reconociera. Esboza una pícara sonrisilla y se va. ¿A dónde? Imposible de averiguar pues incluso los sensores biométricos, la visión nocturna y los demás aparatos de detección instalados de SteelBlade y R3D no alcanzan a detectar nada más allá del círculo de luz.

- Es suficiente, señor Eartho, no se preocupe. Entendemos lo especial de su situación y lo tendremos más presente de ahora en adelante. Gracias por colaborar - Palabras amables vacías de emoción. Sonaban realmente extrañas. - Señor R3D, por favor, un paso al frente. Entiendo que se pueda encontrar fuera de lugar en este momento, pero en nombre de la corporación le informo que no hacemos distinción entre aspirantes. Todos dispondrán del mismo trato y oportunidades. Igualmente apreciamos que se hayan presentado como aspirantes, señores SteelBlade y Erre. Nos complace contar con veteranos como ustedes. - Esos formalismos daban a entender que en la Corporación estaban al tanto de las actividades de los dos aspirantes, aunque no la postura de la empresa con respecto a ellas.

-Y ahora, si no hay ninguna pregunta...  - Se apartó a un lado, sin teatralidad alguna -  Bienvenidos a SubCity.

Notas de juego

Aunque Charles no ha posteado, damos por hecho que ha firmado sin mas. Si para el lunes no ha dado señales de vida, sale de la partida y el grupo se queda en cinco.

No hay problema con las licencias en cuanto a la situación personal de cada personaje. Sobretodo si se trata de uno con características notablemente diferentes.

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28/09/2012, 18:04
Director

Con esas palabras la luz del foco se atenuó hasta hacer discernible lo que había mas allá. Poco a poco empezó a ser visible algo que en un principio debería haber sido imposible. La humedad del ambiente era perfecta y se respiraba aire fresco, sin embargo, según su vista se iba a acostumbrando a las nuevas condiciones de iluminación revelando dónde se encontraban, los aspirantes no pudieron dejar de sorprenderse.

A pesar de haber comenzado el viaje de día, sobre ellos se extendía una noche sin estrellas y ante ellos lo que parecía una calle cualquiera de una pequeña ciudad cualquiera.

Pisos de hasta diez alturas se extendían mas allá de la vista. Escaparates de tiendas mostrando sus productos, bloques de oficinas con algunas luces encendidas tras las ventanas, farolas, bocas de riego, carteles, señales de tráfico... Todo parecía tan normal que debía ser imposible... Pues estaba bajo tierra. Enormes columnas se alzaban sobre algunos edificios, sujetando una bóveda excavada en la roca natural, cuajada de troncos de estalactitas cuidadosamente recortados para evitar accidentes innecesarios.

Las aceras estaba sucias, papeles y bolsas volaban libremente y algunas paredes estaban decoradas con pintadas poco inspiradas e inspiradoras.

Pero lo mas peculiar era le gente. Gente haciendo vida en aquella ciudad subterránea. Entrando y saliendo de las tiendas, charlando en las aceras, caminando cabizbajos sin fijarse en los demás, subiendo a sus coches y poniendo la radio para regresar a sus casas tras la jornada laboral. Hombres y mujeres de todas las edades y razas. Lo único que parecía faltar era la presencia de niños...

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29/09/2012, 08:25
Robert Jones

Jones asintió antes la primera apreciación de Carbono. Sabía que muchos serían los que, al momento, le tenderían la pluma y se la ofrecerían como obsequio. Él no. Nunca regalaría una pluma usada, al contrario, se encargaría de solicitar un juego de pluma y portaminas de edición única y se la haría llegar a través de la Corporación.

Después respondió a las siguientes palabras. Cuando habló, su voz mostró reminiscencias de exclusivos internados británicos, clubs de campo y charlas en clubs de caballeros alrededor de una buena botella de cognac y carísimos habanos.

Gracias, Señor Carbono. Solo espero estar a la altura de las expectativas y se del agrado de nuestros mutuos patronos.

