Partida Rol por web

Asiente y busca algo en su túnica, de ella saca dos pequeños anillos que parecen hechos de madera pulida y os entrega uno a cada uno.

Tomad esto como agradecimiento. Os permitirá comunicaros a distancia siempre y cuando no os alejéis demasiado.

Cuando lo coges ves que el anillo tiene escrito "amistad" en dracónico en la cara externa.

Mientras investigas el anillo y Llharandhäe hace lo mismo Cabris dice -prepararé el conjuro para transportaros.

Se levanta y se acerca a una de las paredes que no tiene un tapiz. Empieza a entonar un cántico en un idioma totalmente desconocido para ti. Mientras lo hace ves como el muro empieza a emitir ondas como el agua de un estanque cuando cae una piedra en ella. Donde Cabris pasa la mano las ondas se extienden y cada vez el muro parece rebullir de forma mas agitada.

El cántico aumenta su volumen y el muro empieza a encresparse como si una pequeña tormenta estuviese agitándolo y haciendo que emita crepitíos que te recuerdan a los de la madera en una hoguera. Un intenso olor a pedernal inunda la habitación y de pronto con un tremendo chasquido el muro vuelve a la normalidad salvo porque está tremendamente liso y reluciente, casi como un espejo.

Cabris se da la vuelta para miraros y dice -está conectado al patio de la posada de Hargre. Decidle que venís de mi parte para ayudarle en este asunto.

Os deseo suerte y tenéis un sitio al que venir a descansar cuando volváis. Ahora colocad la mano en el muro y os llevará hasta Sundabar.

Llharandhäe se levanta y obedece, en cuanto coloca la mano el muro cede como si estuviese hecho de agua y ella entra en su interior desapareciendo de tu vista.

Una vez en el interior del muro sientes como eres transportado bajo tierra a una velocidad pasmosa. Eres capaz de "ver y oír" a tus alrededores y puedes ver desde las raíces de los árboles hasta los insectos y animales que están en la superficie. Todo pasa como un torbellino y enseguida pierdes la noción del tiempo.

El paisaje cambia y cada vez ves como el terreno se vuelve mas rocoso, mas sólido y presupones que estás justo debajo de las montañas ya que sientes una cierta opresión, la sensación de tener toneladas encima.

De pronto todo vuelve a cambiar, sientes frescor y el terreno se vuelve oscuro y blando, empiezas a ver cultivos y la humedad, has cruzado un río. Pocos segundos mas tarde sales del suelo junto a Llharandhäe que está sentada en el suelo, tu tampoco logras mantener el equilibrio después del extraño viaje y caes al suelo ligeramente mareado.

Lo primero que ves es que se ha hecho de noche, la luz de la luna y las estrellas ilumina todo con su fulgor plateado y escuchas varios grillos en su interminable cántico.

Te encuentras en un patio interno bastante grande de unos 10 metros con un olmo en un lateral. Tres lados son pared de mampostería pero la otra es de madera y ves que está abierta al interior del edificio. Allí puedes ver el interior de una sala común de posada y a varios ocupantes. La sala está ténuemente iluminada por una lámpara en la única mesa ocupada.

Dos enanos, un varón en las escaleras que bajan del piso superior y una mujer que está vendando la cadera a una humana vestida solo con un taparrabos. Esta tiene un aspecto salvaje y os mira con un brillo belicoso en los ojos, aunque no hace ningún movimiento.

En el otro lado de la mesa donde se encuentran las mujeres puedes ver a otro hombre fornido, con el torso descubierto y un aparatoso vendaje en un hombro. Los músculos de sus brazos son tan grandes como tus piernas y al brillo de las estrellas puedes ver un ligero rubor en sus mejillas.