Bruce queda petrificado ante la escena que tiene ante sí. Una de las balas le cae de la mano. Observa, sin poder hacer nada, como el joven Willis es engullido y luego los dientes de Barton hacen el resto. Willis ha muerto.
Sin poder reaccionar observa, o más bien intuye, como el último de los hermanos Jackson, esa cosa informe con un gran ojo entra en escena en ese teatro de pesadilla, horror y muerte, el cual se ha convertido la caverna. No sabe que hará, no sabe que pasará, pero aún así intenta reaccionar. Monta su rifle y dispara hacia Barton mientras retrocede hacia la escalera intentando huir de allí. No dice nada, no grita, asimilando lo que ha visto, lo que está viendo, o al menos no caer en una locura más profunda de la que ya está viviendo. Pero su disparo se pierde, o ni siquiera sale y se le encasquilla su arma. Coulon no lo sabe, perdido en sus pensamientos, en la locura que está viviendo.
Motivo: Agilidad
Tirada: 60d100
Resultado: 2720
Motivo: Agilidad
Tirada: 1d100
Dificultad: 60-
Resultado: 34 (Exito)
Motivo: Rifle
Tirada: 1d100
Dificultad: 75-
Resultado: 99 (Fracaso)
Presa del nerviosismo ante la terrible escena, y seguramente perturbado por la locura temporal de su PJ, el jugador ha metido la pata a la hora de hacer la primera tirada poniendo el 60 de su porcentaje en el número de dados. No hagáis caso de esa tirada, al no ser que se consideren puntos de daño para las dos criaturas :-D
Tiro por rifle, si no es para este turno, para el siguiente, sin modificar pero viendo la pifia que me ha salido como que da igual. Como no tengo claro el resultado, de ahí que ponga que el tiro se pierde o se encasquilla el rifle pero Coulon no se da cuenta.
Ben aún no ha cerrado la boca. Y ni por un segundo ha apartado la vista de la escena en la que Duvall devoró vivo a Jerry Willis. Lo único que tiene en la cabeza es... ¿Por qué? ¿Por qué él? ¿El único que tenía toda la vida por delante? ¿El único cuyo pasado no le atormentaba hasta el punto de arrugar su rostro como una hoja seca?
-Willis...- Es lo único que puede articular ahí parado frente al monstruo.
Lleva su mano a su rifle Winchester pero... ¿De qué serviría? El piel roja ya lo dijo... Sólo el cuchillo puede contra él...
Y, luego, el gigante invisible surge del lago
de Hali
Como un ídolo impio
en Sarnath
Invisible
El horror
Con bocas y apéndices, que se arrastra hacia ellos
El Caos Reptante.
-¡Mierda, Coulon, Clanton, dejadlo, tenemos que irnos de aquí, no podemos luchar!
Ben grita con una voz que no es la suya y trastabilla hacia atrás justo a tiempo para evitar una roca que caería justo donde él se encontraba. A duras penas, pero casi sin reparar en ello, pues el cansancio se ha desvanecido con su cordura, anadea hacia las escaleras.
Motivo: Agilidad
Tirada: 1d100
Dificultad: 50-
Resultado: 22 (Exito)
Corres y corres hacia la escalera, pero la visión de la Realidad te ha sumergido en el éter de los universos -¡Coulon, Clanton, dejadlo!– grita alguien parecido a ti.
Tus pies continúan pataleando mientras caes por entre los vértices del Tiempo y el Espacio.
Ven a Sarnath y redímete
escuchas de una voz que no es tal, sino mas bien un impacto sensorial que apenas logras traducir es estos pensamientos.
De inmediato tocas suelo y vuelves a correr sobre un minúsculo planeta de tierra y rápidamente viajas hasta mañana y luego hasta ayer. Tienes la sensación de que aquí, en este extraño montículo de tierra rodeado por todas las estrellas, podrías borrar tus errores del pasado y llenar de éxtasis tus días venideros.
Sin parar de correr vuelve a retronar en tu mente
¡DESÁTAME!
hasta que finalmente llegas a la escalera de madera.
Te recojo el guante ;)
El predicador Dewey deja de sonreir aterrado ante el fallido disparo de Coulon y sin dar miramientos ni dudas trata de sacar y meter de nuevo el cuchillo en el cuello de Barton cuando se cuenta de la figura del tercer hermano y aterrado le saca el cuchillo a Barton para salir corriendo de allí mientras que grita:
" Es momento de huir corriendo de aquì, esperando haber eliminado estos demonios de la buena gente de Tombstone "
- Tiradas (1)
Motivo: Ataque c/cuchillo
Tirada: 1d100
Motivo: Ataque c/cuchillo
Tirada: 1d100
Dificultad: 75-
Resultado: 20 (Exito)
Motivo: Agilidad
Tirada: 1d100
Dificultad: 70-
Resultado: 18 (Exito)
Motivo: Daño de Cuchillo 1
Tirada: 1d6
Resultado: 1
Motivo: Daño de Cuchillo 2
Tirada: 1d4
Resultado: 1
La cabeza de Ben da vueltas. No sabe qué ha ocurrido, sólo que ha llegado a la escalera, Clanton y Coulon también están corriendo, y él no tiene intención de quedarse atrás. Lleno de mugre, sudoroso y con la cordura destrozada, sin valor suficiente para echar una última mirada atrás, grita con todas sus fuerzas, mientras sube por la escalera, algo que espera que sea las últimas palabras que los dos monstruos escuchen.
