Partida Rol por web

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Mi nombre poco importa.

Son mis palabras lo que os traigo a vuestros oidos. Son palabras de advertencia, porque son muchas las cosas que mis ojos han contemplado.

Peligros innombrables acechan a estas tierras, el Mal ha vuelto con más fuerza que nunca. Es hora de luchar, permanecer atentos, con los oidos prestos a rumores camuflados en el ulular del viento, con los ojos en busca de sombras que acechan esperando su oportunidad.

Ya no hay tiempo, no hay tiempo sino para luchar.

Os empezaré hablando de lo que era conocido como Bosqueverde el Grande y de como la Sombra se cernió sobre él.

El Gran Bosque Verde. El mayor de los bosques de Tierra Media descansa en Rhovanion, al este del Anduin.

Fue hace mucho cuando el mal se asentó allí, desde la Fortaleza negra de Dol Guldur, el que todos llamaban El Nigromante y del que se desconoce la identidad, ejerció tal poder que oscureció los árboles, retorciendo los troncos y sus raices. Todo cambió, tal era su fuerza.

Desde entonces se le conoce como el Bosque Negro o Taur-e-Ndaedelos.

Muchas veces he estado allí y os aseguro que la penumbra de sus sombras entristecen al más puro de los corazones y que hasta el espiritu más noble languidece cuando el viento atraviesa las copas de esos árboles.

En las entrañas de ese Bosque está AmonLanc, la colina pelada, el volcán inactivo que todos conocen como Dol Guldur. Una montaña negra que se observa emerger del bosque desde kilometros de distancia.

En su cima descansa la fortaleza del Nigromante, cubierta por nubes perennes sus muros revestidos de hierro se levantan imponentes.

Pocos somos los que hemos estado allí, y pocos son los oidos que están preparados para escuchar lo que allí duerme.

Pero otro mal, más grande en ambición quizás despertó lejos de allí, en el extremo norte de las Montañas Nubladas.

De la nada surgió el Reino De Angmar que en sindarin significa Casa de Hierro y cuyo monarca se hizo llamar El Rey Brujo. Desde entonces ese nombre es fruto de pesadillas ya que consigo trajo la oscuridad.

Sus ejercitos combatieron pronto a los Reinos divididos de mi pueblo. Los Dunedain. Los tres reinos que fueron sucedores de Arnor. Rhuadur fue el primero en caer, puesto que era debil y frágil fue presa fácil para los hombres mezquinos que se habían aliado con los terribles orcos.

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Desde entonces, los Dunedain hemos luchado por mantener a raya al ejercito de Angmar. El segundo de los reinos, Cardolan, también ha caido y ahora sólo sobrevive Arthedain. Casi 400 años llevamos luchando por mantener al Rey Brujo en sus yermas tierras. pero la batalla es dura y el poder oscuro que allí emerge es cada día más fuerte. La batalla final es inminente. Todos estamos en peligro.

Os hablaré un poco de las razas que pueblan en esta dura época la Tierra Media. empezaré por los Eothraim, llamados por algunos los señores de los caballos, son un grupo nómada de nórdicos de la zona de Rhovanion.

La seis tribus de los eothraim vinieron de Criador al principio de la Tercera Edad, tras la gran guerra contra Sauron estableciendose en Rhovanion con el viso bueno de los gondorianos de los que eran aliados.

Rhovanion es un vasto territorio de colinas suaves con densas arboledas en en norte y oeste, si embargo en el sur existen fértiles pastizales.

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Los Eothraim se pueden comparar en fortaleza y nobleza a nuestra raza, los Dunedain, siendo realmente altos y fuertes. La mayoría de ellos son rubios y de ojos claros como el cielo despejado. Su piel es realmente blanca. Los hombres se dejaban crecer el pelo considerablemente hasta los hombros, sus barbas suelen ser también abundantes y bien cuidadas. Lo cual va de maravilla ante la dureza del invierno en estas frías tierras.