Partida Rol por web

Draek, acostumbrado a la tanquilidad y el equilibrio en su vida interna, ahora ha chocado con una incómoda y pesada sensación de desconcierto. No sabe de doden surge...pero siente un profundo pesar en su corazón.

Phyan ha sembrado dentro suya un mar de dudas para los que hasta ahora, no ha tenido ojos, pero que ahora le devuelven una lacónica y silenciosa mirada.

Quizás sea el momento de empezar a hacer las preguntas correctas...o a las personas correctas...

Esa frase resuena varias veces en tu cabeza...pero...realmente ¿es tuya esa?

Mientras Raj y Elyviel tratan de resolver el encriptado enigma que cerrba la caja que habíais encontrado en la taberna...decides junto con tu pupilo meditar en busca de algún tipo de respuesta o conexión con el enigmático Kami Larcen...

Tras un primer intento extraño, donde fuiste capaz de vislumbrar una entrada en la roca vivida de peculiares características, decidiste volver a sumirte en un trnace meditatorio a fin de encontrar algo más alla. Y...a pesar de que pareció que no conseguiste nada...o al menos eso compartiste con la gente de tu alrededor...paraece que fragmentos empeizan a acudir a tu mente, como pequeñas piezas de un puzle que recuerdas al volver a tu estado de vigilia...

Con cuidado miras al suelo...un escalón tras otro, pues la penumbra del lugar hace difícil saber cuando estás caminando por suelo estable. Al llegar al final de las escaleras miras al frente y observas que aún te queda un gran camino por recorrer...un camnino que parece no acabar nunca.

- Tu piel pococ a poco se hace tan dura como el acero Draek...de eso no cabe duda...

Una voz potente retumba en toda la cueva. No parece provenir de ningún lado en particular, ni tampoco la reconoces, pero es una voz que calma tu espíritu.

- Pero a la vez tu piel te hace ciego y osado...te hace olvidar tu parte más humana... te hace olvidar las cictatrices...

Por un momento te paras a mirar a tu alrededor...intentas encontrar el origen de dicha voz para poder interpelarle...pero no ves a nadie a tu alrededor.

Te miras las manos y los brazos, desnudos, mostrando tu verdadera piel escamosa y tu afiladas garras. Respiras despacio, sintiendo la brisa que corre a tu alrededor, el tacto de tu piel en tus manos...

- No Draek...no me refiero a esas cicatrices...de las que yo te hablo...estan dentro de ti...en tu alma...

Colocas una mano en tu pecho e intentas reflexionar sobre lo que la voz está intentando decirte...sobre los acontecimientos que han ido ocurriendo...sobre Gala y su familia...sobre el nigromante encapuchado...sobre las hordas de muertos vivientes...sobre la ciudad perdida bajo el lago...sobre tus compañeros...

- No Draek... no es del pasado a quien me refiero...esas cicatrices ya están muy profundas...hablo de la que están por llegar...

Aprietas tu mano contra tu pecho y una sensación de ira y decepción florece en tu pecho...

- Draek...no podrás salvarlos a todos...

Al principio no eres capaz de ver nada...todo está muy oscuro, y tus ojos necesitan unos minutos para poder ver en la penumbralo que ante ti se presenta.

Te encuentras en una habitación sumida en la oscuidad...donde solamente ante ti hay un altar con forma de Sol y en su interior una gran Luna llena, formando una armonia entre ambos y coronando una mesa.

Sobre esta mesa puedes encontrar varios objetos. Por un lado un montónde cartas con el lacre roto pero reconocicbles. Son el sello real del rey Elias y cartas con el lacre que la familia Baranova te facilitó pra poder comunicarte cone ellos, una abeja.

También puedes encontrar un collar de cuentas del que cuelga la gran piedra de Hakkam que destruisteis para poder liberar a Gala de su trance. La piedra se encuentra rota y su color es un verde apagado.

Por otro lado ayuna gran maza, ornamentada con runas y relieves que no puedes reconocer.

A la derecha del todo puedes ver el libro que encontrasteis en el refugio bajo la cascada, escrito en una antigua lengua y que Elyviel se afana en traducir

Por último, al fondo del altar y bajo el Sol y la Luna, unas figuras talladas en madera con exquisita destreza pero ninguna de ella tiene los rostros definidos sino una superficie lisa. Sin embargo, a pesar de no tener rostro, sientes que de alguna manera estás conectado con ellas.

Una figura de un mujer joven y delicada se encuentra partida por la mitad de manera vertical, como si se hubiese quebrado de arriba abajo de madera abrupta la madera de dentro a fuera dividiendo la figura en varios pedazos. Sus piezas reposan separadas sobre la mesa.

Otra de las figuras es un varón de mediana edad, encadenado por tres gruesos y rugosas raices que tiran de él en direccciones diametralmente opuestas.

A continuación la figura de una mujer de pelo largo que le subre el rostro y que sujeta el cuerpo inmóvil de una chica muerta más joven que ella.

Por último, un joven sujeándose la cabeza mientras mira al suelo sentado sobre su espalda, apoyado en un árbol marchito y seco.

