-Madre traigo la harina... no vas a creer a quien he conocido, alguien de lo más...- se detuvo al llegar al salón y verlo lleno de gente
-Uis. Disculpen ustedes.- se ruborizó ligeramente
Me levanto para saludar a la recién llegada, la hija de la señorita arenas, pero esta vez procuro mirar al techo y poner las manos antes de darme otro golpe en la cabeza, después miro a Negnar con una sonrisa de oreja a oreja al recordar efectívamente que la paciencia del enano no es un gran virtud, y haciendo un gesto con la mano señalando a la hija...
- Ya llegó, permitirme presentarme joven Arenas soy Gorex, este es mi compañero Negnar y no se tiene que usted que disculpar, es su casa, debe disculparnos a nosotros por destorbar el tiempo de su madre...
Después con una sonrisa me giro mirando a Kairi...
- Y ella es Kairi, creo que es tu hora... Señorita arenas creo esta hermosa mujer la estaba esperando....
Se levanta, con una sonrisa, y hace una leve reverencia.
Buenas tardes - responde, cuando Gorex la presenta, sonríe - Sí, la verdad es que deseaba comprarme algun vestido a la moda que abrigase... ¿Cómo lo ve?
- Claro que podremos hacer algo por usted, señorita. Pero avisarla de que este tipo de prendas son más dificiles de tejer, y que llevaran un poco de tiempo.-dijo meditando
-Y tambien serán algo más caros.- puntualizó debidamente la madre
¿Algo más caro...? - se la queda mirando, con una tímida sonrisa y un rubor en las mejillas - ¿De cuánto estamos hablando...?
Sonrío complacido ante la respuesta que ha obtenido la joven humana. Con voz modulada mirando por la ventana al exterior Recordad, bella Kairi, que ahora nos dirigimos al húmedo bosque que rodea estos contornos. Un atuendo de esas características podría entorpeceros una travesía tranquila y podría estropearse... incluso podría darse el caso de que se rompiera por enredarse en algo o por una caída. Sonrío un poco más Tened en cuenta estos consejos que acabo de daros... sería una pena que algo nuevo se rompiese, por lo menos que durase algunos años... unas decádas como mínimo...
Se gira hacia Negnar y asiente - Tienes razón... - observa a los Señoras Arenas, a ambas - Entonces... ¿me vendrán una capa gruesa no muy cara...? - sigue sonrojada levemente, con lo que le gustaba fingir clase y buen estatus social.
Escucho como Kairi cambia de opinión inteligentemente, y una sonrisa surge de mis labios, después con voz suave me dirijo a la señora Arenas...
- Perdone, e pensado que quizá me vendría bien una capa con capucha, dispone de alguna??
Mientras se lo comento me quito mi propia capa que ya está bastante estropeada con los años...
- Como puede comprobar mi capa que tengo ahora mismo no está para pasar otro invierno....
Sigo mirando por la ventana Humanos... no saben darle un valor apropiado a los objetso que poseen.