Puse mi mejor aspecto inocente, como si el notar cosas fuese algo casual, que no tuviera nada que ver conmigo. Supuse que estaba acostumbrado a pasar desapercibido y que nadie se fijase en el esfuerzo que hacía para conseguirlo. Malo para nosotros. O tal vez no, pero en la duda era malo. Pese a todo, dediqué una sonrisa a Mirka y le di una palmadita amistosa en el brazo, tal vez así ganase confianza y nos contase más cosas.
- ¿De veras? Seguro que podríais compartir el truco con nosotros. Ayudaría si vamos a infiltrarnos en los hangares del sol negro - lo dejé caer como si fuera una idea repentina, casual, y luego continué - Te noto preocupada ¿sucede algo? Más allá del ataque al planeta, parece más bien... algo concreto. - la miré intentando transmitir la mayor de las confianzas y una sincera preocupación - Puedes contárnoslo... Seguro que así te sentirías mejor.
Motivo: Sentir vida
Tirada: 2d6
Resultado: 2, 3
Te preguntas que estará haciendo Tanner más adelante... cuando te das cuenta que, de alguna manera... ¡le estás sintiendo! No con ninguno de tus sentidos habituales, sino con otro, con un "saber" que está ahí, como un faro a unas decenas de metros...
Y más allá hay otras presencias que no sientes tan fuertemente como a Tanner, una de ellas te resulta familiar, aunque alguna de las otras están como furiosas, negativas...
Y entonces varias de ellas mueren.
La realización te resulta tremenda, vidas cortadas, segadas en un instante, lo único que te permite mantener la cordura es que la que te resulta familar no es una de las que han perecido...
Esto los vas sintiendo durante los dos o tres próximos minutos. No es instantáneo.
De alguna manera, a través de tus nueva percepción sientes que Tanner se ha encontrado con problemas más adelante... y los ha solucionado "permanentemente".
No te concentras más en ello porque en ese instante tocas a Mirka y sientes la preocupación que tu misma has previsto y expresado en palabras...
-Bueno... si, quieres, yo te digo como lo hago yo, igual tu puedes hacerlo de esa manera, de otra diferente o directamente no puedes.-Te miró especulativamente, como si te midiera.
-Realmente no vemos bien en la oscuridad porque estamos acostumbrados a la brillante luz de las estrellas, o a la tecnología. Pero dentro de nuestra cabeza, está la capacidad de ver mejor. Nuestros antepasados, evolucionaran en Coruscant o en donde fuera, porque no hay registros del planeta natal de los humanos... pues nuestros antepasados veían mejor, estaban acostumbrados a moverse de día y de noche.
-Así que cierra los ojos, céntrate en tus cuencas, en tus nervios, en las minúsculas células que ahí están... y mejoralos, obligales a responder, por fuerza.
Adoptó un tono irónico.-O imagina que todos estamos conectados que hay un campo místico llamado "La Fuerza" que nos une, que sólo tienes que expandir tu mente y verás claramente, a través de ese campo, a través de bah... mi sistema es mejor, al menos para mí.
-Y con respecto a lo que me preocupa... probablemente no sea nada, aparte del bombardeo y ataque al planeta, claro.
Y si quieres que te cuente algo mas... tira persuasión ^^ (es difícil que te cuente porqué está aquí y eso... pero no imposible para alguien con la persuasión de Alex).
Caesar estaba absolutamente abstraído... como si realmente no estuviera presente allí sino que su mente volara fuera de aquel pequeño recoveco entre pasadizos, tuberías y conductos mohosos y raídos. Sin embargo era más consciente que nunca de todo cuanto le rodeaba. Los pasadizos... un lejano gorgoteo de humedad malsana... la conversación entre Mirka y Aleesha.
- ¿Y tu sistema también te permite saber cuando muere alguien? ¿Sentir ese dolor como si fuera el de tu propia vida que se escapa...? - el chiss hizo una pausa que aprovechó para volver a la escena que le rodeaba. Era como si sus anteriores palabras las hubiera pronunciado estando aún ausente. Ahora fijaba los ojos brillantes y encarnados en la mujer rubia... estos ojos eran ahora fieros y, su tono de voz, afilado como una navaja. - ¿O es que es eso precisamente lo que te preocupa pero no nos dices nada? ¿Es eso Mirka...? ¿Qué hace Tanner ahí delante?
