- ¿Respuestas? No podemos ir preguntando por el pueblo así como así, Jim y menos sobre cosas que no conoce nadie porque están en el olvido. - Y entonces caí en que su preocupación era genuína. Suspiré y me acerqué a él. - Mira, a veces, entrar en ese estado me hace poder hacer cosas increíbles y una de ellas es conseguir que el fuego no me alcance porque soy más rápida que él. Si no hubiese logrado entrar en ese estado, como entré me hubiese conformado con sacar a los niños... y si hubiera fallado... seguramente me hubiese tenido que atender una ambulancia. Así pues lo uso poco y con cabeza.
Y le agarré del cinturón y tiré de él hacia mí para abrazarme a él. Nadie se hacía una idea de lo que necesitaba ese abrazo desde hacía años. Uno que me llegase dentro y esperaba que Jim me lo correspondiese o me llevaría un buen palo. - Yo también te aprecio más de lo que pensaba, Jim... jamás pensé que en una tarde podría apegarme tanto a alguien. - Le susurré y apareció Nate, herido. Eso me sorprendió tanto como a Dexter, quien no tardó en soltar que era un Ángel.
Lo que no entendí fue porqué me miró de aquella manera cuando dijo que se les llamaba así al preguntar Bonnie por lo de ser un ángel cuando yo no había abierto la boca al respecto. Cada vez veía a Nate más raro, como si no me conociese y me considerase una maldita cotorra que todo lo pregonaba. Pero no iba a recriminarle nada porque sus heridas no me gustaban nada.
- Déjame ver eso, anda. - Le dije a Nate y le cogí de la mano y le senté en una de las sillas que tenía Hunt de exposición. - Dime donde te duele y de donde sale es sangre, si de la mano o de la garganta... - Y con lo poco que sabía de medicina y mucha suerte, encontré en la tienda todo lo que necesité para estabilizar a Nate. Luego miré a Bonnie y hablé con respecto al tema del ángel.
- Si Nate fuese lo que dices, no sangraría... ni necesitaría cuidados. Además, ¿no le has dicho nunca a nadie "eres mi ángel de la guarda" cuando te ha protegido de algo o ayudado? A veces hay que saber diferenciar las expresiones en las conversaciones de lo que uno es o no.
» Por mi actitud de hoy, por lo que hice que no viste... deberías ver las noticias esta noche o mañana Bonnie. Pensarás de mí que soy... no lo sé... un ángel tal vez, no solo por salvar a esos niños, sino por salir como lo hice de la biblioteca sin ningún rasguño... pero aquí tienes mis heridas. - Dije remangándome un poco la manga y mostrando un mordisco de uno de aquellos lobos del infierno. - Y mi sangre. No te tomes todo al pie de la letra con lo que digamos, porque las cosas son más complejas de lo que parece... y creo que ha demostrado con creces que ha venido a protegerte y no solo a ti... sino a quienes te importan.
Y esperé que con eso Bonnie se olvidase del tema del ángel de una vez. Entonces Nate dio el resto de noticias. No entendía como era capáz de enterarse de todo con su excaso don de gentes, pero claro, de eso solo tenía Jessie y no estaba entre nosotros. Entonces habló de un tal Royce y me quedé pensando. - Me vas a perdonar, Nate, pero... no sé quien es ese Royce. - Dije dándome cuenta de que los libros que cogí no servirían de nada ya y que solo el de las Brujas de Salem quizás sirviese para algo.
- De todas maneras, tenemos que descansar, tú el primero, Nate y espero que tu protegida se de cuenta de una vez del valor que tienes y que acepte que has venido del futuro para protegerla y de paso reunirnos a todos para velar por este pueblo antes de que se convierta en brasas. Así que sugiero que compremos lo que necesitemos y nos vayamos a descansar para buscar mañana a Royce, pues ya sabemos lo que su amigo puede hacer y yo tengo que parchear mi equipo y descansar también.
Y para rematarlo todo miré a Jim y le cogí de la mano. - Vamos, mi ángel de la guarda... necesito material para reparar mi guante, porque dudo que tengan klevar en la tienda y menos aún guantes hechos con ese material. - Dije tirando de él tras dejar a Nate bastante mejor que como apareció y le guiñé un ojo cómplice... un gesto que no sabía si entendería o no.
