Partida Rol por web

- Si estamos a tiempo, que va a ser que no... a mi también me gustaría que Veronica explicase un poco mas lo de la llave maestra, en mi opinión lo ha dejado bastante claro, pero son palabras muy arriesgadas. A lo fácil me inclinaría hacia Randall pensado Polaroid->almas gemelas->recuperaron la llave de Fawks y corroboran que Mark sigue siendo de los nuestros. Pero seria muy muy dificil... así que por supuesto, también podría ser un renuncio de libro a la desesperada...

- No sabría que decir... pero Caroline, lo hemos hecho lo mejor que hemos podido hasta hoy... dales caña - le sonrie

Caroline eres muy muy tonta y una inútil como mano. Ahora lo vas a ver.

- Un empate. ¡Qué interesante!- dijo Unius. Pero en su tono de voz había algo de maldad. Y de sensación de triunfo. 

Caroline trataba de recordar las reglas en voz alta:

- En caso de empate, y no habiendo doblón, soy yo quien debe decidir que...

- Correcto, asesina descuidada, pero creo que se te ha pasado un detalle por alto. Uno que tampoco yo tenía claro hasta ahora. Maldita fuera Olivia y sus regalos. Creo que se produjo una extraña carambola... ¿No es así? 

Alguien creía estar usando un amuleto como chaleco antibalas, pero las reglas son las reglas

¿VERDAD ANGUS? 

Nadie entendía que estaba pasando. Randall y Verónica paralizados ardían de angustia de saber qué ocurría con el empate. Todos miraban entonces a Angus McMullen que parecía especialmente irritado y suspiraba tratando de aceptar lo que había pasado. 

- Vamos, Angus, saca eso que tiene ahí. ¿Cómo pudiste saber dónde lo guardó Jerzy antes de desaparecer? ¿Le espiabas, verdad? ¿Le seguiste de alguna manera y ahora te hiciste tú con EL DOBLÓN DE ORO? Qué lástima para vosotros que tengas que usarlo de esta manera. En un empate absurdo. Y qué conveniente para mí dejarte sin una "vida extra" ha ha ha. 

Angus da un paso al frente y saca su doblón. Sus gestos de chulo hortera poco tienen que ver con el difunto jugador de poker. Y sin embargo, es cierto, saca un doblón de oro del bolsillo. A punto de explotarle la vena de la frente del cabreo de no haber sido escuchado que le da si cabe un aire aún más cómico, lo lanza y pronuncia un nombre, deshaciendo el empate y perdiendo por tanto su preciado objeto que consiguió eligiendo al azar a un invitado aquella primera noche y descubriendo que fue afortunado. Afortunado por un tiempo, claro. 

- Elijo a Verónica- Dice queriendo decir mucho más pero sin finalmente decirlo. 

Verónica Casual da un respingo sin creerse que esto esté pasando. Randall no se atreve ni a suspirar de alivio. El resto enmudece, con una Caroline que no acierta a creerse lo que ha pasado... 

- Lo siento ambiciosa y desdeñable asesina... Tus compañeros han dictado sentencia, aunque sea de carambola. Por favor, retrocede hacia la cocina. Así, eso es... 

Verónica no sabía qué decir o hacer. ¿Estaba caminando hacia su sentencia de muerte? No podía ser. ¡Tenía toda una vida por delante, tenía...!

Unius no se dio la vuelta pero todos notaron como subía el volumen de uno de sus controles y entonces...ENTONCES VERÓNICA NOTÓ UN FUERTE DOLOR EN EL OÍDO Y SOLTÓ EL AURICULAR ¡¡DE ACÓLITO!! QUE TENÍA EN SU OÍDO. 

Al verlo los demás la miraron con odio. ¡Junto a Aya y a Misso era una de las acólitos!! ¿Estaría desde el principio o sería un nuevo fichaje? Ni lo sabían ni les importaba: Jane, Scott, Chico y hasta Victor corrieron hacia ella y junto a Angus, Caroline y Randall la cercaron. Pero una puerta se cerró entre ellos y Verónica. Su mirada implorosa y asustada fue lo último que vieron: 

- Ya me encargo yo, queridos, sólo sois ocho para cenar. ¿No es una maravillosa velada esta? Disfrutad de vuestro triunfo al haber eliminado a una de mis acólitos. 

Tratando de convencerse de que Unius nunca ha dejado de ejecutar a los suyos, se sientan a cenar. Apenas hora y media después, cuando van a irse a la cama, oyen como la puerta corrediza que les separaba de Verónica se vuelve a abrir. 
Y allí está Verónica, claro. 

TOTALMENTE CONGELADA

Yo tenía diez negritos

yo tenía diez perritos.

uno se perdió en la nieve.

No me quedan más que nueve.

http://cdn.uproxx.com/wp-content/uploads/2012/08/l...