Ahora Caesar sonreía con sobrada actitud. Como si soltar un lastre fuese una acción tremendamente satisfactoria.
- Mira... tanto tú como ese tipo oléis a forraje de bantha. Esa actitud de "sobrados". Ese carisma de "vamos a secuestrar una nave a los de Sol Negro... nos sobramos y nos bastamos" apesta a encerrona. ¿Qué pasa Mirka? ¿Realmente pensáis que es a nosotros dos a quien busca el pirado ese que está arrasando todo Raxus? ¿Qué pretendes... entregarnos y cobrar una buena suma?
Tuve que contener la sonrisa que bailaba en mis labios, no habría sido apropiada. Pero debía admitir que prefería al Caesar seguro de si mismo. Sin contar con que ahora acapararía toda la atención, lo que siempre era bueno. Di un paso lateral, deslizándome, y me coloqué junto a Mirka, justo detrás y con una mano en su hombro, de forma amistosa. La otra seguía sujetando el blaster, aunque, por supuesto, no de forma que ella pudiera verlo. Aún no me interesaba parecer agresiva, aunque desde esta nueva posición, un mero gesto podía servir para sujetarla y encañonarla. Era una de las tácticas favoritas de Zekk, pero esperaba que no fuese necesaria.
- El... sistema es lo de menos, lo importante son los resultados - respondí con voz suave, acariciante - Creo que lo que de verdad le preocupa es las consecuencias de fallar. O que la descarten una vez cumpla con su misión. Es algo que he visto muchas veces. - La mire a los ojos - Muchas, muchas veces.
Después devolví mi atención a Caesar e hice un gesto de leve asentimiento.
- Eran muertes innecesarias. Y las muertes siempre dejan un rastro, no es... coherente con alguien que realmente quiera pasar desapercibido. Situaciones desesperadas requieren medidas desesperadas, ¿Es ese tu caso? - Esperé la respuesta, pero no creía que fuera a responder.
Motivo: Persuasión
Tirada: 6d6
Resultado: 3, 1, 4, 3, 4, 1
Motivo: Intimidación
Tirada: 4d6
Resultado: 5, 4, 5, 5
Motivo: Intimidación
Tirada: 4d6
Resultado: 3, 3, 4, 6
En fin, se ve que ya gasté mi suerte. Nota, tiraré intimidación también por si la persuasión falla XD
Mirka no aparentó turbarse lo más mínimo por las palabras de Caesar. Pese a que sonaban con mucha más confianza que anteriormente.
-No, ese es otro truco, y Tanner ahí delante... está haciendo su trabajo, y si no nos crees, muchacho... pues eres libre de largarte, no te lo voy a impedir. El planeta es muy grande. El que esté arrasando Raxus, la verdad es que no os quiere, porque si no se guardaría de disparar como un loco, que es lo que ha hecho. Si quieres algo no bombardeas el planeta en el que está.
Aleesha se colocó al lado de la rubia en una curiosa maniobra. -¿Fallar? -rió amargamente.-Ya fallamos hace mucho, ahora tenemos que vivir con las consecuencias de nuestro error. Peliazul, buena maniobra, tienes el bláster en la mano. ¿Sabes? Podrías matarme sin ningún problema, no me daría tiempo a tomar mi arma y defenderme. He visto las posibilidades... pero no siento que seas una amenaza, realmente no quieres hacerme daño.
-Y ¡Joder! no os hemos mentido en ningún momento. Veníamos a por la criminal que os mostramos, y queremos escapar robando una nave del Sol Negro. Si estoy preocupada es porque esa mujer, la criminal que habéis visto... tiene muchos recursos, y no la ves llegar hasta que te ha clavado un vibrofilo en la espalda. La medida desesperada que dices no lo es tanto. Robaremos la nave y nos largaremos.
-No se que está haciendo Tanner ahí delante, pero podéis preguntárselo... ahí viene.
Tanner apareció instantes después, iba seguido de una figura familiar ¡Gaius!.
