Intento hablar con voz tranquilizadora a la niña, todo lo calmado que puedo con dos monstruos de pesadilla a la espalda.
- No te preocupes Edith, quédate detrás de mi. Esto sólo es un mal sueño. Cierra los ojos fuerte y cuando yo te digo los abres y todo habrá pasado.
Luego me giro y me interpongo entre la niña y los seres que quedan en pie, en actitud defensiva, y disparo contra la pelirroja.
Tirada: 1d100
Motivo: Disparo
Dificultad: 60-
Resultado: 71 (Fracaso)
De pronto el Dr. Dare cae en la cuenta de que la única bala que ha hecho efecto en el monstruo ha sido la bala de plata que le dio el vagabundo, luego en la plata debe estar el quid de la cuestión. Se acerca al cuerpo de la bestia intentando recuperarlo mientras advierte a sus compañeros - ¡Es la plata lo que lo dañó! golpéenlas si tienen con algo de plata! ¡una cruz, cualquier cosa!
máster: Tienes un maletín médico, si pasas una tirada de medicina supondremos que logras extraerla. Pero ten en cuenta que lo que vas a extraer solo es la punta de la bala. La zona donde se aloja la pólvora (casquillo) así como la pólvora, no. Es decir, extraerías una punta de bala de plata. Para ser reutilizada tendría que ser tratada por un armero que sepa lo que hace, y colocare de nuevo un casquillo y la pólvora.
¿Plata? Qué tontería, fue la bala en la cabeza, su bala no hizo más que terminar de tumbar a la bestia. ¡Quemémoslas! ¡Que ardan en el infierno! Son criaturas del demonio.
Con la improvisada antorcha en la mano me aproximo a la chiquilla y al policía para cubrirles de posibles ataques mientras todavía empuño la pistola aunque mi mano tiembla incontroladamente.
La niña, Edward y Robert, este último con una improvisada antorcha, aguardan en un lugar de la zona a una distancia media de las lobas, que comienzan a olisquear el suelo para encontraros entre el humo y los destellos del fuego.
El Doctor ejerce de veterinario improvisado y extrae, con mucha dificultad dadas las condiciones, la punta de la bala de plata que había disparado anteriormente.
Dirk, muy cerca del doctor, abre su lámpara y rocía al animal con todo el combustible de esta (la lámpara es de gasolina según tu inventario) En ese momento el ser se revuelve y encara a Dirk, su hermana hace lo mismo.
Os toca de nuevo.
Enarbolando la antorcha improvisada como si fuera un escudo, a un lado del cuerpo, doy unos pasos hacia las lobas. Ahora van a ver esos monstruos. La adrenalina me excita tanto que el miedo se convierte en temeridad. Al ver que uno de los animales se empapa en gasolina le acerco la antorcha para que se convierta en una pira. Luego apunto al otro y le disparo.
El sobrecogimiento y el miedo son sentimientos a los que no estoy acostumbrado y reacciono mal ante lo que no puedo entender ni controlar. Me siento intimidado, furioso y vengativo por el daño que le hayan hecho a la niña.
¡ARDED HIJAS DEL AVERNO!
Tirada: 1d100
Motivo: disparo a la loba
Dificultad: 75-
Resultado: 12 (Exito)
Tirada: 1d10(+2)
Motivo: daño a la loba
Resultado: 7(+2)=9
Tirada: 1d10(+2)
Motivo: empalamiento: más pupa
Resultado: 6(+2)=8
Cuando retiro el casquillo de plata, me doy cuenta de que de momento no puedo usarlo, así que decido atacar con lo que tengo, mi rifle de caza con su munición normal, y disparo 2 tiros a la "muchacha" mostruosa que no ha sido afectada por el fuego, mientras pienso si no tendré algo de plata en mi maletín. Luego me aproximo al grupo que se reúne en torno a la niña.
