Llegas tarde a tu casa, los pasillos son ahora fríos y oscuros y dan algo de miedo, la verdad. Al abrirse la puerta ves a cinco estudiantes medio adormilados hablando en los pocos sillones que la casa tiene.- Al final no parece que haya fiesta... nadie viene.- parece que hablan de la fiesta de esta noche.
-¿Qué aquí es la fiesta?-
Pregunta su magnificencia algo indignada por lo que acaba de escuchar, pero para él tenía sentido si es que no había sido invitado con anterioridad era que seguro no era la gran cosa.