Vamos a seguir capturando quién y cómo es el personaje en el momento en el que empieza la partida. Vamos a describirlo físicamente y crearle un perfil de personalidad. Esta es una de las partes más divertidas de la creación de personaje, porque no hay que pensar tanto y sí dejarse llevar.
En la descripción física vamos a hacer exactamente eso, describir cómo es el personaje. Cubriremos cosas típicas como la primera impresión que da el personaje, altura y complexión, color de pelo y ojos. Pero también cómo es su vestuario y qué objetos fuera de lo común porta. Como una imagen vale más que mil palabras, incluiremos todas las imágenes que encontremos. Por ejemplo, la descripción que hice de Valeria, mi maga roja exiliada, fue así:
Valeria es una mujer alta y esbelta como una espada, con apenas un atisbo de pechos. Parece desaprobar todo aquello que la rodea: tiene los labios carnosos perpetuamente fruncidos en una fina línea, en un gesto avinagrado que hace juego con su mirada de hielo gris. Tiene el pelo negro como el ala de cuervo, tan encrespado que no te extrañaría averiguar que se lo corta con un puñal. Lo cierto es que es un vestigio de su pasado como maga roja: tras años de habérselo afeitado, no volvió a crecer como es debido.
Cuando es posible utiliza vestidos ribeteados con marta que le dejen las clavículas al desnudo, para que se vea el inmenso tatuaje de una rosa roja que lleva en el hombro derecho. Suele utilizar corpiños que resalten su escaso escote. Sus colores favoritos son el verde, el morado y el amarillo, y nunca la verás vestida de rojo. Cuando viaja a la intemperie suele utilizar ropas más utilitarias: camisas de lana, pantalones con polainas, abrigadas capas, guantes y gorros de piel. Utiliza pocas piezas de joyería, decantándose por piezas de bisutería muy sencillas de plata labrada con piedras semipreciosas. Siempre lleva un broche con forma de libélula con diminutas alejandritas y crisoberilos que le regaló cierto caballero thayino: el único recuerdo grato que conserva de su pasado en Thay.
Empuña un bastón de hierro, forjado para asemejarse a una pila de cráneos en miniatura. En el extremo hay una calavera de mayor tamaño con la boca abierta, por donde surgen los conjuros ofensivos del bastón.
El libro de conjuros de Valeria está encuadernado en piel con tres gruesas argollas de hierro y está impregnada de un desagradable olor a podredumbre. Algunas páginas tienen manchas de tierra, la escritura es irregular y puntiaguda, y hay escalofriantes anotaciones al margen de una Valeria más joven y obsesionada con la búsqueda de la magia más oscura.
La descripción de mi hombre lagarto, por si ayuda a Argolyn fue:
Zz'pora es un hombre lagarto de escamas verdes, que se tornan cobrizas bajo los intensos ojos azules. Su mandíbula angulosa está festoneada de cuernecillos.
Luce una armadura de cota de mallas reforzada por bandas de acero, como un guerrero de sangre caliente. Y no obstante, aquí y allí se ven detalles que traicionan su origen: pulseras de cuero labrado y algas secas, plumas de vivos colores, y huesecillos de bestias tallados con runas dracónicas. Pero sobre todo llama la atención el macuahuitl que blande: una gran espada de madera pintada con ranuras a los lados para encajar cuchillas de obsidiana.
Respecto a la personalidad, vamos a partir de las cosas que ya sabemos del personaje. Especialmente su motivación, y trabajar alrededor de eso. En mi maga roja:
Su reputación, al menos en Thay, es la de ser una de las magas más brillantes, inteligentes y llenas de recursos de su generación y Valeria hace lo posible por mantenerla en su nuevo hogar. Su fuerte es la astucia, la reflexión paciente y el análisis frío y concienzudo de hechos, posibilidades y contingencias hasta rallar la paranoia, no los juicios rápidos o las decisiones en momentos de crisis. Como una jugadora de ajedrez, está constantemente pensando su próximo movimiento en relación a sus planes y según los escenarios posibles. La cantidad de trabajo intelectual que Valeria es capaz de desarrollar sin tan siquiera sacar una pluma puede ser extenuante para otras personas, aunque el increíble potencial de sus ideas rara vez da frutos debido a su ansiedad e indecisión.
Lo cierto es que los errores que cometió en su tiempo en Thay han acentuado su indecisión y tiene miedo al rechazo por su oscuro pasado en el Azote Rojo. Para compensarlo, trata de ser la mejor en todo, proyectando una imagen de seguridad en sí misma que, unida a que rara vez se equivoca, puede resultar tan insoportable como un dolor de muelas.