Cuando el hombre de la carpeta le miró y le dirigió una pícara sonrisa, no pudo evitar devolver un rápido guiño.

Eatrho, R3D, Steelbade, Erre, Vapor... fue apuntando mentalmente todos los nombres.

Cuando el foco dio paso al espectáculo ante ellos, se ajustó los puños de la camisa con un movimiento rápido de los brazos, dejando a la vista unos pulidos gemelos de plata. Inspiró profundamente, mirando la panorámica con detenimiento y observando el techo sobre sus cabezas.

Casi me recuerda a casa... dijo más para él que para nadie.

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29/09/2012, 12:02
R de Rorschach

Nuevo Diario de Rorschach. Entrada 002.

¿Os lo imagináis? Era una ciudad bajo tierra, literalmente hablando. Y yo, ignorante de mí, sin saber de aquel paraíso. Sin luz natural. Con bolsas de basura y papeles correteando por la calle. Sin niños inocentes. Una cueva llena de gente, con pilares que sujeten el peso de su mundo. Sólo faltaban terroristas para derribarlos.

Y yo sin saberlo.

Lógicamente, sonreí como un recién nacido al verla, estrechando las marcas de la máscara como un gato de cheshire. Aquello era simplemente maravilloso. Me permití dar un par de palmadas vacías a través de los guantes, mostrando mi aprobación ante aquello.

Quería decirle algo a aquel hombre de hojalata, pero estaba bastante ocupado mirando el camino de baldosas amarillas. Toda mi vida en la superficie, luchando a golpe de sangre y hueso contra el color negro. Y aquella maravilla que hacía las delicias de mi sangre y la saliva en mis labios, oculta bajo mis pies a plena vista. E aquí el reflejo de cuan grande puede llegar a ser la ignorancia del hombre. Yo, medianamente despierto, ignoraba aquello. Imaginen lo que ignora el Hombre Corriente.

- Es un placer.

Esa fue, en tono grave y frío, toda respuesta a las palabras del anfitrión, a falta de una palabra mejor. A mis ojos ese hombre cumplía con un protocolo y unas normas de cortesía con las que yo no acostumbraba a copular. Y no iba a yacer con pedanterías así simplemente para parecer educado. Ahí buscaban eficiencia, ¿no? Qué más daba cuan amable fuese mientras no le faltase al respecto injustificadamente.

Para nadar en perfume de Channel y drogarse con adornos y parafernalia ya estaba el carcamal avestruz de las plumas. Me preguntaba cuál de los dos agacharía la cabeza para lamerle los pies al otro.

Inspiré hondo, con profundidad, intentando llenarme con el aroma de aquel maravilloso infierno. Las calles sucias y las paredes pintadas. Si hubiese visto ese sitio antes ahora sería un monstruo al completo y no a la mitad, pero bien hubiese merecido la pena. ¿Sabéis la de cosas que podría haber intentado hacer ahí dentro? No hay palabras para describirlo. El corazón me pedía correr y buscar un nido donde esconderme en aquel sitio, pero el cerebro pedía paciencia. Tras ingresar en la empresa ya habría tiempo de sobra para sacar la basura.

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29/09/2012, 14:06
Eartho

Sabía que aquellas palabras amables no cambiarían la situación, era lo que se decía en esos casos, pero no apostaría a recibir un trato diferente, especial sonaba a molestia o beneficio, al del resto por su tamaño. No dio respuesta alguna, pero asintió a las palabras de Carbono.

Cuando las iluminación se fue incrementando y pudo ver la ciudad subterránea, una pequeña bombilla se encendió en su cabeza. Una luz que le decía que tendría que tener cuidado allí abajo, la idea de quedar sepultado le inspiraba respeto y ese respeto podría convertirse en miedo con las condiciones adecuadas.

Esperaba instalaciones militares, con complejos y numerosos túneles, laboratorios repartidos y una sala de reuniones. Pero no, era una ciudad viva, con sus habitantes haciendo vida normal y corriente. Hubiera mostrado sorpresa, pero su inexpresivo rostro no le dejaba.