En mi otra mano llevaba lo que había ido cogiendo para estabilizar a Nate y lo puse en la barra. - Buenas noches Hunt, esta vez venimos unos cuantos más. De momento me llevo eso, lo he tenido que usar antes de pagarlo... lo siento, corría prisa. Vamos a mirar algunas cosas más... - Íbamos a necesitar más vendas y ya hablaría a solas con Nate para saber si podía usar antibiótico o algún medicamento con él. - ¿Tienes piezas grandes o retales de cuero o algo así? - Le pregunté desde lejos a Hunt con las vendas ya en mis manos y alcé mi mano con el guante roto. - Un lobo nos dio un buen susto y me dejó el guante bastante estropeado... y si tienes aguja e hilo para cuero me lo llevo también.
Si lograba entrar de nuevo en aquel estado sin problemas, coser el cuero sería lo mismo que coser papel para mí. Sin máquina para arreglarlo, era la mejor opción. Y entonces los vi... al final de la tienda y casi salí disparada hacia ellos... comics.... y busqué mi favorito entre ellos, el único que leía: Batman.
Jim me dio alcance. - Este era mi cine... lo único que podía leer a escondidas ocultándolos entre los libros de estudios. - Cogí uno de los comics y lo ojeé. Tenía tantos que ya no sabía si los tenía o no hasta que no los veía por dentro. - El primer chico con el que salí... lo hice porque fue el único que me lo pidió... les daba miedo a todos. Era un nerd, un fracasado como le llamaban... un bicho raro y al juntarse conmigo su reputación no mejoró. La verdad era que no sabía que hacía con él porque ni me gustaba... pero un día me enseñó un comic de Batman y... luego otro... y cada vez que nos veíamos era para leer alguno de los comics pues no le hacía ni caso... al menos pudo decir que me pidió salir, lo hicimos y me dejó él... aunque claro, le fui infiel por el Señor de la Noche. Como viste, son las únicas referencias que entenderé... y me dejaban salir con él por ser un empollón y decirles que me ayudaba a estudiar... si no ni eso. Ya te dije que mi adolescencia fue muy rara... mmmm... yo podría vestirme de la Sonja esa... pero a ti no te quedaría nada mal un traje de Batman...
Y cogí el último número que había salido en ese mes, el que sabía que no tenía, mientras pensaba en aquello. Con Jim se me antojaban juegos que nunca se me habían pasado por la cabeza antes. - Vamos a tener que hacerte un traje a ti también esta noche Jim, así que a ver que tiene Hunt que te pueda servir, como guantes con protección de plástico o anticorte, aunque dudo que tenga de lo segundo... si tiene ropa de cuero, podría añadir protecciones extras esta noche con más cuero y quizás alguna lámina de metal para que los lobos se dejen los dientes en el primer mordisco. Y esta vez hablo en serio... lo otro también lo era, pero creo que no es el momento de esos juegos... prefiero que vayas protegido en condiciones a que me des un susto como el de hoy en el bosque...
Motivo: Cirugía Improvisada
Tirada: 2d6
Dificultad: 7+
Resultado: 9(+1)=10 (Exito) [5, 4]
Se estabilizan las heridas y curo 1 punto de daño.
Me tomé ese respiro para sentarme y descansar. -No es mi mano lo que está herida.- Intenté explicar a Scarlett. Aproveché que se acercó a mí y le susurré unas palabras al oído, antes de dejarla alejarse. Aunque me quedé parpadeando luego de verla guiñar uno de los ojos. ¿Le había caído un sucio?
Mientras ella y Jim entraban a la tienda del tal Hunt, me dirigí a Dexter y a la bibliotecaria. -La señorita Bonnie puede decirnos más de este Royce, si mal no recuerdo te estuvo molestando hace unas horas, ¿cierto?- Inquirí, antes de dirigirme a Dexter. -Mi teoría es que se trata de un infernalista, posiblemente uno de los Barrett, y ha robado el diario para tentar a Sazel de cruzar a nuestro mundo y a hacer un trato con él. Esa reliquia en manos de un demonio como él... No quiero ni imaginar lo que podría hacer.- Murmuré.
Volví mi atención a Bonnie. -El señor Blake está a salvo, lo llevaban de camino al hospital.- No conocía la relación del director de la biblioteca y su empleada, pero me pareció que se sentiría aliviada de saberlo.