Tanto en una parte como en otra notaréis que las descripciones contienen tantos elementos positivos como elementos negativos. Recoged en esta parte la idea de Salmakia de hacer personajes con defectos porque aquí son importantes, especialmente los de personalidad.
En la personalidad también podemos hablar de cómo se relaciona con otros personajes y cómo el mundo le ve. Algo de este estilo:
Hericus es idealista, imaginativo, impredecible y más emocional que sesudo. Por lo general es una persona pacífica, amistosa y con un gran sentido del humor, pero le hierve la sangre ante los desafíos. No puede evitar defender su punto de vista cuando alguien expresa una opinión distinta a la suya. Su gran pasión después de la magia es la música, y la utiliza para canalizar sus miedos y pasiones. Es leal a sus amigos y muy divertido. Ve el mundo como una gran obra de teatro, y la realidad a veces no se corresponde con las elevadas expectativas que tiene.
Sus colegas magos suelen verle como un mamarracho, y suelen sorprenderse de su habilidad con el Arte. Los bardos, por su parte, suelen verle como un diletante con una bonita voz sin pulir, y muchos creen que utiliza la magia para mejorarla.
Vuestro turno. ¿Cómo son vuestros personajes?
Que curioso , Talesin. Tu maga tiene la misma imagen que mi hechicera tatuada de Pathfinder. Supongo que porque la tuya tambien tatuaje y habras puesto en el buscador algo parecido a lo qu epuse yo. La foto del hombre lagarto tambien la tengo en mi seleccion. De momento no me decido por ninguna aun.
En realidad tengo una colección de 3 gigas y pico de imágenes de fantasía, y cuando estoy creando un nuevo personaje, le echo un vistazo a lo que tengo antes de buscar más xD.
Estos son mis tres candidatos. A vosotros que os parecen?
Estaría bien una combinación entre la armadura y las armas del primero con la "piel" del segundo, porque la perspectiva de la primera está muy bien pero ese color rojo no me convence.
Es sólo mi opinión x)
Bueno, al tajo:
Descripción física: Zedje es un chico joven, esbelto y de altura media. No llamaría la atención si no fuera por su manera de vestir: ropa ancha de viaje muy colorida, una docena de brazaletes de oro, cuatro collares con diversos símbolos plateados, unos pendientes con esmeraldas y un sombrero típico de los nómadas del desierto. Todo esto le da una imagen muy curiosa. Su leve acento y su invención de palabras también delatan que es extranjero.
Tiene el pelo largo y grisáceo, algo bastante normal en su lugar de origen. Sus ojos, también grises, saltan de un lado a otro con curiosidad, lo que le hace parecer algo ingenuo. Suele sonreír, aunque a veces parezca forzado. Camina muy erguido, tal y como le han enseñado, y parece muy tenso.
Personalidad: Zedje se apasiona fácilmente con todo lo relacionado con el arte y siempre se pone a trabajar en cuanto le llega la inspiración. Esto puede significar que se pase toda una noche sin dormir sólo para no perder ese momento de iluminación, lo que puede acarrear consecuencias por la mañana. Cuando trabaja requiere silencio y soledad, pues necesita concentrarse, y a veces puede ser muy arisco si alguien no cumple estos requisitos.
Respecto a lo demás, es un chico amable, aunque no demasiado abierto. Preferiría ir por su cuenta, pero sabe que necesita estar con más gente si quiere viajar. Evita siempre las preguntas personales. Le cuesta hacer amigos por su actitud impredecible, pero al menos lo intenta. Se agobia mucho cuando tiene que cumplir las convenciones sociales, especialmente en reuniones de clase alta, y por eso prefiere pasear por los barrios bajos. Esto, claro está, también le conlleva muchos problemas puesto que es "nuevo" en el mundo* y no sabe cómo desenvolverse con naturalidad sin parecer un idiota o un pedante. A diferencia de lo que se esperaría de él, no trata con condescendencia a criados y gente pobre, aunque a veces puede hacer comentarios sin malicia que estos puedan tomarse mal.
*teniendo en cuenta que se ha pasado toda su vida casi encerrado las veinticuatro horas del día en el palacio de su familia.
Básicamente normal…. Así se describiría Nile si le pidieras que se describiera, básicamente normal.
Mide alrededor de 1,75, no es muy corpulento pero su capacidad reside mas bien en su tozudez, no da nada por perdido y no da una pelea por perdida al menos que le dejen noqueado.
Sus ojos son marrones, casi color miel, su pelo es corto y muy negro, casi siempre despeinado y su barba bien poblada normalmente la lleva de dos días, le da pereza afeitarse.
