Partida Rol por web

Roderick que estaba leyendo la carta mientras Aryan escribía miró con el ceño fruncido a la chica y dijo:

- ¿Debo entender que habéis matado a Brian Piedra?

- ¿A quién? pregunto sin soltar la pluma volviéndome rápidamente a mi tio.

La joven reconocía vagamente el nombre por lo que el corazón le dio un vuelco y la sonrisa que tenía mientras escribía la carta desapareció.

Roderick se giró hacia su guardia personal.

- ¡Buscad a Brian Piedra por el campamento!- les ordenó. Ellos saludaron y salieron de la tienda rápidamente.- El servicio se encontró a un hombre asesinado en uno de los armarios, estaba degollado, el maestre le identificó...ese hombre era Bryan Piedra! Pero el maestre aseguraba que lo había visto partir con el resto de la comitiva cuando os fuisteis. No sé quién es la persona que viaja con vosotras, pero aquí pasa algo muy raro...

- ¡Oh! a la joven Aryan se le paró casi literalmente el corazón en aquel momento, un suspiro ahogado salió de su garganta mientras dejaba caer la pluma, que machaba de tinta sus ropas y el suelo.

Miró fijamente a su tio, primero había pena y algo de dolor, pero luego se volvió una mirada fría y seria: Era mi amigo. ¿Cómo han podido hacer algo así? Pagarán por ello.

Antes de que nadie más entrara en la tienda, relató a su tio lo que hasta ahora les había sucedido, con todo tipo de detalles, el soldado, el incendio, la lucha, la muerte del hombre... pero sobretodo, la charla que supuestamente había tenido la joven gemela con Brian Piedra, o mejor dicho su impostor.

- Alguien debía haber estudiado muy bien sus pasos... debéis reanudar la marcha hacia Desembarco y solucionar las sospechas que Jon Arryn pueda albergar sobre nuestra Casa. - dijo Roderick.

Al cabo de unos instantes entró uno de los guardia de la guardia personal de Roderick.

- No está en el campamento señor! Los soldados dicen que hace al menos unas horas que no lo han visto...

- Organizad una batida para encontrarlo, no debe estar lejos. Aryan, lo encontraremos y averiguaremos quién es. ¿Has terminado tu carta?- le dijo su tío.

En los últimos días, Darina había permanecido todas las horas al lado de su prima con la excusa de controlar el progreso de sus heridas y estar atenta a una posible infección pero la verdad era muy diferente; estaba preocupada por su estado anímico. Sabía que a la chica le había afectado matar al hombre y que estaba algo nerviosa, pero no la presionó para hablar del tema; simplemente iba a estar a su lado para apoyarla y darle la oportunidad de hablar si quería.

Fiel a su propósito, estaba con ella cuando llegó su tío Roderick, aliviando la preocupación de todos por él y por Lord Tilverton. Claro que las noticias que traía consigo no eran tan buenas.

- ¿Pero, cómo...? Si era idéntico a él, ¿cómo es posible?

Miró a Aryan con compasión, aunque como siempre aparentaba sobrellevar bien la situación. Quería consolar a su prima pero no era el mejor momento para hacerlo.

Aryan no podía contenerse, ya habían pasado muchas cosas. Se levantó de su asiento muy estresada y nerviosa. ¿Cómo puede estar ocurriendo esto? Era mi amigo. ¿Cómo pude no darme cuenta que no era él? ¡Maldita sea!

No paraba de moverse de un lado a otro de la tienda.

- No podemos dejar que sepan que estamos tan desprevenidos, sino se nos echarán todos encima. dijo mirando a su tio. Si creen que somos débiles, y que dejamos entrar a cualquiera en nuestras filas, no solo perderemos nuestro intento de aclarar las cosas con la Mano del Rey. La joven estaba muy seria, parecía como si en cuestión de días hubiera crecido y madurado como en años.

Cuando de nuevo se sentó en la silla para doblar y entregarle su carta, pareció tranquilizarse un poco: ¿Qué debemos hacer tío? Confío en ti.

Roderick parecía igual de desconcertado que las chicas.

