Aquí hablaremos tú y yo de los últimos detalles para completar tu llegada a Berlín.
También definiremos tus contactos, conocidos, etc...
Te han informado de que la Capilla Tremere de Berlín está regida por Maxwell Ldescu, un astuto y viejo Tremere que rendía cuentas puntualmente a Viena. En la capital alemana había muchas cosas por investigar, y por descubrir. Muchos elementos mágicos, fantasmas y objetos de poder. Se rumoreaba que hasta la mismísima Biblioteca perdida de Hitler estaba oculta en algún lugar de la ciudad. Sin embargo las cosas no eran fáciles en Berlín. 2 Príncipes pugnaban por el poder desde que finalizó la segunda guerra mundial, y a los tremere no les habían ido bien las cosas. Maxwell tenía las cosas bien organizadas para el auge de los tremere y estaba todo meticulasemente planeado. Para uno de los Príncipes: Gustav, el primogénito tremere en quien confiaba para todos los asuntos mágicos era: Heinrich Himmler (chiquillo de Maxwell), y para el otro Príncipe: Wilhelm, el primogénito tremere en quién debía confiar era Maxwell.
Ganara quien ganara en la guerra los tremere saldrían beneficiados y fortalecidos, habiendo hecho creer a los gobernantes que su influencia había sido imprescindible para lograr el resultado final.
El problema es que Maxwell tenía muchos asuntos que atender y que investigar y en Berlín no quedaban más tremere. Estaban Maxwell, Heinrich, y un aprendiz de Maxwell, que hacía poco había sufrido un fatal accidente. Maxwell estaba deseoso de que le mandaran nuevos aprendices desde Viena, gente que se encargara de mucho de su trabajo de laboratorio, algún novato deseoso de aprender y quitarle trabajo al viejo vampiro, o sencillamente que salieran a buscar objetos e información relevantes para Maxwell.
Tu sire te explicó que con el fatal accidente del último aprendiz de Maxwell, Viena había decidido mandar un par de novatos para fortalecer a los tremere en Berlín, ayudar a Maxwell y mejorar el status del clan.
Tienes que decidir cómo quieres ir a Berlín, de qué ciudad vienes, y tenemos que hablar de tu sire.