Partida Rol por web

- ¿Como está tan seguro de eso último? - la mente de Dûlag bullía intentando analizar la nueva información sobre la flecha y lo que sabía sobre los viajes de su hermano, aunque esto no conseguía tranquilizarlo precisamente.

- Quiero decir, ni siquiera yo se bien por lo que ha pasado esta flecha en su trayecto hasta aquí. ¿Como afirmar que no la han disparado en esa fortaleza maldita? -

- Porque cualquier criatura que haya estado en las proximidades de la Colina Oscura no habría regresado jamás. Si alguien recibió esta flecha en lo más profundo del Bosque Negro, no habría vivido para llegar hasta aquí. Tal vez fuera atacado por los orcos y los trasgos de allí, pero el ataque tuvo que ser lejos de Dol Guldur.

- Y el ataque se realizo en el oeste, con toda seguridad.- Añade el enano de mediana edad. Con una reverencia a la manera de los enanos, se presenta.- Gambrun, hijo de Gorbam, para servirle, señor. Como ya le dije, las estribaciones al este del Bosque Negro son seguras. Ninguna tribu o partida de caza orca ha atravesado el perímetro de seguridad de los Enanos y los Hombres. Yo mismo vengo de allí y le aseguro que ni un ejército podría atravesar las fronteras. No, si alguien ha sido atacado, debe haber sido cerca de las tierras de los Hombres del Bosque de las Tierras Ásperas, ya sea en el bosque o en las inmediaciones del Anduin. Tal vez Rhadagast, el Mago Pardo, sepa más acerca de este asunto.

- Vista la procedencia de la flecha, siguen sin ser buenas noticias... - dijo retorciéndose la barba intranquilo - pero dadas las circunstancias tal vez aún haya algo de esperanza. Gracias por todo Gorbam, y Gambrun hijo de Gorbam, que vuestra forja siempre esté encendida. - terminó la frase con una reverencia y se dio la vuelta dispuesto a irse de la forja, esta vez sin prisas.

Ahora le quedaba la tarea de encontrar a un mago, y por todos era sabido que eran de lo más esquivos. Sin embargo, recordó que había otro mago al que algunos sí conocían. ¡Gandalf! Aquél había acompañado a los héroes que rescataron Erebor de las garras de Smaug.

¡La nota! La invitación al banquete por la batalla de los cinco ejércitos. De seguro que allí podría encontrar a uno de ellos, y si no podían guiarle hasta el mago que buscaba, siempre podían guiarle hasta el otro. ¿Cuantos eran todos? Bifur, Bofur, Ori, Dori, Gloin, Balin...

Continúas con tu auto-discusión, cuando te da por releer el pergamino. Pone que contestes lo antes posible, pues falta apenas una semana para el banquete, y por tanto, para tu oportunidad de encontrar a Gandalf, Radhagast o cualquiera de los magos.

"Por favor, entregue la respuesta en mano a un paje del rey O en un cuervo lo antes posible", pone textualmente.

Había estado a punto de olvidar algo tan obvio como releer la nota con atención, maldita fuera su torpeza. En cualquier caso no había ocurrido nada grave. Se dirigió con calma a su casa y se tranquilizó fumando de nuevo un poco de tabaco pensando que si seguía a ese ritmo acabaría con lo que le quedaba en apenas dos días.

Mientras tanto, recogió un trozo de pergamino en blanco, tintero y pluma, y se dispuso a escribir la respuesta con su mejor caligrafía confirmando su presencia en el banquete. Después solo restaría entregar la nota...

Entregas la carta, y dejas pasar los días, entre intranquilo y esperanzado, a que llegue el día en que acompañes al rey Dain al banquete de celebración.