-Ehhh, Bri -Bert lanza una mirada suplicante a la de seguridad, todavía intimidado por el olfateo al que ha sido sometido-. No quisiera importunar, la tía Petunia era muy estricta en cuanto a asuntos femeninos, un caballero nunca debe inmiscuirse, siempre me decía eso, aunque la verdad es que a mí nunca se me hubiera ocurrido, los pescozones que soltaba eran de aúpa, jamás se me hubiera ocurrid entrar sin llamar...
-¡Ay, sí! A lo que iba... ¿no sería conveniente que esa mujer dejara de retransmitir, incluso de grabar? La señal podría ser interceptada por los asaltantes. De hecho, ¿no podrían formar parte de la banda, quizás nos quieren engañar? -eso último lo dice en un aparte.
Ingeniosa cuanto menos la forma en que Becca llama a capítulo a todas nosotras - dime - igual se le había ocurrido algo, no me extrañaría lo más mínimo, la había visto construir aquel artilugio de la nada - menudo juguete, para que luego digan que los ingenieros son gente aburrida - estaba bien que lo llevase ella, Becca, al fin y al cabo su grupo iría en busca de la bodega. El mío una vez alcanzada la armería volveríamos cargados con todo tipo de rifles y bombas.
Tampoco desatendí a Bert, se encontraba bastante impaciente, nervioso y estaba en lo cierto, cuanto más nos demorásemos peor. Pero como le preguntó por los nuevos "invitados" no pude hacer otra cosa que explicarle mi perspectiva - parece que esa cámara forma parte de su vida - el bicho con patas era un adicto a la imagen, lo grababa todo, así que, donde quiera que fuese la cámara le acompañaría - y es diplomático, así que, habrá que procurar no molestarlo ni que nos moleste - que podían advertir nuestra presencia por culpa de aquel aparato suponía una incertidumbre - míralo por el lado positivo, si todo sale bien lo habrán visto en muchos mundos y serás famoso - aunque si no salía tan bien la notoriedad que se podría alcanzar también sería manifiesta.
- Resuelvo este asunto con Becca y nos vamos todos - le desee suerte a Erik, al fin y al cabo, le tocaba cargar con la periodista y el bicho - al menos te libras de Petunia - bromee.
Escuché con atención lo que dijo la periodista sobre los asaltantes - ¿seres de pequeño tamaño con armas? - me sorprendió ese comentario, máxime cuando el orionita había interrumpido en el comedor envuelto de sangre y malherido, parecía un contrasentido que seres pequeños constituyesen una seria amenaza.
- Staafar, aunque el orionita estuviera afectado por alguna sustancia ¿no crees que ir armado hasta los dientes y resistir aquel número de heridas conlleva creer que está consciente de la realidad que le rodea? - si hubiera llegado al comedor arrastrándose entonces claro que habría dudado de su palabra pero disparando y sobreviviendo al ataque era difícil considerarlo como alguien "borracho" - aparte es tu superior, la cadena de mando no se rompe en circunstancias así.
Becca, presta atencion a todo, pero se la nota "nerviosa" no era usual de ella tener pensamientos en contra de las normas pero si sucedía lo que planeaba al menos no seria la única en la toma de decisiones...
Cuando Bria se acerca le dice con el mayor de los cuidados, en voz baja y de manera muy personal...
-Puedo PEM cerca de... eh? dos pajaros de un tiro? pasillo compuertas PEM PUFF! si? Becca se señala un pecho pone las manos en la zona pelvica, cara de dolor, se retuerce un poco, y se reincorpora.
-Perdón Bert, tía Petunia seguramente tenga algún tratamiento para esto, pero aquí y ahora no tengo forma de sentirme mejor, lamento incomodar a todos, no se en otras especies pero en la humana la situacion se puede poner muy fea de repente y mejorar al segundo siguiente.
Siempre que el riesgo no sea corte marcial estaba dispuesta a hacerlo, lo que había indicado Bert era muy certero, los enemigos pueden estar viendo, podemos quedar mal si algo sale de control... mucho estaba en riesgo. El hecho mismo de hablar sobre un oficial borracho dando ordenes frente a la cámara sonaba perjudicial para la Federación, tal vez sea momento ideal para activar el PEM al salir del camarote, eso también activaría las compuertas y aseguraría el paso a los tubos. dos pájaros de un tiro.
Alrededor de Ruby muchos eventos tenían lugar al mismo tiempo, pero la atención de ella estaba centrada en el embajador. Era consciente de la importancia de garantizar la seguridad de una figura diplomática que se hallaba en una nave de La Federación. Incluso ellos, siendo oficiales de bajo rango y responsabilidad, tenían que hacer lo posible para cuidar de él, por muy desagradable que fuera en sus tratos y su discurso.