Tiene unas manos fuerte cual perro de presa, jamás dejara caer el escudo jamás dejara caer su arma, sea como fuere esa lección de su padre aun llevando martillo la tiene grabada a fuego en su memoria.
Ya hable de sus ojos marrones pero me gustaría centrarme un poco mas en dichos ojos, mas importante que su ropas de tonos marrones, o sus muñequeras grandes de cuero las cuales impiden que se le vuelvan a abrir esas dichosas muñecas, sus ojos realmente son los que mas le describen, son serios cuando de una conversación trascendental se refiere, siempre mirando pero con disimulo aunque fuera en una conversación trivial ya que son ojos picaros por años de severos entrenamientos paternales, “ que parezca que no miras hijo, así nunca sabrán donde darás el golpe”, ojos a la vez que risueños, vivos y plagados de inocencia si te fijas bien, inocencia noble cual persona exenta de infancia, ojos que iluminan cuando el resto de su cara se ríe y también pueden oscurecer una habitación cuando su cara expresa enfado.
Está bien, aunque echo en falta bártulos de pintura en la descripción física.
De cara a una partida real, haz que la actitud inicial de tu personaje frente a los demás compañeros de tu grupo sea amistosa. Puedes ser todo lo cerrado que quieras con los desconocidos, pero en general es buena idea que trates al resto de PJs como trataría tu PJ a un amigo. Al menos si juegas con desconocidos.
Has hecho un detalle muy bueno en la descripción, y es que lo has relacionado con una parte de tu trasfondo: "Tiene unas manos fuerte cual perro de presa, jamás dejara caer el escudo jamás dejara caer su arma, sea como fuere esa lección de su padre aun llevando martillo la tiene grabada a fuego en su memoria."
Me falta el perfil de personalidad.
Descripción física:
Kassmal es un gran Hombre-lagarto, de un metro ochenta y recios músculos bajo sus escamas verdes. Se mueve con gesto pesado, casi arrastrando los pies, como si llevara una gran carga en su espalda. Suele vestir con un simple chaleco de piel curtida y tachonado con piezas de metal, que le porporciona flexibilidad y algo de protección para las riñas que se producen en el bar donde cumple funciones de seguridad pero guarda en secreto una armadura completa muy usada y de origen humano de tonos broncíneos. Sus armas habituales, escudo ligero y lanza corta, también parecen viejas y gastadas.
En su rostro llaman la atención sus ojos reptilianos de color azulado y su cresta de macho de un color verde más intenso.
Personalidad:
Kassmal habla el común arrastrando la "s" pero ha aprendido el idoma lo suficiente par hablarlo con comodidad. Aún así, aún hay frases hechas que no domina y, en ocasiones, confunde con otras. Eso, añadido a lo amenazador de su aspecto, le hace dificil el caer simpático a la gente y, en respuesta, prefiere mantener la distancia con los desconocidos hasta conocerlos bien. Eso si, una vez traba amistad con alguien, es ferozmente leal.
Además, Kassmal siempre habla en serio y no entiende muy bien el concepto del humor lo cual dificulta aún más el desarrollo de sus habilidades sociales.
Sobre las herramientas de pintura: nada demasiado raro, supongo. Pinceles de diversos tamaños, una libreta de arte conceptual, la paleta, las pinturas... no creo que llevar un lienzo por allí sea demasiado práctico :P
Zdeje, tengo cierta experiencia con el mundillo del arte, y los pinceles paletas y demás se reservan solo para el taller y el uso del lienzo es solo tras mucho estudio. Lo que suelen (y solían en las épocas preteritas) llevar es un cuaderno de dibujo (de tamaño similar al A3 o A4) y carboncillo, conté o sepia (estos 2 últimos son similares al carboncillo). Este material permite abocetar muy rápido (he visto hacerlo a gente en cuestión de minutos) y no ocupa demasiado espacio. Si luego quisieran hacer un lienzo sobre el tema, tomarían los bocetos como base/prueba y listo
Sí, había pensado llevar un cuaderno, no un lienzo. Claro que, ahora que lo dices, llevar una paleta si no vas a pintar en lienzo es bastante absurdo x)
jejej, tu pon bocetos Miguel Angel en google imágenes y verás que casi todo lo que sale es sepia o carboncillo :)
Pese a que todo lo que comenta Nalfeim es cierto y bastante razonable, esto es D&D. Aquí puedes llevar lienzos ridículamente grandes, y todos los bártulos de pintura que quieras, en una bolsa de contención colgando del cinturón.
Son bolsas mágicas, vaya, más grandes por dentro que por fuera porque se abren a un espacio de otro plano.
Ah, en plan Doraemon. Entonces tiene sentido xD