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Et in Barcino Ego Origins

Preludio : Constanza de Montcada

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09/07/2010, 11:50
Constanza de Montcada

Notas de juego

Heráldica de los Duques de Bretaña:

Escudo de Armas (sobre el año 800): http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/5/5f/BlasonBRETAGNE.PNG

Idem (sobre el año 1000): http://www.celtichearts.com/php/images/heraldry/brittany_coa.gif

Idem (sobre el año 1300): http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/thumb/2/26/COA_fr_BRE.svg/200px-COA_fr_BRE.svg.png

Bandera (hay más pero ya son del 1500 en adelante): http://www.worldflags.es/imagenes/347iKROAZDUBRTXXS.jpg

Emblema (representa el armiño): http://www.moldeo.eu/modules/actualites/upload/hermine%20PM.jpg

Este es el de los Montcada (:P) : http://www.grandesp.org.uk/resources/armas/m/moncadaarn.gif

Si algún link no te va, a mi me ha pasado a veces, insiste o copialo y lo abres en otro explorador, no pongo las fotos para ahorrar espacio. 

Pobre Ponç, menos mal que Constanza no se echa novio o le da algo :PPP La pesadilla mosquea... :OOO Y lo de Algeciras... Acabo de leer el sitio de 1309 en la wiki, anda que... Voy a ver si sigo limpiando y puedo acabar hoy con los cristales y cortinas... :((( 

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09/07/2010, 15:44
Director

Notas de juego

Gracias :), en cuanto a la pesadilla ... psss psss, tampoco es el defecto de pesadillas no me vayas a salir con esas :), ¿qué será? ... ¿será?  :P.

El sitio comienza en 1309 pero las negociaciones comenzaron en 1308 y culminaron el 19 de Diciembre, parece que al final la gente se dio prisa para irse de vacaciones :).

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10/07/2010, 01:30
Constanza de Montcada

Dos días con sus noches habían pasado y el alma de Constanza, si bien el sentimiento iba desapareciendo conforme pasaban las horas, aún se inquietaba al recordar aquel extraño sueño, en realidad una espantosa pesadilla, con la que despertara de forma tan abrupta. Aún recordaba aquella sensación, el terror atenazando su ser, el blanco camisón impregnado de las gotas de sangre que su cuerpo desprendiera en forma de sudor.

Pero... ¿Qué había sido aquello?. Como todo ser humano o inhumano, a veces, había tenido malos sueños, normalmente relacionados con aquello que temía o cuando se enfrentaba a situaciones difíciles. Recordaba que cuando era muy niña, cuando se portaba mal, su aya la amenazaba con que los moros vendrían y se la llevarían, y esa noche soñaría con aquellos espantosos hombres asaltando el castillo de su padre y llevándosela como rehén, como esclava, lejos de allí.
 
Y ya de adulta, mientras Alfonso la cortejaba, soñaba que sus planes quedaban arruinados y ella era desterrada. Cuando enviudó y salió aquellas noches en busca de un embarazo que obtuvo y del que se libró voluntariamente, tenía pesadillas que siempre eran la misma: era descubierta y arrastrada ante el Rey, acusada y ejecutada, o encerrada en una celda de por vida, como prisionera o forzada a tomar el velo, que era lo mismo. Luego, tras su encuentro y pacto con Roldán, los meses que siguieron al aborto y hasta su Abrazo, soñaba sus hijos perdidos, o con su futuro Sire, que se convertía en un demonio y se llevaba su alma al infierno.
 
Pero nunca, desde su conversión, desde que abrazara la noche, había sufrido de pesadillas. Tampoco de sueños agradables, hasta donde alcanzaba a recordar. Sin embargo aquello... ¿por qué soñó con aquello?. ¿Era algún tipo de aviso o advertencia?. Podía comprender, hasta cierto punto, las visiones de demonios y bestias pues recién acababa de leer la carta de Wilhelm. Aunque el resto... ver a Don Jaime y a su Corte, a su esposo y a su padre, de aquella forma y con semejante fin, con el fuego devorándolo todo... Y las palabras del anciano, oh, por el dulce nombre de María Inmaculada, las palabras eran lo peor de todo.
 