-¡Que esta caverna maldita sea vuestra cárcel eterna, monstruos!
Dewey se la juega e intenta asestar una última y mortal cuchillada a Duvall. Ya sea por las prisas o por la cercanía del último y degenerado Jackson, su ataque solo consigue rozar la criatura medio lupina en la que se había convertido Barton, sin llegar a herirla realmente.
El predicador corre con las escasas fuerzas que le quedan, justo a tiempo de salvar de un salto una gran grieta que se forma de improviso en el suelo. Rumson y Coulon ya casi están en la superficie y antes de seguir sus pasos escaleras arriba, Dewey da un último vistazo a ese subsuelo que más que nunca se parece al inframundo.
La parte central del techo de la caverna se está derrumbando sobre el suelo, donde Duvall, extasiado después de haber saciado momentáneamente su hambre, se da cuenta del peligro que corre. Su cazador ha vuelto para terminar el trabajo y ahora él se ha convertido en la presa. Duvall intenta desvanecerse justo en el momento en el que el monstruoso Jackson le escupe un chorro pastoso y negro.
Mientras tanto, y por fin al aire libre, los tres humanos salís a rastras por el agujero. Estáis sucios de polvo, de barro y de sudor pero sentís de nuevo en vuestra piel el aire caliente del desierto. Ahora mismo os sienta como si os hubierais pagado el mejor de los baños en California.
A unos metros de allí están vuestras monturas, presas del pánico. Las bridas y las cuerdas con las que estaban atados están fuertemente desgastadas y forcejeadas, pero esta vez han aguantado las embestidas que daban los caballos para lograr huir.
Si alguien tenía alguna duda sobre si quedarse aquí un minuto más o no, queda esclarecida cuando una gran y pesada roca de la cumbre de la colina cae pendiente abajo y pasa muy cerca de vosotros. El relieve de las Colinas Blancas empieza a cambiar, cojeando allí donde la caverna ya no resiste por más tiempo. Para evitar ser arrollados por el alud, os alejáis a caballo unos pocos minutos justo a tiempo para contemplar desde una posición segura el magnífico caos que os brinda la naturaleza.
Como si ya no tuviera que obedecer más a las leyes del tiempo, la colina se desmorona lentamente ante vuestros ojos. Una falda de la colina desaparece en un costado y una alta columna de rocas se pliega sobre su base, hasta que finalmente la cúspide de las Colinas Blancas cede ante unas fuerzas que ya no puede contener por más tiempo y desaparece de la silueta del cielo. Finalmente el derrumbe muere con una voz profunda y ahogada, como el último suspiro de un hombre que ha cargado con demasiadas pesadumbres a lo largo de su vida.
La tierra sagrada de los Apache se ha convertido lenta e inexorablemente en una tumba para lo que sea que quedase allí abajo y una gran capa de polvo se va posando suavemente sobre las ruinas, como la mortaja que intenta tapar piadosamente a su cadáver.
Después de lo ocurrido el predicador se inca y reza por el alma del joven Jerry, implorando porque hay alcanzado el cielo y la paz eterna, cuando termina se pone de pie y mira a los ojos a cada uno del par de hombres que han sobrevivido con él y les dice con total aplomo y convicción:
" Las criaturas infernales han regresado de vuelta al infierno, espero padre que de alguna manera esto pueda ayudarme a conseguir el perdón de mis pecados ... pasados ... tienen razón señores ... yo soy Stanton ... ese que usted no pudo apresar señor Rumson ... mi alma era parecida a esas criaturas de atrás por eso tenía la esperanza de conseguir que se arrepintiera Barton de sus pecados .... como yo lo he hecho con los míos ... sin embargo como él tampoco puedo evadir por siempre mi justo castigo .... solo que no pienso esperar a que una soga acabe conmigo, así que cada uno de ustedes puede decidir dejarme regresar sin decir nada de lo que saben en Tombstone para que pueda seguir haciendo mi labor allí o enfrentarse a mi en un duelo para saldar deudas pasadas "
Tras decir lo anterior se preparó a tomar su pistola y cuchillo en caso de ser necesario con la sombra de su cuerpo remarcada en el suelo desértico por el sol del ocaso y su sombrero de ala ancha hondeando con el viento
Chicos,... lo siento pero nos falta la clásica escena de una buena película de vaqueros ... veamos que pasa ...