-Impresionante -es lo único que pudo articular-

Pero eso dejaba un par de preguntas en su cabeza: ¿También tendrían que proteger esta ciudad con sus vidas? ¿O era aquí, una ciudad ficticia, donde se llevaría a cabo la prueba de aptitud?

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29/09/2012, 19:42
SteelBlade

Gente en las sombras y de las sombras, y sin manera de ver nada. Menos mal que me estoy tomando en serio la oferta de Jericó, porque noto que está deseando sacar un arma y defenderse... de lo que sea que haya más allá. Pero si a algo he aprendido, es a evitar que haga esa clase de cosas y meterme en una carnicería. Porque eso no sería bueno para mi reputación. Aunque por las palabras del gigantón, tampoco es que parezca que la tienen en especialmente buena consideración. Eso sí, que hayan oido hablar de uno siempre es una buena señal. Y además, esas frases justo antes de encender las luces son lo único que necesito para sacar el nombre de mis compañeros y saciar una curiosidad de cotilleo. Ya sospechaba quién era Rorschach, pero conocer el nombre del resto siempre es un punto extra. Menos el hombre del cabello alborotado y la piel tostada, que parece sobrecogido por la situación.

Y vaya vista, tras sacarnos de la oscuridad. Lo primero que me llama la atención y me hace sentir tremendamente pequeñito es darme cuenta de que no tenemos cielo. O más bien, que el cielo ha caido varios kilómetros y tenemos piedra sobre nosotros, encerrándonos. Y toda esa gente, como si nada... realmente impresionante. Pero eso sí, me alegro de no haber tratado de amenazar a un montón de civiles solo por inseguridad. SubCity, ha dicho. Casi me dan ganas de acercarme a un puesto y comprobar que la comida es normal, que la gente es normal. Que no son un montón de hombres-topo, o algo parecido. Pero seguro que cuando nos movamos pueda hacerlo igualmente, así que para qué adelantarme y romper todo ese protocolo impresionista en que nos está sumiendo la compañía. A mi lado, Rorschach aplaude. Yo sonrío, aunque nadie pueda verlo.

-No me malinterprete, está muy bien en general. Hay hasta aire fresco. Pero, ¿tienen algo parecido a estrellas, o el techo es siempre así de oscuro? -No es que tenga una razón concreta para preguntar, más allá de la simple curiosidad. Y normalmente cuando estoy en la ciudad las constelaciones ni se ven. Pero las veces que he hecho noche en el campo, esas vistas no las cambiaría por nada. Y si aquí no tienen ni esa mínima oportunidad, no saben lo mucho que se pierden.

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30/09/2012, 13:56
R de Rorschach

Nuevo Diario de Rorschach. Entrada 003.

Sonreí de oreja a oreja, cual gato de Cheshire, bajo la máscara. Bendita máscara. No recuerdo si os lo dije en mi diario anterior, supongo que sí, pero si no es así, lo repito, por si acaso. La máscara no es un capricho. Es el reflejo de la mascarada que vive el propio hombre, maquillando su realidad bajo un rostro poblado de mentiras. Según expertos el lenguaje es casi por entero no verbal, dejando las palabras en un segundo plano. Y a eso me refiero. No es que la gente se comunique con algo más que palabras, es que el propio sonido de la garganta es una mentira. ¿Nunca has oído hablar a tu ex-pareja? ¿A tu político favorito? ¿A tu hijo o a tu anciano abuelo? Todos mientes, y la mayoría no por supuesta piedad, sino por beneficio propio. La máscara de mil caras es precisamente eso, el reflejo de una mentira que no puede engañar a todo el mundo, y menos si uno no cree firmemente en ello. Mi rostro podrá ser inexpresivo cual sociópata, pero la máscara dice lo que yo he olvidado cómo hacer. Problemas de ser un monstruo, que debes buscar formas alternativas para expresarte.