"La bestia despierta"...
"Entre las sombras moran sus servidores"...  
"Recuerda la bestia"...
"El guardián ha muerto"... 
"Adalid del destino"...
 
"La bestia despierta"...
"La bestia despierta"...
"La bestia despierta"...
 
Cada vez que despertaba, cada cosa que hacía, bien fuera vestirse, caminar, escribir, leer, hablar con el Mayordomo del Castillo o entrenar con Ponç, le recordaba la pesadilla. Un susurro, un rezo, una palabra, un color, un aroma, un vestido, el paisaje que divisaba desde cualquier ventana... siempre había algo que traía a su mente las palabras del anciano de su sueño. ¿Pero de que bestia hablaba, de la Bestia que todo Hijo de Caín encierra?. ¿Qué guardián había muerto?. ¿El guardián de qué o de quién?. A veces llamaban así a los Magistri, ¿habría muerto alguno de ellos?. ¿Quién era el adalid y de que destino?.
 
Todo eran preguntas, preguntas sin respuesta que acongojaban su alma en los últimos dos días. Ni siquiera había disfrutado del día de San Esteban, tanto que le gustaba a ella, aunque los criados obtuvieron la paga esperada. Gracias fueran dadas a Dios porque, según pasaba el tiempo, las imágenes marcadas a fuego en su mente iban desvaneciéndose, a pesar de que las preguntas permanecían. Incluso había dejado de pensar en el viaje a Marsan, aunque debía reconocer que en posponerlo pesó más en su ánimo el peligro de darse de bruces con algún lupino que cualquier otra cosa. Quizás si llevara con ella varios hombres, una buena escolta, ninguno de ellos se atrevería a...
 
Pensando en esto y mientras esperaba a Ponç fue que entró Mencía en la sala de armas con la carta de Roldán, y de no ser porque identificó al instante el sello de su Sire habría dejado la lectura para otro momento. Sus manos casi temblaban al romper el lacre y desplegar el pergamino. ¿Habría regresado a Barcelona?. ¿Qué querría de ella?. ¿Estaba enfadado o... o...?. ¿O había pasado algo grave en la ciudad?. Mencía se retiró y Constanza leyó la carta, no una, sino dos veces. ¿Pero qué demonios...?.
 
Su primer impulso, no muy acertado como solían ser, fue levantarse de su asiento, furiosa, estrujando la carta con sus pequeñas manos y arrojarla al fuego, dando la vuelta y empezando a andar, casi a correr, de parte a parte del gran salón todavía decorado para festejar las Navidades. El segundo impulso, naturalmente, fue regresar junto a la chimenea para rescatar la carta. Por fortuna no había sino caído a un lado, aunque ya las llamas empezaban a lamer una de las esquinas.
 
No sería Constanza la que acercara tanto sus manos al fuego para recogerla, y temiendo que si llamaba a algún criado no llegaría a tiempo, tomó en sus manos uno de los hierros, se armó de coraje para acercarse un poco más y la arrastró fuera del hogar, levantando sus faldas y pisando fuerte para apagar la pequeña llama que la quemaba. Luego la cogió, regresó a su asiento y la extendió sobre el regazo, retirando las cenizas e intentando alisarla lo más posible. No sería hasta más tarde que repararía en que sus manos y ropas habían quedado tiznadas. Procedió pues a una tercera, y mas calma, lectura.
 
No la sorprendió demasiado saber que Roldán se encontraba en la Corte de Castilla negociando aquello de lo que ya oyera hablar en la Corte Real. Asuntos de guerra de los que ella entendía bien poco o nada, fueran de los humanos o de los cainitas, eran todos tan tediosos... hablar de hombres y armas y lo demás. ¿Qué esa corte y la tarea encomendada le parecían desagradables?. Era su problema, bastante tenía ella con lidiar con sus propios problemas, y en lo que a ella atañía bien podía quedarse una temporada por las áridas tierras castellanas.
 