Solo que me escuchará Scarlett, susurré. -No son heridas físicas, absorbí el daño que recibió el director de la biblioteca. Tenía una pierna rota y había perdido mucha sangre. Usé parte de mi energía para sanarlo, pero a cambio el dolor de sus heridas pasaron a mi. Estaré bien...-
- Sea como sea, tenemos que hacer que te vea como un humano... y un humano necesita que le curen... y recuerda coger algo para comer y beber aunque luego no lo hagas... - Le susurré a Nate mientras trataba de hacer algo por él. - Y si lo poco que puedo hacer te ayuda, mejor. Al menos estarás más cómodo. Gracias por salvarle... por lo que veo yo no hubiese podido hacer mucho más que sacarle y que se lo llevase la ambulancia a saber en qué estado.
Le sonreí.
- Espero que esto te haga sentir mejor, no puedo hacer más que lo que le haría a un humano normal.
- Entonces los libros que cogí le la biblioteca quizás nos sean de utilidad al final... no de mucha, pero están los nombres de las familias desde que se fundó este lugar, con suerte no solo sus descendientes, sino sus posesiones... lugares que supuestamente ya no existan o estén abandonados... el otro es más actualizado, pero buscando las raíces de cada familia... y luego uno de las Brujas de Salem... ese camafeo... tengo curiosidad por saber quien era. - Miré a Jim. - ¿Ves? Respuestas... quizás no obtengamos nada o puede que aparezca algo... algún sitio que ya nadie recuerde que una vez estuvo en este lugar...
Sí, tiene lógica - dice Bonnie - Algún día tendrá que hablarme sobre esa organización suya, Nate ¿Cuántas cosas puede decirme sobre el futuro?
El nuestro será muy negro si no solucionamos lo de Royce - ataja Jim.
Ah, sí - Bonnie se centra nuevamente en la pregunta de Nate - Supongo que fue el señor Blake quien le dio la información. Ash llevaba varios meses buscando el Diario de John Winchester por Internet y me pidió ayuda. Después de mucho preguntar conseguí encontrarlo en una librería de segunda mano de Lawrence, Arkansas. Cuando le dije a Ash que lo había encontrado y lo recibiría pronto Royce se encontraba casualmente en la biblioteca. Cuando Ash murió Royce empezó a interesarse por el diario, aduciendo que era amigo de Ash.
Lo cual es mentira - apunta Jim - Ash y Royce se habían visto por el pueblo como todo el mundo aquí, pero no eran amigos - Mira la cara roja de Bonnie - No la estoy acusando de nada. Si no conocía bien a Ash es normal que no lo supiera.
Entonces ¿Royce es un... infernalista? Pensaba que era solamente un sintecho inofensivo con problemas de alcoholismo.
El tendero, un hombre entrado en carnes y con una espesa barba blanca, está encantado de recibir nuevas visitas - Bienvenidos a los ultramarinos de Hunt, amigos. Scarlett, me alegro de verla - escucha la petición de la cazadora y asiente - No es la primera motera que tiene un accidente y necesita remiendos para su chaqueta. Deme un momento.
Es cierto que tengo mi furia, pero también contaba con tu respaldo. Si te hubiera pasado algo ahí dentro no habría podido ayudarte y eso es lo que me preocupa. Los libros se pueden reeditar pero tú no. Además Bonnie y Blake se han leído todos esos libros más de una vez, así que cualquier cosa que quieras saber se la podrías haber preguntado a ellos. Me alegra que estés bien, pero piénsatelo la próxima vez.
Aquí tienen - Hunt pone una caja sobre el mostrador con piezas de kevlar de distintas formas y tamaños. A Scarlett no le resulta difícil encontrar la que encaja en la manga de su chaqueta.
También tengo trajes de motero Jim - dice Morgan.
No me hará falta por ahora - dice el leñador.
Señorita McNally, un placer verla por aquí - Mira a Dexter y a Nate - A ustedes se les ve necesitados también de un par de remiendos ¿Les interesa un botiquín de primeros auxilios? El médico no atiende hasta mañana...
Dos botes de fideos instantáneos para mí, señor Hunt - pide Bonnie - De curry picante.
Vaya, hemos tenido un mal día ¿Qué ha pasado en la biblioteca?
Un fallo eléctrico de la calefacción - dice Jim - A Kai se le va a caer el pelo. Por cierto ¿Tiene recopilatorios de Batman? Es para un regalo.
