Partida Rol por web

Con Karizma en brazos, Tank emergue a un Taller que ya no parece parte de este mundo. Los cuerpos en el piso parecen convertidos espontáneamente en ancianos; todo el lugar ha sufrido el ataque del tiempo y parece polvoriento, a punto de desintegrarse.
 

Menos Down Cage. Down se encuentra empalada a la pared por una pulsante lanza violeta, de pura energía. Su luz ilumina tétricamente el lugar, a la propia Down, que parece más... vieja. Tal vez por un efecto óptico; la lanza parece estar poco a poco terminan de devorar sus despojos.

Con un salto, Tank llega hasta el ventanal, ahora partido en millones de astillas de vidrio, como un grano reventado hacia el cielo cargado de tormenta, electricidad, y poder desbocado. De un salto, se encuentran afuera. 

La piedra desciende abruptamente hacia el lago, negro como la noche. Arriba las nubes grises se iluminan por los relámpagos, y el estruendo de los truenos se mezcla con explosiones que vienen del otro lado de la montaña. El fulgor desde allí no es eléctrico; es naranja pólvora y explosivos.

Se adentran en el lago, rápidamente ambos llegan a la otra orilla y transitan los picos helados. Tras dos días de marcha sobrehumana llegan a un pueblo, en el cual descubren que se encuentran en Perú. 

Una nueva vida...