Soltó un bufido al leer el nombre de Silvestre Ruiz, siempre se preguntó que razones esgrimía para considerarse Señor de Iberia, nada menos. ¿Iberia? ¡Castilla y gracias!. Los Magistri eran tan... petulantes, y tantas veces sin motivos. ¡Pero si ni siquiera sabían mantener el orden en su propio reino!. En Aragón, salvo contadas ocasiones, los nobles no se alzaban en armas contra su rey y en Castilla, a la mínima, le volvían la espalda, claro que porque algunos de sus monarcas resultaron ser perfectos inútiles. Y, claro, así no había forma de que la Reconquista avanzase y tenían que pedir ayuda al reino vecino. En Aragón sabían hacer las cosas mucho mejor.    
 
Por supuesto las palabras acerca del cariño que le profesaba la indignaron. Oh, si, había tenido una hermosa prueba de ello, de hecho varias pruebas. ¿Pensaba que era idiota?. Si, era su única Chiquilla, o criada, o esclava, o lo que fuera. ¿Qué solo confiaba en ella para aquella tarea de asegurar el papel de los Patricios en la toma de Algeciras?. Por Dios Bendito, mejor haría confiando en Cesc, que era un mercader. Ella no sabía negociar.  
 
-¿Pero que demonios sé yo de estas cosas? preguntó al aire que la rodeaba. ¿Es que se ha vuelto loco? Más loco de lo que parecía estar últimamente.
 
Se reclinó en la silla, los codos apoyados en los brazos del asiento. A Constanza no le quedaba duda alguna de que Roldán era el único Vástago de la Corte de Cneo capacitado para dirigir las tropas aragonesas. ¿Quién, sino él, tenía la experiencia y fuerza suficiente para llevar a cabo semejante tarea?. Si llevaba siglos haciéndolo... Pere Joan D’Aguilar era demasiado joven para ello, demasiado... Sería locura encomendarle la misión. Pero también Cneo parecía haber perdido el juicio de un tiempo a esta parte. ¿Aitor? Era un buen alguacil, pero una cosa era vigilar Barcelona y otra muy distinta ir a la guerra... suponía la dama.
 
De reojo volvió a leer una de las líneas.
 
"Es de vital importancia que aseguréis el papel de nuestro clan en la toma de Algeciras, no permitáis que nuestros esfuerzos caigan empañados por la influencia de otros". 
 
Ni el Nosferatu ni el Tremere se interesaban demasiado en asuntos de guerra, o eso creía ella. ¿Leonor?. ¿Pero que infiernos le podía importar a la aquitana aquel asunto?. ¿Entonces?. ¿Los Demonios?. Pero ellos... Y si Leonor... Sus manos habían plegado la carta sin darse cuenta. Constanza se quedó mirando el fuego.
 
"El guardián ha muerto"... 
"Adalid del destino"...
"La bestia despierta"...
 
No, no. Otra vez recordar la pesadilla, no. Antes de que se diera cuenta, su cuerpo se había movido y levantado de la silla con gran esfuerzo, lentamente, como si llevara un gran peso, dirigiéndose hacia la puerta del fondo que conducía al pasillo principal. Allí se cruzó con Ponç.
 
-Cambio de planes le dijo negando con la cabeza. Volvemos a Barcelona de inmediato.  

 

Notas de juego

Si, y prepararon el ataque para el 24 de Junio, Sant Joan. Por cierto, ¿sabías que el yelmo de Jaume I lleva un dragón en la cimera? :PPP Menos mal que lo criaron los Templarios y que éstos, supuestamente, estaban controlados por quien ya sabes, o lo intentaba :PPP

Editado porque me había "desaparecido" una frase :(((

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10/07/2010, 23:36
Director

 

Atrás queda Montcada y la seguridad de sus muros, el carruaje avanza lento pero seguro por los caminos cubiertos de nieve, afuera montado en su capón cabalga Ponç, junto a ti dentro del carro viaja Mencía, tu dama de confianza.

