Partida Rol por web

SEGUNDO DÍA

...Estás caminando a través de un pasillo...muy oscuro...tu respiración se entrecorta porque intentas hacer menos ruido que el propio silencio. Tratas de aguantar tus jadeos...has subido muy rápido por la escalera de caracol...321 escalones son mucho esfuerzo para tu cuerpo herido...

...Te sujetas el abdomen...tu mano está empapada y notas como el líquido se derrama por tu pierna derecha... Deberías parar, descansar, buscar ayuda...pero no puedo fallarle, está en peligro...solo tú puedes salvarla...pero...¿llegarás a tiempo?...solo un poco más...un...poco...maaaasssss...

Te despeirtas en tu habitación. Estás empapado en sudor y un terrible dolor emana de tu abdomen...en el mismo lugar que te sujetabas en el sueño con la mano... Palpas, pero no hay nada...el dolor va desapareciendo, como apagándose, hasta no quedar nada de él...

Sin darte cuenta estás jadeando por el dolor y mientras tratas de recueprar el aliento, pronuncias en voz baja, una frase que te impacta de manera inesperada en tu cabeza, irrefrenable...

-Ya...están...aquí...

Phyan reflexiona entre sudores fríos. Parece que fue ayer cuando su única preocupación era ganar cuatro perras para saldar sus deudas. Todo esto antes de que su vida girara por completo por una "simple" niña. Los últimos días había visto demasiadas cosas paranormales que le habían hecho reflexionar si su vida no era tan extraña como el pensaba. Ese hilo conductor quizás era el que le hacia sentir mucha empatía por Gala "No es mas que otra victima...como yo". Phyan nunca ha sido una persona con gran inteligencia, pero hasta el podia entender que debe haber poderes oscuros que se aprovechen de sujetos inocentes, como él o Gala.

"Solo yo puedo salvarla...quizás por eso me encuentro aquí". Phyan piensa en los días en los que su maldición invadió su cuerpo. No fueron días bonitos. Piensa que puede hacer algo por evitar una vida de desgracias sobre Gala. Con esta idea intenta buscar un hueco para intentar hablar con Zia.

NOCHE DEL CUARTO AL QUINTO DÍA

Emerges del oscuro pasillo a una nueva estancia, iluminada con una gradable luz. Solo se oye el sonido del agua correr y tus propios jadeos de dolor y extenuación.

No la ves por ningún lado...

Avanzas por la estancia hasta llegar a las aguas y tu corazón da un vuelvo al mirar tu reflejo. El agua está teñida de rojo... ¡Qué presagio más funesto...!

Avanzas hacia el árbol central y es entonces cuando la encuentras...tendida en el suelo...con la daga clavada en su pecho. Sueltas un quejido de terror y tragedia. Tu cabeza va por un lado y tu cuerpo por otro.

Mientras con una mano tartas de contener tu aliento y tus ganas de gritar, con tus otras manos tratas de incorporarla, buscando signos de vida. Solo la encuentras a ella llena de sangre y unos abiertos ojos llorosos con la mirada clavada en ti, pero sin verte, mirando más allá.

Ha mueto...ha muerto...ahora quien cuidará de...nosotros...durante los próximos milenios...El fin de una raza, de milenios de prosperidad...todo por ella...

Tu sangre empieza a empapar la ropa de la persona que sostienes entre tus brazos...

-Hay...hay que avisar a todos los gremios...a...al Sol, él sabrá que hacer...

depositas a la chica de nuevo sobre el suelo y cruzas sus brazos sobre ella...tras unos segundos observando su rostro...miras tus manos llenas de sangre, las cierras...y aprietas con fuerza...

A continuación abres tus ojos y te encuentras exhalando un profundo suspiro en tu habitación, el los dominios de la familia Baranova. Te incorporas en la cama y limpias con la mano el sudor de tu frente. Al hacerlo sientes pegajosa tu piel...sucia... te acercas hasta la ventana, pues algo de luz de la Luna entra a través de los ventanales... tu respiración se corta mientras observas tus manos manchadas de sangre seca.

A la primera pregunta. No se si lo sabes o no. es un sueño. Investiga por tu cuenta, dale vueltas a la cabeza, haz tiradas...no se.

A la segunda pregunta, he adjuntado la foto en la entrada anterior de lo que ves. Al ser un sueño, se ve todo de manera onírica.

Mientras bajas por la escalera de caracol, siguiendo los pasos de Draek a la cabeza, miras a tu alrededor, primero hacia la distancia, donde ves las abandonadas ruinas de construcciones antiguas tenuemente iluminadas por la iluminación que desprenden los los cristales en la bóveda de la cueva. A continuación miras a tu derecha, hacia las estatuas encajadas en la torre que vais rodeando, y al mirarlas, sientes como si algo dentro de ti abriese un agujero negro que te absorbe, como si tu alma fuese atrapada por un negro torbellino que te arrastra....hasta que pierdes incluso la visión de tu alrededor en un sonido blanco que se va haciendo cada vez más real...hasta el punto de ser insoportable para tus oidos. Aprietas fuerte los dientes haciendo una mueca de dolor, y cierras los ojos, mientras tratas de agarrarte a algo para no perder el equilibrio...

