Partida Rol por web

Pasabais un tiempo bastante largo siguiendo las huellas y parecian interminables, todas perfectamente separadas por la misma direccion parecia que estuviesen hechas expresamente para que quedasen a esa distancia.

Matsu y Akodo reconocian el camino, se estaban dirigiendo hacia el castillo matsu, tardarian un dia entero en llegar a la fortaleza y parecia definitivo que las huellas llegarian hasta ahi, pero las apariencias se acababan cuando la ruta se dividia, las pisadas en el suelo se separaban, unas seguian hacia el castillo las otras se dirigian a un enorme lago que se encontraba cercano a la fortaleza.

Seguimos el rastro, y observé con preocupación que parte del mismo seguía el destino del castillo. Eran tan probable que el culpable se hubiera refugiado allí como que fueran los supervivientes. Pero no tenía dudas, el lugar desconocido primero. Ya habría tiempo de hacer limpieza en casa.

Sigamos el rastro que atraviesa el lago, seguramente hacia el castillo se dirigieran los supervivientes; y si no es así mejor será que acusemos de forma indubitada.

Mi idea era cercionarnos que el rastro acababa en el agua o sus cercanía y desde allí seguramente deberíamos preguntar en la aldea acerca de quien pudo pasar y hacia donde. Así se lo fui comentando a los demás mientras nos dirigiamos allí.

Espero la decisión de Matsu-San, al fin y al cabo estamos en sus tierras y se trata de un asunto delicado, considero que lo correcto es seguir sus pasos al menos de momento.

Cuando finalmente habla contesto simplemente con otra reverencia y sigo sus pasos.

Seguramente la persona que dejo estas huellas se refugie en la aldea cercana. Hablo reafirmando las palabras de Matsu-san. Estas tierras las conocía, aunque esta región no era la que más había transitado. Me gustaba tener a Matsu-san a cargo de esta expedición. La gente seguro que la conocía y sería facil poder obtener información. Ando tras los pasos de ella.

Seguiais las huellas y llegabais a la entrada del pueblo, ahora todo quedaba en vuestras manos como continuar la persecucion.

Mirumoto-san, dirigiendo hacia el samurai del clan dragón. Cree que es una buena idea empezar a mirar en la taberna? A la vez tambien dejo una mirada en el aire para ver si alguien tenia idea de por donde empezar mejor. Para mi la posada era un buen comienzo pues siempre era señal de rumores y centro de reunion de desconocidos, aunque la posada era otra opción.

Quizás la posada sea otro punto de información por si se han quedado a dormir.

Nos encaminamos hacia la aldea con celeridad pero sin correr al fin y al cabo nos llevaban ventaja y no podríamos reducirla hasta saber la dirección.

Si la aldea ofrece hospedaje a caminantes habrá que visitarlo, pero si es asi  deberíamos hacérselo saber al efe de la aldea antes. No es justo que no se entere el primero de la presencia de samurais ivestigado en su aldea.

Encuentro sabiduría en las palabras de Matsu-San. -También a mi me parece lo más correcto. ¿Hay un puesto de magistrados en el pueblo? También deberíamos informar allí en tal caso, y quizá pudieran darnos información util.-

Supongo que cada pueblo debe tener su grupo de magistrados o almenos un jefe que responda como cabeza. Aunque quizas no sea bueno preguntar mucho a los aldeanos por no levantar algun tipo de mala sospecha al vernos con gente de otros clanes. Con ello no lo digo por crear malestar, Mirumoto-san y Doji-san, mas bien para no esparcir ningún tipo de rumor innecesario. Comento el tema para ver como enfocar mejor el asunto. Quizás era mejor pasar un poco inadvertidos, a pesar de estar en nuestra tierra. Dada la tension entre clanes, quizas el hacer poco ruido sería mejor.

Según entramos en el pueblo, observo que se trata de una aldea corriente, donde cada aldeano sigue su vida.

Si hay magistrados o yorikis en la aldea los veremos de inmediato si no están patrullando. De todas maneras bastrá con preguntar y pedir que se nos conduzca hasta el jefe o magistrado.

Entrabais a la aldea que no parecia tener grandes riquezas asi que si hubieran pasado por aqui los bandidos lo habrian hecho solo para escapar y no saquear.

Nada mas poner un pie en la primera calle de la aldea veis a un borracho durmiendo sentado apoyado contra una Katana, si os fijabais mas detenidamente en su aspecto observabais tambien una hoja mas pequeña e igualmente curvada, que reconociais perfectamente. Por sus pintas no seria mas que un vagabundo, pero a todos os intrigaba si no es que os molestase el hecho de que tuviera un daisho bastante adornado.

Si continuais andando encontrareis el centro del pueblo donde podreis encontrar al magistrado patrullando.

No sabía si expresar asco o pena por le hombre echado a un lado de la calle. Poseer un espada y carecer de honor ni señor es como tener una vida y ningún propósito para ella. Contuve el gesto totvo cuanto pude pensando que necesitabamos respuestas.

Ronin, necesitamos saber algunas cosas ¿puedes contestar con sinceridad algunas preguntas?

El desparpajado hombre levantaba un poco la cabeza apoyando sus manos en la katana para no caerse a un lado o hacia atras, cuando os miraba podiais observar en su rostro una larga cicatriz que le cubria que la cara de forma diagonal y a la vez un parche descolorido que le cubria el ojo izquierdo.

-¿Que si puedo?, si, si que puedo.- Respondio el Ronin.

Bien, Podía ser un sentimiento preconcebido, pero la actitud del ronin me parecía desafiante o burlesca. Prefería ignorarlo pues no podía estar segura que no fuera únicamente mi impresión.Seguramente estés entrenado en comprobar datos extraños. Y deben haber pasado por aquí o por las cercanía una serie de hombres o varios grupos pequeños. ¿Has notado algo parecido?, Puede que pidieran pasaje para el río.

Puede.- Respondio el ronin con una gran sonrisa en la cara, sin pudor alguno se estaba burlando de Matsu.

¡Respeto ronin!, alcé la voz golpeando a la vez el suelo con la base de la sasumata.Puede que tu tengas tiempo de haraganear, pero los samurais no. Contesta y si sabes lo que es el pudor deja atrás tus tonos jocosos: me enfermas. Decidí mostrarme firme, pero sin perder la cabeza, aunque probablemente fuera lo más indicado no quería simplemente te atravesar al imbecil y perder la información.

Observo el intercambio de insultos desde una distancia prudencial procurando mantener un gesto tranquilo.

" Un trato justo a un hombre ola sin modales " . 

Pensó el grulla respecto a las palabras de respuesta de la matsu , y que tambien eran esperadas pues la familia matsu es conocida por su temperamento . 

Matsu san daba miedo cuando se enfadaba. Sin duda sabia tratar a gente de esa calaña. En voz baja, siguiendo la escena, digo a Doji: Douji-san, te has fijada en esa Dousho tan decorada que tiene? Sin duda me llamo la atencion cuando se apoyó en la katana.