El viaje se hace más incomodo a la vuelta que a la ida, no solo tiene que ver con el estado de los caminos, simplemente no tienes el menor deseo de volver a Barcelona y su corte, pero tus deseos importan bien poco a tus mayores.

Ya desde niña fuiste educada para cumplir para con tu deber... con tu familia, y ahora por añadido debes de cumplir con tu clan, a pesar de habérsete pedido con el mayor decoro del mundo en el fondo sabes que se trata de una orden, una orden que no puedes rechazar, la tarea en si no es más desagradable y trae consigo la promesa de una suculenta recompensa.

Dándole vueltas al asunto das por sentado que no debe de ser una elección difícil, hasta ahora tu sire es y ha sido el responsable de cerrar el trato para con los castellanos, de igual forma que ha sido siempre el que ha velado por los intereses de Cneo fuera de su reino, algo que sinceramente no entiendes, ¿pues no está su sitio al lado del príncipe para asistirle en el día a día?, ¿por qué hará las veces de embajador?.

No, no puede haber otro más que apto que él, estratega, militar, noble y por añadido uno de los cainitas más antiguos del reino de su alteza, a menos que ... a menos que esos malditos Toreador planeen algo ... Leonor se mostró especialmente agradable con el monje farsante ¿por qué?, ¿qué interés puede tener la aquitana en los Bizantinos?.

Aitor ... sí ... es un buen alguacil, según tienes entendido un gran capitán de navíos ... y sí Cneo se decidiera por apoyar con su flota dejando que los castellanos se desgasten por tierra, la flota catalana no tiene rival en mar y Aitor es el mejor capitán que ha pisado un barco, haciendo caso a los rumores, ya de mortal era un temido y cruel pirata ... ¿pero será Aitor el único chiquillo de Cneo?, casi todo entorno al príncipe es un misterio a salvedad de su pasado mortal, ¿tendrá más chiquillos? ... posiblemente ... tampoco es muy descabellado que sean tan antiguos como Roldán quizás más, ¿quién sabe?.

Mencía descorre la cortina con un clap trayéndote de vuelta al estrecho habitáculo del carruaje, al mirar por la ventanilla ves el objeto de su curiosidad, Ponç, quién monta a la diestra del carruaje con la mirada puesta en el camino, su capa llena de copos nieve, está nevando, por fortuna Barcelona está cerca, a no más de una hora de trayecto.

Será mejor dejar de preocuparse por el que será, al menos hasta poner un pie en la corte ... para distraerte comienzas a hablar con Mencía, siempre tiene algo útil que contar, tal o cual señor se acuesta con aquella dama, tal párroco abusa de infantes, aquella dama está embarazada de tal señor pero se rumorea que el padre no es sino aquel otro, la otra toma artemisa para bajar su vientre antes de que sea demasiado evidente.

Mentalmente tomas nota de cuanto te dice, tal vez algún día te sea útil, la vida en la corte exige la rectitud de un santo so pena de estar sometidos a la burla y el desprestigio, en la corte las indiscreciones se pagan caro ... muy caro, todo se basa en la reputación y el simple hecho de abortar es un crimen, al igual que la fornicación o el adulterio, Dios y la iglesia es tajante aunque bien se sabe que los monjes son tan pecadores sino más que los seglares, depende de quién se hace la vista gorda o con pagando una bula se da por perdonado, así es la justicia divina para los ricos.

El carro se para , al mirar por la ventana ves las murallas de Barcelona, la puerta cerrada se abre para vosotros, las puertas de la ciudad siempre están abiertas para ti incluso en plena noche cuando deberían de estar cerradas, Dios se apiade del guardia que os vede el paso.

El carruaje avanza por las empedradas calles con el característico traqueteo enfilando en dirección al barrio menestral a Carrer Montacada, donde tu palacio aguarda. Aún queda tiempo para cambiar tus ropajes por unos más apropiados para la corte de Cneo.