Y de pronto, todo desaparece en la negrura, para volver a aparecer de nuevo...

Bajas por las escaleras con cierta prisa...no te gustaría no estar ahí para poder contemplar el trabajo bien hecho. Al final de las escaleras,  te espera Pronto con una taza de algo caliente. Giras hacia el jardín, y Pronto sigue tus pasos en silencio.

- ¿Cómo van?

- Lo están haciendo despacio pero con gran precisión. Creo que estará a la altura de las demás.

- Eso espero...estos malditos Sin Nombre nos han cobrado carisima su mano de obra, pero es cierto que de este lado nadie sabe hacer nada en condiciones si hay que usar las manos... Rodeados de inútiles...

Pronto exhala una risa mientras sigue tus pasos. Llgeais al jardín interior. Dos sin nombres están acabando de pulir la piedra de la última estatua...la obra está casi completada...Te aproximas en silencio hacia una de las cinco estatuas, que podrán medir casi tres metros de alto. La estatua muestra el rostro esbelto de una mujer con el pelo que le cae suel to y ondulado hasta los hombros. En estos, dos hermosas hombreras cubren sus hombros y cierran en un broche en su pecho donde otra hermosa joya labrada en piedra adorna el pecho de la mujer. Desde los hombros nace una gran capa que la envuelve y cubre, dejando abierta sola la aprte delantera para poder apreciar el vestido. Observas la magnifiencia y la calidad del tallado de la estatua, y desde tu posición miras a las demás, todas sujetando una gran bandeja pulida de piedra.

-Ooohh... -Exalas un sonido de alegría y satisfacción por la exquisitez de las piezas...- El gremio Bonetti lo ha vuelto a hacer... -Notas como una gran sonrisa crece en tu rostro...- ¡Qué hermosa eres...!

Cierras los ojos para saborear el momento...pero una repentina arcada golpea tu estómago y tu cuerpo. Aguantas las ganas y abres los ojos con fuerza. Has vuelto de nuevo a las tenues escaleras. Te encuentras deroientado y tembloroso. El frió se apodera de ti. Has conseguido mantenerte en pie porque te sujetas con fuerza del plato que la estatua está sujetando...reconoces esa estatua...de nuevo.

...Terminas de colocarte bien las alhajas de tus brazos...odias que no se vean las piedras preciosas que coronan cad una de las pulseras de tus muñecas...ha sido un largo camino y nadie debe olvidar quien eres y quien es tu familia ni siquiera en tu propia casa.

Te giras y miras a la habitación. La ventana está entreabierta y puedes oir el bullicio de las calles que en estas semanas se produce... cinco mil años son muchos...pero ya está llegando de nuevo. En el centro de la habitación, la cama está adornada con hermosas flores de color perla y púrpura, y de sus tallo surgen pequeños brillos que llenan la habitación de destellos que timidamente aparecen y se disipan, dando una belleza hipnótica a la estancia.

-El vestido...

Te apresuras al fondo de la habitación, hacia la esquina donde una plétora de espejos rodean a un hermoso vestido que se sostiene en un maniquí en el medio de todos elos, como si adorasen a la prenda.

De colores claros y delicados valoras la majestuosidad y la exquisitez con la que se ha cuidado cada detalle.

Mientras lo miras fijamente...puedes sentir como dos poderosas emociones surgen en tu pecho, compitiendo por tu completa atención... Por un lado una sensación de orgullo baña todo tu ser...el trabajo bien hecho, la recompensa conseguida...toda una vida en busca de algo que siempre has añorado...un reconocimiento al más alto nivel no solo social sino además personal...la sensación de una meta vital conseguida, que ahora da sentido a los últimos 17000 años de existencia...Por otro lado...de lo más profundo de tus entrañas, una ira poderosa y desmedida, que corroe todo lo que mira y toca. Toda una vida de atención, de servidumbre, de sacrificios, para que lo único por lo que ha merecido vivir, lo único que se ha erigido más puro que el apellido de la propia familia...ahora no solo quieren arrebatármelo...si no que además quieren convertirlo en...sombras y ceniza.

Oyes una puerta que se abre en la distancia de la estancia. Aprietas las manos con tanta fuerza que puedes notar como tus uñas dejan marcas en tus palmas, y como tu rostro más funesto y oscuro, se esconde tras una artificial sonrisa impostada...una máscara para no surfrir.

Te giras...y una chica joven se dirige apresuradamente hacia ti...risueña, grácil y hermosa, hasta fundirse en un abrazo profundo contigo. Puedes notar su respiración....el olo de su pelo...su cuatro brazos sujetando cada palmo de tu espalda.

Tras unos segundos que de buena gana podrían haber durado otros 17000 años, la chica te suelta y se dirige al vestido para maravillarse con él como lo hiciste tu anteriormente.

-Serás la más hermosa de toda Exor...Todos y todas las familias no solo te admirarán por que eres, si no por quien eres...

La chica se sonroja y te mira con sorna...

- Me da igual los demás, a mi solo me importa lo que tú pienses.

...la chica de nuevo se aleja del vestido y te vuelve a abrazar con más ternura que la primera vez.

