Sin embargo, Matei seguía pareciendo tener controlada la situción: Perfecto, entonces el Principe no tendra problema en explicarme porque alguien tan poderoso y capaz como él necesita recurrir al chantaje, la extorsión y en definitiva, medios tan poco honorables para hacerse con una esclava de lo más corriente.- dijo con seriedad con una mano aun apoyada en el pomo de la espada y la otra colgando del cinturón con un pulgar por dentro del mismo- entre tanto, la seguridad de esta esclava es mi responsabilidad y se viene con nosotros.
Me quedo un tanto sorprendido ante la actitud del vampiro que tiene pinta de ser un hombre de honor.
A ver, realmente no trabajo para el príncipe de Buda-Pest, sino para alguien mucho más poderoso e influyente, y mis ordenes son llevarle esa mujer al príncipe, así que si no quereis tener problema scon mi patrón, lo más fácil es que me la entregueis y os marcheis.
Los labios de Matei se curvaron en una sonrisa segura y divertida:
-Así que además de ser un hombre carente de honor, sois un mísero falaz...no perderemos más tiempo hablando con vos, y si acaso deseáis mantener vuestra amenza, no tendré problema en hablar con el Príncipe esta misma noche sobre cómo uno de los vástagos afincados en Buda conspiran a sus espaldas; si el príncipe deseara poseer a esta mujer, ya la tendría, y no creo que necesite la mediación de terceros para ello.- dejó caer la no tan sutil amenaza, guardando silencio un momento para que calara bien en Roland- Claro que también podríamos ignorar este incidente si me decís quien es esta esclava, para quién trabajáis en realidad y porqué esta chica es tan importante. Os doy mi palabra de que si contestáis estas sencillas preguntas, yo olvidaré todo esto delante del Príncipe.
No pudo evitar darse cuenta de que curiosamente Lazar había decidido guardar silencio. Tomó nota mental de ello, la imagen fantasiosa de Lazar en su mente empezaba a emborronarse conforme era suplantada por sus actos y sus palabras.
-Con una simple gota de sangre ya puedes provocar su servidumbre sin llegar a ser ghoul. Por lo cual no son necesarios esos tres días. E igualmente hay que mantenerse las espaldas cubiertas ¿Quien sabe? A lo mejor si a lo mejor no, pero siempre precavidos, Ramirez-
Pronunciaba sonriendo ladino mientras observaba hacia los lados, no parecía haber mucho movimiento, todo demasiado tranquilo
¿Alguien mucho más poderoso que el príncipe? aquello acababa de picar mi curiosidad justo a tiempo, porqué el rollo de si la esclava es tuya o mía empezaba a hacerse aburrido.
- Claro, si tan importante es tu patrón y tanto interesa cerrar el trato ¿por qué no nos dices el nombre de tu amo?
mi olfato para los secretos era de lo más refinado, y aun que sospechaba que aquel hombre se guardaría el nombre para sus adentros, lancé la pregunta por si sonaban campanas.
En unos pocos minutos, Ramirez y Vladimir, observan como el transbordador empieza a volver, quedaría poco tiempo para poder proseguir el camino.
Al mismo tiempo, llegan Markuz y Teodor junto a ellos.
Observo a los dos hombres, que parece que ya no tengo ninguna oportunidad contra ellos.
Bien, podeis quedarosla, no voy a seguir discutiendo con vosotros.
Tras eso me marcho de la zona.
--Parece que finalmente cesaron de esperar.-- comenta al verlos.
Sonrio mientras nos acercamos, concediendo la victoria por esta vez a Ramírez.
-Habia algo que no me acababa de encajar,
finalmente todo parecía normal y debo otorgaros la razón, pues la tenéis. Nuestros compañeros no han regresado por allí, así que será mejor acudir a la cita.
--Bueno, finalmente irme tampoco ha sido de gran ayuda, ya que perdí el bote por poco y me ha tocado esperar.-- se encoje de hombros
Markus sonrío a las palabras de Teodor y este pudo observar también como sus ojos brillaban con el deseo y el anhelo al hablar de los libros.
- Me sentiría muy honrado de que depositara en mi su confianza para cuidar de sus manuscritos o que tuviera a bien compartirlos conmigo para realizar una copia. – acompañando sus palabras de una leve inclinación de cabeza en señal de respeto – Por supuesto estaré encantado devolver su confianza con confianza y granjearle acceso a los volúmenes que reúna con los siglos. La mejor forma de crecer es mediante fuertes alianzas estratégicas.
Pudieron oír Ramírez y Vladimir que Markus contestaba a Teodor, probablemente en respuesta a una conversación previa que venían manteniendo por el camino.
Una vez llegaron a la altura de estos en el embarcadero, Markus asintió levemente a las palabras de Teodor, como corroborándolas.
- A mi me pareció también curioso que aquel noble siguiera poco después la dirección de la esclava y nuestros nuevos amigos. – observó el transbordador regresando – Esperemos que lleguen antes de que el barquero deje de realizar su servicio por la noche…
Me encojo de hombros y sonrío mientras el tipo se larga "efectivamente, ni una palabra del misterioso patrón. tengo una sospecha..."
