Te encuentras en una fila, caminando hacia una luz. Hay niebla. Una voz te apremia a ti y a los veintiún hombres y mujeres que se encuentran en tu cuadrilla, haciendo que aceleréis la marcha. Pero hay algo en ti que hace que no quieras ir, pero no puedes evitar andar hacia la luz.
La angustia crece a medida que avanzas, y cuando eres tragada por la luz, crees oír a tus espaldas una burlona carcajada...
Tirada oculta
Motivo: pesadilla
Tirada: 1d6
Resultado: 6 [6]
Estabilidad mental (1/1d4)
No entiende que esta ocurriendo, pero continua el paso silenciosamente en la fila con una expresión de angustia, aquella voz que la apremiaba la sobresalta intentando distinguir la fuente con la esperanza de observar quien era, pero en lugar de eso la risa la vuelva a sobresaltar provocando que voltease en su dirección con claro miedo en sus ojos por la incertidumbre de lo que estaba ocurriendo
Motivo: Estabilidad Mental
Tirada: 1d100
Dificultad: 70-
Resultado: 44 (Exito) [44]
Pierdo un punto
¿Ella se siente igual que siempre? ¿Es decir, en caso de ser un sueño seria hiper realista o habria alguna difeencia?
25 de Julio de 1918
Justo cuando cruzas la luz... despiertas en el hospital militar de Val-de-Grâce, situado en el 227 de la rue de Sant Jacques, en París. Ves que no eres el único que acabas de despertar, hay más a tu alrededor, todos pertenecen a la 2ª Compañía del I Regimiento de la 42 División (División Rainbow) del I Cuerpo Expedicionario de los Estados Unidos. En camas adyacentes se encuentra el resto de sus compañeros de armas, veintiuno en total. Al parecer, son lo único que queda de la 2ª Compañía.
Un hombre os llama la atención para que todos le escuchéis todos los presentes:
-Soy el doctor Alexander Scie de Villevile, el jefe de planta. Todos los aquí presentes presentáis los mismos síntomas, habéis estado sumidos en un estado de coma, inexplicable en términos médicos, desde que habéis llegado al hospital hace cinco días procedentes de un hospital de campaña en las afueras de Reims, donde en un principio se creyó que podíais ser víctimas de algún nuevo tipo de gas. Todos sufrís una amnesia parcial: al parecer sois incapaces de recordar nada de las dos últimas semanas.
Al intentar recordar, en efecto, recordáis exclusivamente la monotonía de la guerra de trincheras del frente americano, en los alrededores de Chaumont.
El doctor sigue hablando:
-Además, todos tenéis un extraño tatuaje en el hombro derecho.
Lo más extraño es que nunca has visto nada igual, y aún menos, recuerdas haberte hecho ese tatuaje
Es hiper realista
Aturdida y entumecida por el tiempo en cama se mantuvo con la mirada saltando de compañero en compañero. Las palabras del doctor le sentaron como un martillazo pues para empezar no se suponia que ella deberia haber participado de forma activa como una soldado, no era lo suyo, pero las cosas habían resultado así a pesar de que le habían dicho que iba a ser más una molestia que un peligro real. Todo para ganar el favor de los capitanes y que su curriculum pudiera servir para el trabajo al que le habían prometido despues de pasar por ese corto servicio militar. Un tramite habían dicho que sería.
Se irguió entonces, o eso intentó, apoyandose en los codos y se observó detenidamente cada una de las partes de su cuerpo, comprobando que no estuviera herida o algo peor. La mención del doctor de aquella marca sin embargo fue menos desconcertante que perder una extremidad, pero ciertamente no dejaba de ser algo inquietante.
Tal como había dicho el doctor, en su hombro derecho estaba la extraña marca. Se mantenía observando al doctor desconcertada mientras intentaba recordar, con solo la extraña sensación de aquel sueño.
- ¿Alguien...alguien resultó herido? y ¿Qué será de nosotros?- pregunto acongojada intentando comprender lo que estaba pasando.
Al parecer sólo veintiuno de vosotros habíais sobrevivido, todos con diferentes heridas visibles, aunque parece que todo el mundo se va despertando y mejorando, todo excepto uno, Richard Harper, el parece seguir sumido en el más profundo coma.
