Partida Rol por web

Hasta aquí el primer día, muchos iban a sacar sus propias conclusiones y todas las miradas se cruzaban. Desde luego muy pocos podrían dormir tranquilos aquella primera noche, el salón hedía a sangre por mucho que hubieran echado los restos de Eurulfo y Floresta por la ventana  que daba al patio donde ahora caía una fina capa de nieve y desde donde se podía ver el cielo.

Era hora de callar las sospechas, de apartarse del camino de quienes pululan en la oscuridad y de dormir apartados de quienes pudieran tener sobre ellos "la mancha". Era importante despertar al día siguiente.

La estatua seguía emitiendo su fulgor, señal de que entre vosotros se hallaba el poder de los dioses ruinosos

¡Por los bigotes de Ranald! ¡¡Casi me cago encima!!

Exclamó Bragg cuando recuperó la voz. Y a pesar de que eso le tomó tiempo, parece que fue el primero en recuperarla.

Parece que mis temores sobre el viejo eran infundados. Tenía razón y se demostró su inocencia y su buen ojo para los demonios, pero al viejo tahúr también le esperaba una sorpresa desagradable.

Si contaba con salir vivo de esta, no le fue tan bien, pero estés donde estés viejo, buen trabajo y gracias...

Debería disculparme por dudar de ti... - Hizo un gesto que universalmente significaba "pero ya que más da" y se encendió un nuevo puro.

Una calada en tu honor, viejo.

E hinchó tanto los pulmones en la calada, que incluso para aquel experimentado fumador fue demasiado y le abordó un acceso de tos.

Nadie se esperaba lo sucedido. Al menos no yo, desde luego. Al revisar los votos me sentí frustrado por como el viejo había logrado convencer a todos para que lo votasen, e incluso más frustrado al sentir que no era más que un demente mientras lo subíamos a la orca. Pero el resultado final... me dejó la sangre helada. Confusión, mentiras, caos, horror. Tal y como buscan.

-Ha sido tan rápido como imprevisto... Creo que en eso estamos todos de acuerdo en eso. Al final el viejo sí parecía saber quién era el demonio, si era tan sabio como parecía es posible que solo queden 2 de esos demonios entre nosotros  - su sacrificio , si es que no planeaba morir de todos modos, no habría sido en vano.

- El viejo además se votó a sí mismo, si no a otro, pues aunque él hubo señalado claramente al demonio Floresta, fui yo el único quien la votó a ella. Desde el primer momento sentí que ando iba mal en ella - hubiese funcionado o no el plan del anciano. De nada importaba ya. Un monstruo menos entre nosotros, debíamos pasar la primera noche aún en la fortaleza, deseando no encontrarnos ninguna desagradable sorpresa entre la oscuridad. Y después de saber que había un voto en mi contra (sería Floresta? no hubiera ella votado por el viejo que tan directamente la señaló?) todavía estaba más intranquilo. 

   Eh de decir que ayer yo vote por el Calvo, realmente fue mas por azar no por nada en especifico pues del viejo no me estaba fiando para nada, mas cuando a la mitad de su auto-busqueda del linchamiento mentaba que no importaba el día.

   Claro, igual me e equivocado en mis prejuiciosa línea de pensamiento visto lo visto, por lo que solo me queda pedir disculpas y proseguir con todo esto. 

Estaba mirando al viejo "estirar la pata" cuando al pestañar todo habia cambiado. - Como podría estar ahi si lo acabamos de colgar iba a preguntar Erkus cuando lo que sucedio lo dejo atonito.

- Definitivamente que sabía o no sabía el viejo será un misterio o si esto era su plan desde un principio. Tal vez el precio de uno de los demonios era su vida y la pago siendo feliz. - mientras mira al resto de personas a ver cuales actuaban indiferentes o normales luego de la aparición de un demonio. 

Luego se dirije a una esquina, prende su pipa y se pone a mirar a todos los presentes.

Aun recuperándome de la visión de engendro del caos que se había llevado al viejo con él. Busque un sitio para sentarme y descansar.

-Como esperaba escondía algo, aunque al parecer tuvo acierto en sus sospechas, ahora me corroe la duda de si fuera solo azar o sabía algo que nosotros no. Quiero pensar que no fue suerte el elegir a Floresta, pues de lo contrario cualquiera pudo ser el sustituto en la soga. -Poco o nada me importaba un voto en contra, era mas que normal en una situación donde todos acaban de conocerse, no obstante...

