Partida Rol por web

Tras correr por oscuros y humeantes pasillos, el grupo de garras hallaron una escotilla que desembocaba al exterior. Si no habían marrado en sus cálculos, la Forja del Ángel se debía encontrar en las cercanías. Cuando por fin salieron de las profundidades de la ciudad, toparon con lo que no tenían duda que verían. Los combates se habían recrudecido y adentrado en la ciudad. Columnas de humo y edificios destruidos, circundaban el perímetro de aquel lugar. El suelo estaba sembrado con los restos de la muerte, soldados, civiles, xenos... daba igual...

Prosiguieron su marcha. Resultaba gratificante notar como sus funciones orgánicas se mantenían a la perfección a pesar del extenuante trabajo, las abundantes heridas y las horas sin descanso que cargaban sobre ellos. No podían fallar a la Humanidad, pues ella, era un presente del mismo Emperador, señor de Todas las Cosas.

Aprestaron sus armas y corrieron hacia la enorme forja. Allí se hallaba el secreto de poderosas armas y prototipos que asegurarían la supremacía del Imperio allá donde fuera... ¡¡Por Russ que no permitirían que esa alimaña de Gabius los robara!!

A medida que se acercaban al lugar, encontraron ocupando posiciones a un grupo de la Guardia Imperial. Puede que fueran los supervivientes que pedían ayuda...