Partida Rol por web

Conforme caminais hacia el comedor hablando entre vosotros una sirena empieza a sonar por el campamento, os asustais por un segundo pero veis que empiezan a hablar por megafonia.
"VA A COMENZAR LA COMIDA EN EL COMEDOR, DIRIJANSE DE FORMA ORDENADA"
Ya con la seguridad de que podreis comer vais rápidamente hacia el salón.
Cuando entrais os recuerda a un simple comedor de instituto pero con menos mesas y con una gran barra llena de comida de todo tipo, además de un gran cartel al lado de un buzon :"¿No encuentras lo que buscas? Avisanos y lo tendrás en menos de 30 minutos"
Además de vosotros no parece haber nadie más en el comedor, ni cocineros ni monitores.

Ya en el comedor veo que Ersebeth también se nos une (Personas presentes: Regulus, Ersy, María, Sonya y yo) con su habitual entusiasmo, así que le hago señas para que se nos una. -Hola Ersy, me contaron que estabas muy entretenida con tu monitora. -Digo al tiempo que vamos caminando hacia donde se encuentra la comida y lo que había pensado con respecto a la comida era real, colocaron platos típicos de la procedencia de cada quien.

-No puedo creerlo, es tanta comida y yo con un estómago tan pequeño. -Pienso al tiempo que coloco cara de ensueño y algo de tristeza. -¿Qué van a comer ustedes?  -Digo aproximándome a tomar una bandeja y platos. -Dos de estas... un poco de Solianka y algo de refresco... en estos casos es que la obesidad mórbida no me parece tan terrible... -Hablo a modo de susurro mientras voy acomodando la comida en la bandeja. -Bien, a comer. 

En cuanto vi a Nat me arrojé a sus brazos y la estreché. 

 - ¡Naaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaat! -me solté y me puse a dar brinquitos mientras avanzaba con ellos. Le mostré la PDA que me había regalado la señorita Gates -¡Me ha regalado esto! ¡Para mis proyectos! Y me ha pedido que haga algo grande, algo que la sorprenda... - En mis ojos brilló el fuego del desafío. Droidcat alzó el puño conmigo -. ¡Sorprenderémos a todo el campamento y haremos historia! ¿A ti que tal te ha ido? -añadí borrandolo todo y quedándome con la expresión encantadora de siempre.

 Mientras Nat cogía su bandeja, yo me apresuré a pedir lo mismo que ella, esperando a que me relatase su experiencia. Droidcat se aupó como pudo en un asiento y se quedó custodiando mi PDA mientras charlabamos y comiamos. 

La forma de ser de Ersebeth no para de impresionarme y solo me hace pensar en la cara que pondría Daria, una de mis mejores amigas, si la conociera. Ersebeth va hablando conmigo mientras escogemos lo que comeremos, preguntándome sobre cómo me ha ido.

-Por donde empiezo… -Hago un recuento en mi cabeza. –Mina, nuestra monitora me regaló una almohada muy suavecita que coloqué en mi cuarto, fue como una compensación por haber soportado algo de su poder. Malcom y María no lo lograron y cayeron dormidos. Aproveché el tiempo en arreglar mi habitación, cambiarme… lo necesitaba después de la batalla que tuvimos… y salí a explorar. No encontré nada relevante, pero pasó algo muy curioso antes de venir hacia aquí. –Doy una pausa mientras nos ubicamos en la mesa para comer.

-Malcom estaba con nosotros, pero de un momento a otro… espera me estoy adelantando… -Reorganizo lo sucedido en mi mente. –A sí. Cuando iba de regreso a la cabaña me encontré con Malcom y María que ya habían despertado y Malcom me llamó por mi apellido, no me gustó y le dije que me llamara por mi nombre. Malcom me respondió que no éramos tan cercanos para hacer eso, explicándome que eso solo ocurría con personas muy cercanas como familiares… y novios. –Digo esto último al tiempo que miro a Ersy haciendo cara de impresión -Eso no me pareció tan relevante, pero un  instante después dijo muy suavemente, si quieres… Eso sí me tomó por sorpresa. –Dejo escapar una risilla y le digo a Ersy que espere mientras hago una nueva pausa para darle unas cucharadas a mi sopa y un mordisco a una de mis pirozhkí.

-Lo encaré acercándome a él y le dije que era rápido y que me recordara su apellido porque no lo recordaba bien, el caso es que en un abrir y cerrar de ojos salió corriendo hacia el bosque gritando su apellido mientras desaparecía. –Vuelvo a mirar a Ersy pero ahora con cara de no saber que sucedía. -¿Tan mal me veo, lo habré ofendido? María pensó que tal vez se ofendió por lo del apellido, no sé. –Termino y sigo con mi comida mientras espero por si Ersebeth comenta algo.

