-Pues sigue buscando, que yo me ocupo de abrir la puerta.
Pequeñín se marchó al trote ligero para ir a abrir la puerta. Total, ya tenía su pluma para escribir, asi que podría abrirla sin problemas.
Bajando por la escalera vas oyendo el bullicio de la planta baja. Parece que hay bastante gente pero nadie se decide a ir. Al parecer el resto de lutines en este piso andan trasteando en el almacén pues una nube de harina se levanta desde la puerta de acceso a esa habitación.
Sorry, con el comentario que has puesto en el off-topic me he acordado que habías dicho que bajabas pero estaba esperando que alguien más dijera algo :s
Una vez abajo, el lutín se encaró con la puerta enorme que daba entrada a la torre.
-A ver, señora puerta, esta vez no me la vas a jugar y no me atropellarás, ¿verdad?
Haciendo ímprobos esfuerzos y aprovechándose de los asideros que la puerta tiene preparados para estos menesteres, Pequeñín alcanzó el pomo y se recolgó del mismo para poder abrir la puerta.
Pequeñín trata de alcanzar el pomo de un salto... pero de repente se acuerda que el mecanismo de apertura no es un pomo sinó un sistema de poleas y cadenas que se acciona desde una rueda en un lateral de la sala. Mover aquel mecanismo va ser costoso... sin embargo algo llama su atención: una gatera seguramente hecha por Lucifer abre una salida en un costado de la puerta. Parece que, desde fuera, alguien ha colocado un tiesto para impedir el acceso, pero quizá moviéndolo, se podría salir a ver quién hay y ahorrarse intentar mover la puerta.. porque esperar a que el grupillo de incompetentes que discute en el almacén salgan a ayudar va a costar lo suyo.
-¿Quién vive?- berreó a pleno pulmón.
Se colocó junto al tiesto y apoyó su espalda en el, con la intención de moverlo. Pero a pesar de sus esfuerzos, el tiesto no se movía de su sitio.
Cachis en los mengues, ya podría moverse el maldito. ¿Y si le hago volar?
Se concentró para hacer que el tiesto volase un poco, lo suficiente como para poder desplazarlo sin que toque el suelo.
-Tiesto de mi cojones, vuela como los gorriones...
Ni por esas se desplazó el tiesto.
Motivo: Apartar tiesto
Tirada: 3d6
Dificultad: 5+
Resultado: 4, 3, 1
Motivo: Volar tiesto
Tirada: 3d6
Resultado: 2, 4, 3
Voy a ver si vuelve el jugador de Rasputin (que es el que está fuera) y si no lo PNJtizo.
Al otro lado, ves como el tiesto se mueve un poquito, pero nada de nada. Además, Rasputín parece que balbucea algo en el otro lado pero no lo entindes muy bien.
-¡Pega voces, que no entiendo ni papa! - le grita al ser al otro lado de la puerta.
De nuevo se dispone a empujar el tiesto, a ver si así consigue moverlo. Pero tampoco. El tiesto es demasiado pesado y él demasiado pequeño.
Motivo: Desplazar tiesto
Tirada: 3d6
Dificultad: 5+
Resultado: 4, 3, 1
La misma tirada que la otra vez. Vaya mierda.
- Ding dong - la campana de la puerta de entrada suena de nuevo. Parece un toque más vigoroso.
Tras el silencio una voz se escucha desde unas plantas más arriba. Es Rudesindus desde el laboratorio.
- ¿Es que nadie va a ir a abrir? ¿Se puede saber para qué os pago si siempre tengo que hacerlo yo todo?
Parece que al otro lado de la puerta, el compañero Rasputín, pues era él quien había quedado encerrado en el exterior de la torre, ha conseguido ayuda para mover el tiesto. Éste se mueve sin problema pues parece que un joven góblin ha llegado a la torre y le ha echado una mano para mover el obstáculo.
El góblin parece un góblin mensajero a juzgar por la gorra con visera que lleva en la cabeza. Y seguramente es asó porque, al fijarte, observas un enorme paquete envuelto en papel de regalo.
-NO HACE FALTA QUE VENGA, AMO. YA ABRO YO.
-Trae, dámelo, que yo se lo llevo al Amo.- Pequeñín aventaba continuamente con las manos de puro nervio.- -¿Dónde firmo?
La torre vuelve a tener cierta tranquilidad... excepto algunas vocecillas que llegan desde en rellano principal. Parece que ha llegado lo que parece un invitado. Afinando el oido escuchas como un tipo que habla raro charla con Pequeñín un par de pisos más abajo.
Un apunte, ya que no estoy familiarizado con este juego, llevo un rato intentando conseguir el papel, hasta el momento sin mucho éxito al parecer, no sé si es por algún despiste o porque normalmente en estas situaciones los lutines se abstren fácilmente y por ello les cuesta más realizar sus tareas.
Yo me quedé con que removías libros. Si lo que quieres es pillar papel, arranca unas hojas de uno de esos libros, ya verás qué gracia le hace a Rudesindus :p
En principio es un juego normal, tienes unos objetivos a cumplir que no son nada épicos (para qué engañarnos). Lo que pasa es que tengo tendencia a que cada uno haga lo que quiera mientras no sea muy descabellado y, en ese caso, mediante una tirada, continuamos la historia. Pero pillar papel no tiene más complicación que me digas de dónde lo pillas teniendo en cuenta que es una biblioteca. Es decir, que en este sentido soy muy permisivo en la cocreación de la partida.
Dagamo cogió papel del escritorio de Rudesindus mirando que no tuvieran demasiadas manchas de tinta, por desgracia se le había caído el tintero encima de las hojas, y después comenzó a volar torpemente hacia la habitación donde estaba el baúl para dejarlo allí.
ok, pues de momento cumpliré mi objetivo y luego ya se verá.
De camino a la habitación del baúl te encuentras una pequeña reunión improvisada en el rellano de la planta baja (escena III)