Intercambió cortesías con Aemalae, especialmente porque aún continuaba transmitiendo. Si apagar la cámara se consideraría como un acto de violencia contra el embajador, ni modo, tendremos que soportarlo hasta que podamos dejarlos en otras manos. Ruby dedicó toda su atención y su encanto al embajador, quien se encontraba muy disgustado -Señor embajador, permítame explicar... Mi compañera estuvo asignada al sector de cocina el día de hoy, es por este motivo que usted percibe el olor de su alimento en ella. De ninguna manera se encuentra asociada o trabajando con ellos, somos todos miembros de la Federación y tomamos muy en serio nuestras responsabilidades.
Si bien en un principio había estado de acuerdo con la distribución en equipos, consideraba que dadas las circunstancias era necesario repensarlo. El embajador no debería continuar en la nave en estas condiciones, o al menos no al cuidado de ellos. Se le ocurrió plantearle una alternativa -Señor embajador, no está en mi posición representar a La Federación frente a un diplómata ilustre como usted. En estas circunstancias imagino que sería mejor que tenga la oportunidad de hablar directamente con la Capitana o regresar a su planeta en una cápsula, se lo propongo pensando solamente en su seguridad y bienestar, no quisiéramos después de todo que usted corra ningún tipo de peligro. ¿Cómo desea proceder? No me encuentro en condiciones de negociar con usted, pero priorizaré su seguridad y bienestar. Forzó una sonrisa complaciente, su tono permanecía conciliador por más que la actitud del embajador era de lo más agresiva para con ella, capitalizando el hecho de que podía interpretarlo.
Luego, se giró en dirección a Bria y Becca, que estaban a mayor distancia conversando en privado y agregó -Bria, creo que no debería separarme de momento del señor embajador, después de todo no todo el personal está en condiciones de interpretarlo y se encuentra muy molesto, amenazando con cancelar el trato que venía a negociar. No podía agregar más hasta entender cuáles eran los deseos del embajador. De pasada escuchó que Staafar mencionaba que el orionita se encontraba ebrio al momento de asignarles la misión, algo que esperaba que no hubiese sido transmitido a las galaxias. Consideró cuáles serían las posibilidades de éxito, si se dedicara a guiarlos al puente de mando, de forma que los oficiales de mayor rango lidiaran con el diplómata y la reportera, que seguramente podrían manejarse con mayor soltura.
Perdón por la demora! Estoy en medio del temporal de exámenes. Ya la semana que viene debería regresar a la calma.
El vulcaniano asintió, alzando una ceja. Estaba contrariado pero no podía hacer gran cosa. Antes de ir a servir a la Excalibur, sus compañeros le habían advertido de la irritante tendencia de los humanos al comportamiento ilógico. Desde que había iniciado el voluntariado, no había visto pruebas de lo contrario.
Resultaba ilógico que no aprovechasen sus conocimientos en el área de las comunicaciones o la diplomacia y asumiesen que su campo debía ser el científico, establecer semejantes turnos sin hacer una rotación más eficiente del personal, o tomar al pie de la letra las palabras de un orionita beodo aún a sabiendas de que gran parte de su perorata resultaba confusa o errónea.
De no haber aprendido el noble arte de la disciplina vulcaniana, Staafar habría suspirado. En su lugar, contestó con un simple y escueto:
—Fascinante.
Lo único que podía hacer en mitad del ajetreo era acatar las órdenes y dejar que le arrastrase la corriente. No obstante, vio una oportunidad excelente de usar sus conocimientos y habilidades de una forma lógica cuando la Auxiliar Stevens llamó la atención respecto a los problemas del embajador. Por ello, decidió prestar atención por primera vez a aquella pareja que había irrumpido junto a ellos.
—Si me lo permite, auxiliar Stevens, estoy especializado en relaciones diplomáticas y xenoantropología. Tal vez pueda resultar de ayuda.
Motivo: Lenguas (hablar con el embajador)
Tirada: 5d6
Resultado: 19 [2, 4, 3, 6, 4]
A Erik le sorprendió que la alienígena encargada de grabar al diplomático hubiera escuchado sus palabras sobre encerrarles, aunque tenía cierto sentido al ver sus orejas puntiagudas Seguro que tenerlas así hace que capte más sonidos que el oído humano. La mujer dejó muy claro que no aceptarían quedarse en aquella habitación, aunque fuese por su seguridad, amenazándole con mandarle a un destino muy desagradable como castigo.