Con cara malhumorada me sente en la misma mesa que Nat y Ersy, las escuche hablar como cotorras mientras degustaba un insulso plato que desconocia en absoluto. Di un sorbo de bebida gasificada antes de emitir un sonoro y vibrante erupto, y luego decirles.

- Pues Ersy, me alegro que nuestra monitora te tenga en estima. Al menos uno de los tres no la pasara tan mal y hasta incluso quizas te sirva el campamento para aprender algo. Yo vere de pedir el pase de cabaña, esa muchacha que nos toco me parece lo menos capacitada para ser nuestra monitora en absoluto.

Cuando llego al comedor, me dirijo hacia los platos, cojo una bandeja y me sirvo un poco de todo. Queria probar que tal era la comida de este lugar. Luego me acerco al grupo que se esta formando con Ersy, Nat y Regulus y me siento con ellos a comer. -Bueno nuestro monitor apenas nos dejo movernos, en unos momentos estabamos sentados descalzos y con unos aperitivos recien preparados en un parpadeo- digo divertido -Tiene supervelocidad y habla igual que se mueve- le digo al chico del mechon de pelo azul, luego me dirijo a Nat -Jajaja, perdon por meterme, pero no creo que ese sea el caso. Parece un chico muy timido y creo que lo abrumaste.He oido que de donde viene esas costumbres son muy arraigadas y significativas- me rio alegremente -Ademas que una chica como tu se le acerque y lo encare asi debio haberle tomado por sorpresa.-   digo con una sonrisa picara 

Comía de forma automática porque estaba más pendiente de lo que me contaba Nat, que de otra cosa. No tardaron en unirse Regulus y Jaden, dando lugar a una animada conversación.

 - ¿Sabes que, Reg? Deberías darle la oportunidad. Si nos han puesto con ella, será por alguna razón. ¡Nuestras habilidades se complementan, y seguro que ella sabe como sacarles partido! Y si el problema es que te aburres, puedes venir conmigo a explorar el campamento. ¡Ya verás como nos lo pasamos bien! Vosotros también podeis venir -añadí al resto del grupo.

Seguí escuchando a Nat, y cuando me contó lo de Malcom… el estruendo que hizo el cubierto al caer en el plato reverberó contra las paredes del comedor.

 - ¡¿COMOOOOOO?! -Droidcat, que ya sabía lo que se avecinaba, se apresuró a esconderse debajo de la mesa -¡Parejita! ¡La primera parejita! ¡Aaaah! -enlacá las manos -¡Qué bonito! ¡Esto va a ser mejor de lo que esperaba! ¡Le gustas, Nat! ¡Le gustas a Malcom!

Con la aportación de Jaden sobre la supuesta timidez de Malcom, mis ojos se encendieron con el fuego de la determinación. Me levanté con un saltito, quedándome de pie sobre el asiento, y apreté los puños.

 - ¡Chicos,desde ahora, estamos inmersos en una aventura donde nuestros poderes y habilidades serán puestos a prueba! ¡Si perdemos ahora, las consecuencias nos perseguirán de por vida y nos cazaran mientras dormimos! -Droidcat asomó un poco la cabeza, se subió al asiento también y levantó una patita, imitándome -Tenemos que conseguir que Nat y Malcom vivan un amor de verano: dulce, eterno, mágico… ¡¿Quién está conmigo?!

Mientras hablais entra a yoda velocidad Malcom en el comedor, se ha equivocado un par de veces pero al final ha conseguido dar con el edificio correcto.
Apenas un minuto después entra Sunan, lleva ropa distinta, como de entrenamiento y parece muy cansado. Sin decir una palabra se coloca tras Malcom para coger comida en cuanto este termine.

Ahora interviene Régulus con un eructo de entrada. -Vaya, tardaste en mostrar tu lado borde nuevamente. Por lo de tu monitora no sabía que tenías tanta experiencia como para decir quien está o no capacitado para ese puesto, deberías decirle a los cabezas de este sitio que primero te soliciten una aprobación y así seleccionarán monitores "capacitados" según tus conocimientos. -Digo con tono divertido y sarcástico.

Al comentario de Jaden de "una chica como tú" decidí no agregar nada, no iba alargar ese tema, pero no pude evitar sonreír un poco. Ersebeth es la última y junto con DroidCat me hacen poner una cara entre impresionada y de "¿habla en serio?". –No es algo a lo que sea reticente, pero en este momento no estoy en busca de tener novio. Así que, por favor, no quieras hacer de cupido, porque puede que la flecha se desvíe... o rebote. –Dejo salir una risilla tras este último comentario, pero se apaga tras la abrupta llegada de Malcom. –Ojalá no haya escuchado nuestra conversación. –Pienso al verlo aparecer y acto seguido miro a Ersy con mi rostro algo serio y solo puedo esperar que no sea imprudente al respecto.