Una hora después cabalgas junto a Ponç hacia el Palau Mayor, abajo a través de pasillos ocultos, llegáis a la antigua sala de estilo prerrománico, una puerta de grandes dimensiones veda tu paso, al verte llegar el ujier te saluda agachando su cabeza en señal de respeto.

 

-Buenas noches señora, iré a anunciar vuestra llegada- uno de los guardias entre abre la puerta volviéndola a cerrar. Al otro lado de la puerta suena tu nombre alto y claro, las puertas se abren con un destello de luz, al fondo ves al príncipe con su característico mutismo, D´Aguilar, Cesc, Leonor, Filippo di Firenze, Salomón, incluso de Cinçao está presente, parece que las noticias vuelan, cada uno a su manera ofrece sus servicios al príncipe en la empresa que tiene por delante.

Cesc es el primero en acercarse a saludarte - bienvenida seáis noble Constanza, la corte no ha sido lo mismo sin su sol- adula, luego D´Aguilar, di Firenze besa tu mano tomándola entre las suyas -es un placer volver a veros bella dama- dice con su tono italiano.

Di Firenze se pavonea sobre el óleo que pintará para consagrar la victoria sobre Algeciras, D ´Aguilar en su inocencia aporta su espada a la causa con la vana ilusión de desempeñar un puesto importante en la conquista de la pl, Cesc se frota las manos pensando en el comercio de esclavos para ello aportará una suma considerable de dinero, para garantizar por supuesto la solvencia de la cruzada contra el Islam, de Cinçao pone su magia al servicio del príncipe para contrarrestar a los assamitas.

Sin embargo Leonor contra todo pronostico se mantiene en un segundo plano, callada observa a unos y otros haciendo vacías promesas mientras el príncipe dispensa a uno y otros con un leve asentamiento de cabeza.

Una sorpresa más ... esperas ver a Aitor a su siniestra, sin embargo para tu sorpresa no ha acudido a la corte, bien es sabido que no es muy amigo de las ceremonias, pero es raro el que no este presente en un momento como este, ¿tendrá algún asunto urgente entre manos?,¿algún encargo de su alteza?.

Su mirada se clava en ti, con un ademán de su mano te pide que te acerques, bajo la atenta mirada de unos y otros. Lentamente subes los escalones que separan al monarca de la plebe, Cneo señala su diestra, el lugar reservado a tu sire, lentamente con el corazón encogido en un puño te acercas hasta el lugar.

-Bienvenida a mi corte, ¿tenéis noticias de vuestro sire?- dice en apenas un murmullo

 

Notas de juego

la primera es la música del viaje y llegada a Barcelona.

Me ha llevado lo mio postear :(.

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11/07/2010, 01:44
Constanza de Montcada

Notas de juego

Ay, pobre... :((( Haberlo dejado para mañana, hombre, pero te entiendo, porque anoche me costó casi dos horas escribir mi turno... Un turno precioso, pero estoy que me duermo sobre el teclado, la verdad es que me había quedado dormida viendo una peli :((( Mañana lo leo tranquila y respondo, jo, todos pensando en sacar partido, que gente O:PPP

Ah, intenté postear una foto en mi post anterior, la del salón (si eres curioso, el link es este: http://img299.imageshack.us/img299/7708/0museosala...), pero ya no pude editar. ¿Quieres que te busque alguna para el salón donde se reune ahora la corte de Cneo, aunque no sea en Barcelona?. Lo ideal sería el Saló del Tinell, pero faltan como 70 años para que lo construyan, puedes verlo aquí: http://tienda.artehistoria.net/tienda/banco/jpg/HI... Lo que si que está construida es la capella palatina de Santa Àgata: http://www.dkimages.com/discover/previews/788/4180...

 

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11/07/2010, 02:44
Director

Notas de juego

Ya, habia pensado en el salón Tinell pero falta demasiado para ello, de todas formas la corte se desarrolla en ua sala desconocida del Palau Mayor.

Más concretamente debajo del salón Tinell, más adelante habrá que cambiarla de sitio porque descubren restos de la sala cavando.