Finalmente, a Erik le tocó ir en el mismo grupo que la cámara y el diplomático, cosa que no le agradaba nada ya que no le apetecía que le grabasen. No es que fuese tímido, era simplemente que no le gustaban las cámaras.
Erik esperaba ponerse en marcha cuanto antes, ya que allí no estaba haciendo realmente nada y quería un poco de acción para poder moverse en su ambiente. ¿Nos ponemos en marcha ya?
El dueto invitado se alegró al oír las palabras del experto en “evacuaciones”, que posiblemente era un agente táctico imprescindible en la nave. De alguna forma no lograban a comprender que hacia un tripulante de esa índole oculto en un camarote olvidado en medio de una alerta roja. De cualquier manera lo seguirían a donde fuera que vaya.
-¡Perfecto! Vamos con usted. – respondió la periodista y el mercader asintió levemente.
-Ohhh, si, si. Pequeños mamíferos peludos, cuadrúpedos, con cuernos y mirada llena de ternura. Solo que de repente comenzaron a disparar, muy interesados en atacar al señor Scroq'ads y su comitiva. – responde algo preocupada por los recientes eventos de violencia.
Luego Ruby y Staafar unen fuerzas para calmar los ánimos en el embajador y lograr armonizar para que todos puedan seguir adelante con el plan.
Las palabras del Embajador Mercader resultan familiares al Vulcano, porque recuerda haber estudiado la fonética del embajador en sus años de colegial. Recuerda que es una lengua común para un conglomerado menor de especies todas oriundas de un mismo sistema y que no son especies que tengan relaciones diplomáticas con su propia gente por disgustos comerciales de antaño. Pero al ser un asunto menor jamás tuvo demasiada transcendencia en materia de estudio.
Scroq'ads luego de oír la respuesta de Ruby señala a la rubia, asistente de cocina y auxiliar de seguridad, que inicia la marcha de todos fuera del camarote.
-⌇⍜ ⏁⊑⏃⏁ ⍙⍜⋔⏃⋏ ⊑⟟⎅⟒⌇ ⏁⊑⟒ ⏁⍀⎍⏁⊑. ⌇⊑⟒ ☍⋏⍜⍙⌇ ⍙⊑⟒⍀⟒ ⏁⊑⟒ ⌇⍙⏃⌰⌰-⊬⟒ ⊑⏃⌇ ⏚⟒⟒⋏ ⊑⟟⎅⎅⟒⋏, ⏁⊑⟒ ⌇⏃☊⍀⟒⎅ ⎅⟟⋏⋏⟒⍀ ⏁⊑⏃⏁ ⍙⟟⌰⌰ ⏚⟒ ⏁⊑⟒ ⎎⍜⍜⎅ ⍜⎎ ⏁⊑⟒ ☊⟒⌰⟒⏚⍀⏃⏁⟟⍜⋏ ⏃⎎⏁⟒⍀ ⏁⊑⟒ ⏁⍀⏃⎅⟒ ⏃☌⍀⟒⟒⋔⟒⋏⏁. ⏁⊑⏃⏁ ⎅⏃⋔⋏ ☊⍀⟒⏃⏁⎍⍀⟒ ⋔⎍⌇⏁ ⏚⟒ ⌇⍜⋔⟒⍙⊑⟒⍀⟒ ⍜⋏ ⏁⊑⟟⌇ ⌇⏁⟟⋏☍⟟⋏☌ ⌇⊑⟟⌿. ⏁⊑⟒⊬ ⋔⎍⌇⏁ ⎎⟟⋏⎅ ⟟⏁ ⏚⟒⎎⍜⍀⟒ "⏁⊑⟒⊬"! – aclara enérgico al enterarse de la asignación de Bria.
Finalmente todos emprenden la prudente marcha hacia la bahía de carga más próxima, donde grupo se dividirá en dos según lo anteriormente planeado.
Scroq'ads luego de oír la respuesta de Ruby señala a la rubia, asistente de cocina y auxiliar de seguridad, que inicia la marcha de todos fuera del camarote.
-Entonces esa mujer oculta la verdad. Ella sabe donde se ha escondido el Swall-ye, la cena sagrada que será el alimento del festejo posterior al acuerdo comercial. Esa maldita criatura debe estar por algún sitio de esta apestosa nave. ¡Deben hallarla antes que “ellos”! – aclara enérgico al enterarse de la asignación de Bria.
Mensaje traducido para ustedes, en base a sus tiradas previas.