Examinas el cadáver y encuentras varias cosas.
Parece que en la cabaña no hay nada más, pero ves que alguien entra dentro de la cabaña.
Consigues:
- Daga [1 fuerza | +1 daño]
- 3 monedas
- Cuerda (te puede servir para construir algo)
¡CARTA URGENTE! - te entrega una carta en la mano.
Lo siento Gontrán, tengo mucho correo hoy, no podemos hablar. - acto seguido se va corriendo.
Rodea la cabaňa en busca de algo de interés y, a continuación, abre la carta.
Abres la carta y pone lo siguiente.
"Gontrán, ha llegado a mis oídos que has acabado con la vida de el hombre con el que debías hablar sin razón aparente y que después unos soldados de nuestro señor feudal han tenido que acabar contigo. Al principio no me lo creía, pero nuestro señor ha enseñado claramente tu arco.
Si estás muerto esta carta no te llegará obviamente, pero si no creo que está pasando algo con nuestro señor feudal. Aunque de momento no es buena idea que vuelvas a la ciudad. Ahora todos te ven como un traidor. Pero yo sé que no eres así, te gusta dialogar más que emplear el arco.
Deberías investigar alguna forma de entrar al castillo y descubrir que demonios está pasando. Y por el amor de Dios, pasa desapercibido. Espero que el mapa que te di te sea de utilidad y también espero que sigas vivo.
Cuidate."
No encuentras nada por los alrededores de la cabaña.
Guarda la carta y tantea el bosque para dar con alguna rama que le sirva para construirse un nuevo arco, valiéndose también de la cuerda y de la daga. «Tampoco estaría mal hacerse con algunas varillas para afilarlas y conseguir flechas».
Tras estar un rato buscando y buscando, logras encontrar ramas bastante buenas para la fabricación de un arco.
Juntas la cuerda, doblas un poco por aquí y por allá y te fabricas un arco.
Nada que envidiar de tu viejo arco, el cual ya estaba desgastado por el tiempo.
Objeto adquirido:
- Arco Improvisado [Fuerza 1 | Daño +2]
Objeto perdido:
- Cuerda
Busca algo de comida en la casa y, si no la hay, trata de cazar algo con el arco.
Ves un conejo por los alrededores, con tu arco lo logras cazar y con la daga lo desmontas.
Has obtenido:
- 1 Ración de comida.
- 1 piel de conejo.
Come algo y saca el mapa para orientarse y decidir adónde ir.
En el mapa solo tienes tu casa y la ciudad de Parmus, no se como planeas orientarte con eso xD.
Je, je. Vale. Pues entonces, una pregunta: Parmus está dominada por mi señor feudal, pero ¿está él allí? Y ¿he comido ya?
Si, has comido, de todos modos, avisaré a los jugadores Hambrientos de que deben comer, no te preocupes por eso. Además si te ausentas un día, no estás en la ciudad y llevas suficientes raciones de comida, te pondré el estado de Hambriento, te revisaré tu inventarió y te quitaré la ración y el estado negativo.
La ciudad digamos que se divide en 3 zonas, zona exterior de la muralla, viven los granjeros y la gente menos adinerada (no creo que tengas problemas si vas por esta zona, ya que las noticias no llegan hasta tan lejos, recalco el creo) zona interior de la muralla (gente adinerada y tal, como comerciantes) y Zona del castillo, que es la zona central, donde vive el señor feudal.
Gontrán decide partir hacia Pármus, y comenzar sus pesquisas en la zona extramuros.
Llegas a la zona exterior de Parmus, ves niños correteando, granjeros para arriba y para abajo y de vez en cuando algún que otro guardia patrullando, pero es fácil para ti esconderte solo de uno o dos.
Y ahora que estás ahí te preguntas ¿qué hacer? ¿podrás aclarar la situación y volver a tu vida normal?
Gontrán no sabe cómo sentirse. Tal vez este asunto se haya pergeñado a espaldas de su señor y alguien lo haya engañado, o tal vez sea éste el responsable. En cualquier caso, lo dan por muerto, y los vivos tienden a no ver aquello que no quieren ver, por ejemplo, a un muerto viviente. De todos modos, debe ocultarse. Para ello busca a algún labriego de su mismo tamaño con la intención de cambiarle las ropas. También desmonta el arco para hacerlo pasar por un bastón.
Encuentras un espantapájaros y le coges las ropas. Ahora pasarás bastante desapercibido, de todos modos si alguien se fija mucho en ti te reconocerá.
Además, ves algo que te llama la atención, hay un pequeño túnel que al parecer se usa como desagüe para la ciudad. Quien sabe, a lo mejor está conectado con el castillo. Pero no va a oler bien.
«Todo se puede poner peor», se dice Gontrán, mirando el túnel. Decide introducirse en él. Pero, primero, y aprovechando su incógnito, decide ir a la taberna y preguntar a los clientes si alguien ha visto a un tal Gontrán que le encargó un arco, y hablar con el posadero. No le cabe duda de que éste le reconocerá, pero ¿qué más da? Puede confiar en él, y debe preguntarle si ha averiguado algo, si se habla del asunto en la ciudad.
Tengo que crear una nueva escena para ti, por desgracia hasta mañana o el jueves no voy a poder. Lamento las molestias. Será continuación directa de esta.
Sin problema :)
Me espero, que seguro que vale la pena.