Estais de camino ya, pues hace rato que ha amanecido. Las etapas son cortas y el paisaje asemeja a este durante todo el camino.
Buen momento si os place para rolear y hablar entre vosotros.
el lunes a mas tardar, y si no decis lo contrario antes, sigo
Cabalgo con gusto bajo los rayos del sol. Es gratificante porque es justo ese momento del año en que los rastros del invierno van desapareciendo y la luz vuelve poco a poco a adueñarse del paisaje. En algún momento me animo a silbar una tonadilla de las tierras donde crecí. Me siento contento y confiado, a penas pienso en los rufianes sajones. Ahora me apetece disfrutar el viaje. La misión, pese a ser portadores de malas nuevas, no me parece complicada.
Primo Gwilherm, ¿habéis estado antes en Logres?¿será complicado entregar nuestro mensaje? No conozco aún grandes cortes y casi que me angustia la idea de toparme con un muro burocrático que no pueda echar abajo a patadas o mandobles... añado bromeando, pero lo cierto es que me preocupa saber a quién y cuándo debemos hablar para que nuestro mensaje sea tenido en cuenta. No quisiera fallarle al conde y que su voz no llegase donde debe.
Tras el largo y frío invierno, la pequeña comitiva se dirige con ánimos renovados, hacía London primer destino. Hasta llegar a Logres, aún les quedaban leguas por recorrer y castillos que visitar.
La marcha era buena y los hombres estaban contentos, con los primero rayos de sol que calentaban la mañana. Todos, menos uno. Sir Gwilherm, estaba viviendo un momento agridulce, tras la muerte de su amada esposa y el reciente nacimiento de su primer hijo varón. Bogdan, "Dado por Dios". Se quedó al cuidado de Lady Crislan, así como la administración de los señoríos en ausencia del Señor de Malderoi.
Todos le decían que tenía suerte, pues era joven, fuerte y sano. Y con un futuro prometedor. En seguida conseguiría una nueva esposa. Pero en esa fatídica y hermosa noche, algo dentro del caballero murió con su esposa.
Desde entonces, dedicó mas tiempo aún en sus oraciones. Se mostraba ligeramente taciturno, cuando no se encontraba junto a su hijo. Y aún con éste en brazos, su mirada alcanzaba a ver en los ojos de Bogdan, algo que sólo a él se le revelaba.
Mas como Señor y como vasallo del Conde Setzer, debía ante poner el deber a lo personal.
_ Sargentos!! Den instrucciones a los hombres, que sólo beberán vino aguado o cerveza ligera cuando hagamos noche en los señoríos. La embriaguez y la descortesía serán castigados con vara._ Su voz sonaba demasiado fuerte, tanto que las órdenes de los sargentos eran prácticamente innecesarias.
_ SOMOS HOMBRES DE MALDEROI Y REPRESENTAMOS AL CONDADO DE HERTFORD!! NO SUCIOS Y APESTOSOS SAJONES!! Compórtense como tal_ Tras la palabras a sus hombres, su primo se dispuso a su altura y juntos comenzaron una conversación.
_ Si, estuve hace ya muchos inviernos._ Al pronunciar la última palabra no pudo evitar hacer una breve pausa. _ Fui con mi familia, pero era demasiado pequeño para conocer los designios de aquel viaje. Tengo buenos recuerdos, aunque difusos, así como al despertar de un gran sueño. Buena gente, honorable y de confianza. Mas el tiempo cambia a las personas, tan sólo Dios en su infinita sabiduría y magnificencia conoce los designios de nuestro destino._ Su semblante cambió, seguro, decidido y con una ligera sonrisa.
_ Disfrutemos pues, de esta mañana primaveral y de una buena conversación. Así que, dime primo. ¿Qué tal son las mozas del señorío? los hombres hablan y yo tengo oídos._ Soltó, culminando una gran carcajada.
-muy sanas y lozanas como todo lo que crece en vuestras tierras, por lo que he visto. Pero yo me he retirado de esos cotos de caza. Un caballero necesita una buena esposa, mis tiempos de aventuras de alcoba tocan a su fin. No sé si lo lograré, pero por ahora me modero en el tema de las damas. Ahora soy caballero, y me temo que una mala e injusta fama de mujeriego pueda estropear mi buen nombre y el honor de futuras esposas. Por ello haremos mejor al mantenernos en los caminos, porque con la primavera ya se sabe...y las tabernas esconden sirenas que me conducirían al naufragio. La naturaleza pide, más mis votos me encadenan... por ahora.