-Aunque para los demás sea la Sacerdotisa, tú siempre me podrás llamar por mi nombre...pase lo que pase, te quiero y siempre te querré...

De nuevo...la ira desmedia sube por tu cuerpo...apretando cada músculo, cada fibra, cada pensamiento...Si por ti fuese, quemarías toda Exor y la destruirías hasta sus cimientos con tal de que no se aleje de ti...

- Para mi siempre serás Calabrielle, la luz de mi vida...

La chica esboza una sonrisa y se hunde un poco más en el confort que tu pecho le ofrece...

-Te quiero...Lo sabes, ¿verdad?

-Lo se, y yo te he querido, te quiero y te querré siempre...estés donde estes...hija mía...

Cenizas...solo hueles cenizas y carne asada...o más bien quemada...

Los Quiebra Soles te han depositado en el suelo de la gran templo... y ahora solo se oye el tumulto lejano...en la distancia...

Apenas te quedan fuerzas...la herida te ha hecho perder casi todas las fuerzas que te quedaban...de hecho sientes que no vas a poder incorporarte si quiera...Lo intentas y jadeas con gran dificultad...pero es inútil...

-Ayudadla, ¡no os olvideis quién es!

Dos Quiebra Sols te incorporan hasta dejarte arrodillada. Enfrente de ti...Mayshen te mira fijamente ataviada con su armadura de combate. Se ha agachado, para ponerse a tu altura y se mantiene en cuclillas...sus ojos como dos rubíes ardientes te miran con seriedad sepulcral.

-La han matado...Mayshen...la han matado...ese diablo la ha matado.

Mayshen se mantiene fija en su postura, pero agacha la mirada hacia al cielo, como si tratase de pensar o recordar algo.

-No es asunto nuestro...Nosotros miramos por los nuestros, por los Sin Nombre...No puedo hacer nada por ti...

Aprietas los dientes...no vas a dejar de luchar hasta tu último aliento.

-No quiero que hagas nada por mi...yo ya estoy muerta...me muero Mayshen...quiero que lo hagas por ella...salva el alma de la Sacerdotisa...

-No Eliana...ella no es nadie para mi...

Agarras a Mayshen de la armadura con las fuerzas que te quedan para gritarle- ¡Es tu sobrina maldita sea! Me da igual loq ue pasase después de tu nacimiento, siempre serás parte de mi familia y de la suya...¡Sálvala!

Pueden notar como Mayshen se consterna bajo la armadura...su mirada te lo revela...

-No puedo salvarla Eliana...¡Tú misma lo has dicho, está muerta!

Esozas una sonrisa desagradable...-Sabes que el Cielo Nocturno no dejará morir a su elegida...sabes lo que va a ocurrir ahor que han robado la flor...sabes que la maldición del Cielo Nocturnae lo destruirá todo...-

-No Eliana...tan solo destruirá lo que vosotros creasteis...Y nosotros nos aseguraremos de que nadie vuelva a atravesar esas murallas...

En ese momento eres consciente que no vas a encontrar a nadie que pueda ayudarte...pero no todo está acabado par ti...

-Mayshen...libera mi alma en la superficie...llevame afuera a morir, deja que mi alma vague hasta que encuentre a alguien o algo digno de mi poder para poder volver aquí y liberar el alma de mi hija..me lo debes y nunca te he pedido nada a cambio...hasta ahora...

Mayshen guarda silencio...-Una vez me salvaste la vida...me diste una segunda oportunidad al sacarme de estos muros a los que llamais hogar...No has sido la hermana que yo quiese tener...has sido la hermana que has tenido que ser... ¿Sabes lo que significa que abandones estos muros y esta ciudad no?

-Aquí ya no me queda nada...y menos ahoar que el Cielo Nocturnae clava cada vez más sus raices en mi gremio... Por favor...dejame morir

Mayshen se incorpora y mira a su alrededor.

-Llevarla afuera de Exor, haced cumplir su voluntad como si su voz fuese la mía...los demás conmigo...tenemos una ciudad que sellar para la eternidad...

Mientras Raj y Elyviel tratan de resolver el encriptado enigma que cerrba la caja que habíais encontrado en la taberna...decides junto con tu pupilo meditar en busca de algún tipo de respuesta o conexión con el enigmático Kami Larcen...

A pesar que durante el primer intento de meditación que Draek te pidió te realizaras casi con un éxito nulo, lo intentaste una segunda vez. Todo sea dicho...con menos entusiasmo que la primera, dando lugar la meditación a un ligero sueño que poco a poco se fue tornando en...un recuerdo...

Notas como la bebida inunda tu paladar, desatando todo un manjar de toques y especias en tu boca...el licor baja cálido por tu garganta y esbozas una sonrisa...ha sido una gran cosecha. Levantas tu copa en gesto de aprobación hacia tus compañeras.

 Cada persona ocupa su posición...

Asûrr siempre con el rostro cetrino y mirda perdida... Lycander siempre muy recta sobre la silla y muy paricipativa, como si fuera ella quien dirigiera Exor... Müda recostada sobre el asiento y con una seriedad y mirada penetante que te invita a no interpelarla directamente...Natile, siempre grácil, sonriente y atenta... Y por último kalais...varonil, musculoso y con un aire de solemnidad que transmite tranquiliad a la gran mesa redonda.