- Será mejor que prosigáis el viaje, yo me quedaré con mis hombres por estas tierras y realizaremos una batida para encontrarlo. Aryan, envía un cuervo a tu hermano indicandole que no os puedo acompañar, si capturamos al asesino lo llevaré al castillo y será juzgado por la justicia del Señor del Valle y las leyes del Rey!- indicó su tío.

Aryan añade en la carta las palabras de su tio, a modo de postdata, y luego se la entrega. Por favor, haz que la envíen con un cuervo ahora mismo.

Mira a su prima, esperando si quiere añadir algo: ¿Qué opinas Darina? termina preguntándole cuando se acerca a ella, preocupada también, sabe que es fachada la cara de entereza que pone y sabe que está igual o más asustada que ella misma. Quería preguntarle si estaba bien, pero seguramente mentiría diciendo que sí para tranquilizar a todos. Como ella misma también haría.

Por un momento había tenido la esperanza de que Roderick las haría volver por su seguridad pero estaba claro que eso no era posible, sobretodo si el hecho de volver a casa implicaba la invasión de un ejército acusando a los Tilverton de traidores. Pero hubiera sido tan idílico poderse olvidar de que las reclamaban en Desembarco del Rey y que había un desconocido esperando casarse con ella o quizás incluso matarla...

Contuvo un suspiro de desánimo antes de hablar con su acostumbrada serenidad.

- Opino que es mejor no hacer esperar a la Mano - dicho esto, se acercó a su tío para darle un abrazo cariñoso -. Ten cuidado.

Querido Hermano,

Estoy deseando ver las flores que traerá padre. No me importa que no sean gladiolos. Nosotros continuamos bien el viaje. Ah y no te preocupes por el perro, no lo hemos confundido, pero tenía la rabia y lo hemos tenido que sacrificar. Mordió a Nym, y no podemos consentir que se la pegue a nadie. Nuestro tío también me trajo preciosas flores, estoy feliz por ello. A todas nos han encantado. Y hay un bosque cercano en el que también pude recoger flores silvestres para hacernos una corona. Aunque me pinché en el brazo izquierdo y Darina tuvo que vendarlo. Pero las coronas de flores quedaron preciosas. También hice una corona para Nym, jugueteó con ella hasta que terminó por comérsela. Espero saber noticias tuyas pronto. Dale besos a padre.

Tu hermana A.T.

PD. Parece que había otro perro rabioso, no sabemos cómo se ha colado entre los nuestros, pero sabemos cómo es. El tio Roderick va a buscarlo y sacrificarlo para que no le pegue la rabia a nadie. Nosotras hoy partimos de nuevo hacia Desembarco del Rey.

Aryan asintió ante las palabras de su prima, y le sonrió. Gracias pensó, gracias por estar tan entera y estar de nuestro lado.

También fue a abrazar a su tío, al que le dijo al oido, menos mal que me enseñaste unos trucos con el Estilete. Ten cuidado y cuida de Will.

Se despidieron y la comitiva reanudó el viaje. Las dos chicas hablaron durante mucho rato hasta que se quedaron dormidas a causa del traqueteo y la luz agradable que entraba en el carruaje, a medida que se aproximaban a Desembarco del Rey la temperatura iba cambiando y cada vez era más agradable.

Aryan soñó, en su sueño aparecía un oso en las montañas, el oso intentaba pescar los peces que saltaban río arriba contracorriente, pero de pronto un cuervo cruzó el bosque y atacó al oso con sus garras dejandole ciego. El oso daba zarpazos al aire intentando derribar al cuervo y gritando de dolor, pero de pronto sus gritos eran los gritos de mucha gente y el entrechocar de cientos de espadas en un combate.

Aryan se despertó, observó que aún estaba en el carruaje junto a su madre y a su prima y por la ventana de la puerta pudo ver que estaban llegando a su destino, allí como un coloso se alzaba la Fortaleza Roja enmarcada en lo que era una gran muralla y toda la ciudad de Desembarco del Rey.

*** Fin del capítulo 7 ***