Partida Rol por web

El enano era demasiado insistente, Celebnor dio un suspiro y se apartó de la chimenea para acercarse de nuevo al grupo. -Me están comenzando a ver con ojos de desconfianza.- Terció muy serio. -Yo no quiero eso, maese Farin. Quiero que este grupo sea tan unido como lo es la salsa a los fideos.- Fue mirando a todos uno por uno. -Sí, tengo una deuda de sangre por cabrear a uno de esos bárbaros, me he metido en un buen lío y lo se. Los he ayudado con mi magia, y he puesto en ridículo a su jefe, incluso he llamado la atención de su mujer, cosa que lo hizo cabrearse aún más.- Saca del interior de su ropa un guardapelo que tiene colgado al cuello. -Tengo uno de sus cabellos. De la mujer, no del jefe bárbaro.- Dijo como chiste, pero seguía con el semblante serio.
-Una noche me tendieron una trampa tratando de involucrarme en un crimen que ellos pensaban cometer. Escapé usando una runa de fuego, incendié un almacén de trigo y dos casas, maté cuatro guardias y dos bárbaros, uno de ellos era hermano del jefe, por si todavía no estaba lo suficientemente furioso, con eso ya lo dejé en claro.-
Tomó un trago de leche de cabra, ya dejando la jarra vacía. -Me lié con bárbaros, sí, y hasta ahora me arrepiento. Pero sepan que jamás he roto una promesa y soy de cumplir con mi palabra. No quiero que por culpa del pasado haya desconfianza entre nosotros.

Se gira para ponerse de frente a Farin. -Es suficiente? O quiere que le diga los nombres de cada uno de los bárbaros del clan, maese Farin?-

Dio un suspiro fuerte y se retiró a dormir.

Farin escucho todas las palabras de Celebnor con atencion y le contesto.-Esta vez has sido sincero o eso creo,porque no podias contar esa historia desde el principio?...bueno lo hecho hecho esta.Si me disculpais yo tambien me ire a dormir,este viejo ya ha hablado demasiado por hoy.-Farin pone una mano encima del hombro de su primo y le dice-Te importaria despertarme cuando estes de pie?,no me gusta dormir mucho me da dolor de espalda...-Farin se despide de todos los presentes y se dirije a su habitacion.
 

Mientras se encaminaba a su habitación, Celebnor le habló a Erestor. -Ya os lo he dicho, acertijos y jugarretas, eso es todo lo que nos propinó el arbolillo.- Dio un bostezo largo. -Mañana iremos hablando en detalles durante el camino, por ahora será mejor dormir, ya hay varios que los está venciendo el sueño, yo me cuento entre ellos.-

Fúrin había estado absorto en sus pensamientos. Muchas cosas habían pasado desde que se había ido de Bree. En realidad, no habían pasado tantas cosas, sino que se había enterado de muchas. Lo que iba a pasar sería dentro de poco... lo sentía.

Como si en una nebulosa se encontrara, había escuchado la conversación un tanto tensa de su primo con Celebnor. Compartía la postura de Farin, no sólo por ser su primo, sino también porque no le gustaban las medias tintas. De todas formas, no se había pronunciado por ninguno de los dos porque no veía claro... sus pensamientos iban de aquí para allá.

¿Estamos yendo contra un dragón? ¿En qué estamos pensando? ¿Nigromantes? Fúrin... recuerda el tesoro... recuérdalo y tendrás mayor foco... el tesoro... se repetía eso en su mente como una letanía. Si no fuera por la recompensa que parecía estar por venir, si sobrevivía, se hubiera quedado en la seguridad de su forja. Aunque algo, en el fondo, lo había hecho salir... más allá del tesoro. Parecía una voz lejana que lo empujaba a las aventuras, a la gloria en el combate no sólo en el reconocimiento como forjador de armas legendarias...

De pronto la mano de su primo y sus palabras lo trajeron de vuelta.

-Ehm... sí... sí primo, te despertaré... es más... ahora iré a acostarme- dijo volviendo mientras se acomodaba en la silla y se levantaba -Buenas noches muchachos, nos veremos temprano mañana- saludó con una corta reverencia y se fue a acostar.

Todas las situaciones las miraba de lejos, pues pensaba que pareciera que algunos nos traerían mas problemas de los que encontraríamos naturalmente y por causas de la misión misma, lo cual me hizo recordar las palabras de Aragorn cuando me pidió venir:

- Mantén los ojos abiertos y el perfil bajo, pues los peligros que encuentren no siempre serán los que se esperan, recuerda la historia del mediano y del dragón en Erebor, parecía que los peligros serían solo lo que encontraría con el Dragon, pero terminó incluso en una guerra... ánimo  Halbarad... y vuelve vivo...-

Esas palabras volvieron a mi e hicieron que esperara a que los demás fueran a dormir, para dar una ronda de guardia.