Volviendo al tema original y dejando las divagaciones de lado, no sé si os he dicho cuales fueron las palabras de SteelBlade, el justiciero, al ver la ciudad subterránea, pero fueron exactamente estas:

"No me malinterprete, está muy bien en general. Hay hasta aire fresco. Pero, ¿tienen algo parecido a estrellas, o el techo es siempre así de oscuro?"

No lo dije en voz alta, pues podía haber organizado una absurda discusión sin sentido ni beneficio. De seguro que el vegetal sin jubilar añadía la pincelada de color con su estilográfica. Y no. Tenía cosas mejores que hacer que escuchar ese tipo de comentarios.

El caso es que una ciudad sin estrellas ni luz en el cielo es una ciudad realista. Las parejas van al monte a tumbarse sobre el césped o la roca en plena noche y ver el cielo abierto con luna llena y mil una estrellas en el firmamento. Poco importan los animales salvajes, tan peligrosos como el hombre. Permitidme deciros que para las parejas así sólo hay una palabra apropiada, y no es un elogio. Aún me pregunto a que clase de ser inteligente se le ocurre un plan así. En fin.

Sea como fuere, años después, vuelven, solos, y lloran, intentando arrancar las estrellas y extinguirlas. Porque todo, como el tiempo, se acaba. Da igual que hayan pasado dos años que sesenta, siempre acaba, de una forma u otra. Y el cielo brilla cada vez menos conforme el tiempo pasa. Primero desaparecen las estrellas, luego la luna, después las nubes, y por último el sol. Hasta que sólo queda la oscuridad. Hasta que olvidas incluso tu nombre salvo la inicial.

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30/09/2012, 14:16
Yandr0s

Asi que estos seran mis compañeros ¿o quizas adversarios? Cuando aquel robot menciono mi nombre me saco de mis pensamientos. -Disculpe. -Murmure mientras daba un paso adelante y me ponia junto a los demas.

Al apartarse Carbono y apagarse la luz me dio la sensacion de estar en casa. Una ciudad subterranea, si hubiera estado mas limpia, ordenada y eficiente, podria ser una de las ciudades de Netris.

Sera dificil mantener las condiciones para la vida aqui abajo. Pense mientras veia a unos niños jugando a perseguirse. Buen trabajo de planificacion. -Dije para mi mismo.

 

 

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30/09/2012, 14:16
Robert Jones

Notas de juego

Preguntita, sin ningún ánimo de generar polémica, ¿Rorschach va a escribir todos los post en plan Diario de Rorschach? Porque cuando lleguemos al momento de la acción puede ser un poco locura xDDD

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30/09/2012, 14:24
R de Rorschach

Notas de juego

No. Los más narrativos e introspectivos, sí. Los de acción o que incluyan mucha interacción, no. Y de todas formas, si a alguien le incomoda esa forma de escribir (que es experimental y estoy probando en esta partida), que me lo diga, no tengo ningún problema en pasar a escribir de otra forma más común ^^

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30/09/2012, 14:28
Robert Jones

Notas de juego

No, no, para nada.

Es curioso, la verdad es que refleja bastante bien el Diario original.

Además, solo el master debería poder decirte sobre cómo escribir en su partida ^^

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01/10/2012, 06:19
Charles Standford - Vapor Negro

Charles jamás había recurrido a sus poderes mutantes, bueno, solo una vez y porque no tuvo más remedio. Y ahora iba a entrar en algún tipo de liga mutante, era un buen momento en su vida para esto. 

Ya se había retirado de su anterior trabajo, la edad era algo que no perdonaba en el cuerpo de bomberos y aunque por suerte tendría suficiente dinero como para poder mantener a su familia se había quedado con la conciencia intranquila sobre las vidas que no volvería a salvar, sobre los bosques que no podría ayudar a extinguir y sobre todo por las señoras cuyo adorable gatito se quedaría atrapado en el árbol y él no podría rescatar.