Antes de que el doctor pueda contestarte, un individuo agresivo, de gafas oscuras y enormes patillas se acerca a ti
-Señorita Kenedy acompáñeme -en su voz notas que no es una petición sino una orden, te lleva hasta una habitación completamente vacía, con una silla en el centro donde te indica que te sientes-. Quiero que me explique cómo desertaron usted y sus amigos, ¿cómo consiguieron esfurmarse de Chaumont para ir a tatuaros a Reims? ¿Cómo lo hicieron sin que nadie les viera y atrevesando el campo de batalla?
Se la nota perdida a medida que le sigue despues de acentir quedamente con una actitud pasiva aunque sus preguntas le hacen negar suavemente con la cabeza mientras frunce el ceño intentando comprender.
- Nosotros no...o bueno, no lo se. No recuerdo...quiero saber que paso. Esto...- vuelve a mirarse el tatuaje y entonces siente como se la aguan los ojos por la mirada inquisitiba del hombre hacia ella, como si tuviera la culpa.
- Yo no, no lo se...- gimotea un poco mientras intenta mantener regular su respiración.
Las cosas aun le estaban siendo dificiles de procesar. Solo 21 sobrevivientes dios mio, piensa.
Se hecha entonces las manos a la cara y gimotea antes de volver a mirarle.
- Se suponía que sería algo rutinario...que sería facil...- le dice casi que como con suplica en sus ojos
El hombre te mira impasible
-¿Pretende que me lo crea? ¿Sabe que por haber desertado se puede enfrentar a un Consejo de Guerra? ¿Sabe que cuando eso suceda su próxima cita será con el pelotón de ejecución?
En cuanto dice ejecución sus de por si ya nervios afectados no hacen mas que empeorar, ahora negando mas freneticamente con la cabeza.
- No, no...no. - parece estar intentando procesarlo mientras aun tiene lagrimas en los ojos, pero mas bien parece estar pensando a medida que uno que otro gimoteo se le escapa, intentando recordar echandose las manos a la cabeza.
- Esto no tendria que ser asi...yo no pedi esto...mis superiores, ellos le diran, yo nunca desobedeceria...nunca desobedeceia- cierra los ojos nuevamente mientras gimotea con lagrimas corriendo por sus mejillas.
- Nunca desobedeceria...-
-Qué conveniente que sus superiores hayan acabado muertos, ¿verdad? No hay nadie que pueda respaldarla, yo que tú confesaría que desertaste, algunos de tus compañeros lo hará, ¿por qué no ser tú la primera?
- Porque no lo hice! Aunque no lo recuerdo. Nunca lo haría. No soy capaz...yo, nunca he sido capaz. Aunque eso implique algun riesgo...siempre he seguido ordenes...desde siempre...por eso, aunque no lo recuerdo...estoy segura que no contradije a nadie, no traicione a nadie...- seguia con las manos en la cabeza mirando hacia el suelo aunque parecía estar pensando con mas claridad despues de despertar. Antes había dudado de si sería capaz de hacer algo así, pero al menos que alguien no se lo haya ordenado...probablemente ella habría muerto antes que algo así. ¿Verdad?
Fin del prólogo, toda esperar a tus compañeros
A pesar de que continuaba con lagrimas en los ojos continuo recuperandose como podía mientras seguía hablando.
- Si verifica en los registros...si verifica en los registros podra comrpobar que estuve como personal de correos...estuve muchos años ahi, ellos le diran...que soy de fiar-
Motivo: Burocracia
Tirada: 1d100
Dificultad: 39-
Resultado: 23 (Exito) [23]
Aunque sabes que las palabras de aquel hombre son ciertas, hay algo que no es real, no te pueden llevar al pelotón de ejecución sin antes aclarar los sucesos, por lo que debe haber una investigación previa, aunque tienes claro que si aquél hombre se iba a encargar de la investigación, todos terminaríais frente al pelotón de ejecución
- Quiero...quiero un abogado...- dijo mirandole con ojos de cordero al entender que iba a necesitar ayuda externa con esa persona.
No se xd