Me es imposible, entendedlo. Corro demasiado peligro y no me gustaría ver mi cabeza en una estaca.
Cambia de tema
Esperad media hora y salid, no tiene pérdida. Mucha suerte amigos, la vais a necesitar.
El hombre cierra la puerta ( aunque no echa la llave ) y le oís alejarse y como abre otra puerta y la vuelve a cerrar sin que tampoco se oiga como echa la llave.
Ahora estáis de nuevo solos.
Espero un poco, mas o menos el tiempo indicado por Iñigo, y salgo por la puerta, en busca de mi equipo, justo al dar el primer paso por la puerta, me giro hacia la celda:
-Bueno, ¿nos vamos no?, rápido, no se si durará mucho nuestra "ventaja".
- Venga, vamos. Mi reuma no aprueba la humedad de los calabozos.
- Vamos allá, primero cogemos las cosas y después a casa del mandamás.
Juan también se apunta a esperar lo que Íñigo les dice. Al salir de la celda, lo hará con mucho cuidado y en silencio, intentando escuchar algún tipo de ruido que delate la presencia de guardianes, recién llegados, etc...
Malik llamó a Rasiq con un silbido, y el cuervo se aposentó en su hombro. Hizo un gesto afirmativo a sus compañeros, y los siguió fuera de la celda, esperando que las indicaciones de Íñigo fueran precisas.