Te encuentras junto a Kurt Reed, el teniente Xenon Richardson y el teniente Alan Parker, estáis en un nido de ametralladoras. Alguien da la alarma y una incontenible oleada de boches (alemanes) se lanzan contra vosotros. Comenzáis a disparar con vuestras ametralladoras, pero las balas no parecen afectarles, entonces, de repente, te das cuenta de que no son humanos...
Tirada oculta
Motivo: pesadilla
Tirada: 1d6
Resultado: 3 [3]
Estabilidad mental (1/1d4)
Desde muy joven empecé a notar como los humanos siempre buscábamos cualquier razón para luchar contra los demás, en ocasiones había algo real tras el conflicto, algo con sentido y en este tipo de luchas solían desarrollarse con algún tipo de coherencia, pero en su mayoría las luchas partían de pequeñeces, entre más absurdos y ridículas eran las razones, mas lo era el conflicto, llegando a cometer grandes injusticias por ideales sin sentido, luego de años en los barrios bajos de New York confirme mis teorías, ahora irónicamente me veo forzado a participar en estas luchas sin sentido.
Estaba perdido en mis pensamiento cuando me informan que los alemanes han comenzado un ataque, mis compañeros y yo accionamos nuestras armas contra ellos, y con ello habría de venir el horror de la guerra, o eso era lo que creía que pasaría, al final la realidad fue mucho mas horrible de lo que pudiera imaginar, mis ojos no podían dar crédito a lo que estaba sucediendo, los proyectiles estaban impactando a los objetivos, pero estos continuaban avanzando sin recibir ningún daño, es allí cuando veo con claridad, esas cosas no son humanos, suelto la ametralladora y miro a mis compañeros, quiero saber si soy el único que lo ha notado, quiero ver en sus rostros una confirmación de lo que veo.
Motivo: Estabilidad Mental
Tirada: 1d100
Dificultad: 80-
Resultado: 25 (Exito) [25]
25 de Julio de 1918
Justo cuando aquellos seres están a punto de alcanzaros... despiertas en el hospital militar de Val-de-Grâce, situado en el 227 de la rue de Sant Jacques, en París. Ves que no eres el único que acabas de despertar, hay más a tu alrededor, todos pertenecen a la 2ª Compañía del I Regimiento de la 42 División (División Rainbow) del I Cuerpo Expedicionario de los Estados Unidos. En camas adyacentes se encuentra el resto de sus compañeros de armas, veintiuno en total. Al parecer, son lo único que queda de la 2ª Compañía.
Un hombre os llama la atención para que todos le escuchéis todos los presentes:
-Soy el doctor Alexander Scie de Villevile, el jefe de planta. Todos los aquí presentes presentáis los mismos síntomas, habéis estado sumidos en un estado de coma, inexplicable en términos médicos, desde que habéis llegado al hospital hace cinco días procedentes de un hospital de campaña en las afueras de Reims, donde en un principio se creyó que podíais ser víctimas de algún nuevo tipo de gas. Todos sufrís una amnesia parcial: al parecer sois incapaces de recordar nada de las dos últimas semanas.
Al intentar recordar, en efecto, recordáis exclusivamente la monotonía de la guerra de trincheras del frente americano, en los alrededores de Chaumont.
El doctor sigue hablando:
-Además, todos tenéis un extraño tatuaje en el hombro derecho.
Lo más extraño es que nunca has visto nada igual, y aún menos, recuerdas haberte hecho ese tatuaje
Al abrir los ojos me veo en un lugar desconocido, pero estoy rodeado de rostros familiares, unos más que otros, entre estos busco uno en particular, es cuando un hombre mayor pide nuestra atención, nos habla de nuestra situación, en mi mente comienzo a formular teorías, empezando por algún tipo de arma química que pudiera causarnos este estado, lo que dice tiene sentido, no recuerdo que nada raro hubiera pasado, pero cuando menciona lo del tatuaje la historia se torna algo más misteriosa.
No puedo reprimir un primer instinto de confirmar lo que dice, levanto mi manga y observó intrigado, no tendría ningún sentido que los alemanes nos atacaran con gas o algo similar, para luego tatuarnos, moviendo mi cabeza en negación, como intentado descartar la idea, dirijo mi voz al hombre -Discúlpeme doctor, ¿sabe usted algo del Cabo John Jurgens?, ¿tal vez este en otro grupo de supervivientes?- mi mirada pasa nuevamente por los presentes, buscando el rostro mas familiar en la División Rainbow, para confirmar que no se encontraba presente.
El doctor mira una lista después de escuchar el nombre
-Lo siento, los que os encontráis aquí sois los únicos supervivientes
no pongas turno
Antes de poder asimilar las palabras del doctor, un individuo agresivo, de gafas oscuras y enormes patillas se acerca a ti
-Señor Jurgens acompáñeme -en su voz notas que no es una petición sino una orden, te lleva hasta una habitación completamente vacía, con una silla en el centro donde te indica que te sientes-. Quiero que me explique cómo desertaron usted y sus amigos, ¿cómo consiguieron esfurmarse de Chaumont para ir a tatuaros a Reims? ¿Cómo lo hicieron sin que nadie les viera y atrevesando el campo de batalla?
Me parecía irreal lo que decía el doctor, a mi mente le costaba asimilar que mi hermano hubiera muerto, pero antes de poder intentar poner en orden mis pensamientos soy arrastrado a una sala de interrogatorios y soy cuestionado por cosas que simplemente no recuerdo -No lo sé- empiezo a hablar, pero me siento realmente confundido y esto puede notarse en la forma como salen las palabras de mi boca -Solo recuerdo como pasaban los días en el frente sin mayor novedad, siendo los mayores enemigos el calor y las moscas-
En mis incursiones en los bajos fondos de New York me encontré en muchas situaciones similares, alguien con gran poder intentando amedrantarme para sacarme información, una sensación a la que me fui adaptando, le mire a los ojos y me convertí a mi mismo en el interrogador -¿Qué ha sucedido en el frente? ¿Los alemanes decidieron atacar? ¿acaso usaron algún tipo de arma química contra nosotros?-
El hombre parece no tener intención de responder a tus preguntas e insiste
-¿Sabe que por haber desertado se puede enfrentar a un Consejo de Guerra? ¿Sabe que cuando eso suceda su próxima cita será con el pelotón de ejecución?
Haz tirada de derecho
Motivo: Derecho
Tirada: 1d100
Dificultad: 15-
Resultado: 16 (Fracaso) [16]
Motivo: Suerte
Tirada: 1d100
Dificultad: 80-
Resultado: 46 (Exito) [46]
Como fallo por 1 lanzo suerte (por que vinimos a jugar) creo que aplica.
Aunque sabes que las palabras de aquel hombre son ciertas, hay algo que no es real, no te pueden llevar al pelotón de ejecución sin antes aclarar los sucesos, por lo que debe haber una investigación previa, aunque tienes claro que si aquél hombre se iba a encargar de la investigación, todos terminaríais frente al pelotón de ejecución
-Es de mi conocimiento esa ley y deseo colaborar en la investigación, pero mis últimos recuerdos son en el frente y como la situación estaba estancada, mi hermano era cabo en la división, no hay razones por las cuales yo pudiera desertar- le digo tratando que mi sinceridad pueda llegar a él, aunque parece un hombre bastante renuente a entender cuan inexplicables son los acontecimientos.
Fin del prólogo, queda esperar que tus compañeros acaben