- Soy yo... ehm... esto... ¿cómo era? Ahm sí, mi nombre era Rastaplín, o... no, no no, Rasputín, eso Rasputín. A veces me olvido hasta de donde dejé mi cabeza.
"Por favor, ábreme, aquí no hay nada que hacer"
Y dicho esto agarré de la maceta que se estaba moviendo y empujé en la misma dirección.
Motivo: Empujar
Tirada: 3d6
Resultado: 1, 3, 4
"¡Pega voces, que no entiendo ni papa!" - oyes al otro lado de la puerta. Parece que alguien está intentando ayudarte a mover el tiesto pero no hay manera humana.
De repente, tras un último esfuerzo y mientras están jadeando de cansancio, alguien se aproxima a la torre, se acerca a ti y pregunta:
- ¿Chico, está el amo en casa?
A juzgar por lo que ves, parece un gran paquete envuelto en papel con dos patas por debajo, finas como alambres. Seguramente es un goblin mensajero. Algo más grande que tu.
- Eso es lo que estoy tratando de averiguar, ayúdame a mover esta maceta y entremos por la gatera. Allí dentro preguntaremos por el amo. Yo quiero saber también si está en casa o no.
- Muy bien chiko! Voy a echarte una mano pero primero kiero hazer zonar la kampana. Órdenez de mi jefe; zeguro ke kienez noz atiendan van a kerer zaber ke eztoy akí.
Y el joven goblin hace sonar la campana -ding, dong- ruidosamente antes de echarte una mano. No le cuesta demasiado pues deja en el suelo el bulto y sube encima para mover la cadena.
Disculpas por la ortografía. Sé que clama al cielo pero quería representar un goblin que habla mal y se me ha ocurrido cambiar letras por k y z.
Me ahorro la tirada de dados, os ponéis los dos a empujar y movéis la maceta. Al otro lado está el lutín Pequeñín, que también intentaba, sin éxito, mover la maceta.
Oh, gracias, Pequeñín, al menos veo que tú también estabas tratando de ayudarme. Mira, te presento a... ehm... ¿Cómo te llamabas? y qué es ese bulto que tienes ahí?
Hablo con Zug y con Pequeñín