¿De Batman?... Mmmm, no, pero puedo pedir uno a San José y tenerlo aquí mañana por la tarde ¿Cuál quieres?
El que diga la señora...
Nate se recupera de 1 daño
Podéis recuperaros de todos vuestros daños con una buena noche de descanso.
Yo tampoco conocía a ese Royce pero antes de que nos hubiese hablado de él Nate, ya me imaginaba que sería algo problemático. De todas maneras, entre Bonnie y Jim dejaron claro que era un tipo de quien desconfiar y con lo que habíamos visto, peligroso.
-Bueno, no creo que importe demasiado lo que sea, sino lo que quiera y pueda hacernos. Ha demostrado ser alguien peligroso así que la próxima vez que lo veamos, dispararía primero y preguntaría después.
Y si me dejáis a mí disparar, mejor.
Tampoco tuvimos mucho más tiempo para hablar, porque el tendero hizo su aparición, ofreciéndonos sus servicios de muchas y variadas maneras, incluyendo munición e incluso un botiquín. Cuando oí a Jim volver a mostrar su preocupación por Scarlett, puse los ojos en blanco y me acerqué al mostrador.
-Hola. Sí, un botiquín nos vendría bien -le dije. Tras oír a Bonnie pedir dos botes de fideos instantáneos se me antojó lo mismo, sobre todo porque de esa manera podía decir que ya había comido y no tendría que acompañar a nadie -. Eeeeh... otros dos para mí, señor... Hunt.
Y en cuanto los tuve en las manos, miré a Bonnie, sintiendo por un momento que había un "algo" entre los dos. No estaba muy seguro, porque no solía entender bien las intenciones de las personas, salvo cuando intentaban matarme, así que sonreí, como siempre solía hacer, e hice un comentario inofensivo.
-Seguro que están muy buenos y así puedo comer en la habitación.
- Ninguna Bonnie. - Le respondí secamente a la mujer a pesar de que la pregunta fuese hacia Nate. - Tienen prohibido hablar de eso. Bastante que le ha dicho de donde viene y cuales son sus intenciones y si se lo pregunta, sí, he trabajado con él antes. Es de confianza. Créame si le digo que jamás tendrá un protector mejor que él a su lado.
La charla deribó hacia Royce del cual se pensaba que era un vagabundo con problemas de alcohol. Y Jim aprovechó un momento de silencio para volver al tema del incendio. Le acaricié el rostro. - Llevo cinco años trabajando el 90% del tiempo sola. Tú tienes tu furia y yo este don que me permite hacer cosas increíbles. Pelear a tu lado estuvo más que bien, pero aún así te dejaron muy mal herido... en el incendio, como bien has dicho, no hubieses podido hacer nada. Solo Nate y yo podíamos entrar con seguridad. Así que deja de preocuparte por eso. Ya ha pasado. Ahora hay que preocuparse por el presente y el futuro... y si Bonnie hubiese leído tantas veces esos libros, sabría algo más de Royce a parte de lo que ha dicho. ¿Qué tengo que hacer para que me perdones? ¿Darte un masaje en la espalda después de una buena ducha sería una buena idea? Hace años que no doy uno, pero supongo que será como montar en bicicleta...
Hunt hizo su aparición y tuve que separarme de Jim. - Veo que tiene buena memoria, señor Hunt. Sí, con algo para remendarla y quede decente será suficiente. Le tengo mucho cariño a esta chaqueta.
Hunt le ofreció a Jim ropa de motero. Era increíble lo que aquel tipo tenía en la tienda. - Vamos, Jim... piensa en el futuro... tú, yo... la moto... No me gustaría tener otra caída y que acabases peor que yo. - Estaba claro, al menos para mí, que le hablaba de los combates actuales. Pero los paseos en moto también contaban si duraba aquello tanto como empezaba a pensar que ambos queríamos y necesitábamos que pasara.
- Además, puedo ponerle remaches de kevlar en puntos críticos. Hunt tiene suficientes piezas para dejarte bien cubierto... y pago yo. El casco ya te lo comprarás tú por tu cuenta. - Y le cogí de la mano y entrelacé mis dedos con los suyos. - Así que miremos esa ropa, ¿quieres? Ya deberías saber que no hay mayor seguridad para el otro saber que su compañero está bien protegido.
