una gran construcción, situada a las afueras de la ciudad. Destacando un poco entre el arbolado y natural paisaje que la rodea.
Bueeeeno, heeemos llegado. - Anuncia Hoaru con cierto tono alegre en su pasimónica voz.
Grrrr... - Gruñe Samuel como descontento.
El tío no podía ser un poco más discreto... Noooooo... Piensa. ¡Nunca entenderé a los magos, están todos mal de la olla!
-A sido un paseo muy agradable.-comenta indiferente Ryuk observando la "humilde morada"
Ciertamente a sido un agradable paseo, espero que ese tal Roderick nos pueda ayudar.
Camina agarrando su espada envuelta en vendas, se ajusta las gafas de sol con la mano que le queda libre.
Pues vamos alla!
Alastor acompaña silenciosamente a sus compañeros. Su gran espada Rose en la espalda y su mirada decidida al frente, muestran que esta completamente concentrado.
¿NO ES UN POCO DESCARADA LA CASA? - pregunto abiertamente aunque sin darle mucha importancia... podria ser un excentrico o simplemente un mago poderoso que se puede permitir el lujo de poner un cartel luminoso que ponga "Mago"
Demasiada. - Contesta a VN. - A esa clase de personas el poder acaba subiéndoseles a la cabeza, hasta que se atragantan con él y se vuelven así de zumbados. - Le comenta en voz baja a éste en especial.
Veeenga, va, ya sabes cómo es Rod-Rod. - Comenta Hoaru. - A mi me gusta. - Añade, en un dudoso tono burlesco.
Reconozco que cada vez siento mas intriga por conocer a ese hombre, ya sea para bien o para mal jaja -Dice con un tono alegre y bastante despreocupado
Suspiro con desden al ver tal construccion.
Este tio tiene la discreción en el culo...donde va con este castillo?
Ehem, vamos? pregunto al grupo.
Al acercaros a la puerta, Hoaru da unos toques a la misma. Se queda esperando con cara de pasmarote, hasta que Samuel pulsa un pequeño interruptor a modo de timbre que había junto a la puerta. Acción a la cual Hoaru no presta atención.
Por un pequeño altavoz situado bajo el mismo interruptor se puede oír una voz que reza:
Adelante.
Y la puerta se abre con un leve movimiento.
Al entrar dentro no veis más que un gran pasillo en la penumbra. El cual no captáis bien de primeras por el radical paso de luz a oscuridad.
En ese momento, cuando todos entráis, la puerta se cierra repentinamente y os quedáis totalmente a oscuras, engullidos por las tinieblas.
Y, la misma voz, se vuelve a oír.
Bienvenidos a mi humilde morada, señores, y señorita. - Lavoz es tan grave que resuena en toda la estancia en la que os encontráis, la cual se ilumina súbitamente.
En lo alto de la escalera, está un hombre corpulento y bien vestido, con grandes gafas adornando su cara cuadrada, apoyado con sus potentes y grandes brazos sobre la baranda que da al centro del recibidor.
El hombre so mira sonriente. Bel brillo de sus redondas gafas provocado por la luz no os permite ver su mirada.
Asombrado por tal enigmática presencia digo con dificultad:
-Encantado...De no tenerte como padre jajaja
Me acerco a mis compañeros y me pongo lo más alejado posible de aquel extraño tipejo.
Me molan todas esas fotos, de donde sacas tanto material?
Me quedo mirando todo el espectaculo desplegado por este hombre.
Se nota que le gusta hacer entradas dramaticas.
Pienso para mi, mientras devuelvo el saludo de la voz grave con un gesto de cabeza hacia el hombre. No me siento muy a gusto con los magos, pero trato de que no se note demasiado.
Ryuk observa con atención el lugar y al tal ROd-Rod...
-Impresionante morada señor Róderick. Me llamo Ryuk Harusabe-mientras dice esto se saca el paquete de cigarrillos y dice.-¿Le importa si fumo?-
Menudo mago, ni un pavo real "enseñaría tanto las plumas"...
A mi no me importa mientras me des uno. -Responde a Ryuk, casi quitandole un cigarro antes de que responda.
Encantada señor, soy Dhalia, creo que tenemos cosas de las que hablar. -Dice sonriendo, sacandose las gafas de sol con la mano libre.
Agradecería que se abstuvieran de fumar, señores. - Dice Róderick mientras empieza a descender por una de las largas y limpias escaleras. - Al menos aquí...
Al llegar abajo, pasa su mirada, escondida por las gafas, por Hoaru y Samuel, para acabar en Hoaru.
Supongo que son tus ``reclutas´´. - Le dice con voz pausada y gravemente sonora. - Y también supongo que vendréis para ver cómo marchan las cosas...