La noche había llegado y con ella terribles noticias... Jon no conocía muy bien a muchos de los presentes, era mas cosa de nobles, comerciantes y conspiradores el conocer a aquellos relacionados con el trono de hierro y los miembros de las grandes familias, de las cuales se escuchaba una que otra historia a allá en el norte. Tyrion era sin duda una leyenda para muchos o mas bien un mal chiste, como lo demostraba a ahora, aunque al cruzar palabras con él demostraba ser una "persona" bastante versada, sino fuera por su particular sentido de hacer las cosas, seria un claro objeto de admiración. Total que no era de asombrarle el que se tomara las cosas de esa forma y por lo tanto no había que prestarle mucha atención, habían cosas mas preocupantes.
Debemos encargarnos de que el peligro no llegue a esta sala. Dice a sus compañeros de la guardia de la noche. Aunque la pequeña Arya y su padre estaban respaldados por el fiel y fuerte Hodor, Jon pondría principalmente su atención en que nada les pasase.
Edito. He escrito tan mal una palabra, q ni existía en ningún idioma posible xD
La reunión resultaba ser eternamente aburrida, hubiera deseado que mi padre estuviera aquí enseñándole a varios de los presente como se reclama un trono sin rey a través de la cortesía y el poder que una suficiente cantidad de oro puede brindar. El peor momento sin duda de mi asistencia en este lugar fue la presencia de la chismosa de turno (Varys) avisando que debíamos permanecer la noche aquí. Mire a mi hermano Jaime sintiendo deseo, esas ganas locas de pasar un buen rato a solas libre de las responsabilidades burocráticas y las bromas de mal gusto de mi otro hermano gnomo, es evidente que mis fantasías se diluyen cuando aparece mi esposo todo sudado, alcoholizado y gordo.
-Mi hermosa esposa a que viene esa cara tan larga, comprendo que esta situación no te guste y sea incomoda, pero somos invitados lo menos que podemos hacer es mostrar cortesía y tu eres muy hermosa como para mantenerse entre sombras.-Le ofreció la mano.-Ven, juntémonos con mi hermano, ahora que es de noche los Baratheon debemos mantenernos unidos. Usted también Melisandre, mantengámonos unidos.-
Finjo una bella sonrisa ante Robert, consintiendo su petición, aunque me amargaría por horas tener que aguantarlo contando sus anécdotas de la juventud y como llegó a ser una persona con títulos y poder mientras visita los prostíbulos todo el tiempo. Al menos, su hermano Stannis era mas atractivo que esta masa de carne llena de vino y comida. Hubiera preferido escuchar a Tyrion durante toda la noche, debo admitir que el gnomo tenía un sentido estúpido del humor que me incitaba a reírme de él y disfrutar de la velada.
-Como Ud prefiera mi querido esposo, sería un honor compartir tiempo con uds- Finjo como una descarada dulce esposa mientras lo tomo del brazo y lo acompaño hacia donde prefiera sentarse.