Y de golpe Jim me sorprendió con el tomo de Batman. - Pues... tengo tantos que... Mire a ver si tienen Batman vs. Alien o Batman vs. Predator. Creo que los enemigos son de películas o algo así... Sé que no los tengo por eso. Porque no son los enemigos de Batman habituales ni sus historias y no sé que voy a encontrar en personajes de películas metidos en un comic... como no sabía lo que iba a encontrar en este pueblo. - Y apreté su mano, para que se diese cuenta de que hablaba precisamente de él.
- La verdad es que hay gente realmente maravillosa por aquí, salvo el sheriff que es un poco borde y un vagabundo borracho con el que nos cruzamos, que al no darle una moneda para gastársela en alcohol se puso hecho una furia. ¿No serán familia esos dos? - Le tiré a Hunt. Evidentemente todo era mentira y si lo eran, lo vería en los libros, pero alguna relación debían tener esos dos cuando el sheriff no quería que nadie supiera como estaba el cuerpo de Ash y tuviese incluso amenazado al forense.
Tras las respuestas tanto de Jim sobre la ropa y tener todo lo que Hunt me trajo, junto a la información proporcionada, pagué lo mío y lo de los demás, porque no subía mucho la cuenta. - Creo que deberíamos irnos a descansar. Yo tengo que coser esto y darme una ducha... y creo que un masaje en la espalda antes de poder dormir... junto con algo para cenar... creo que dijiste que tenías pizzas, estarán bien tras un día como el de hoy.
Pues eso, que por mí, salvo que salgan datos nuevos y arranque con otro post de respuesta, podemos irnos en cuanto el boss responda a mi parte del post.
Agradecí con un sutil asentimiento las palabras de Scarlett ante las inquisitivas preguntas de la señorita Bonnie. Sabía que en algún momento tendría que explicarle a que venía todo esto, por qué estaba tan insistente en continuar con la pantomima cuando ya la bibliotecaria estaba teniendo experiencia directa con lo sobrenatural... Pero no podía contarlo en este momento, y no mientras la señora Van Helsing estuviera arriba y abajo con el leñador. Ya tendríamos tiempo.
Mientras el tendero se acercaba, continué mostrando mi interés hacia lo que los dos pertenecientes al pueblo sabían, ignorando el comentario respecto al infernalista. -¿Sabéis cuando llegó Royce al pueblo? ¿Donde duerme?- Me resultaba extraño preguntar si un sintecho tenía un techo bajo el cual dormir. La llegada del señor Hunt hizo que la conversación pasara a ser más mundana, por lo que me limité a estar en silencio. Hasta que noté que se estaban pidiendo comida. -Dos más para mí también. Gracias.- Dije, tomando en cuenta el consejo que la cazadora me había dado hacia un minuto.
Bonnie se queda cortada por la respuesta de Scarlett - Bueno, supongo que hay reglas para esas cosas.
Jim se deja acariciar por la cazadora - Pues no estaría mal. Creo que te vendría bien uno a ti también. Bueno, veamos qué tienes por aquí Morgan.
Scarlett y Jimm se van con el tendero a ver la ropa de motorista.
El de Batman contra Predator lo tengo. El otro puedo tenerlo aquí en dos días ¿Le interesa?
Realmente no sé mucho sobre Royce - les dice Bonnie a Dexter y Nathanael - Creo que le dejan dormir en el albergue para senderistas y hace pequeñas chapuzas a cambio de comida. Sólo he tenido encontronazos con él desde que se enteró que Ash quería ese libro ¿Por qué es tan importante?
Y, como suele ocurrir, la mujer malinterpreta del todo la sonrisa de Dexter - ¿Le importa...? ¿Le importa si duermo en su habitación esta noche? Sin ofender, Nate, pero este hombre es el más normal de su equipo y no quiero verme teleportada otra vez si es posible...
Dejo a vuestra elección cómo pasa la noche cada personaje. Los malos no van a ir a daros la tabarra, así que vuestros personajes pueden disfrutar de un sueño reparador que cure todos sus Daños. No olvidéis describir qué hacen los personajes al día siguiente, para poder abrir la siguiente escena. El personaje de Arthur Blake ha sido trasladado al hospital de San José, por que no estará disponible para obtener más información de él. En cambio Bonnie puede responder a la mayoría de preguntas que tengáis sobre la historia sobrenatural del pueblo.
