Partida Rol por web

El ataque de Rachet en su nueva forma es demoledora, sus fauces se cierran con fuerza contra el cuello de su victima desgarrandolo por completo. Cuando la Osenda Rachet suelta su presa, el cuerpo sin vida de este cae al suelo.

El oscuro guerrero suelta la tensa cuerda del arco al tiempo que ve la jabalina surcar el aire, la flecha impacta en el torso del clerigo con un sordo chasquido seguido del quejido del herido... único indicio ante el que Marçao sonríe pues había desviado su atención para recoger otra flecha y tensar de nuevo el arco Sahsnôt, Garland adelante el caos ya esta hecho... Al final parece que tendremos ayuda de lo más inesperada, ese enorme oso seguro que será un gran punto a favor...

Al tiempo que os enzarzais en un sangriento combate, veis aparecer desde el fondo de la caverna una jabalina que roza el brazo del Clerigo causandole una leve herida y otra flecha que se le clava en la clavicula izquierda.

Al mirar hacia el origen de las flechas descubris a los gigantes que habeis conocido la noche anterior... Los dos Oshar, el guerrero de piel negra y la rubia de aspecto noble.

Garland se aproxima al hombre que esté más proximo, y con toda su fuerza le pega un hachazo en el pecho.

Cuando todo se desencadenó Yorash aún se estaba colocando para obtener un mejor lugar de disparo. De pronto apareció aquella enorme criatura peluda con zarpas tan grandes como las cabezas de sus "víctimas". Cogió una de las piedras extrañas que había adquirido y la tanteó levantándola del suelo. Innecesaria, también podría dañar a los que iban con él. La dejó a un lado y con la mayor rapidez que pudo colocó una flecha y tensó apuntando al que podía parece el líder de aquellos hombres.

Sahsnôt se lanza a la carga junto con el gigante, buscando realizar un ataque rápido y mortal. Cuanto antes terminen con ellos, más posibilidades de sacar de alli a aquellos muchachos tendrían.

Una vez suelto de la presa, me desplazo hacia una de las antorchas, para usarla como arma.

Miro sorprendido la entrada de mis compañeros de taberna y pienso: ¿no podrían haber llegado antes?

 El amargo sabor de la sangre esta en mi boca, trato de escupir en mi forma actual, sin embargo es difícil, miro al que acaba de caer un poco perturbada… es la primera vez que mato  a alguien. Hago un gruñido un poco satisfecha por estar libre, miro que Olon se ha liberado lo cual me alegra. Debo recuperar mi vara, no me importa luchar para conseguirlo… a pesar de estar muy débil, No puedo perderla.

La caverna se llena de gritos de terror y miedo cuando los congregados al rito ven que no solo son atacados por un Oso furioso sino tambien por 4 guerreros sedientes de sangre, estos intentan correr desesperados de un lado a otro, intentando alejarse lo mas rapido posible de vosotros... dos de ellos caen envueltos en sangre tras ser alcanzados por las armas de Garland y Sahsnot. Yorash no tiene tanta suerte y su flecha, aunque si alcanza al lider religioso, apenas si consigue hacerle un pequeño rasguño.

Una de las figuras se acerca al clerigo para intentar ayudarlo, el cual al ser alcanzado se habia tirado tras el altar... las manos de este se posan sobre las de su discipulo y este, sin previo aviso, comienza a chillar de dolor... al cabo de unos segundos el clerigo se alza totalmente recuperado, el cuerpo del discipulo en el suelo, sin un apice de vida.

De entre la muchedumbre, salen 5 figuras en direccion a los gigantes (Marcao, Garland, Breielssa y Sahsnot) pero estos a diferencia del resto, sin portan armas. (no llegaran todavia este round)

De los cuatro que arrastraban a Yorash, solo quedan con vida 2... estos desenfundan tambien sus armas y atacan a Rachet en su forma de oso y a Olonheint.

Aunque estos no son unos consumados guerreros, si son lo suficientemente buenos como para poder alcanzar sin dificultades a dos guerreros (en este caso un guerrero y una osa) aun bajo los efectos de las drogas (recordar que teneis penalizadores tambien a la Defenas... Realmente a todo)

Cogiendo la antorcha de la pared golpeo al guardia que me ataca, intentando acercarle el fuego a la cara.

Siento que me han lanzado una fecha. El dolor invade mi cuerpo. Y  establezco un quejido en mi forma animal. Miro que Olonheint ataca a uno, yo voy por el otro de mis atacantes, herida corro hacia ellos, dispuesta a morder.