No puedo contenerme y vuelvo a reír-Jajaja, eso si seria interesante- respondo ante el entusiasmo de Ersy -Pero ten en cuenta lo que siente Nat, puede que a ella no le guste el pobre de Malcom..... a no seeeerr...... hago una pausa y volteo mirando a Nat entrecerrando un poco los ojos de manera traviesa. En ese momento llega Malcom -Y hablando del rey de Roma- digo al ver al chico -Heey- levanto un brazo llamando a Malcom y a Sunan que llega un segundo después. -Bueno, pero veamos que pasa- sonrió respondiendo a la afirmación de Nat y dándole a Ersy una mirada de complicidad. Si iba a hacer algo tipo Cupido quería estar ahi para verlo.

Nat tenía pinta de estar apurada con la situación y yo hice oídos sordos a sus advertencias. Empecé a orquestar pequeños planes en mi cabeza y aspiré aire para contárselos cuando entraron Malcom y los demás. Aún de pie sobre el asiento, moví el brazo para indicarle donde estábamos. La mesa era lo suficientemente grande para todos. Recuperé la compostura y me senté de nuevo.

 - Tu no te preocupes, Nat. Si algo tiene que surgir, surgirá. Yo solo voy a… eliminar obstáculos en el camino -le susurré lo suficientemente bajito para que solo me oyeran mis compañeros de mesa, pero no Malcom.

Tras el gesto de Jaden, supe que ya tenía un aliado y le devolví la mirada complice. Si le presionaba un poquito, quizás Reg también se apuntarse a la fiesta.

Primera parte de la operación: comodidad. Si Nat no se sentía cómoda compartiendo espacio con Malcom, no conseguiríamos nada. Así que teníamos que conseguir que iniciaran una conversación amigable primero.

Entré y estaban alli habian unos cuantos hablando con Nat. No llegué a escuchar de lo que hablaban Solo trozos de conversacion perdidos. Pero al parecer hablaban de mi huida. En fin tenia que pedir perdon por mi comportamiento. Me daba mucha verguenza. Aun asi era lo correcto. Me acerqué a Nat y cuando estaba eso de metro y medio me doblé por la cintura hasta que mi cuerpo parecia un angulo recto. 

- ¡Perdon! - Le dije tal vez mas fuerte de lo que pretendia. - Cuando me pongo nervioso, mi corazon se acelera tanto como el de un colibrí, y si no corro... podria tener un colapso. - Era una mentira enorme, pero no podia decir la verdad. Esperaba que colase. Notaba como me empezaba a subir los colores de la verguenza, asi que antes de que me dijese nada sali corriendo. Cuando todos se dieron cuenta estaba en una mesa lejos y solo, con una bandeja y comida pero no comiendosela, si no solo mirandola. Haciendo esfuerzos por calmarse. 

La llegada de Malcom no fue demás, con una ruidosa disculpa para acto contiguo ir hacia una mesa distante... -Creo que es demasiado exagerado para solo ser nervioso o tímido, no hace falta ahondar, es su forma de ser y si no quiere cambiarla... -Pienso y sigo con mi comida, no es bueno dejar enfriar la sopa, no es nada grata estando fría.

-Bien, supongo que se han acabado las actividades del día. -Comento ya con tono aburrido. -Oye Régulus, deberías ir a colocar tu queja a ver si te colocan como moderador, la experiencia que debes tener seguro es invaluable. -Digo para ver si se enfocan en el chico con problemas de atención o para ver si él contesta algo, lo que sea mientras termino mi comida para regresar a la cabaña.

Veis como Sunan recoge su comida silenciosamente y con algun que otro quejido, como si le doliese moverse. Coge una cantidad exagerada de comida, tanto que no parece que vaya a caber anda más en su bandeja.

 Cuando tiene todo en la bandeja recupera su expresion alegre y se dirige a la mesa donde estais todos. Pero cuando ve que Malcom se sienta solo decide acercarse, pone su bandeja en la misma mesa y habla con el japones.

-¿Qué pasa? ¿Habeis tenido un problema con los monitores o algo así? Como veo que te vas solo y demás. Mi monitor se ha dejado llevar un poco por la emoción de toda esta competición,me duele solo pestañear.- dice mientras suelta una pequeña risa.

Mientras espera la respuesta de Malcom empieza a comer con avidez.