Como sugerencia, vuestros personajes podrían pertrecharse contra Royce y su magia infernal en la iglesia del pastor Holloway, ya que sin armamento con la etiqueta [Sagrado] sólo podréis detenerlo un tiempo, no matarlo del todo.
Jim y Scarlett parecieron concentrarse en los cómics, hasta el punto de que estaba dispuesto a comprarle uno, como si fuese una especie de anillo de compromiso o algo así, solo que para frikis. Aquellos dos necesitaban, de verdad, pasar una noche juntos y olvidarse de todo para que los demás pudiéramos respirar.
De hecho, hasta hacían que viésemos cosas, porque yo no sabía si lo que había percibido en Bonnie era real o no. Es lo que siempre sucede con las mujeres, que quieren que los hombres seamos capaces de sentir lo mismo que ellas y en mi caso, eso era todavía más difícil.
Al menos antes de que todo se volviese extraño, nos dijo que no sabía mucho sobre Royce pero que sabía en dónde podría estar.
-Bueno, quizás es un lugar en el que podamos empezar a buscar. En cuanto al libro... simplemente puede tener... información... y la información es poder -dije, con tono indiferente.
Sin embargo, cuando le sonreí para evitar malas interpretaciones... la mujer pareció tomárselo de otra manera.
¿El más normal? Esta mujer no sabe leer a la gente.
Pero si eso era lo que quería, no podía negarme. Había pensado aprovechar la noche para dar una vuelta por mi cuenta pero mi cuerpo también me pedía otras cosas. Solo era cuestión de comprobar hasta dónde quería llegar Bonnie.
-Eeeeeh... pues entonces... será mejor que encarguemos algo para beber. ¿Un... vino tinto? -sugerí, mirando al hombre de la tienda para indicarle que nos trajese uno. A las malas, siempre podía bebérmelo yo solo.
- Sí, el de Batman vs Predator nos lo llevamos. Así sabré quien es alguien del cine. - Y miré a Jim y le sonreí. Así podría jugar con esos comentarios también. - El otro... pues... - No sabía cuanto tiempo nos iba a llevar encargarnos de Royce y encontrar el diario. Quizás dos días eran demasiado. - Dependerá si Jim me aguanta tanto tiempo como huésped en su casa. Así que, decide él esta vez. - Le dije a Hunt y luego me vi arrastrada por Jim a la zona de ropa de moteros.
- Realmente no necesito nada de aquí, Jim. Mi traje está preparado precisamente para combatir. Cuando me pongo todas las protecciones, cubro lo que necesito... - Le susurré a ratos, pues Hunt estaba con nosotros. - Pero si es cierto que hay zonas que debería proteger, pero esas no he encontrado piezas que me sirvan... por ejemplo esta me encanta, simplemente para ir en moto. - Saqué una especie de armadura que cubría frontal y espalda. Llevaba protecciones para los brazos y las piernas. - Existen los guantes a juego y van sobre la ropa. ¿Problema? No hay para mujer... si fuese plana de pecho me la compraría, pero...*
- Pero mira, a ti no te iría mal... quizás Hunt tenga la versión en negro de tu talla. Puedo reforzar varias partes sin demasiado problema, como el pecho y el abdomen, los antebrazos necesitarás guantes que te cubran lo máximo posible, esto no da la suficiente protección frente a un mordisco. Para moto va bien... para lo que estamos haciendo nosotros no. La idea es que tengas algo como yo, que te quites las protecciones en un momento, te pongas una chaqueta y pasees normalmente por la calle y que con las protecciones puestas puedas enfrentarte a lo que sea. Aunque esta... no te quedaría nada mal...
» Podría meter el kevlar bajo el forro y con unos guantes normales irías bien. Nadie se daría cuenta de que la chaqueta está reforzada para nada... Para las piernas puedes usar lo que uso yo, botas reforzadas y unas protecciones similares a las que vimos antes, pero las hay que cubren un poco más que esas... o cogemos unos vaqueros para moto, que existen y los preparo y solo tienes que coger las botas. Tú decides... además si la chaqueta es grande puedes ponerte el chaleco antibalas debajo. Creo que por tu forma de vestir irás más cómodo y mejor con los vaqueros de motero, unos guantes decentes, las botas y la cazadora. Además, no debes llamar la atención... eres un civil, un inocente al que debo proteger por oficio... luego está lo demás que va aparte.