Así que la oportunidad que tenía ante sus ojos era un buen momento para resarcirse, tenía ante él una nueva prueba, ya había pasado por ello, pero hacía ya un par de docenas de años, era todo un veterano, "El Anciano" lo llamaban en el cuerpo, pero a él eso ya no le importaba.

Cuando se bajó del furgón y se encontró con Carbono no pudo dar crédito a sus ojos, y mucho menos a sus nuevos acompañantes, daba por hecho que había más como él, no podía ser el único en tener esa clase de poderes, pero desde luego que no esperaba encontrarse esa cantidad de seres tan extraños a su alrededor.

Fueran lo que fueran, era el momento de destacar, y aunque se había mantenido pensativo todo el viaje ahora era el momento de presentarse, firmar el papel que Carbono tenia ante él y observar la nueva ciudad que se abría hacia sus ojos. "SubCity" la había llamado. Un nombre, sin duda, muy adecuado.

Las escuetas palabras de sus compañeros le sobresaltaron, dio un respingo cuando el tal Robert Jones habló y le hizo darse cuenta de que había llegado el momento, había llegado el principio de su nueva vida, ante él una nueva oportunidad.

Disculpad que no lo hiciera antes, estaba pensando en.... bueno, en muchas cosas, mi nombre es Charles, aunque mis antiguos compañeros me llaman Anciano o Charly, llamadme como queráis. Soy veterano del Cuerpo de Policías de mi ciudad, y la verdad que nunca me había encontrado nada así. 

Después miró a Carbono, quería que formulasen sus preguntas, ¿pero por dónde empezar? Si algo le quedó claro en su vida, que la ausencia de dudas indicaba exactamente lo contrario. Así que se plantearía comenzar por lo más básico.

Bonita ciudad, o mejor dicho, impresionante ciudad, pero exactamente, a qué hemos venido hasta aquí, ¿hay alguien en apuros, o algún incendio que apagar?

Notas de juego

Siento haberme saltado un post. Tenia que ponerme al día con algunas cosas de la web, ya que las dos últimas semanas fueron una pasada de curro.

Ahora voy a tratar de darlo todo. Sorry máster, como te dije le tengo muchas ganas y más ahora que parece empezar, a pesar de que ya tengo un pie fuera por mi ausencia, pero bueno, trataremos de evitarlo.

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03/10/2012, 16:49
Carbono

- También yo lo espero. Al parecer la Corporación tiene puestos ciertos intereses en usted y me han pedido que lo observe de cerca. - Respondió mecánicamente a Robert, revelando, quizá, un dato que aumentaría la competencia dentro del grupo.

- SubCity - Repitió modulando el sintetizador que hacía las veces de transmisor de voz para bajar ligeramente el tono y darle un toque de solemnidad. - Impresionante, como ha señalado el señor Eartho. Pero que sus dimensiones no les lleven a equívoco. No es una ciudad real construida bajo tierra. Se trata de una gran simulación. El techo no es siempre así de oscuro, señor SteelBlade. Hay una serie de potentes focos localizados a intervalos regulares que imitan a la perfección la luz de un día claro. Incluso se pueden recrear algunos fenómenos atmosféricos como lluvias o fuertes vientos. - Informó colo lo haría una grabación de un poste turístico.

- Lo que ven no es mas que un  gran campo de entrenamiento. Yo tampoco lo creí la primera vez que puse mis ojos sobre la ciudad. Tan realista, tan completa. Impensable - Dio unos pasos en dirección a la ciudad, saliendo de lo que ahora se ve que es un enorme círculo marcado por contornos amarillos de seguridad justo a la entrada de la calle. -Pero los edificios están huecos, las tiendas son poco mas que lo se se ve en el escaparate. Solo funciona la electricidad. No hay agua corriente, ni teléfono o conexión a internet. Los metros de tierra que nos separan de la superficie y una serie de medidas electrónicas protegen este lugar de cualquier intento de espionaje. Es prácticamente imposible llegar hasta aquí si no es con el consentimiento expreso de la Corporación. Por supuesto y espero que lo entiendan, no podemos revelar la localización exacta de este complejo ni otros detalles como la profundidad a la que se encuentra.  Del mismo modo quiero que considere, señor Eartho, que dada su afinidad con este entorno le creemos capaz de forzar la seguridad del complejo y le tendremos bajo vigilancia especial. Esperamos no se lo tome a mal, debemos proteger nuestros intereses.