Alguno de ustedes debería alejarse con la niña y encerrarse en la casa
Tirada: 1d100
Motivo: Primer disparo
Dificultad: 75-
Resultado: 56 (Exito)
Tirada: 1d10(+2)
Motivo: Daño Primer disparo
Resultado: 1(+2)=3
Tirada: 1d100
Motivo: segundo disparo
Dificultad: 75-
Resultado: 57 (Exito)
Tirada: 1d10(+2)
Motivo: daño segundo disparo
Resultado: 5(+2)=7
¿Puede que algo de mi instrumental sea de plata?
Cuando las lobas se me acercan, y viendo que Robert se acerca a encender con su antorcha a la que acabo de rociar, retrocedo a los tumbos hasta el incendio, y busco una rama para usar como arma.
ESO! HUYAMOS HACIA LA CASA! PODEMOS ENCERRARNOS AHI! dice enloquecido, sin tomar en cuenta las distancias y la ferocidad de las monstruosas criaturas.
Grito mientras me vuelvo para disparar hacia la misma loba que el doctor.
- Gently, llevaos a la niña, venga.
Pero una vez más los nervios me hacen fallar el disparo. Edward, concéntrate, no puedes fallar a Edith ahora.
Tirada: 1d100
Motivo: Disparo
Dificultad: 60-
Resultado: 62 (Fracaso)
No hay forma de dar una... XD
El Doctor Dare dispara su fusil, casi a bocajarro, y por dos veces sobre una loba y esta cae al suelo inmediatamente derrotada. En eso momento Dirk Gently encuentra un camino por el que aproximarse al resto dando voces a la niña y a sus dos compañeros.
Edward Mcnee dispara de nuevo para ofrecerle protección al periodista, pues la loba empapada en gasolina lo persigue, pero falla el disparo; Aunque el que acierta es Robert Bingham, y tras asestarle un certero disparo le arroja una tea que hace a la loba llamear como el sol del mediodía.
El ser, asustado, y casi en pánico, comienza a correr hacia el río para lanzarse de lleno en él, y veis como la criatura fluye río abajo sin control, desapareciendo de vuestra vista.
El peligro no ha pasado, los árboles arden, hay uno en el lugar y cada vez más, os pican los ojos y os cuesta respirar... El gran lobo y su hija siguen tirados en el suelo, aún en su forma bestial.
Con el corazón desbocado por la adrenalina y el miedo miro a todas partes buscando más amenazas pero cuando veo los cuerpos inertes ya solo puedo pensar en salir de ahí a toda velocidad.
¡Vámonos! Rápido, salgamos de aquí.
Me acerco donde está la niña para ayudar a sacarla.
¡Doctor, DOCTOR! Necesitará atención.
Con los ojos semicerrados grito para hacerme oír por encima del crepitar de las ramas verdes que se prenden fuego. Quizá nosotros también deberíamos buscar el camino del río para volver arriba, a la casa. El humo es molesto y me hace lagrimear, cuesta respirar.
El miedo antinatural provocado por lo que vi antes da paso a uno más instintivo y comprensible. Vamos a achicharrarnos vivos como no salgamos de aquí.
Dirk toma a la joven de la mano, y sale corriendo tirando de ella en direccion a la cabaña. Más tarde, se lamentaría por haber dejado los monstruosos cadáveres alimentando al fuego....
Dirk corre con la joven, en direccion a donde salieran los Pelton, y tras atravezar un par de arboles en busca de alguna sorpresa o pista que hayan dejado, comienza a dar un rodeo en direccion al viento, para luego regresar a la cabaña.
VAMOS! SALGAMOS DE ACÁ
Edward sale corriendo, acompañando a Dirk y a la niña.
- Marchémonos de aquí, ya hemos rescatado a la muchacha.
El Doctor los acompaña de regreso a la cabaña, una vez allí tratará de evaluar el estado dela muchacha y ponerse a salvo de esos monstruos.