Finalmente quedó Tetsuo Nakima solo, junto al soplón quién ya llevaba demasiado tiempo inconsciente. Se había comprometido a liquidarlo y después dejar todo aquello limpio. Un trabajillo que demandaba delicadeza pues una metida de pata y le dejarían con el culo al aire.
Me he tomado la libertad de hacer un juego de palabras, el yakitori es un tipo de plato japonés cuya traducción es pollo frito, así que me ha parecido gracioso llamar a este acto, Yakinezumi o rata frita.
Como comentamos en el offtopic, puedes hacer un movimiento buscando un contacto para ver por cuánto te hace el trabajito de la limpieza, o haciendo una tirada+encantador para ver si puedes llamar a un conocido para que te ayude con el marrón.
Tetsuo se situó detrás de la silla de Nezumi y envolvió la cabeza de su víctima con una bolsa de plástico. Todavía seguía inconsciente pero el cuerpo reaccionó con un par de espasmos ante la falta de oxígeno. Mantuvo la presa el tiempo suficiente como para asegurarse de que aquel pobre desgraciado había muerto. No le gustaba tener que matar a gente pero tampoco sentía ningún remordimiento: no era nada personal, sólo negocios. Él no tenía la culpa de las malas decisiones de Nezumi, sólo tenía que limpiar los destrozos.
Lo cual le recordó su segunda tarea. Antes de llevar al ratón a los cerdos debía trocearlo. Extendió plásticos por toda la trastienda y fue a por su bolsa de herramientas al coche. De forma concienzuda y con extremo cuidado para no salpicar fuera de los plásticos fue serrando los miembros del cadáver. La cabeza era siempre la parte más desagradable por lo que Tetsuo puso la cara del cadáver contra el suelo. A veces abrían los ojos y era perturbador.
Una hora más tarde estaba todo empaquetado en el plástico y, a su vez, en una mochila amplia Adidas. Lavó con cuidado las herramientas y las guardó de nuevo en la bolsa de trabajo. Luego las tiraría al río, como tantas otras veces. Tras llevar todo al maletero regresó a la trastienda para asegurarse de que no quedaba nada fuera de lugar. En una ocasión había saltado un globo ocular que encontró una semana después en la boca de una rata. La situación había sido graciosa pero no se hubiera reído tanto si la policía hubiera registrado aquel cobertizo cuando desapareció el pederasta que la familia le había encargado sacar de circulación. Que absurdo le parecía aquello: la policía habría hecho lo mismo que él pero con la ley de su parte. ¡En el fondo les ahorraba trabajo!
Antes de subir al coche hizo su primera llamada. Era conveniente avisar a Tororo de que iba a visitarlo.
—Soy Tetsuo. Te llevo pienso.
Hubo un silencio al otro lado de la línea. Tororo siempre meditaba las respuestas, aunque fueran tan simples como la que le iba a dar:
—Vale. Llegas a tiempo. Aún no han comido.
Colgó el teléfono. Un problema menos. Mientras se sentaba en al asiento de conductor decidió realizar la segunda llamada. Para su sorpresa una voz femenina contestó al móvil de Hideki:
—¿Diga?
—Quiero hablar con Hideki.
—Mira que bien. Yo también quiero saber donde está ese capullo. ¿Quién eres?
—Tienes su móvil ¿no sabes dónde está?— contestó Tetsuo esquivando la pregunta.
—Desapareció hace un par de días. Si lo ves dile que yo no espero más, pillo mis cosas y me largo. Ah, y que le jodan. Dile que le jodan si está con otra.— dudó un momento —Y que le jodan también si se ha dejado matar. Maldito capullo.
La mujer rompió a llorar. Tetsuo colgó el teléfono. No era su problema. Lo único malo es que no tendrían refuerzos, pero tampoco era tan grave. Todavía no sabían a que se iban a enfrentar.
Arrancó el coche. Los cerdos esperaban su pienso.
Motivo: Mercado negro
Tirada: 2d6
Dificultad: 7+
Resultado: 9(+1)=10 (Exito) [3, 6]
Motivo: Mercado negro (Hideki)
Tirada: 2d6
Dificultad: 7+
Resultado: 4(+1)=5 (Fracaso) [2, 2]
—Supongo que me has traído lo mismo de siempre —dijo Tororo-san mientras observaba cómo los gorrinos se abalanzaban sobre los restos. Se habían afanado los dos en echar rápidamente los restos de la difunta rata al corral donde el ganadero tenía estabulada a su piara y estaban en aquel momento retirándose los delantales que protegían su ropa de las manchas de sangre del finado.
Tororo tenía su finca a unos 20 minutos del centro de Osaka, en dirección a Kobe, era la tercera generación dedicada al negocio de la ganadería. El plato fuerte de la familia era el Wagyu con denominación de origen, pero hacía tiempo que comprobó en sus propias carnes que la suerte no siempre acompañaba y una peste podía arruinar a la familia. Tocó pedir favores y éstos fueron cobrados con el tiempo. Por eso contaba desde hacía algunos años con una pequeña remesa de ganadería porcina que certificaba de cuando en cuando unas buenas cabezas de gorrinos además de un sobresueldo como el que estaba a punto de ganar.
—Hace tiempo que no te veía, Tetsuo-san. Supongo que los negocios marchan bien. —Certificó mientras se frotaba las manos a la espera del botín —. Si no quieres nada de lo que llevaba el fiambre, lo quemaré como siempre —añadió señalando un barril metálico que acostumbraba a guardar en el exterior.
¡Madre mía te lo has guisao y te lo has comío! No te he dado pie a más porque no sé si tenías ya intención de unirte con los demás al fracasar esa ronda de contactos, llamarles para informarles, etc.
La metáfora del pienso me ha hecho esbozar una sonrisa irónica, me ha hecho gracia.
—Correcto.— le contestó Tetsuo mientras le dejaba las cosas del tipo junto con un abultado fajo de billetes —Los negocios van bien. Recuerdos de mi hermano. Dice que sus jefes del restaurante están muy contentos con la mercancía que les mandas. Es importante que estén bien alimentados.
Lo dijo esbozando una medio sonrisa, que es lo máximo a lo que podía aspirar como imitación de humor. El granjero se rió sonoramente mientras recogía el dinero.
—Tengo que irme. Cuídate Tororo-san.
Una vez en el coche sacó el móvil para llamar a sus compañeros y reunirse con ellos.
Lo del pienso es que a veces estoy inspirado, tenías que verme en otra partida que estoy de abogado que hablo todo lo que calla Tetuso XDDDD
La verdad es que mi intención era resolverlo todo con un post y volver con los otros, pero como pidieron escenas separadas me dije 'y yo quien soy para privarles de irse de picos pardos' :P
Tú dirás si me uno con ellos o espero. ¡Sin problema!
Al estar como destinatario oculto en los otros post habrás podido ver que les he contado que reciben una llamada tuya, puedes si quieres contarme lo que piensas decirles para que se lo pegue en cuanto me contesten y así te quedáis para introducirte en breves allí.
Cuando descolgaron el teléfono Tetsuo simplemente informó:
—Asunto arreglado. ¿Dónde nos vemos?
Tetsuo es un hombre de pocas palabras. ¡Lo estoy logrando! :D