Muchas gracias, responde mañana tranquila, que descanses :).

 

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12/07/2010, 00:46
Constanza de Montcada

Verdaderamente Ponç era un tozudo y así se lo hizo saber Constanza en cuanto el carruaje entró en el patio del palau y sus pies pisaron los adoquines. Con semejante nevada y había insistido en cabalgar junto al coche, helándose hasta los huesos, en lugar de viajar cómodamente dentro, con ellas. No temía que fuera a morir de fiebres, pero ¿qué necesidad había de aquello?. Por Dios Bendito, si camino más seguro que aquel no debía haberlo en toda la península. De inmediato lo mandó a sus habitaciones para que comiera algo, se calentase y cambiara de ropas para acompañarla hasta la corte del Príncipe. Mencía fue liberada hasta la noche siguiente, las otras damas se encargarían de servirla. 

Su humor no era el mejor aquella noche, sintiéndose como una niña separada a la fuerza de sus juegos infantiles para ser engalanada y llevada junto con los adultos, a fin de saludar a una visita no deseada. Puesto que el viaje había sido corto no consideró imprescindible tomar un baño, le bastó con asearse y perfumarse. Lo único bueno de transitar por caminos nevados era que el polvo desaparecía bajo el hielo. Mientras paseaba por su dormitorio decidiendo que vestido se pondría de todos los desplegados ante ella, volvió a recordar los chismes que Mencía le contara, nimios en apariencia, pero nunca se sabía que utilidad podía darles en el futuro, incluso ofrecer su desinteresada ayuda o silencio... por el momento.    
 
 
Aquello le hizo regresar, de nuevo, a sus primitivas cavilaciones. Si, Roldán era el Vástago más indicado para dirigir a los aragoneses en el asalto a Algeciras, ¡pero si él mismo había pactado los términos del acuerdo!. ¡Siempre preocupado, desde que lo conociera, por la causa de la Reconquista, para que no quedara relegada al olvido!. Y sin embargo, cada vez que pensaba en ello, su desasosiego crecía, alimentado por tantas inseguridades... ¿A que influencias se refería su Sire en la carta?. ¿A los Toreador o a los Tzimisce?. ¿Quizás a los Lasombra?. Si tan hostil encontraba la corte castellana y tan arduo fue sacar adelante el tratado... Había olvidado que Aitor era marino, y muy  bueno, según se decía. ¿Y si...?. ¿O...?.
 
Dedicando a estos clanes, desde lo más profundo de su alma, maldiciones tales que harían sonrojarse a cualquier soldado, aunque desde luego nunca las expresaba en voz alta pues ninguna auténtica dama lo hacía, se decidió por uno de ellos, luego por las joyas que llevaría, y por último el peinado.
 
-Quédate aquí... susurró Constanza a Ponç cuando estaba a punto de ser anunciada o sal fuera y dá una vuelta... pero no te alejes demasiado. Es posible que acabe pronto.
 
Al abrirse las puertas se quedó paralizada un instante. ¡Por Dios! ¿Pero es que toda la Corte se había reunido aquella noche... o casi todo el mundo?. Al fondo el Príncipe, sin la compañía de Roldán y Aitor, parecía más encerrado en si mismo, más inaccesible que nunca y... ¿dónde se habría metido el alguacil?. ¿Y su chiquillo?. Varias cabezas se giraron hacia ella y algunos Vástagos se acercaron a cumplimentarla.  
 
-¿Tendremos luego un breve aparte, vos y yo? le dijo sonriendo al adulador de Cesc, como sin darle importancia a lo que tuvieran que hablar, antes de que D’Aguilar y Filippo llegasen junto a ella y les ofreciese la mano, agradeciéndoles su cortesía y les dedicara otras palabras banales, de circunstancia. Desde la distancia inclinó la cabeza hacia Salomón y luego se volvió al fondo.
 