A nuestro regreso, parecía que Bonnie había elegido pareja de baile. - Pues a mí no me ha teleportado nunca, pero sinceramente Bonnie, en caso de peligro inminente, es la mejor huída. Pero... es decisión suya. Él ha venido a lo que ha venido y no estará lejos suyo. Le recuerdo que usted es su misión.
Nuevamente saqué la tarjeta para pagarlo todo lo que había salido de más. Incluído el kevlar que tenía Hunt y que no había cogido con anterioridad. - Si tiene más, me lo llevaré. Quiero dejarle bien reforzada la ropa a Jim. El Kevlar es mejor que los refuerzos que ponen. - Aunque no me opuse para nada a que cada uno pagase sus cosas, salvo por la ropa para Jim. A fin de cuentas la había elegido yo y sería yo quien se la preparase esa misma noche en un santiamén.
Con casi media tienda que nos llevamos entre Jim y yo, salimos al exterior y nos despedimos de los demás. - ¿Nos vemos mañana en el hotel a eso de las 9:00? Nos habrá dado tiempo a desayunar y a encontrar los locales abiertos.
Tras quedar con todos y despedirme de ellos, me subí en la pick up de Jim. Me moría por una ducha...
*Y es cierto, no existen para mujer.
1/2
Tras meter la pick up en el garaje, saqué mis cosas del arcón y ayudé a Jim a meter todo en la casa. Tal y como dijo, era una casa de un soltero, pero con muy buen gusto y estilo. Pero sí... se notaba que le pasaba como a mí... le costaba dejar todo en su sitio. Así que dejé todo a un lado. - Tengo que coger mis cosas de la moto para darme una ducha y cambiarme.
Y salí en busca de mi ropa y demás enseres personales. Me hice un sitio en el salón sin decir mucho, me moría por aquella ducha y cuando obtuve lo que necesitaba, pregunté a Jim por donde estaba el baño mientras él ponía unas pizzas a hacerse. Le miré deseando decirle que se metiese en la ducha conmigo, pero parecía que le gustaba ir despacio... y a mí me gustaba lo suficiente como para evitar acostarme con él la primera noche... o la segunda. Además no habíamos tenido ninguna cita.
- Debo ser idiota. - Pensé para mí al descubrirme pensando en aquellas cosas y abrí el grifo del agua fría. Necesitaba bajar el calentón que llevaba mi cuerpo al tiempo que mis heridas se limpiasen, así que me retiré las vendas y me metí bajo el agua helada para apagar mi fuego interno. Ese que despertaba Jim con solo verle y esperé que la ducha fuese suficiente.
Tenía narices, estaba pasando más calor en aquel momento que dentro de la biblioteca en llamas.
Al menos funcionó y cuando fui a buscar el desodorante... no me quedaba. - Mierda. - Salí en toalla a preguntarle a Jim si me dejaría el suyo. Ya compraría mañana en la tienda de Hunt. Pero era lo que me faltaba, oler a él toda la noche. - Jim. - Dije asomándome a la cocina. - ¿No podrías dejarme tú desodorante? El mío solo sirve para tirarlo a la basura... y si me dices donde está eso haré ahora mismo. - Le dije enseñándole el frasco vacío.
- Me curo las heridas y me visto de persona. Al menos tengo el traje de recambio para mañana... tendré que lavar el otro que apesta a chasca de las malas. - Dije por el incendio y volví al baño a curarme las heridas que tenía. Por fortuna era todas accesibles y nada graves. Solo dolorosos mordiscos. Luego recogí y limpié lo que pude antes de salir del baño ya vestida de persona y me planté delante de Jim con una sonrisa.
- ¿Mejor así? Si lo prefieres puedo ponerme el otro traje de trabajo que tengo. - Le dije sin dejar de sonreír como una tonta.
Mis brazos mostraban algunos moratones y viejas cicatrices de guerra. Lo normal en el cuerpo de un cazador. La cena fue amena, Jim tenía muchas preguntas y yo casi todas las respuestas. Tras la cena, Jim se fue a la ducha y yo comencé a ojear los libros de familias de la ciudad, buscando a Royce entre ellos y mirando de paso la ascendencia del sherriff, por si alguna rama de su familia daba con Royce.
