Partida Rol por web

Vale pues como en un hilo estoy medio muerta no posteare de momento y solo posteare en el del pasado que aun estoy algo viva, si?

El medico estaba curando mis nuevas heridas cuando entre unos cuantos consiguieron sacarme a mi y a los demas de aquel cenagal, no tenia muy claro lo que estaba sucediendo pues estaba medio ida y me sentia en dos lugares a la vez; a parte de que tanta herida junta estaba haciendo mella en mi y practicamente ya no me sentia la misma.

La cuestion es que ahora me encontraba tendida en el suelo... recordaba el beso y no beso que le habia dado al medico pero como este seguia haciendo su trabajo supuse que el beso no era real; por otro lado debiamos salir de alli y aunque no me encontraba en condiciones haria todo lo posible por no ser un estorbo.
Movamonos antes de que vuelva a aparecer algo.. dije medio moribunda mientras intentaba ponerme en pie

Pero aun no era capaz necesitaba algo de ayuda
Alguien podria ayudarme?? dije mientras me apoyaba en un arbol Hermana indiquenos el camino le dije para intentar iniciar la marcha Y entregueme esa pistola... creo que en manos mas expertas hara menos daño

Despues de darle el beso al medico nada me sabia diferente, sabia igual que uno dado de verdad.
Maldita sea!! masculle entre dientes, ahora el medico se haria ilusiones, unas que no eran ciertas; si que era verdad que era mono pero en mi vida no habia cabida para el amor, asi que simplemente me levante y asome la cabeza por la abertura del avion, alli afuera estaba Sextus que habia sido uno de los primeros en salir, en el interior quedaban pocos pero al mirar entre la maleza... estaba el otro

Como era posible?? Volvi a mirar a uno y a otro

No os movais de aqui hasta que no pasen los dinosaurios les grite a los que aun se encontraban en el interior del avion EEEHHH tu!!! le gritaba al Sextus que se encontraba entre la maleza, mientras saltaba del avion y salia corriendo en su busca Vuelvo en seguida le dije al otro Sextus al pasar por su lado.

No sabia que estaba sucediendo ni en que vida me encontraba realmente pero pensaba descubrirlo

- ¡Que te lo has creído cara bonita! - Exclamó tras escuchar aquella sugerencia para nada vinculante acerca de arma. - Mi pistola se queda conmigo. Aunque prometo no volver a usarla contra ti. Justo entonces la hermana se dio media vuelta y se dispuso a regresar tras sus pasos en busca del lugar que aquella gente le había indicado. Debían llegar a aquella balsa cuánto antes. Era su mejor baza. - Es por aquí... - Dijo totalmente segura de lo que estaba hablando.

Carter salió corriendo detrás de lo que había visto, ese segundo Sextus o lo que fuese, dejando al resto con el rugido todavía resonando en sus oídos y sus cuerpos temblando por lo que podía significar.

Por su parte, Sextus no estaba nada a salvo. Ahora aquella morena se dirigía corriendo hacia ella. Si le atrapaba, ¿qué pasaría?

Mientras todo esos sucedía, el resto no tenía tiempo para preocuparse por la huida de Carter porque había hecho su aparición aquel bichejo tan simpático.

Su aparición hizo que Carter se detuviese y que Sextus... tuviese tiempo de decidir lo que hacía.

La monja se nego a entregarme la pistola y yo estaba demasiado debil como para quitarsela pero tenia claro que una vez me encontrara con mas fuerzas se la quitaria y tal vez les pegara un tiro a todos... solo tal vez, porque una cosa estaba clara y es que yo sola no saldria de alli.

Asi que simplemente agache la cabeza me apoye en la persona que me estaba ayudando a mantenerme en pie y seguir caminando y segui a la monja

Cuando me puse a correr en busca de aquel Sextus una nueva bestia hizo su aparicion y es que parecia que aquella isla queria hacerse un bolso con nosotros pues desde que habiamos llegado no habia reptil que no quisiera comernos, me quede inmovil a la vista de aquel animal a la espera de ver que hacia aquel hombre; tenia dos posibilidades intentar esconderme y tal vez con aquello perderle de vista o seguirle con el riesgo de que aquel animal nos devorara.