Entonces apoyándome con un brazo por detrás de los hombros de la esclava con soberbio descaro, miro a Matei y le digo.
- Eres un hacha haciendo amigos, eh?
e incorporándome de nuevo.
- Venga vamos.
Mi única despedida con la esclava es una sonora palmada en el culo, y sin esperar respuesta de Matei, me doy la vuelta y me encamino hacia la calle principal donde me separé del resto de compañeros. Tenía una importante reunión a la que acudir y ya me había entretenido bastante.
Matei se gira sobre sus talones para mirar a Lazar antes de que se vaya. Su gesto parece decepcionado; esperaba mas honor de un vástago con el que iba a compartir camino. Tendría que vigilarle de ahora en adelante:
-No he venido a hacer amigos...no se a qué has venido tu.- le responde mientras el vastago le da la espalda, no le importa si le ha oido o no.
Sin mas se gira hacia la esclava para tranquilizarla:
-Estais a salvo, yo la protegeré, lo juro por mi honor. Mi nombre es Matei Nádasdy, para servirla.
Por fin el noble me había dejado en paz, gracias a la aparición del que se ha presentado como Matei. Antes de que su acompañante consiga golpearme en el trasero, doy un paso lateral, apartándome de su trayectoria.
Mi nombe es Sherazinha Basarav, mi señor. Gracias por haberme salvado de los esclavistas y de ese hombre. Os acompañaré si lo deseias.
Digo agradecida.
Tras otros minutos de espera, veis como el transbordador llega a las orillas del Danubio y empezais a montar en el barco. Justo en ese momento, llegan Lazar y Matei, acompañados por la esclava, la cual o habían tomado para ellos, o habían liberado.
Finalmente todos subíis al barco y este empieza a navegar hacia el otro lado del rio, en la ciudad de Buda.
Escena I: Llegada FIN
Os dejo esto abierto por si quereis conversar. Mañana a la noche, empezamos la Escena II.
Al ver llegar a Lazar y Matei, Markus les dirigió una mirada interrogativa y luego la desvió a la esclava que traían consigo, tras lo que esperó pacientemente a que sus compañeros les relataran de muto propio su pequeña aventura y su resolución.
- Oh... no os lo creeréis, - digo en tono afectado, simulando una emoción desproporcionada .- ¡Ha sido como un cuento de hadas! ¡Já!
Apoyo una mano en el hombro de Markus, como quién se prepara para contarle la anécdota de su vida.
- Un malvado maleante se disponía a secuestrar a la hermosa princesa rumana y cuando ella ya solo podía suplicar por su vida... ¡Tachán! aparece de entre las tinieblas el valiente Matei: "Esta joven es una alma inocente que lo ha arriesgado todo para escapar..."
Digo poniendo una voz grave, imitando las palabras de Matei.
En este momento miro a mi compañero Matei con una sonrisa, buscando su complicidad.
- Su nobleza y honor se mantuvieron firmes hasta el último momento, dispuesto a defender la chica a capa y espada; hasta que logró que el maleante se fuera con la cola entre piernas. ¡Un genuino acto de heroicidad! ¡Un auténtico caballero!
gesticulo con el puño cerrado, ensalzando la figura del otro vástago.
- ...solo que el maleante era el senescal de la ciudad, y la princesa una esclava fugitiva.
Añado la coletilla con sorna, como si no tuviera importancia alguna, mientras suelto el hombro de Markus y me separo, dando la historia por concluida y disponiéndome a disfrutar del resto del viaje.
Markus escucha con atención la narración de Lazar, como si realmente se tratara de la anécdota de su vida. Por unos minutos parece que no haya nada más para él que su interlocutor.
Conforme va avanzando en su narración, va dejando ver una sonrisa divertida y amable, puede que hasta algo cómplice; un gesto totalmente adecuado a la narración.
Cuando hace su apostilla final aclarando quien era el senescal de la ciudad Markus, enarca las cejas levemente a la par que abre un poco los ojos, pero por lo demás evita cambiar su expresión más.
Al cabo replica con calma.
- Me alegro de que halláis entablado ya amistad con la autoridad local. Estoy seguro de que será algo que agradecer en las noches venideras. – hace una pausa – Por alguna casualidad de la vida, dicho mal… senescal, ¿sería el rico noble que vimos destacar entre la multitud en la plaza? – pregunta con un ápice de inocencia, que podéis intuir fingida, en su voz.
A Ramírez no parece impresionale, ni a decir verdad importarle en demasía el relato del Senescal ni de la esclava, y simplemente pregunta --¿Y que pensáis hacer con la hu... con la joven? Os recuerdo que tenemos una reunión privada-- dice en referencia a los sires y el patron, reunión entre vástagos, a tratar temas de vástagos donde una humana no sería bien recibido por mas de un Vástago.
Observo a la joven aprovechando la cercanía, sin añadir nada a lo ya comentado.
Desde luego el proceso del rescate no había salido demasiado mal, ni demasiado bien.
-Disgustar a la autoridad no parece demasiado acertado, incluso cuando aparece en forma de mortal, si autoridad emana de algún otro...