La noticia es recibida con sorpresa, pero las posibilidades se están terminado y es cuestión de tiempo que las cosas empeoren. William se encarga de explicar la situación al grupo y el porqué de su noticia. A algunos les cuesta aceptar más que a otros el plan pero parece que la reunión puede ser una oportunidad única, al fin y al cabo la posibilidad de un ataque armado se terminó en el momento en el que acabaron las negociaciones con Sweet Lust. A Ben no le cuesta volver a reafirmar lo locos que están y el resto del grupo está de acuerdo en que lo más seguro es que sea una trampa. A pesar de esta evidencia es más posible encontrar una forma de solucionar las cosas yendo que sin ir.
Tras aclarar estás ideas deciden hacer caso a Ben y pasan la noche en su casa de nuevo para descansar. No hay noticia de Richard, Maria o Nirameth, pero tampoco parece haber ningún lugar por el que comenzar a buscarles. Tras una noche de descanso la reunión se podrá planear con más tranquilidad.
Y llega la mañana.
Brokk se despierta antes de lo esperado, inquieto.
Mientras todos duermen, Brokk da vueltas sin rumbo por el taller, únicamente para ocupar su mente en algo.