Partida Rol por web

Mikel, Hans y Berbie echaron a correr. Estaban heridos y cansados, la pelea con los gusanos de fuego había sido dura, pero estar al aire libre había renovado sus fuerzas. Se s entían más ligeros. Y eso que sobre sus cabezas volaban piedras ardientes que se estrellaban contra el suelo por doquier. ¡Incluido Sibelburgo! Y eso sin contar que la lava iba avanzando lenta e inexorablemente bajo sus pies. Menos mal que no fluía como el agua.

La verdad es que la situación se había complicado más de lo esperado. ¿Quién se podía imaginar que iba a aparecer un volcán de la nada y que entrara en erupción? A mitad de camino, se encontraron con el cuerpo de mineros liderados por Hefastus.

El minero abrazó a Barbie al verla aliviado. Después de lo que acababa de pasar, lo lógico habría sido pensar que morirían. De hecho, se habían salvado por los pelos. Si el combate hubiera sido más largo o la navegación de Daftpunk hubiera fallado, seguramente la montaña hubiese explotado con ellos en su interior.

El reencuentro de Hefastus y Barbie no fue el único. Con su forjado y escultural torso al aire, Ken de Génesis no tardó en hacer acto de presencia. Parecía venir corriendo desde el pueblo pero, ¿a qué había venido?

Marlboro llegó corriendo, al llegar dejó a Berbie y Hefastus disfrutar de su reencuentro, cuando terminaron se dirigió a este último - ¿Cuál es la situación? - Preguntó seriamente, esperaba a que Hefastus le informase sobre cuál eran los protocolos que seguían para estos casos, luego vio al agente Ken, le miró y le hizo un gesto de espera - Ahora me informas de la operación - Le parecía secundario su informe ahora y a que venía, su intención era evacuar a los mineros.

     Pelo oscuro, gesto serio ~ Pelo oscuro, gesto serio ~ Pelo oscuro,  gesto serio ~ Pelo oscuro,  gesto serio - se me podía ir escuchando balbucear mientras avanzaba por aquellos senderos hasta que cierta figura me hace tener que detener mi avanzar de manera abrupta.

    Marlboro, gracias a dios que estas bien - mentaba al ver a mi compañero, pero al escuchar sus palabras rápidamente pasaba a tomar una pose un tanto mas militar - Fuertes sismos han comenzado a Asolar a la población de Sibelburgo además de repentinas ráfagas de escombros que caen sobre los edificios, parecen que tienen como Origen este lugar... Croquet se fue a velar por la seguridad de su Ilustrisima, mientras que me dejo la parte de ayudar a la población - iba diciendo, para mirar por unos instantes el grupo de extraños que le seguían y luego volver la atención a Marlboro - Ayudando al Alcalde, el mismo me pidió que buscara a un tal Hefastus Brenthurg, pues confía que el y su gente puedan a Auxilar con el desastre que esta por alcanzar al poblado. - terminaba de comentar, para quedarme mirando con ligera ansiedad toda la escena y como la inminente lava estaba cada momento un poco mas cerca del poblado.

—¿Qué os ha pasado ahí abajo?—le preguntó Hefastus a Berbie tras separarse del abrazo con gesto aliviado—¿Cómo rayos habéis podido salir con vida?

Estaba claro que el minero se esperaba lo peor.

—No lo sé—respondió la chica un poco conmocionada—. Yo me tuve que quedar en los niveles superiores, el calor era demasiado y entonces... ¡Todo pasó demasiado rápido! Primero aparecieron los gigantes cargando unos gusanos monstruosos de piedra. ¡En serio! Y cuando salimos al exterior... la montaña explotó sobre nosotros.

Hefastus escuchó con seriedad las palabras de Berbie.

—Seguramente os salvasteis porque estábais justo debajo de la explosión. Ha sido una...

Entonces el minero interrumpió lo que decía y se giró hacia el renovado trío de agentes imperiales. Tras hacerle un gesto a la chica se acercó a Ken.

—Yo soy Hefastus Brenthurg. ¿Quién eres?—entonces señaló a Mikel y a Hans—¿También vienes con ellos?