-Necesito otra copa...

Haces un gesto y un sirviente te rellena la copa del aromático licor que brilla en tu copa.

Lycander se pone en pie y comienza a dirigir la sesión...nada nuevo hasta ahora...

-Hemos llegado a los últimos 500 años antes de la festividad del Cielo Nocturnae y necesitamos nuevos representantes de los gremios que acompañen a la Sacerdotisa a su altar para el sacrificio y nacimiento del nuevo Cielo Nocturnae.

Asûr toma la palabra despueés de que Lycander vuelva a tomar asiento.

-Como cada festividad, tenemos que proceder a elegir a los nuevos mecenas de los gremios, y para ello habrá que volver a confeccionar las pruebas de seleccion. Por favor, recordar llevar un exhaustivo control de quienes se presentan, para que no puedan volver a optar al mismo reconocimiento, pero no descarte la posbilidad de que puedan intenarlo en otros gremios. Por cierto, este año se elegirán a dos representantes de cada gremio, que trabajarán de manera conjunta en la resolcuón de las pruebas. Pero par evitar situaciones fraudulentas, las pruebas se relizarán a la vez en los distintos gremios, par que solamente existe la posibilidad de presntarse a dos gremios diferentes, si las plazas disponibles lo permiten. El en momento en que salgan los elegidos de un gremio, estas pruebas quedan cerradas al resto de habitantes de Exor. Por ello se respetará el orden de llegada al examen.

Lycander vuelve a tomar la palabra y mira directamente a Múda, la cual no mueve ni un ápice su expresión y mantiene la mirada alta y silenciosa.

-Bien. Müda ya ha pactado con Soak y Mayshen un veto a la entrda de ambos en la ceremonia, y serán sus pretores quienes se encarguen de salvaguardar la seguridad de la festividad. Por otro lado, he encargado a mi hijo que se encargue de...

-¡Jamás!...¡Y basta de sandeces!...-La ira recorre tu cuerpo como tras veces...pues las formas a veces no son las más correctas...- No será un varón quien se encargue de dirigir el nombramiento de la nueva Sacerdotisa al igual que jamás un varón ostentará el puesto de Sacerdotisa, ¡que demonios te crees que es ese infeliz!...¿el adalid?...por favor...La ceremonia la seguirá dirigiendo Natile, como lo ha hecho ella y su madre antes que ella durante más de 15000 años.

Un tenso silencio agarrota el ambiente...una estancia llena de mirada desafiantes y de odio...

Kalais se levanta tranquilamente con una sonrisa politicamente correcta en un semblante duro. Ambas mujeres callan y se vuelven a sentar.

-Nuestras tradiciones son lo que nos definen como cultura...como civilización y como pueblo. Respetamos estas tradiciones, pero también, crecemos como seres y nos adaptamos a los cambios si es necesario por el bien de todos. Votaremos, pues mi cometido en este cónclave es este, guiar al pueblo de Exor...

Se votó...cinco contra uno...Kalais no tuvo que posicionarse...Natile sería quien dirigiría la ceremonia...

-Que así sea.

La hoja atravesó los ropajes y la carne como una ennegrecida aguja de muerte, que dejó un horrible horificio de entrada y salida. Tras arrancarla con un fuerte tirón, acompañada de una seca patada en tu vientre, puedes notar como empieza a emanar profusamente la sangre de ambas heridas. Entre el dolor y el empujón, te tambaleas y pierdes el equilibrio, cayendo contra el suelo de espaldas.

Miras a tu derecha y ves a Lycander...apoyada sobre una columna luchando por pronunciar palabras, pero lo único que emite su boca, son gorgojos mientras un hilo de sangre se le derrama por el mentón Las lágrimas pueblan su rostro...quizás porque sabe que su final esta cerca...quizás porque sabe que esto significa el final de milenios de paz...o quizás porque ella confiaba ciegmente en él...

Intentas girar sobre ti misma, pero la herida te produce demasiado dolor. Puedes ver a tu otro lado a Natile tirada en el suelo. Intentó defenderse pero fue un movimiento vano... su fuerte nunca fue el combate...

- Müda...Mayshen..ellas pueden detenerte...ellas...

Escuchas como se dirige hcia a ti mientras emite una burlona carcajada.

-Para cuando ellas sepan lo que ha ocurrido aquí, ya habré desaparecido y el Cielo Nocturnae será mío. Esta ciudad no merece seguir existiendo...

Aguantas tu peso sobre tus brazos lo justo como para poder incorporarte y mirarle al rostro mientras te diriges a él.

- Naciste Sin Nombre y a pesar de ello...tu madre te ha mantenido dentro de los muros...te han tratado como a un Tau a pesar de no ser nada...¿Así se lo pagas...ASÍ SE LO PAGAS A TU MADRE Y A TODOS NOSOTROS?

Le sigues con la mirada, pues camina pesadamente hacia Lycander. Se acuclilla hasta poder estar  la altura de ella y la mira fijamente.

- Todos los Taus sois una panda de despojos de una raza extinta...orgullosos y arrogantes... Sin embargo poseeis el Cielo Nocturnae...un poder inconmensurable...imagina lo que puedo hacer con él...

