La ganadora de la partida ha sido Akiko que, junto a la propuesta ganadora que incitó, siempre ha tenido un as bajo la manga. Famo ha sido el elegido para realizar la cena de esta noche. El actor acata la decisión que previamente se habían apostado. Cuando se desplaza a la cocina va pensando en lo que va a cocinar, pero cuando llega observa que probablemente tenga la solución. Al acercarse a la encimera coge una serie de papeles rotos que se encuentran allí, detallándolos de una manera más óptima ve que se trata de una receta de tortilla de patatas.
Famo se fija en que hay huevos, cebolla y patatas en la nevera. La sonrisa que puso al visualizar la receta no era casualidad, la tortilla siempre está en su mente cuando hay un viaje y justo tienen los ingredientes adecuados. Pero en la mente de Famo aparece un problema... No sabe exactamente las cantidades a utilizar en el preparativo de la tortilla. Así que, no duda y se desplaza hacia el salón para coger el móvil y llamar a su abuela. “Ella seguro que me lo dice todo perfecto y así dejo sin palabras a estos tres”, piensa el actor mientras teclea la llamada. Acto seguido, se da cuenta de que no tiene cobertura y en ese justo momento se guarda el móvil en el bolsillo del pantalón. ¿Qué cantidad de cada ingrediente necesitaré? – piensa Famo para sus adentros.
Tirando un poco de astucia, apoyándose en la receta recién encontrada y recordando cómo podría hacerlo su abuela, logra conseguir hacer una tortilla de patatas más o menos decente. Al ponerla en la mesa no es recriminado por ninguno de los demás, al revés, le felicitan por la buena pinta que tiene. Para Famo esto es un éxito personal.