-Todo resuelto, hemos tenido unos problemillas más adelante, pero creo que está todo solucionado.
El chiss más adulto estaba pálido, si ese tono podía aplicarse a un rostro azul. Miraba con una mezcla de ira y asombro a Tanner.
-Tus problemillas eran unos cazarrecompensas armados y si tu forma de solucionarla las cosas es tan salvaje, acabarás muerto muy pronto.
Movió la cabeza.-Caesar... me alegro de verte en buen estado, y a tí también Alex. Menuda noche de diversión habréis tenido. ¿Quienes son las señoras? ¿Más refugiados?.
-Algo así. Somos un grupo de inconscientes que quieren salir de éste planeta antes de que acaben de arrasarlo.-dijo Dalla con su voz soñadora. Señaló a Mirka.-Ella y Tanner... tienen un plan.
Caesar no podía creer lo que veía... Gaius, su padre estaba a salvo. Estaba bien... sano... estaba... como siempre.
El chiss notó como un reflujo ácido se agolpaba en sus ojos tratando de desbordar una poderosa lluvia de llanto y emoción. Realmente había "sentido" que la vida de su padre se extinguí para siempre como una estrella lejana e inexplorada. Pero no... estaba bien. Y sin embargo él no parecía inmutarse por volver a ver a su hijo. Un saludo cordial era suficiente... unas palabras frías y escasamente expresivas. Muy al modo "chiss".
Jamás se habían juntado con otros de aquella especie. Su planeta de origen quedaba aún más allá del borde exterior y, a pesar de ésto, Caesar sentía todo el peso de una especie sobre sus hombros. Toda la responsabilidad de continuar y propagar, aquella conciencia racial que ni siquiera él mismo entendía o sentía, por toda aquella vasta galaxia. Era una dura tarea... muy dura.
- Me alegro de verte sano y salvo... - a punto estuvo de apostillar un tierno "papá" pero acabó por sentenciar, - ... Gaius.
Aquí, tragándose todo el torrente que se movía en su interior, una sensación similar a estar a punto de echar chispas, volvió a dirigirse a Mirka y al recién llegado Tanner.
- Ahora ya podemos irnos. Dejemos la discusión para otro momento.
Desde luego aquello no era una reunión normal entre padre e hijo, ambos habían alegrado levemente el semblante al verse, pero ninguno había dado las típicas muestras de cariño que serían inevitables en otra especie.
-De acuerdo.-dijo Mirka a las últimas palabras de Caesar.-Pero si queréis saber algo más, no dudéis en preguntar. No tengo nada que ocultar.
-Ahora debemos darnos prisa, el lugar no está cerca de aquí.- Miró a Gaius. -No se si Tanner te lo habrá dicho pero vamos a robar una nave y largarnos de éste planeta.
-Algo me ha contado... estáis locos, pero la alternativa es peor.
No había acabado de decir esas palabras Gaius cuando los temblores se reanudaron. ¡Los bombardeon continuaban!.
-Sí, la alternativa es peor, si no os importa iré delante, creo que encontraré un camino desde aquí. Me gustaría que alguien fuera en la retaguardia.
-Su base es bastante grande, y no vamos precisamente al cuartel, sino a los hangares. Tenemos que ser rápidos.
Tanner se va a poner en marcha, si queréis poneros adelante o detrás pues me lo comentáis, si queréis preguntar algo a alguno también. etc etc. Y si no vais a decir nada y esperar a llegar porque sois callados y eso idem, que así sigo.
Caesar dirigió una nueva mirada a su padre. Pasividad... esa era la manera de hacer las cosas de Gaius. Dejarse hacer... ir de un lado a otro sin opinar... sin sentir... sin verse afectada por nada. Era la manera de hacer las cosas de cualquier Chiss... de cualquiera menos de Caesar.
El joven chiss apretó el paso para ir delante. No quería entorpecer la tarea de Tanner pero sí mantenerle en el campo de visión. Aquel humano le llamaba la atención en el mismo grado que le generaba desconfianza. De cualquier manera... allá iba.
- Voy delante... - afirmó con tono adusto a Alex.