-Hagas lo que hagas, decidas lo que decidas...esto dejará una cicatriz en ti...

-Recuerda...que tú tendrás que recorrer un camino donde no podrás salvarlos a todos...

Has tardado casi dos días con dar con el sitio exacto...atravesando el sistema de alcantarillado que recorre la ciudad entera....y eso no ha sido lo más difícil, si no llegar evadiendo a la infinidad de carceleros que pueblan todo el subsuelo de la zona noble de la ciudad.

Tu presteza y tenacidad te han permitido salir airosos de este extenuante periplo...y tu entrenamiento durante milenios afinando tus capacidades perceptivas han creado un formadable rastreador que ahora puede recoger sus frutos.

La puerta se encuentra en mitad del oscuro pasillo, y solo una tenue luz que se escapa por un ventanal en la misma ilumina el oscuro corredor. Jamás nadie se aventuraría a bajar hasta aquí y menos con tanta vigilancia de los esbirros de Soak yendo de aquí para allá...por eso este este sitio es perfecto...

Te aproximas con extrema cautela a mirar a través del cristal...no solo no percibes a nadie, si no que tampoco parece haber nadie por los alrededores. La puerta no tiene pestillo...tampoco le haría mucha falta aquí abajo...

Al entrar en la pequeña estancia confirmas lo que ya sospechabas desde que empezaste tu investigación...

Bastones de extraña procedencia...antiguos tomos apilados de cuero, calaveras con marcas y runas, símbolos y anotaciones de lenguas desconocidas... y en medio de la habitación un atril con un pesado y viejo tomo.

Lo sujetas con cuidao y comienzas a ojearlo... Por supuesto no entiendes nada...solo hay símbolos, jerogríficos, dibujos y runas...pero no necesitas muchas páginas para saber que es un libro de magia negra....magia de la más oscura y siniestra... sangre y muerte...

A lo largo de los últimos milenios, los Sin Nombre han traido gran cantidad de artilugios y libros del exterior...algunos sin relevancia y otros peligrosos e incluso malditos....este, parece ser lo peor de ambos...

Durante cuantos siglos habrá estado urgando e investigando acerca de todo este material...cuanto habrá descubierto...y peor aún...cuánto habrá investigado... tener acceso al gremio de medicina puede que haya sido el catalizador para poder poner a prueba los límites de su enferma mente...y su poder crece día tras día...puedes sentirlo... Tiene lo peor de las dos partes...la arrogancia de los Tau y la sed de poder infinito de los Sin Nombre...

- Oh...puede ser peor aún....si corrompiese el Cielo Nocturnae, su poder podría no tener límites....un poder incomensurable no debe ser poseido ni controlado por una sola persona...y menos aún si es un adepto a la magia nigromántica... El Cielo Nocturnae y magia de muerte...que presagio más funesto...

Dejas el libro en la misma posición en que lo enontraste y abandonas el lugar con el mismo sigilo con el que apareciste...

-Larcen... dame fuerzas, guía mis pasos prestos... sé mis palabras para guiar al pueblo de Exor hacia la concordia y expulsar el mal que crece dentro de nuestras fronteras...

Una vez más, te encuentras en una habitación sumida en la oscuidad...donde solamente ante ti hay un altar con forma de Sol y en su interior una gran Luna llena, formando una armonia entre ambos y coronando una mesa.

Todo sigue dispuesto de la misma manera y de nuevo observas en silencio el tablero, pero esta vez hay dos nuevas figuras que quizás siempre han estado ahí...o quizás no.

Ambas están talladas con suma delicadeza y todos sus rasgos físicos y sus rostros están cuidados con sumo detalle. Te aproximas para poder observarlas más de cerca.

La primera representa a un fornido varón de cuerpo escultural y poderosos brazos erguidos.

La segunda representa a una hermosa adolescente de mirada melancólica.

-Ahora solo son sombras de quienes fueron...

De nuevo la voz que escuchaste en la cueva vuelve a resonar a tu alrededor, con gravedad y un eco penetrante.

- ¿Quienes son?- Preguntas a la voz con curiosidad e intriga.

- El primero es Kalais, el lider espiritual de Exor...asesinado por defender su tierra y seguir su código...

-La segunda...bueno...ya deberías saberlo... es el motivo por el que has llegado hasta aquí...¿no?...Hace tiempo te dije "Quizás sea el momento de empezar a hacer las preguntas correctas...o a las personas correctas..."

-...Ahora es tarde...pero hasta los muertos siguen teniendo respuestas a nuestras preguntas...quizás el historiador Demine te ayude a encontrar a sus cinco descendientes...

Un gran silencio reina a tu alrededor...

-Has sido fiel a tu código...igual que lo fue Kalais al código que le dió Larcen a su pupilo... y por ello te he permitido ser parte de su vida, aunque no te pertenece... A partir de aquí, tendrás que encontrar tu propio destino... y no puedes saber cual es tu destino si no entiendes el origen... debes cerrar el círculo...