Como te prometio el Hombre tras darle la moneda el te saco una daga extraña al mirarla bien te das cuenta que es una uña de garra de unos 4 cm de largo y adherida a un mango de hueso de reno formando un extraño Puñal.

-Esta uña se le callo a ese ser, mande hacer un puñal con el como ves estan duro como el acero. 

Ten es la prueba de que lo que digo es cierto. 

La noche pasó sin más incidentes el desayuno estaba listo digno de un Hobbit.

Las mulas y alimentos listos para el que quiera costearlo.

Los bárbaros partieron temprano, la niebla había desaparecido y salio un debil sol y el día era Helado tipo montañoso.

Os quedaba pasar otra montaña y luego el trecho era un poco más llano.

La Posadera os desea un buen viaje y si se sabe algo de su hijo ella esta preocupada, pues la última noticia que le dieron anoche es que podría haber sido unos Trolls.

Buen viaje. Os dice despues del desayuno. 

A Celebnor le dolía el no poder ayudar a la señora, no le importaba mucho la misión de Elrond y hubiera preferido buscar al niño, pero sabía perfectamente que no era sabio salir él solo y que no iba a ser capaz de convencer al resto del grupo a que lo acompañara. No después de haber escuchado todos lo que el enano le hizo confesar. Aunque la noche anterior lo puso un poco tenso, no se enfadó con Farin. -Él no tiene la culpa.- Pensó -Ese comportamiento es típico en los enanos ancianos. Soy yo el imbécil que no sabe discernir las amistades.-

Se levantó un par de horas antes que el resto de sus compañeros, ya había recuperado un poco su aire alegre, aunque no del todo. Le preocupaba que los bárbaros que lo buscaban anduvieran cerca.
Luego de meditar tomó una de sus mantas y le rasgó una tira que usó para envolverse el rostro y cubrirse la nariz y la boca, y se puso su capucha, de modo que su rostro quedaba casi del todo cubierto.

-Olvídense del nombre Celebnor, puede ser demasiado peligroso andar por ahí llamándome asi.- Dijo cuando ya todos estaban reunidos y listos para partir. -De ahora en más usen el apodo Huesogris. Si alguien aparece preguntando por mí inventen cualquier historia, la que se les ocurra, no me importa.-

Vayamos a dormir pues y esperemos que los actos de  nuestro desaparecido compañero Celebnor no dificulten nuestra misión .Digo con tono seco dando por terminada para mi discusión .Nada bueno podía salir de un grupo de enanos , forajidos y medio-humanos .Mañana será otro día y no podemos seguir perdiendo el tiempo 

Tras haber escuchado atentamente lo que se sabe o se ha averiguado de la cría de Smaug (que es más bien poco), el nerviosismo comenzó a crecer en mi a cada palabra que se hablaba entre los tres barbaros y el conjurador Celebnor - no se si será buena idea llevar con nosotros a una persona con ese tipo de problemas.... esperemos que todo vaya bien - pensé una vez el tema se había calmado y los tres decidieron marcharse por la puerta.

Una vez el problema quedó zanjado, se comenzó a decidir cual sería el siguiente paso - Hermanos, aunque se tarde más, es mejor ir a pie, pues ya sabéis que a "La hermandad" las cuatro patas no nos duran demasiado y lo único que hacen es estorbar... - Tras eso, miré a Lycyn y asentí con la cabeza a su propuesta.

A la mañana siguiente, Fúrin fue a despertar a su primo. El enano había dormido bien, después de todo casi no había tomado nada y tampoco lo había extenuado el viaje por las montañas.

-Primo, ya es hora... prepárate y te esperaré en la sala común- le dijo tocándole al puerta para luego bajar.

Los demás estaban ya preparados, y Fúrin también. Desayunó con voracidad, no sabía cuándo sería la próxima vez que tendría un desayuno de tal magnitud.

Hay que aprovechar cada oportunidad... eso hace un buen comerciante.

-Siempre prefiero ir a pie, para eso los dioses nos dieron dos fuertes piernas...- dijo para percatarse de los elfos -Bueno... a algunos...- y sonrió con picardía -Sin ofender... es una broma matutina. ¿Estamos listos?-

Farin bajo preparado para desayunar.-Ahora mismo me tomaria una buena cerveza...pero bueno-.Farin desayuno lo justo y se guardo las sobras en un pañuelo, no esta bien tirar nada a la basura penso .-Bueno,ya estoy listo vamos primo. -Farin se subio la capucha de su capa y salio afuera.