Sujeta la cabeza de Lycander para que esta pueda mirarla directamente a sus ojos. Lycander no puede pronunciar palabra pues se atraganta con su propia sangre y sus ojos llorosos muestran un infinito dolor que ojalá solamente fuese físico...

- Gracias madre por haberme dado la oportunidad de destruiros... siempre habeis sido muy cautos de que ningún Sin Nombre pudiese ostentar a cuidar del Cielo Nocturnae, inteligente y conservador cuanto menos... pero aquí me tienes, sangre de tu sangre, bastardo y maldito solo por no poseer la misma fisionimía y el mismo Don de la eternidad como vosotros...

Y con las mismas arroja su cabeza con gran fuerza contra el suelo, profiriendo un sonoro golpe seco de huesos.

El caballero se levanta tras unos segundos de silencio y de nuevo se dirige hacia ti para mirarte desde arriba.

-Sabes...creo que no voy a matarte...pues ahora llega lo más divertido...Sin lugar a dudas la herida acabará matándote, ya me he encargado de envenar la hoja como para que no haya vuelta atrás...es cuestión de horas...pero ahí no acaba la cosa...verás...he envenedado las fábricas de Hidroxígeno para que empiecen a liberar un agente que poco a poco destruya las frágiles mentes de las descarriadas ovejas que viven más allá de las murallas...y por otro lado, en cuanto los orgullosos Taus os quedeis sin vuestro ansiado Cielo Nocturnae...perdereis no solo vuestra cordura, sino que os convertireis en terribles e irracionales criaturas... ¿A quien vas a ayudar?...

Una risa burlona sale de su boca mientras te observa con aire sádico y juguetón...

- Pero...tranquila...antes quiero hacer una visita a una vieja conocida mía...quizás la conozcas...es hija tuya...ya sabes...no puedo llevarme el Cielo Nocturnae así sin más delante de la Sacerdotisa... cuando me largue de este agujero infecto siempre recordaré quien hizo posible mi ascensión... y no volveré a estar jamás bajo las órdenes de ninguna matriarca de ideas retrógradas...

Al escuchar su nombre una ira como nunca habías experimentado te embarga todo tu ser y por una vez en milenios sientes realmente miedo a la muerte...

- No te atrevas a tocarla...¡o te arranzaré el corazón del pecho CON MIS PROPIAS MANOS!

-Jajajajaja...- De nuevo el encapuchado suelta una sonora risotada- Adios Bonetti...me despdiré de ella por ti...

-Se cree que puede escapar de mi...pero no tiene ninguna posibilidad...

Avanzas lentamente...el abrigo de la noche te protege de los ojos indiscretos y ella está lo suficientemente distraida como pra no percatarse de tu aceho... ya puedes saborear la sangre chorreando por tus dientes...

Te agazapas y no mueves ni un músculo...el momento se aproxima...es cuestión de ti... ¡ESPERA!

Lo hueles...suave y a la vez ocre...se aproxima hacia ti a pesar de ir en contra del viento... Algo dentro de ti te dice que es hora de oir...pero...ese olor...trae algo consigo que hacía siglos que habías olvidado...es...el olor de un Observador...

Te quedas sin saber qué hacer....en el mismo sitio en el que te mantenías agazapado...tu presa ya huyó hace rato y tú ni siqueira te habías inmutado... Ya puedes oir sus pasos...viene directamente a por ti...viene a por ti... a por t...

-Oh... Aquí estás... por los Dioses que guerra me has dado...

La señora se sienta a unos metros de ti....es absurdo seguir escondiéndose, pues te está mirando directamente a ti. Dejas de agazaparte y te sientas sobre tus cuartos traseros...sin saber bien porqué no has huido aún...

- ¿Sabes qué es una de las cosas que a la edad que tengo, más disfruto? De tener un sueño plácido y largo... oh...que felicidad... Seguro que tú también los has tenido...

La enigmática señora te sigue mirando con una media sonrisa...como si supiese que no vas a atacarle...o peor aún...como si supiese que aunque le ataques...no te tendría ningún miedo... no sabes cuál de las dos opciones te preocupa más...

-El caso es...que llevo más de dos decadas sin poder dormir tranquila ¿sabes?...hay...una chica...¡es muy hermosa! -la señora se rie, pero tras unos segundos de silencio vuelve a continuar con su hablduría- Bueno...el caso es que no para de hablarme en sueños...dice no se qué de una ciudad bajo tierra...de que su alma está atrapada por la maldición de...yo que sé noche oscura o algo parecido... y que está buscando a la única persona que puede salvarla...

De nuevo la señora mayor hace una pausa y te mira con tranquilidd...esperando a que digas algo...pero todo lo que haces es ladear la cabeza y mover un poco el hocico...

- Tu alma lleva demasiado tiempo fuera de un cuerpo humano... posiblmente tantos siglos moviéndote entre lobos, hace que estés empezando a olvidar quien eres...estás empezando a olvidar porque tu alma aún no ha abandonado este plano, como han hecho todos tus antepasados... Acércate, déjame que te vea de cerca...