Extendió el brazo y señaló a una persona cualquiera que paseaba por una acera, a unos diez metros, alejándose calle abajo.

- Simulacros. Todo en SubCity es artificial, incluidos los ciudadanos. Observadlos bien. - Dejó uno segundos para que el grupo hiciera lo que les había pedido. - Movimientos repetitivos y mecánicos, ausencia de expresión más allá de lo programado. Fijaos en que nadie se ha asombrado al vernos. Nadie parece reparar en nosotros.

Los sensores biométricos de R3D parecían volver a estar en activo y al hacer un barrido general sobre la población lo que obtuvo confirmó lo expuesto por Carbono. Todas las personas que tenían frente a ellos haciendo vida en realidad eran una suerte de simulacros artificiales, de algún tipo de polímero plástico mantenido por un servo esqueleto interno de metal. 

La capacidad especial de Steelblade le indició exactamente lo mismo aunque le aportó un dato extra. Al parecer esos simulacros se movían gracias a una suerte de acumulador de energía cuya fuente era externa y parecía estar orientada hacia el centro de la ciudad.

- Normalmente solo utilizamos estas instalaciones para entrenar a los nuevos miembros del cuerpo de Seguridad Especial, por lo que no, no hay problemas realies de los que hacerse cargo, señor Vapor. Por circunstancias que escapan a nuestro control, hemos recibido una avalancha de solicitudes de ingreso en apenas unas semanas. Parece ser que hay mucha gente interesada en formar parte de la Corporación. ¿Los motivos? Nos son indiferentes. Pero tenemos un número limitado de plazas pactadas con el gobierno. Solo podemos ofrecer cobertura a ocho aspirantes, por lo que el resto deberá volver a casa y esperar una posible ampliación de personal o la apertura de un nuevo departamento especial. Lo lamentamos

Se vuelve entonces hacia el grupo, desplazando de nuevo su enorme a la vez que estilizada armadura con total fluidez.

- Así que... ¿Que esperamos de ustedes, señores? Que actuando como grupo sean capaces de superar una serie de escenarios que reproducirán con fidelidad la realidad de un día de trabajo para el personal del Departamento de Seguridad Especial. Se enfrentarán a unos desafíos diseñados cuidadosamente por especialistas, en este entorno controlado, supervisados en todo momento por los sistemas de seguridad y vigilancia, así como por observadores del gobierno. Por supuesto, un equipo médico se mantendrá alerta en todo momento para evitar riesgos innecesarios. - Regresó sobre sus pasos, colocándose a la misma altura que el resto del grupo y observando la ciudad a través de los filtros de su visor. Ahora que la verdad sobre SubCity había sido revelada, no se podía evitar comprarla con un gran decorado de cine - En algún punto de la ciudad hay una fábrica. North Central Positronics es el nombre. Dentro, en los niveles inferiores, hay una cámara acorazada. Y en esa cámara está guardada una caja que contiene un documento que debéis recuperar y traer aquí en el menor tiempo posible.

- No hay mas directrices, ni consejos o ayudas. Así serán los trabajos y así es como actuamos en la Corporación. Se nos supone completamente capaces y autónomos como para poder funcionar por nuestra cuenta y riesgo en cualquier situación, siempre minimizando los daños materiales y manteniendo la buena imagen de la empresa. ¿Alguna otra duda?

Notas de juego

Sera dificil mantener las condiciones para la vida aqui abajo. Pense mientras veia a unos niños jugando a perseguirse. Buen trabajo de planificacion. -Dije para mi mismo.

No hay niños, como describí en el post de presentación de la ciudad.