Partida Rol por web

Al escuchar lo que Urik le dice, ese hombre se le queda mirando seriamente y da dos pasos hacia atrás, a la vez que empieza a temblar.

-¿Zargón?- dice -(Ininteligible)- y señala la pared del fondo, la que está al sur.

-¿Zargón?- dice -Lo siento, lo siento, no me hagas nada, por favor. Pregunta allí.- y señala la pared sur.

- Dice que preguntemos allí- transmite Hitmol- Que preguntemos allí por Zargon. No sé que habrá ahí, pero creo que no serán más drogados, sino algo con más capacidad para razonar.

Pues venga, en marcha muchachos - apremia el Paladin al grupo

Urik al escuchar al drogado y ver que este le indica la pared sur , se acerca y la observa buscando algo en ella , algo distinto , y a la vez intentando escuchar por si se oye algo .

Antes les dice a sus compañeros ... Estad atentos , no me fio de los drogados estos .

Reshark , asiente antes las palabras de su pequeño amigo y le contesta .

Tranquilo yo te cubro , y saca su arco preparandolo para lo que se pueda avecinar .

Ellidian suspira - Sí... marchemos - corrobora a las palabras de su hermano.

En realidad, lo que hay en aquella pared es... un pared. Los Cynidiceanos que hay ahora a vuestro alrededor tienen el mismo comportamiento errático y fantasioso que los anteriores y se apartan en cuanto pronunciáis la palabra Zargon, mirando con miedo la pared monda y lironda que tenéis delante.

Urik mira la pared y luego a los drogados ...

Aqui no hay nada , estos tios deben de estar peor de lo que parecen , tienen miedo hasta de las paredes . Venga sigamos por el otro lado del pasillo , a ver si encontramos a alguien que de verdad nos pueda decir donde encontrar a Zargon .

Luego mira a los drogados y le increpa ...

(ininteligible ) Zargon (ininteligible ).

Luego se gira a los drogados y les increpa ...

Malditos desgraciados , solo queremos libraros de Zargon y vosotros no nos ayudáis lo mas mínimo .

Las constantes menciones a Zargon no hacen más que alejar a los drogados cynidiceanos de la pared. Algunos incluso empiezan a dirigirse a la puerta, incómodos, simulando un andar noble y digno, señal del tipo de persona que en sus sueños creen ser.

Ellidian vuelve a suspirar, con resignación.

Creo que preguntarle a estas pobres almas descarriadas no nos servirá de nada, Urik. Andan vagando lejos del camino de la cordura, y a menos que seamos nosotros quienes busquemos, nadie nos facilitará el camino

Hummm… ¡Malditos chiflados! Si no hay manera de atravesar esa pared será mejor que volvamos por donde hemos venido...- Jathor observa con curiosidad la pared que habían señalado, preguntándose si realmente no podría haber algo de razón en las mentes perturbadas de aquellos hombres.
¿Urik, no sería posible que hubiese algún tipo de puerta secreta en esta pared? No perdemos nada por echar un vistazo.
Jathor pasa la mano por la pared, buscando algún tipo de fisura en la piedra.

- Tranquilo Jathor- dice el semielfo mientras ayuda al bárbaro a buscar una posible puerta secreta en la zona sur, ya sea una puerta normal o accionada por algún tipo de mecanismo.
Creo que deberías dejar de mencionar a Zargon, no hace sino alterarles.- comenta a Urik durante la búsqueda.

Reshark se acerca a la pared a buscar como sus compañeros ...

Bueno si dicen que estan por aqui , algo oculto tiene que haber , veamos a ver si lo encontramos entre todos . Dice mientras tantea en la pared buscando posibles rendijas o resortes ocultos .

Jathor, que no encuentra ninguna irregularidad en la pared, se separa de esta, dejando sitio a los demás. Se da una vuelta por la sala, sin preocuparse si ahuyenta a los cynidiceanos que quedan en esta.

Vuestras pesquisas no parecen servir para encontrar nada extraño en la pared. Cada vez que la lopeáis o rastreáis, los cynidiceanos parecen ponerse más nerviosos, como si esperasen que en cualquier momento el muro fuese a derrumbarse para dejar paso a un dragón.

Y no tarda en empeorar la cosa. Un grupo de varios cynidiceanos que habían dejado la sala vuelven a ella, nerviosos y asustados, murmurando "¡Darius!" Al mirar interrogativamente a Arvid, este susurra unas palabras que Tayyip traduce antes que nadie.

"¡El esclavista!"

"¡El esclavista!"

¡Hombre, a este quería ver yo!, dice Thelonius, bastante mosqueado por tanto retraso. Y sin decir más, empulga una flecha y busca distancia para "saludar" adecuadamente a dicho personaje.

Bien, ya era hora. Intentar no matarlo. Estaría bien poder sacarle algunas palabras.
Dicho esto, Jathor se coloca junto a la puerta de la pared norte, por donde se supone está a punto de entrar el esclavista. Se coloca pegado a la pared, para coger por sorpresa al zargonita, y tapar la salida, para que no pueda escapar.