Decides que mejor te quedas donde estás...si has aprendido algo de los humanos es que son peligrosos...incluso los débiles y enfermos...

- Está bien... - La señora se incorpora lenta y pesadamente y se acerca hasta ti. extiende su mano hacia tu cara hasta dejarla a un palmo, lo justo para que te acerques a poder olisquearla... Mientras la hueles, la anciana te acaricia lentamente el hocico...- Oh si...ahí estás...

Durante unos minutos la anciana acaricia tu cara y cabeza...su mano transmite una sedante sensación de confort. Al cabo de un rato, retira la mano y vuelve lentamente a sentarse en el trozo de madera en el que había estado reposando hasta entonces.

- Hmmm...Si esa maldición es tan poderosa como para atrapar a un alma inmortal como la de tu hija...solo hay una forma de poder liberarla...tendrás que ir a por ella al plano donde la vida y la muerte coexisten... y liberarla de quien la retiene antes de que destruyan la cáscara a la que ahora se encuentra amarrada su alma... Si destruyen el cuerpo antes de su liberación, su alma vagará eternamente por la oscuridad...pero si no liberas su alma, estará atrapada entre el mundo de los vivos y los muertos para siempre...

La anciana resopla...cruza los brazos dejando su candelabro sobre el tronco y mira hacia el cielo... dubitativa te mira de soslayo...

-¿Sabes el precio que tendrás que pagar si quieres encontrar el alma de tu hija?... Deberás viajar al reino de los muertos... con lo que ello conleva...más te vale encontrar ese maldito cuchillo ceremonial... - la anciana resopla y se frota la frente - Bueno...eso no es un problema de momento...ahora lo que necesitas es un nuevo recipiente donde poder colocar a tu alma inmortal...alguien lo bastante estúpido como para no medir el riesgo de sus acciones...el destino ya se encargará de volver a llevarte hasta allí...

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Lentamente el sonido a tu alrededor se va apagando... las voces de tus compañeros se van diluyendo en la distancia hasta encontrarte en un silencio en el que solo escuchas los estertores que emanan de tu garganta y el latido de tu corazón, que se ralentiza de manera paulatina...

La carcasa que te ha llevado de aquí para allá durante tantos años empieza a parecerte incómoda y aprisionante. Empieza a resultarte molesto el roce de todo aquello que hasta ahora habías considerado tu cuerpo.

Tu visión avanza de la nitidez arropada por la iluminación de la sala a una borrosa y oscura masa de colores que se apagan con la velocidad con la que se consume la llama de una fría hoguera...

Y durante una eternidad...o quizás unos segundos tu ser empieza lentamente a levitar, separándose de tu inerte cuerpo. Sin esfuerzo te incorporas y la oscuridad empieza a tomar de nuevo forma a medida que una luz cálida llena la sala, iluminando con claridad todo a tu alrededor. No sabrías determinar el foco de esta luz....pero seamos realistas...tampoco te importa mucho.

Es extraño...Miras a tu alrededor y puedes ver a tus camaradas...compungidos, paralizados y atónitos con lo que ha ocurrido, con la decisión y el acto que has realizado...pero por el contrario, tú no sientes nada de eso...sientes una absoluta y completa desconexión con esas mundanas y básicas emociones que hasta ahora te han atormentado y perseguido, tiñendo cada momento que has atravesado a lo largo de tu vida.

Giras sobre ti mismo, para seguir contemplando la escena y observas el Cielo Nocturno.

La flor ha cambiado...en el centro de esta, a pesar de ser un capullo cerrado, puedes ver como en su interior crece una intensa luz de la que emana una energía que no puedes tocar, pero que puedes sentir. Que no puedes ver, pero puedes percibir y que lentamente, mientras la sangre de tu carcasa cruza a través de los pétalos y penetra en su interior, va alimentándose y empapándose de esta pureza.

-Hola Madre...

Una voz que resuena más allá del Cielo Nocturnae te hace volver a prestar atención a lo que te rodea. La voz resuena limpia y clara...una voz femenina que ya habías escuchado antes. Alzas la vista y cruzas tu mirada con Calabrielle, que te observa desde la parte alta de la montaña.

Sin duda ha cambiado...parece que la corrupción de su alma es un hecho...por la sangre que emanan de sus manos y le rodea en movimientos hipnóticos e ingrávidos, además de la cornamenta que ahora adorna su cabeza, es posible que te encuentres ante el alma corrupta de la antigua sacerdotisa. Sin embargo, algo encoge tu ser al observarla con detenimiento. Sus ojos transmiten piedad, arrepentimiento y un sufrimiento acorde a la destrucción que te rodea Exor.

Decides que lo mejor será tratar de hablar con ella y tratar de averiguar sus intenciones... ahora no estás armado...de hecho, ni siquiera sabes bien que eres y que puedes hacer ahora que no estás en el plano mortal.

-...!

- Hola Hija mía...

Antes de que seas capaz de articular tu primera palabra, una voz resuena justo detrás de ti...de nuevo una voz de sobra conocida por ti. Te giras velozmente, pero no hay nadie...¿Ha sonado detrás tuya, no?...¿O...desde dentro tuya?. Te giras de nuevo y ahí está ella, Eliana Bonetti, que camina tranquilamente hacia su hija desde donde tú estabas...¿pero desde detrás tuya? ¿Te ha atravesado mientras te girabas?...¿Eso se puede?...o más bien nunca te atravesó, si no que partió desde el mismo punto en el que tú estabas...no lo sabrías determinar... Decides dejar de divagar y atender a la pareja, que lentamente se aproximan la una a la otra.