No pensaba moverme hasta que él no hiciera su movimiento o el animalillo intentara comernos

El enorme y repelente bicho, pareció mirar en todas direcciones. A varios metros bajo su cabeza, cada uno de vosotros intentaba quitarse de allí a la mayor velocidad posible, como hormigas huyendo despavoridas del pie que intentaba aplastarlas.

Zenji y Diana se metieron entre la vegetación. Carter, que había corrido detrás de Sextus, se quedó quieta esperando que no le viesen. Incluso Vance, que acababa de despertarse con la sorpresa de hallarse cara a cara con aquel monstruo, había sido rápido y eficiente camuflándose con las plantas que tenía al lado.

Pero la Hermana no tuvo tanta suerte. Se dispuso a huir, tropezó y cayó. Eso llamó la atención del monstruo, que miró en su dirección, lanzó un rugido tremendo y después abrió y cerró sus mandíbulas sobre ella.

Cuando levantó la cabeza, los dientes del monstruo llevaban cogida del hábito a la hermana, que estaba prácticamente cabeza abajo. Otro movimiento llamó la atención de la criatura, que ya parecía dispuesta a tragársela, y miró en dirección hacia O'Brian, que parecía haber chocado con una vegetación demasiado densa para atravesarla.

Y por si eso fuera poco, apareció otra criatura más, similar a la otra en cuanto a forma, pero de menor tamaño.

Alzó su cabeza y empezó a olisquear el aire, aunque no le costó localizar rápidamente a O'Brian, que prácticamente se comportaba como si él mismo fuese una gigantesca diana para aquellos bichos. En cuanto lo vio, se lanzó a por él a toda velocidad, y sus cuatro patas amenazaron con aplastar cualquier cosa que se encontrara a su paso, lo viese o no.

Me parecía soprendente lo que aguantaba la morenaza, con aquellas heridas cualquier otro soldado estaría tirado en el suelo gimoteando, pero ella soportaba el dolor de una forma admirable, aunque mantenerse de pié era otra historia, aunque su rostro intentaba mostrar entereza lo conseguía en parte, el rictus de dolor era visible y el balazo de la monja no había ayudado en nada.

-Hermana, está bien conserve el arma, pero la próxima vez apunte a los japos ¿de acuerdo?-dije entre suspiros de esfuerzo cargando con Carter, a la que miré fijamente-de todas formas tú estás demasiado débil, no estás en condiciones para empuñar un arma, por muy dura que seas, todos tenemos los mismos litros de sangre en el cuerpo-dije con una pequeña sonrisa-sigamos a la monja, al parecer su querido Dios la guía..-fue lo último que dije cargando con Carter no sin lanzar una rápida mirada a sus labios de nuevo.

Sextus vio acercarse a la morena, asomo la cabeza, y le hizo un gesto señalando a la mujer rubia, y luego un vete vete.

Y dando por concluido su trabajo, se acurruco en el suelo y todo hasta ponerse al lado de una piedra. Allí se hizo lo más pequeño posible. Afortunadamente, no era gran cosas de persona, así que no había mucho que esconder.

Ambos os escondisteis perfectamente, pero la situación se volvió tan caótica como recordábais. Sextus, el auténtico (XD), echó a correr a toda velocidad, mientras la  Hermana Claire era levantada en el aire por las fauces de una de aquellas criaturas. Jack también inició la carrera y en general, todo el que no estaba escondido, estaba corriendo.

Pero no todo iba a quedarse así.

Sextus empezó a sentir un extraño hormigueo a su alrededor. Era como si de repente, todo su cuerpo temblara. Además, empezó a brillar, como sí... como sí....

Carter ni siquiera lo vio. Sextus fue rápidamente rodeado por uno de aquellos embudos y al igual que había aparecido, desapareció de nuevo, con un "flop" en el aire.