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¿Qué pasaría si la naturaleza comenzara a reclamar lo que es suyo?

Los científicos han descubierto un nuevo virus peligroso que hace que a las personas les broten estructuras parecidas a hongos y que su conducta sea salvaje y peligrosa, el virus ha comenzado a mutar a la humanidad hasta convertirlos en algo parecido a zombis.

La historia comienza 20 largos años después del brote del virus, la mayor parte de la humanidad ha desaparecido y quedan muy pocas personas que han sobrevivido al virus. Todo esto ha forzado a crear zonas de cuarentena, bajo ley marcial, gobernada por militares. Los militares hacen todo lo posible para mantener a la raza humana viva, por lo que hay estrictas normas de seguridad y las mínimas infracciones pueden conllevar la pena de muerte. Cualquier humano que sea detectado con el virus será sacrificado inmediatamente, sin peros ni excusas, no hay excepción.

Algunas normas en Boston, la ciudad de inicio:

• Hay toque de queda en cuanto oscurece, sobre las 19.
• La ciudad está dividida en sectores numerados, se requiere una identificación y control para pasar de uno a otro.
• Se necesitan permisos especiales para salir y entrar de la ciudad.
• El pago por el trabajo son cartillas de racionamiento que se intercambian por comida en el punto designado a tal efecto. A veces las raciones se dividen sin motivo aparente.
• Los controles militares y su presencia por todas las calles son constantes.

La infección que afecta a los humanos es causada por el Cordyceps unilateralis, un hongo existente en la naturaleza que sufre una mutación que lo hace parasitar a humanos. El desarrollo de la infección tiene cuatro etapas:

◊ Runners o Corredores: Tienen ciertos rastros de consciencia, y con ella algún sentido de moralidad. Saben íntimamente que lo que hacen es incorrecto pero no pueden resistirse a la implacable voluntad del hongo que habita en ellos, se lanzan sobre la presa al verla con toda la intención de acabar con su vida.

◊ Stalker o Acechadores: Corredores a punto de completar su transformación en clickers (chasqueadores). Los cambios fisiológicos que sufren, entre los que destaca su acusada pérdida de visión, los llevan a comportarse de forma menos itinerante que sus compañeros más jóvenes en el macabro calendario del Cordyceps; de ahí su nombre, derivado de la costumbre de permanecer ocultos en lugares de paso, acechando a potenciales- y desprevenidos- "benefactores" humanos. Se esconden cerca tuyo pero en un lugar cubierto, no se lanzan directos, esperan y cuando llegue el momento oportuno atacarán antes de que te dé tiempo a reaccionar.

◊ Clickers o Chasqueadores: Son los infectados de un año de edad, aproximadamente. En ellos, las estructuras fúngicas han emergido completamente de la cabeza, deformando y rompiendo el rostro. Aunque ciegos, poseen un excepcionalmente desarrollado sentido de la audición, que emplean junto a su característico y perturbador sonido de "chasqueo" como medio de ecolocación -de forma muy similar a la de los murciélagos- para orientarse y encontrar a sus presas. Los chasuqeadores han perdido por completo cualquier traza de su humanidad; lo que queda del huésped en este estado es un depredador despiadado, rápido y sumamente letal, una vez que ha identificado una posible víctima. Prácticamente invulnerables a ataques contundentes.

◊ Bloater o Gordinflones: Sus características físicas son las de un chasqueador cuyo cuerpo ha sido casi totalmente colonizado por el hongo pero que mantiene cierta movilidad y una peligrosidad inexorable, debido a su extraordinaria resistencia al daño físico y a las armas de fuego. Si te encuentras con uno de ellos deberías en lo posible aprovechar su relativa lentitud para poner una buena distancia de por medio, en lugar de malgastar valiosos recursos en acabar con un enemigo casi invulnerable.

Los luciérnagas se formaron después del estallido cordyceps, en respuesta a la ley marcial de los militares de EE.UU. situados en las zonas de cuarentena. El grupo pidió la vuelta a todas las ramas del gobierno para poner fin al régimen militar y el apoyo del público aumentó cuando los soldados ejecutaron seis miembros de los Luciérnagas.

Las luciérnagas tuvieron éxito en derrocar a varias zonas de cuarentena, como la de Pittsburgh, pero no obtuvieron los resultados deseados.

Durante muchos años los Luciérnagas han buscado en vano una vacuna para contrarrestar la infección cordyceps.

La moral de la organización estaba cayendo cuando los militares comenzaron a cazarlos.

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