La señora Eliana Bonetti conserva la misma majestuosidad con la que siempre la has recordado. Hermosa, esbelta, con un precioso pelo que le cae por la espalda y una gran mancha de sangre fresca que nace en su estómago, que dejada empapada toda su falda de sangre. A medida que la madre se aproxima a su hija, esta, cambia su actitud...su comunicación corporal, hacia algo...menos grotesco y amenazante, menos terrorífico...más...humano. Su rostro se va lentamente compungiendo y sus ojos se van liberando de su fiereza, para mostrar unos ojos cristalinos y amplios, hasta que hay un momento en que madre e hija están al alcance de la mano.

- Hace demasiado tiempo que me fui...madre...me asesinaron...desde entonces he vagado en estas salas corruptas, encarcelada por mi maldición...sin voz... sin control...siempre sola...

- Lo sé...Calabrielle... yo recogí tu cuerpo...y usé todo el poder de Exor y de mi familia para encontrar la forma de poder volver a traerte conmigo...de poder liberar tu alma de la gran maldición que destruyó nuestras vidas...

Calabrielle observa a su madre. La herida que emana sangre desde su abdomen. Parece que empieza a ser consciente aunque solo sea a través de su imaginación que no ha sido nada sencillo llegar a donde ha llegado ahora mismo.

-Estás...te han...-Calabrielle traga saliva- Te has sacrificado...por mi...

-No hija...- Bonetti emite una pequeña y cálida sonrisa en su voz- Ya morí hace muchos años...el mismo día en que tú dejaste de estar conmigo, yo también abandoné mi cuerpo. He vagado durante siglos, de acá para allá, hasta encontrar la forma de volver a Exor y poder encontrar la manera de volver a tu lado... costase lo que costase...

Por momentos, una profunda tristeza se va dibujando en el rostro de Calabrielle, y sus ojos se van lentamente llenando de lágrimas.

-Una vez te dije que te quería...-Calabrielle observa fijamente a su madre, mientras una lágrima contenida durante más de un milenio recorre lentamente su mejilla izquierda a través de su suave rostro -Y todavía sigo queriéndote como el primer día... Lo sabes, ¿verdad?

-Lo sé... -Eliana hace una pequeña pausa en su voz...posiblemente para evitar que se le quiebre la voz mientras habla. Mientras acaba la frase abre sus brazos hacia su hija-  y yo te he querido, te quiero y te querré siempre...estés donde estés...hija mía...

Calabrielle, ante las palabras y el gesto de su madre, avanza hacia ella para fundirse en un profundo abrazo con ella, mientras llora de manera incontenida en sus brazos.

Tras una larga pausa en la que parece que tú ni siquiera estás presente en esta situación, ambas mujeres se separan sin dejar de agarrarse de una mano. La señora Bonetti se gira y te mira directamente. Tiene los ojos manchados de lágrimas al igual que su hija.

- Lo has hecho, Phyan. No solo has conseguido mantenernos con vida hasta llegar a Exor si no que has sido capaz de abrirte paso a través de esta ciudad maldita. Incluso has hecho lo más incongruente que podría pedirse a alguien, y es que sacrifiques tu vida por una causa que no es la tuya... No puedo hacer otra cosa que no sea agradecerte desde lo más profundo de mi corazón lo que has hecho por mi alma y sobre todo por salvar el alma de mi hija.

Eliana mira a su alrededor cuando termina de hablar, y la mano libre que le queda la aprieta con fuerza contra su pecho. Su rostro es como si tratase de recordar algo con gran intensidad, pero no fuese capaz.

Las antiguas escrituras nos lo habían dicho, pero no entendíamos bien lo que querían decir.... El Cielo Nocturno, no se alimenta de la sangre de una persona que se sacrifique por él...no es el precio de la sangre lo que lo alimenta...sino...El precio del Alma...

De nuevo vuelve a guardar silencio y mira hacia su hija. Esta le mira directamente a los ojos y le sonríe de manera tímida, como un niño pequeño cuando vuelve a reencontrarse con la mirada de sus progenitores.

He pagado el precio del alma...un sacrificio bien merecido por salvarte...y que volvería a hacer las veces que fuesen necesarias... ahora nuestras almas están ligadas a este lugar, a esta flor... Pero es mi Alma, no la tuya la que ahora ha pagado el precio...

Estas últimas palabras las pronuncia mientras se vuelve a mirarte a ti directamente.

-Este no es tu sitio...no es tu momento Phyan... He vivido dentro tuya el suficiente tiempo como para entender que siempre te has considerado un desplazado, un extraño en el mundo...sin rumbo, sin dirección ni objetivo que perseguir...y parece que por fin has encontrado algo...tu vida ha recuperado el sentido a través de perseguir algo más grande que tu propio ego.

La señora Bonetti extiende su mano señalando tu alrededor con la palma hacia arriba.