    Soy parte del mismo grupo - le mentaba al sujeto que parecía ser a quien estaba buscando - pero eso no es lo importante ahora, lo que que prioriza en estos  es que volvamos junto al alcalde para poder organizar las ayuda, pues cada minuto cuenta para salvar a los civiles del poblado - decía totalmente consciente que en estos momentos aunque quisiera... mi fuera individual no seria capaz de ayudar al bien común. 

¿Ese es el plan entonces? ¿Volver con el alcalde? - Preguntaba Mikel pensando que Hefastus ya tendría algo planeado, con el dolor en el culo que era, seguro que podía confiar en él para que tuviese algo... Qué decepción 

Hefastus frunció el ceño al escuchar el mensaje de Ken.

—Dudo mucho que el alcalde te haya dicho que volvamos con él al pueblo—dijo con desconfianza.

El jefe de los mineros señaló el inesperado volcán en una pose anime bastante chula y digna del mejor de los husbandos. La verdad es que estaría guay ser un personaje como él.

—Ahora mismo la mayor amenaza de Sibelburgo es esa montaña que escupe una lava que inexorablemente avanza hacia nuestro pueblo. Nuestro objetivo es evitar que eso llegue a pasar.

Un minero gordo y barbudo se acercó a donde estaban los agentes y el jefe de las minas.

—¡Hefastus! El campamento provisional esta preparado—dijo a modo de anuncio con un tono que parecía incluso militar—. Johan viene ya de vuelta con los mapas topográficos.

—Perfecto—dijo con satisfacción, para después dirigirse a Berbie—. Un pequeño grupo va a salir hacia el pueblo. Ve con ellos. En el pueblo habrá problemas y la gente necesitará ayuda. Aquí sólo vamos a picar piedras.

Finalmente se giró hacia los agentes imperiales, mirándolos con la misma desconfianza con la que se había dirigido a Ken. Estaba claro que no confiaba en ellos.

—Si me disculpan, tengo un pueblo que salvar haciendo una maniobra geológica-minera imposible.

Lo que quieras - Respondió Marlboro a Hefastus, no le caía bien, pero confiaba en que su trabajo iba a hacerlo bien - Berbie, te seguimos - Dijo con un toque militar - Vamos Ken, tenemos que ayudar a esta gente - El agente sabía qué tal vez a su jefe el noble se la sudaba totalmente que este pueblo se calcinase, pero tenía la excusa perfecta para que entrase en razón si se quejaba de algo, al fin y al cabo son efectivos útiles 

—Hefastus, ¿pero y los monstruos? ¿Y si esos monstruos vienen con la lava? ¡Necesitas aquí todas las manos posibles!

—¿Esas cosas son de piedra?

Berbie asintió a la pregunta de Hefastus

—Entonces no hay de qué preocuparse. Crearemos canales por los que fluya la lava, y si esos monstruos aparecen... Sabrán lo que es enfrentarse a los Mineros de Sibelburgo—terminó con la voz llena de orgullo.

     Aunque igual tuviera una o dos palabras respecto al tono del Minero, eso podría esperar hasta que esto estuviera ya mas calmado, tal que asintiendo a las palabras de Mikel le seguiría hacia donde se me necesitara para hacer mas amena toda esta seguidilla de problemas ambientales ... entonces de echo el alcalde no tenia protocolos para esto, extraño considerando la importancia que se le da a la minería en este pueblo... 

El agente miró con cara despreciable a Hefastus, tanto por hacerse el chulo como por que seguramente si que hará lo que se propone, que asco le tenía.

Miró a Berbie y Ken con impaciencia, estaba esperando a que la minera se decidiese si partir o no.

Berbie acabó haciéndole caso a Hefastus y se fue junto con el pequeño grupo de mineros a los que también se unieron Ken, Mikel y Hans. Todos se subieron en una camioneta y pusieron rumbo hacia el pueblo de Sibelburgo a donde llegaron no mucho después. 

Cuando entranron en el pueblo, vieron que estaba bastante vacío. Parecía que había tenido una evacuación bastante ordenada y limpia y a tenor de las palabras de Ken, todo gracias al alcalde. Todavía había gente allí, ayudando en las extinciones o ayudandos a los rezagados. Los sibelburgueses parecían gente honrada y trabajadora 

Entonces vieron un tumulto.

—¡Ese es el alcalde!—exclamó el conductor—¿Qué está pasando?

Ken y Mikel continúan aquí.