Partida Rol por web

Scott le da el ultimo trago a la copa que tenia entre manos mientras va escuchando lo que dice el ciego, sigue dudando de el, pero hoy no se llevaría su voto... también le sorprende la rancia contestación que le concede Connor a su gran protegido, el mismo Hugh, al que hasta el momento había rendido poco menos que pleitesia por la muerte de Simba - ¿que me he perdido?... - piensa, sabiendo que ha estado muuuy atento... no dice nada al respecto, pero levanta una ceja con cara de chiste malo muy notoriamente. También sigue dudando de Connor, pero este tampoco se llevaría hoy su voto.

Por otro lado, Scott le devuelve el gesto de complicidad a Milton, y le comenta, en un tono en el que pudieran escucharle todos, buscando así la atención de la persona que tuviera el candado - hay que encerrar a Mark independientemente de lo que pueda pasar, pues con algo mas de información, lo que sea - calca - podríamos tener un buen comodín con el chico - se fija en el resto levantando las cejas en plan "¿...no?" y sigue - en el mejor de los casos podríamos incluso provocar que ni se les ocurra acercarse al muchacho hasta los últimos días - termina, para acto seguido sacar el ultimo cigarro de su cajetilla, arrugarla, y encenderse aquel ultimo filtro nicotinoso para acompañar una nueva copa de ron. Quizá hoy si fuera conveniente pillarse una buena cogorza, de esas, de acabar echando la pota todo descamisado a las tantisimas de una soleada mañana mientras vas cantando New York, New York por cualquier calle transitada.

Scott se queda haciendo "ós" con el humo del cigarro, semitumbado incomodisimamente en una de las sillas... se levanta con su copa, se fija en Misso - no esta haciéndolo mal la chica, admito... intenta defenderse, pero cada frase que suelta parece empeorar su situación de cara al resto... - dice.
Scott, el primero en mostrar una acusación mas o menos firme en su contra, visto lo visto, si no había convencido a algunos de los presentes, al menos... les había provocado ciertas dudas sobre la modelo, provocando incluso que algunos complementaran públicamente sus propias sospechas... la "Femme fatale", la chica a la que había señalado parecía tener bastantes papeletas para ser la próxima, estaban curiosamente en una situación bastante paralela, a pesar de presuntamente contraria - la ocasión me recuerda a una peliculera cita... - piensa - la muerte nos sonríe, devolvamosle la sonrisa... - observa a la modelo, quien sabe si por ultima vez...

Voto a Hugh C de Cegato

Voto a Hugh

- Milton, por favor, ¿quieres desvelar dónde cada uno ha puesto su tablero? 

Todos lanzaron un grito. No se esperaban ese resultado.

Una figura, con bastón, estaba rodeada de manera apabullante por muchos de los invitados. 

En concreto a Hugh le habían votado Angus, Connor, Chico, Mark, Milton con doble voto, Misso, Randall, Verónica y Victor... 10 irrebatibles votos. 

Misso, la escultural figurita tenía dos votos: Los de James y Scott

Angus, tenía la del propio Hugh

Y Jane y Luz no se habían colocado sobre el tablero, así que tenían un voto en contra cada una también. 

- Bien, Hugh Taylor, tendrás un ajusticiamiento poético pues ¿sabes cuál es la pena de muerte en Burkina Faso, el país allí donde tu arrogancia mató a tantas personas? ¡LA HORCA!

Dicho lo cual, una soga apareció del techo. Era un nudo duro y áspero y de una contundencia mortal. 

- Adelante, señores, su voto en este caso ha sido ampliamente mayoritario...¿ayudarían al invidente en este patíbulo? Vamos, vamos, no tengan miedo... Es un sistema decente de condena si piensan que es un acólito a quien van a eliminar. 

Con miedo pero con la decisión de acabar con quien pensaban que era uno de sus asesinos, fueron subiéndole a un taburete y de allí al oval maldito que se cerró sobre su cuello

Ayudó que Hugh apenas pudiera decir nada. 

Sus gafas oscuras se cayeron cuando empezó a balancearse. Pero nadie se las dio. 

Sus ojos sin vida se iluminaron un instante antes de que el taburete cayera y el crujido rompiera su nuez y le asfixiara 

- ¡Veo! Veo algo.. veGHHHHHHKKKKKhhhh

De los quince que quedaron (bis)

uno se ahorcó en un torce

No quedan más que catorce

Alguien subió corriendo a su habitación y la registró por completo. Nervioso volvió a bajar y ayudado por otro registraron el cuerpo del ahorcado. 

PERO NADA. NO HALLARON ABSOLUTAMENTE NADA. 

Hugh no era acólito ni tenía objeto de valor alguno

- Descansad ahora queridos. Mañana desayunarán en el jardín aprovechando que pasó la tormenta. Bueno, no todos lo harán, claro...