Partida Rol por web

Me estremezco y me separo unos centímetros. Han caído tres, Ares. Susurro. Estoy divertida. Estoy apenada. Al fin y al cabo la muerte no deja de ser un gran juego y quizá en otros momentos... Pero no ahora. Han caído tres, Ares. Repito. Tendremos que tomar una decisión. 

El mata sanos, si ahora tengo que acusar. Conoce los venenos y un cadáver se puede manipular. Le dejo apenas esos centímetros, pero no por mucho. Muerdo su labio inferior tirando un poquito, mientras necesita pensar y continuo con unos besos en en cuello, aunque espero que no lo necesite mucho y eso si, que que vuelva a pegar su cuerpo al mio no se libra, ella si es capaz de pensar en esas condiciones y que tras la desaparición de dos diosas de tres victimas me hace no desear apartarme de ella. Temo separarme de ti, dos diosas han caído te tengo a mi lado, eso lo vale todo. Alterno mis breves palabras co los besos mientras este pensando, es toda la tregua que puedo concederle de momento....

Asiento levemente: Que sea Asclepio, pues, señor de la medicina. 

Y Ares, añado con voz pausada, antes de volver a saltar encima de él, no olvides que yo no soy Afrodita. No soy ninguna damisela en apuros. No temas por mi seguridad, porque yo no temo por ella. Dejemos el miedo a Phobos y vivamos el momento. 

Tregua terminada, acompañando de besos de cintura para arriba el cuerpo de la diosa lo libero de esa ropa que tanto le molesta disfrutándolo con mis manos, mis labios.....olvidando todo lo que no es ella ahora.

¡Ares! Gimoteo. ¡Est... estás seguro de Asclepio? Respiro hondo, intentando controlarme. No es seguro atacar a nuestros defensores, ¿no te parece? Él y Anubis son de los pocos que han hablado en nuestro favor. 

Paro un momento mirándola fijamente a los ojos. Cariño, Asclepio el dios de la vida y los venenos tiene motivos y el medio, es uno de los que tienen todos los medios. Vuelvo a a besarle para respirar hongo y controlarme un poco mas. Mnemósine es mi otra asesina, me acerque a ella desde el comienzo porque sospeche de su aptitud, pero de eso parece que Dionisio ya esta acusándola. Shiva me da que también, no ha sido capaz de dar la cara por su mujer en todas las veces que le he atacado y son muchas ya. Espero ver si tiene algo que añadir, antes de continuar con nada deseando poder tener mas entre mis brazos y los besos, caricias de Eris mirando a Eris con deseo y toda la calma que puedo mantener en un momento así.

No tienes pruebas, y ahora resulta más un aliado que un enemigo. Respondo rápidamente. Mnesmósine es una palurda que llora la muerte de las inútiles de sus hijas, no la veo capaz ni de ambicionar salir viva de este encuentro. Y Shiva... Shiva es un vago que espera que su mujer le haga todo el trabajo. No entiendo porqué Ares señala a esa gente. ¿Confías en Dioniso? 

Me parece que con Mnemósine acierta, puesto que hasta ahora solo tengo la certeza de que tengo un dios dominado y solo puedo confiar ciegamente en ti, Dionisio no va desencaminado y gracias a su acusación ya tengo a dos de mis tres sospechosos en jaque a la espera de que los termine de desenmascarar en el momento adecuado. Ya están nerviosos. Yo no atacaría a Dionisio mas de momento porque esta librando una batalla por nosotros sin el saberlo. Y necesitaba meterlo en mi acusación para meter al matasanos. Abrazo a Eris firmemente, mostrando plena confianza en ella y transmitiéndole mi seguridad.

Frunzo el ceño. Hay algo que no me convence: ¿A qué te refieres con "dios dominado"? 

Va hacer lo que le pida, servirá a nuestros intereses.Recuerda que te hable de lo mas parecido a un amigo. Motivo por el cual tenemos un apoyo externo que usaremos para encontrar al o los asesinos. Como ves te estoy siendo sincero en todos mis planes, ya que sin ti no veo motivo para luchar por una meta que no fuera diversión y acabar con todos. No dejo de abrazarla acariciando suave y sutilmente su piel desnuda mientras espero su reacción.

Una partida sin peones es del más aburrida. Asiento, no muy convencida de sus palabras. Entonces, ¿sigues deseando la muerte de Asclepio? 

Tengo dos objetivos principales, el matasanos o Mnemósine, quien este mas tocado a ese le hundimos. Si tienes alguna idea te escucho, estamos unidos en esto.

No entiendo tu obsesión por Mnemósine. Ella me acusó y aún así no veo su maldad en ninguna parte. Es tan aburrida que me entra sueño solo de pensar en atacarla. Me encojo de hombros. Vayamos a por Asclepio y después... después veamos lo que pasa. 

No quiero que me malinterpretes, no se si recuerdas el momento que comenzó a acercarse demasiado a mi, fue tras un desafió y una humillación publica por mi parte. Cambio radicalmente de aptitud intentando seducirme y complacerme en exceso tras un casi intento de agresión. Creo que busca darme una puñalada por la espalda y es el motivo por el que me acerque mas a ella.

Asiento: Ten a tus amigos cerca y a tus enemigos más cerca aún. Si es lo que deseas, gran Ares. Así sea. 

No es solo lo que yo deseo, tus deseos también cuentan, necesito conocer tu opinión y deseos porque esto es cosa de los dos. Si buscara otro sirviente no te contaría todo.

Mis opiniones difieren de las tuyas, Ares. Desconfío de Dioniso, de Yahweh y de Nyarlathotep. Kali me parece peligrosa, pero no sé si hasta el punto de querer matar a otros dioses. Y Quetzalcoatl me irrita. 

Asclepio y Mnemósine me parecen dos peleles, dos marionetas. Fácilmente desechables y rápidamente olvidables. Ella ni siquiera tiene un culto propio. Él ni siquiera es un dios de verdad. ¿En serio crees que tienen el suficiente poder como para coger al dios más rápido y matarlo? ¿Esos dos? Me encojo de hombro. Quizá son lobos disfrazadas de ovejas, pero no parecen más peligrosos que un piojo. Molestos sí, pero peligrosos... para nada. 

Sonrió al verla hablar, aunque no pensemos igual prefiero que piense por si misma. Quiero que me prometas algo, que aunque no coincidamos en nuestras opiniones te expresaras libremente y no dejaras que se haga todo porque te lo digo yo sin mas. Beso a Eris para terminar de sellar mis palabras.

Somos un equipo, solos no valemos nada... Juntos, juntos valemos el mundo. Unas veces debo ceder yo, otras debes ceder tú. Déjame ser la primera en hacerlo.  Le devuelvo el beso. Y no te preocupes por mis deseos, al fin y al cabo, todo va a salir como debe de salir. 

Entre risas de felicidad y bastante animado. Eris, como diosa de la discordia veo que estas perdiendo facultades, estas menos peleona que de costumbre. Me tumbo y también lo hago con ella junto a mi.