Finalmente entra en el comedor el ultimo de los campistas, el que ni siquiera se había molestado en presentarse, solo recordais su nombre del reparto de grupos: Ibiki. Va vestido de nuevo con un uniforme deportivo, el que llevaba en el bus, conforme entra pasea la mirada por la sala examinando a cada uno de los presentes hasta acabar en Sunan al que parece buscar. Cuando observa que esta sentado con Malcom observais una mueca de desprecio en su cara.

Coge un poco de comida y se acerca a la mesa de los chicos, pone su bandeja al lado de Sunan y mira fijamente a Malcom, sin ocultar su desprecio. Entonces lo ois hablar por primera vez.

-Se suponía que aquí venía la élite, no metas de tres al cuarto. Y aun así los primeros juguetes de metal que os lanzan os ponen contra las cuerdas. No me extraña que Atlas solo haya escogido a dos para su cabaña, los dos que merecen la pena.-

Aunque mira a Malcom mientras dice esto levanta lo suficiente la voz como para que lo oigais todos. Sunan claramente molesto le da un codazo con un gesto para que se calle pero Ibiki lo ignora.

-No se porque se molestan en hacernos competir, no vais a durar ni dos días. Pensaba que esto iba a ser una oportunidad de mejorar, lejos de los inutiles de mi ciudad-

Cuando acaba no deja de mirar a Malcom mientras come un poco.

-No digo..- hablo al ver a Malcom correr a una mesa vacia, el pobre parecia que iba a tener un colapso de los nervios que tenia. Sunan al verlo va a sentarse a su lado, por mi parte noto que parece algo magullado al moverse. Iba a ir a por ellos, pero entra un ultimo chico. Este entra al parecer buscando a Sunan, y despues de tomar su comida se sienta junto a el con una mirada de desprecio en el rostro dirigida a Malcom. Al escucharlo no pude evitar sonreir, -¿Deja vu?- pienso divertido al recordar el viaje en el auto bus. 

-¿Amigo tuyo? - le pregunto a Regulus en son de broma, tenia la sensacion de que esos dos se iban a llevar de maravilla. -Se ve que lo ser el chico malo esta de moda estos dias- Levanto un poco la voz  -Oye dime ¿de verdad crees que a alguien de aqui le importa una opinion como esa?- hago una pausa para tomar un trago de mi bebida  -o es que te gusta tanto el sonido de tu voz que no puedes evitar abrir la boca- digo divertido.

No puedo evitar reír ante lo dicho por el último chico en llegar y aún más cuando Jaden dice algo muy parecido a lo que estaba pensando. -Si, definitivamente deben ser familiares. -Al parecer hay gente que tiene el poder de ser borde y prepotente. -Digo apoyando lo expresado por Jaden volviendo a reír después. -Y pensar que hace un instante ya me sentía un poco aburrida, este sitio tiene de todo.

Me sentí algo mejor cuando Sunan se sentó a mi lado a comer. - No es eso... - Le intenté explicar. - Es solo que a veces mi poder me trae problemas... - Empecé a comer un poco mas relajado por la intervencion de Sunan. Parecia de lo mas majo. Entonces apareció el tipo mas prepotente que habia visto en mi vida. Me miraba mal, como si no fuese mas que una colilla ahi tirada. Eso me enfadó. 

- Y que poder se supone que tienes tu? - Parecia el tipo indicado para gastarle algunas bromas clasicas de alta velocidad. 

Antes de que Jaden pueda acabar de reirse Ibiki esta a su lado mirandole con una expresión agresiva, no sabeis como ha llegado allí, no parece que sea como la velocidad de Malcom. 

-Tu tampoco puedes abrir mucho la boca, que hayas acabado antes que él no significa que lo hicieses mucho mejor. Dejar que esos trozos de chatarra te diesen es vergonzoso.-

En ese momento Sunan carraspea sonoramente desde la mesa en dirección a su compañero para llamar su atención.

-Ibiki dejalo, come algo y calla anda.- 

Pero el japones lo mira con una mirada confusa como si no pudiese comprender lo que decía.

-Sunan, tú deberías estar de acuerdo conmigo. Es como dijo Atlas, el nivel de este año es lamentable. Deberías dejar de rebajarte a su nivel, sabes de lo que somos capaces.-

Luego vuelve al lado de su bandeja y se dirije a Malcom, sigue mirandole como si no le importase nada de lo que tuviese que decir.

-¿Mi poder? ¿Estas seguro de que quieres verlo? No empieces peleas que no puedes acabar.-

A medida que hablaba Ibiki, la bestia gruñia y me rogaba que le dejase destrozar al chico. Arrancarle el corazon y merendarselo mientras él miraba aun. Pero una extraña y fria calma se apoderaba de mi tambien... Algo en mi interior (y no era la bestia) me decia que él seria mi primera victima a drede... Y me acojonaba seriamente no sentir remordimientos por pensar eso.