Salís de la cabaña con vuestras armas y algunas cosas, pero no con vuestras mochilas ni el equipo completo. Entre ambos cargáis con el cadáver, envuelto en sábanas.
El día amanece soleado y frío, todo está en calma, no hay ni un soplo de brisa en la orilla, ni un pequeño ruido en el horizonte. Tampoco hay señales de caminantes cerca.
Una vez fuera intenté dejar el cadáver del muchacho a la vuelta de la cabaña, no me encantaba la idea de no sepultar al tal John pero no tenía pala ni energías que desperdiciar en él considerando la situación actual del mundo. De no estar en un lugar tan desconocido y potencialmente peligroso sería otra su actitud.
Con cuidado dió una vuelta alrededor de la cabaña, en lo posible a la par de su compañera, para luego revisar la canoa. Si todo estaba en orden y con aquel día podrían tener una travesía tranquila hasta Santuario, la seguridad estaba tan cerca que los instintos de supervivencia de Zack estaban a mil. No había llegado tan lejos para cagarla.
Tomando a la eslinga desde una punta y dejando un par de metros hasta el bulto formado por la misma lanzó el mismo hasta el agua del lago, solo para traerlo nuevamente sin mojarse. Una vez en sus manos (guantes) estrujó y restregó la eslinga, luego repitió la moción un par de veces hasta quedar esta limpia.
Secó sus guantes agitando las manos un par de veces y luego, lo poco que quedaba, a los lados de su pantalón.
-¿Qué opinas Daniella? ¿Cómo está todo?- consulté.
Entre los dos sacan el cadáver y mientras Zack lava su eslinga ella comprueba que la barca esté bien,sin agujeros ni nada que haga que se hundan en mitad del lago.Echa un vistazo alrededor de la casa,comprobando que todo está tranquilo antes de volver junto a Zack
-"Opino que debemos irnos ya,parece que está todo tranquilo,no tentemos nuestra suerte"-espera que él acabe para volver dentro juntos para recoger a la niña y a Mara
Dejáis el cuerpo y os aseguráis de que todo está seguro alrededor de la casa. No hay indicios de zombies ni nada raro. La canoa está en perfecto estado, aparentemente. Es una prqueña piragua para dos personas. Lo más probable es que tres personas sobre ella la hagan zozobrar. La bebé, todavía, podría ir con dos adultos. El agua está helada.
Oís cómo la bebé comienza a llorar dentro de la cabaña.
Tirada oculta
Motivo: a
Tirada: 1d8
Resultado: 1
Tirada oculta
Motivo: a
Tirada: 1d8
Resultado: 6
Tirada oculta
Motivo: a
Tirada: 1d8
Resultado: 6
-"Mierda"-mira a Zack y corre hacia el interior,buscando a la niña-"Ssssh,sssh"-mira a Mara-"¿Qué le ocurre?"-se acerca y si la otra mujer la sostiene en brazos mira si la niña tiene el pañal limpio.Si no la tiene la coge ella y mira igualmente,mientras la mece tratando de calmarla
Daniella se va corriendo de tu lado y entra de nuevo en la cabaña.
El llanto de la bebé me saca la tranquilidad que estaba cocinando en el alma, Daniella sale corriendo hacia dentro y yo simplemente vuelvo detrás de ella más despacio, atento al entorno, picahielos en mano y tratando de recordar aquel viejo juego de los granos, la oca y la zorra.
No me es demasiado difícil recordarlo, pero se simplifica por el hecho de que aquí ninguno intenta comerse a otro. O eso esperaba.
-¿Qué pasa con la bebé?- murmuro audiblemente desde fuera pero sin mirar dentro -¿Seguras que no tiene nada malo?-. Zack no era un pediatra exactamente pero a su criterio la niña lloraba demasiado.
En cuanto al equipo ¿Cuenta como parte de nuestro peso o qué?
En cuanto al equipo ¿Cuenta como parte de nuestro peso o qué?
No entiendo la pregunta. ¿Si el equipo pesa? Pues no vamos a contar los kilos, pero tampoco vamos a llevar 500m de cuerda o cosas así, nos moveremos en parámetros normales y nos guiaremos por la lógica y el sentido común.