Partida Rol por web

Priscilla entra antes que Enia. Esta última se queda a la entrada, esperando que su compañera la llame.

Desde la puerta se pueden ver vestidos de todo tipo expuestos en maniquís , y también varios zapatos, colocados ordenadamente en valdas .

Un zombie salió desde detrás de una gran estantería, sorprendiendo a Priscilla

-¡Ah!-grito sorprendida, mientras el zombie me muerde el brazo derecho, provocndo que la barra que estaba sujetando se precipitase obtra el suelo-¡Me cago en todo!

Le pego una patada, y el zombie sale casi volando hacia la estantería, en la cual choca, partiéndola a la mitad.

Me caigo al suelo de rodillas, agarrándome la herido, en un intento de taponarla. La suelto, y, con el brazo libre alcando un vestido cercano, tiro de él hasta que el maniquí se come el suelo. Después, coloco mi pie en la tela, y con la mano izquierda, tiro para rasgarla. Como es roja, no se apreciará la sangre, y no habrá pelidro de que nadie se asuste por ello.

Me intento levantar, tambaleándome, pero, tras varios intentos, no lo consigo

-Enia-digo, y, con cara de dolor, le lanzo la barra con la mano izquierda. Menos mal que soy ambidiestra, pienso-. Ayúdame

Empiezo a atarme el trozo de tela rasgada sobre la herida, apretándo un nudo con los dientes.

 Sin dudarlo ni un momento, corro hacia la barra que se le ha caído a Priscila,la cojo y en ese momento el zombi se levanta,me giro rápidamente y le doí un golpe en la cabeza,la cual se le desprende del cuerpo

Toma,uno menos-pienso mientras me giro hacia mi compañera, que esta intentando taparse la herida

Puf, esto tiene mala pinta,trae déjame que te lo vea,algo de esto entiendo-le digo irónicamente -  te voy a hacer un torniquete de momento, pero necesitamos limpiarlo,así que vamos a coger algo de ropa y nos vamos,ademas tambien necesitaremos antiinflamatorios.  

Agarro a mi "Pris" y la ayudo a levantarse

Cambiando de tema has visto aquel vestido...-digo y me quedo atontada mirando un precioso vestido negro 

-¿A caso es momento de vestidos?-suelto, con tono borde. Pero no podía disimularlo, el brazo me dolía horrores.-Necesito algún vestido de tirantes, corto y suelo que ponerme, o estos largos pantalones terminarán matandome.

Señalo hacia las desgastadas perneras de mis vaqueros, las cuales eran demasiado largas, y eran pisadas por mi calzado, el cual también tendría que cambiar.

-Ahora vuelvo-digo levantándome a duras penas. Me tambaleo un poco al caminar, pero puedo moverme bien. Cuando vean que me han mordido... Me matarán, pienso.

Consigo alcanzar uno de los vestidos, el cual supuse que me vendría perfecto. Parecía cómodo.Me desvisto rápidamente, y me pongo el vestido, el cual me asentó. Supuse que era de mi talla. Agarro unas botas cercanas, negras. Miré de qué número eran. 40, perfecto.

Me las pongo, tirando a un lado mis desgastados 'converse'.

-Ya estoy lista-anuncio, poniéndome en pie y volviéndo al lado de Enia.

 No te vayas muy lejos-digo

Tenemos que hacer algo con esa herida,si hubiese alguna farmacia...-pienso- podriamos cauterizar la herida y así casi,no se notaria.Bastante tenemos encima, como para que los demás, se pongan histéricos.

A ninguna chica, le debería faltar uno de esto en su fondo de armario-comento en voz alta,mientras cojo el vestido.- ¡Es precioso!,esto con unos zapatos de tacon quedaría estupendo. 

Pero me voy a decantar por estas sandalias, son monas y comodas por si hay que correr.

Me giro hacia Priscila, -¡Guau! estas genial, ese vestido te queda de muerte.Bueno,si has terminado, vamos a currar esa herida.¿Te parece bien?

-Está bien-digo, aprentándo más el torniquete que Enia me había hecho-Tú también estás genial, aunque el aspecto no es muy importante ahora mismo. He escogido el mio porque es cómodo, y suelto.

Doy una vuelta sobre mi misma lentamente, fijándome en todos los detalles de la tienda, hasta que me topo con una puerta, que posiblemente diera al almacén.

-Mejor vamos por ahí-dije, señalándola-. La tienda de deportes de riesgo queda contigua a esta sala, hacia la izquierda

Me dirijo hacia una estantería, y cojo un zapato con un tacón afilado y largo. Enia ya tebía la barra, pero yo me tendría que apañar con eso.

-Esta vez entrarás tú primero-anuncié. Me quedé pensando en un plan, ya que el pasillo tenía escape hacia la derecha e izquierda había que cubrir los dos lados-Una vez cruzada la puerta, espalda con espalda.

Hago una pausa, y añado:

-¿Entendido?

Si pero de todas formas te queda estupendo, y no me dirás, que no tenias ganas de ponerte algo limpio...

Me giro y señalo la bola de "ropa" que dejábamos en el suelo,que no se sabía muy bien que era en realidad.

 Bueno vamos, me parece estupendo el plan,espalda contra espalda es la mejor opción, así estaremos cubiertas en todo momento.-le digo, mientras me adelanto-Ahora, si que me esta entrando hambre, venga, no perdamos mas tiempo