-Les seré sincero y confesare a ver votado contra aquel hombre.- Señalo a Arist, pues no había abierto la boca desde que empezara aquel encierro y ni su nombre conocía.

Al principio cuando vio al viejo ir hacia la orca, Ariel tuvo que contener un bostezo de aburrimiento. Había sido muy previsible. Sin embargo, lo que pasó a continuación le pilló por sorpresa. Su siguiente acción cuando vio al hadilla del bosque convertirse en demonio, no pudo más que aplaudir asintiendo al hombre. Gran trabajo, que poco le duraría. Torció el gesto cuando el anciano acabó también hecho papilla. Lástima, le había cogido cariño.

¿De qué sirve decir a quien hemos votado? Lo hecho, hecho está. Fin. Empezamos de 0 otra vez. Lo único claro es que el abuelo suicida era bueno cazando a esas bestias y se lo han cargado también. Estaría bien que si alguien tuviese el maravilloso poder de comunicarse con los muertos, le comentara si le había dado tiempo a ver algo más. Dijo sin darle más importancia. Por mi parte, nada de lo que puedo hacer resulta útil en este momento. Se encogió de hombros apretando un puño, y es que esa última verdad le revolvía las entrañas bastante.

—Los muertos no hablan, elfa —dijo Gherta, consiguiendo hablar después de todo lo acontecido.

—Puede que el anciano no quisiera morir después de todo. Tendió una trampa. ¿Cómo sabía él que Floresta era uno de los Siervos? Misterios que la muerte esconde ahora. Si al menos hubiera sido más rápida con mis hachas.

Se engañaba a si misma, no hubiera sido capaz de frenar al demonio ni con un acero mejor. 

—No tengo más armas que estas hachas, no tengo nada más para cazar a los otros dos diablos. Ese hombre se ha sacrificado por nosotros. Bragg, fuma en su honor si quieres. Yo prometo honrarlo cazando a otra de esas bestias. 

-Eso no es del todo cierto, Ariel. De mucho sirve saber quien vota en ciertas circunstancias. Y de poco sirve decir que empezamos de cero cada vez. Al menos de entre todos nosotros, yo fui el único que votó a Floresta, y ésta resultó ser un monstruo como bien hemos visto.

-Aunque la mayoría luego decidierais votar al viejo, siempre cabía la posibilidad de que ella fuese votada por otros y arrastrada a la horca, sobre todo después de que el anciano la señalase directamente. 

-Y esto demuestra que yo - miro entonces a Presunta D. Altonatha - estoy del lado de los inocentes, reduciendo el margen. No empezamos de cero, Ariel - me dirijo nuevamente a la Elfa - ahora sabemos que son menos, y tenéis un "sospechoso" menos de quien preocuparos, pues yo he probado, sin quererlo, que formo parte del bien.

Lo acontecido después de las votaciones me tomo por sorpresa, todo fue tan rápido y brutal.

El hombre tenía razón, sin duda era un gran elemento para cazar a esas bestias, es una lástima que rápidamente hayan cobrado venganza,pero debemos continuar aún no tengo idea de quiénes ni cuántas bestias quedan, lo que si es interesante es que Jorjos votará por Floresta parace tener también un buen olfato para encontrarlas, me preguntó Jorjos tienes alguna otra sospecha?

Gherta soltó una risa elevada al escuchar los argumentos de Jorjos.

—Solo porque tú digas que has hecho una cosa no quiere decir que la hayas hecho, ¿Es que no existe la mentira en estas tierras o qué? Empezamos de cero porque aunque digamos a quien elegimos colgar, estaremos mintiendo, unos por ser los Siervos del Caos, otros, por vergüenza. Yo voté al viejo, lo mismo día. Podría haber dicho una cosa y hacer otra.

Se encogió de hombros, lo mismo daba.

—Yo recibí dos votos, ergo quien me ha votado es un necio o uno de los Siervo. ¿Quedan hagallas dentro de vosotros para decirme quién me ha votado?

Los miró a todos, desafiante.

—Y hay otra cosa que me preocupa. Uno de nosotros aún no ha dicho una sola palabra, como bien han señalado. ¿Por qué callar en un momento así?

- FIN DE LA NOCHE Y FIN DE ESCENA -