-Mírales...están llorando tu muerte, tu sacrificio... Has dado tu vida por salvar a cientos de personas...por salvar el pueblo de un desconocido en tierras foráneas... Has dejado tu antiguo estilo de saqueador y bandolero para encontrar la paz interior a través de las enseñanzas de un monje que debe esconder su rostro para ser aceptado... A los ojos de tus compañeros has dejado de ser un paria para convertirte en un igual, en un camarada y una persona digna de su respeto y confianza...

Miras a tu alrededor...tus camaradas guardan silencio mientras observan tu cuerpo inerte. Miras más allá y observas como Mayshen se aproxima hacia ellos junto con sus guardias con las armas enfundadas. Habla con ellos...no entiendes lo que ocurre...todos se arrodillan ante tu cadáver. Incluso Mayshen cruza palabras con ellos...no puedes oirles ni entenderles, pero sabes que hablan por sus gestos... Vuelves a girarte y ahora la Eliana Bonetti esta a un metro de distancia de ti. Se ha aproximado y no te has percatado de ello. Calabrielle le acompaña y te observa con curiosidad, como reparando por primera vez de tu presencia.

- ¿Sigues sin entenderlo? El Cielo Nocturnae no desea tu alma...el precio ya se ha pagado...mi alma, que siempre ha ido contigo... Ahora debes volver...volver a tu vida mortal...debes acabar lo que empezaste. Salva al pueblo de Elyviel... ayuda a Draek a saber quien es... encuentra al asesino de mi hija, y pon fin al reinado de terror que destruyó a mi pueblo... Tu vida tiene un propósito, es tu momento.

Te quedas mudo...en silencio porque realmente toda esta información está siendo demasiada para retenerla. Has muerto, pero te dicen de volver a vivir...¿Eso es posible?...La muerte jamás la habías imaginado como estaba siendo...pero...¿esto es realmente morir?... Exor es un lugar demasiado peculiar como para poder considerar que esto es extrapolable a lo que ocurra fuera de estos muros... Bonetti te pone su mano sobre tu hombro. El contacto te saca por completo de tu mar de dudas y vuelves de nuevo a tu realidad.

- Esto es una despedida viejo amigo...no volveremos a vernos nunca más...pero esto también tiene un precio...ya sabes que aquí todo lo tiene...Al alejarme de ti, el alma del lobo cobrará mucha más fuerza, y sus conductas impulsivas te asaltarán con mayor virulencia...pero a su vez también te dotará de nuevas capacidades que hasta ahora no has conocido porque yo impedía que él tomase el control de tu ser...

Durante unos instantes la cabeza te da vueltas y te sientes al borde de un precipicio...demasiadas preguntas, demasiadas decisiones... debes elegir que vas a pedirle que haga...

-Sabia decisión Phyan... Ahora...es el momento de volver... El Cielo Nocturnae acaba de nacer y ahora más que nunca necesita de vosotros...debéis salir de esta ciudad... mi hermana os ayudará a salir, pero ahí afuera os esperan peligros aún mayores de los que os habéis enfrentado hasta ahora. El anterior Cielo Nocturnae tiene que estar próximo a marchitarse, lo que significa que debéis acabar con el asesino hijo de Lycander antes de que se haga con un nuevo Cielo Nocturnae y sea el final de los reinos de la superficie...Buscad a alguien que tenga relación con Exor... nombres, apellidos, escudos familiares, negocios... nunca fue muy original a la hora del subterfugio y seguro que podréis reconocerle si dais con la información correcta.

Eliana Bonetti extiende su mano y coloca la palma sobre tu pecho. Puedes notar tu tacto suave... a continuación, como si tratase de abrir una pesada puerta, Bonetti empuja tu peso con fuerza creciente hasta que de alguna manera, como quien rompe la cáscara de un huevo, su palma atraviesa tu pecho de manera espectral. Puedes notar un terrible frío que emana desde tu interior, que se extiende a gran velocidad desde tu pecho hacia todas las zonas distales de tu cuerpo... Te entumeces a gran velocidad y la gélida sensación empieza a sustituirse por un dolor casi tan intenso como el frío que recorre cada punto de tu alma.

Como si un gran peso colgase desde el interior de tu ser, sientes como una irrefrenable fuerza te arrastra hacia atrás de manera implacable. Cada vez tu visión empieza más y más a oscurecerse, a temblar, empiezas a perder la noción de los bordes de la imagen que te rodea para solo poder enfocar nítidamente a Eliana sonriente con su mano extendida, y a Calabrielle que da un paso enfrente para gritarte algo desde la lejanía de tu ser... El dolor te atrapa con tanta intensidad que casi no eres capaz de captar su voz.

-Búscalas- dice Calabrielle- Ellas son la clave para entender...

Y como si una gran explosión emanase en tu pecho, una terrible bocanada de aire entra a través de tu nariz y tu boca para llenar una vez más tus vacíos pulmones. El sabor a sangre en tu boca es muy real, al igual que el dolor que sientes allí donde anteriormente hubo una herida mortal. Abres tus ojos, pero todo es oscuro y borroso...todo es...espera...lentamente vas recuperando la nitidez en la penumbra del gran salón...