Estais de camino ya, pues hace rato Estais de camino ya, pues hace rato que ha amanecido. Las etapas son cortas y el paisaje asemeja a este durante todo el camino.
Llegáis y pasáis la noche en compañía de los caballeros, que sin gran ostentación ejercen la hospitalidad con vosotros. Entregáis la documentación y habláis de lo humano y lo divino.
Siempre os daré una noticia ( bastante cierta)o rumor( bastante inexacto). Además si sacáis éxitos en vuestras tiradas de intrigar sacareis otras informaciones.
no se si me explico.
Por si os habiais quedado con las ganas de rolear.
a me direis que tal os parece este sistema.
Converso e intercambio noticias con los caballeros de buen grado. Me intereso especialmente por las cosechas y los ganados, intentando hacerme una idea de lo bueno que esperan que sea el año. Por supuesto les pregunto sobre la presencia sajona u otras amenazas... Pero me guardo de prodigarme demasiado, aún me siento un recién llegado con costumbres un poco plebeyas...así que confío e imito las formas más experimentadas de mi primo.
Tirada oculta
Motivo: Intrigar
Tirada: 1d20
Dificultad: 10-
Resultado: 14 (Fracaso)
Tirada oculta
Motivo: Cultura popular
Tirada: 1d20
Dificultad: 8-
Resultado: 11 (Fracaso)
He tirado por cultura popular, si lo ves justificado me dices. Si no, descarta la tirada.
Tras degustar la cena, la cuál fue amenizada por conversaciones sobre la fertilidad de sus tierras y la presencia del invasor. Los caballeros se reunieron junto a un fuego. Ya echada la noche las voces y las risas de los hombres tornaban a menguar. Momento en que Sir Gwilherm, pidió permiso para narrar una historia, un suceso reciente y personal. Hasta entonces, se había mantenido cordial pero parco en palabras, dejando el peso de las conversaciones a su primo Walter.
Se le daba bien confraternizar con desconocidos. Su personalidad enérgica, segura y honesta, hacía que la gente se sintiera relajada en su presencia (o al menos, con los de Malderoi). Así pues, su iniciativa fue bien recogida y comenzó con su relato. Había estado practicando en el invierno, con ayuda de su amada esposa. En él, comenzó contando las hazañas de ambos primos y Sir Cimrud en el torneo de hace años, adornando las escenas de lucha como si de gestas se trataran. Para terminar con la escaramuza durante la patrulla en el Condado de Hertford, usando palabras elaboradas y precisas, dándole cierta rima en la acción.
Para cuando terminó, los caballeros estaban ansiosos por saber si en verdad les superaban en 3 a 1, de cuantos soldados estaba compuesta la comitiva, y cosas así. A lo que el Señor de Malderoi respondió sin tapujos, para así hacer también alguna pregunta de interés. Cuáles eran sus defensas ante un posible ataque sajón, de cuántos hombres disponía, cuáles serían sus posibles aliados si sufrieran un asedio.
Motivo: Oratoria
Tirada: 1d20
Dificultad: 11-
Resultado: 8 (Exito)
Motivo: Intrigar
Tirada: 1d20
Dificultad: 11-
Resultado: 4 (Exito)
Tirada oculta
Motivo: Intrigar
Tirada: 1d20
Dificultad: 11-
Resultado: 1 (Exito)
Perdón, no me di cuenta en la primera tirada de intriga que no estaba oculta. La otra no especificas si hay que hacerla oculta, así que la dejo como está.
P.D: Menuda empanada llevo con las tiradas
Sir Gwilherm de Malderoi: en este caso tomare la tirada oculta.
Sir Walter de Lickey Hill: perfectamente cultura popular vale. con que hagais oculta la de intrigar vale, la otra podeis hacerla abierta, puesto que sabeis tras la conversación si hay o no frutos. al final os daré las marcas y gloria de todo vuestro periplo.
Sir Gwilherm de Malderoi: marca en intrigar y en oratoria +2d10.
Sir Walter de Lickey Hill fallo ambas.
si sacan mas de una tirada de intrigar en vez de +1d10, se suman directamente el 10
Tras compartir vino y asado en justa camaraderia entre los caballeros del castillo que os acoge hospitalariamente, la conversación cordial con los allá residentes, os hace llevar vuestra conversación, por este tema:
Sin mucho más que añadir, y alargando la charla todo lo sensatamente necesario, os recogeis a descansar ya prepararos para el nuevo dia de viaje.
añadis algo si quereis para cerrar la escena.