Se notaba que estaba acostumbrado a estar solo pues cuando salió de la ducha se fue a la nevera y cogió una cerveza solo, cuando vino al sofá recordó que estaba allí y me la ofreció. Cuando la cogí, casi se me cae al suelo. Estaba tremendo con aquella camiseta de tirantes. - Mi última cerveza o no respondo de lo que pase. - Bromeé al cogerla.
Jim volvió con otra cerveza más y se sentó a mi lado. - Estoy buscando alguna conexión entre el sheriff y Royce. No entiendo porqué quiere ocultar lo de Clarke. - A fin de cuentas, un cuerpo quemado era un cuerpo quemado, salvo que hubiese algo más allí. Cerré el libro y miré a Jim. - ¿Qué tal si pones la televisión y nos olvidamos de todo un rato? Si tienes una de esas películas que dijiste podríamos verla... no es el cine pero...
Y eso hizo. Puso Terminator creo... y digo creo porque cuando se sentó a mi lado de nuevo me recosté sobre su pecho y sentí su brazo pasar por encima de mi cuerpo. Creo que no llegué a ver ni el título de la película pues me quedé dormida antes.
Desperté en la cama, abrazada a Jim, quien seguía durmiendo a mi lado... o eso creía. En algún momento debió llevarme allí con él. Ambos estábamos vestidos y miré la hora. Era pronto, si usaba mi poder podía tener la ropa de Jim lista para antes de irnos, así que me levanté con cuidado y fui al salón, cogí la aguja de cuero y el hilo y empecé por mi guante destrozado, junto a la placa de Kevlar y el cuero quedaría casi perferto.
Luego me puse con la vestimenta de Jim. Le reforcé todas las partes sensibles, sobre todo a mordiscos de perro o golpes. Sobró kelvar para protegerle el pecho y el abdomen. En aquella cazadora se podía colocar muy bien las piezas. En los pantalones me costó más, pero por disimular las puntadas. En algún momento Jim se despertó y me descubrió cosiendo a toda velocidad. - Buenos días. ¿Qué tal has dormido? Yo de lujo. Gracias por llevarme a la cama. De verdad estaba rota. Solo me queda meter refuerzo en los guantes y tendrás tu equipo listo... ¿Qué tal si haces un poco de café mientras termino? O lo que sea que tomes para desayunar... pero que no sean cervezas. - Le dije con una sonrisa.
Y le vi como me miraba al coser. - Tranquilo, es el mismo poder que usé en la biblioteca... me confiere más fuerza, velocidad... para estas cosas está muy bien. Por cierto, de la película, creo que solo llegué a ver el título, lo siento.
Con su equipo listo, me senté a desayunar con él. Tenía más preguntas y yo más respuestas. - Usarás la katana grande. - Le dije al final. - Te queda mejor a ti... ya me la devolverás cuando me marche. - Y aparté mi mirada de sus ojos y me centré en el café. No era la noche que quise tener, pero era la justa para que viese que no me voy con cualquiera aunque acabase durmiendo en su cama sin querer.
Luego me cambié de ropa y me aseguré de que el filo de las armas estuvese en condidiones. - No se me ha olvidado que te debo un masaje. Quizás esta noche volvamos menos cansados... - Revisé mi equipo antes de salir, no quería que me pasara como con el desodorante.
- Bueno Jim, ¿vas a salir ya para que te vea como te queda o no? Si te molesta alguna placa aún puedo recolocarla, nos queda algo de tiempo...
Y con Jim listo y mi corazón dando un vuelco al verle así, subimos a la pick up para reunirnos con los demás.
2/2
-No me ofende.- Admití a las palabras de Bonnie, alzando una ceja. En realidad, quienes me habían encargado de la misión de cuidar de Bonnie habían sido Scarlett y Jessica, por lo que suponía que mientras ella estuviera con alguno de nosotros estaría todo bien. -Supongo que... hm... seguiremos mañana.- Me despedí de ellos, contando con que la cazadora pagaría lo que había comprado.
Estábamos dando una noche de ventaja a nuestro objetivo. Esperaba que eso no volviera para, como dicen los humanos, mordernos el trasero.
Nate no hará gran cosa; estar en la habitación meditando sobre lo ocurrido, tratando de ver si hubo algo que le puso haber pasado desapercibido durante todo el día. Recordar a Royce y la impresión que me dio. Y apenas se sienta recuperado, salir a buscar al resto.