La etiqueta exigía, para aquellos que la seguían a rajatabla, que al llegar se presentaran los debidos respetos al Príncipe, pero en aquel momento no podía hacerlo. El Tremere se encontraba hablando con él, ofreciéndole su magia para... ¿Oh?. ¿Pero es que ya estaban al corriente del tratado y de las intenciones de Aragón y Castilla?. El resto de los cainitas presentes se apresuraron también a ofrecer a Cneo sus artes, recursos o habilidades, pero no, no todos... curiosamente Leonor se mantenía aparte, como si aquello no fuera con ella. Si, era muy extraño, pues la aquitana no perdía oportunidad de destacar, y si no existía, la creaba. Al escuchar a Cesc sus cejas formaron un perfecto acto que descendió al segundo siguiente.
 
Constanza esperó unos minutos a fin de no interrumpir a los que hablaban, antes de acercarse al Príncipe y ofrecerle una cortesana reverencia. Al incorporarse, dispuesta a hablar, vió los ojos de Cneo fijos en ella y su ademán indicando que subiera junto a él, pero era consciente de que no solo eran los ojos del Lasombra los que se clavaban en ella. Levantó unos centímetros su falda e hizo como el Señor de Aragón le ordenaba, con los ojos bajo y luchando por mantener a raya sus nervios y ansiedad. ¿Pero que quería de ella?. ¿Y por qué la ponía en evidencia?. Al llegar a su lado volvió a repetir la reverencia.
 
-Gracias, mi Señor. Antes habría venido de saber que había una reunión dijo en voz baja y respondiendo a su bienvenida. Luego asintió, levantando la mirada Así es, Alteza. Acabo de recibir carta suya.
 
¿Acaso Roldán no le había escrito?. ¿O por alguna retorcida y malvada curiosidad quería saber si Roldán estaba en contacto con ella?. ¿O no sabía nada?. Constanza lo ignoraba, pero puesto que le había preguntado... Era su oportunidad para hablar y no iba a desaprovecharla. El discurso preparado quedó arrinconado, del mismo modo que su voz quedó reducida a un murmullo a juego con el del Príncipe.
 
-Mi Sire ansía, más que nunca y ahora que las negociaciones han llegado a buen puerto, regresar a Barcelona, se deslizaron, cuidadosas, las palabras de la de Montcada, a fin de informaros de todos los detalles, comenzar los preparativos, que sin duda llevarán su tiempo, y partir de nuevo, para unir nuestras tropas a las castellanas y conducirlas a una segura victoria sobre nuestros enemigos Constanza hizo una pausa Todos sus esfuerzos y esperanzas, y las de nuestro Clan, están puestas en ello, mi señor.
 

Notas de juego

Desde las 7 de la tarde lo tenía escrito, pero con lo histérica que estaba, decidí mandarlo después del partido... y después de darle un buen repaso :PPP

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12/07/2010, 18:38
Director

El príncipe asiente a tus palabras sin decir palabra alguna, su mirada fija en su corte, su respuesta tarda, pacientemente te mantienes a su lado, pues no te ha despedido, su ceño se frunce.

-Petimetres ... estoy rodeado de petimetres ... así no hay manera- susurra para si, luego vuelve la vista mirándote de frente -vuestro sire me ha servido bien en este asunto, ha cedido demasiado a las exigencias de mis hermanos pero ha llevado a buen puerto las negociaciones ... lo tendré en cuenta-

De nuevo mira al frente, una mueca de hastió cruza su cara, con sutileza miras al objeto de incordio del príncipe, para tu sorpresa se trata del caballero LaSombra, apodado el oscuro en las lizas del Born, D´Aguilar se pavonea intercambiando palabras con la Aquitana, quién no da demasiadas muestras de interés a la banal conversación.

Desde tu privilegiada posición ves a Salomón en una esquina como siempre, observando sin decir palabra, al otro lado de la sala Cesc y el brujo hablan, tal vez el mercader de esclavos este cerrando un trato, según se dice, los Tremere tienen la costumbre de usar humanos en sus macabros experimentos. Di Firenze, ¿donde está Di Firenze? ... quién apenas se despega de Leonor, su principal mecenas, tras una vista más detallada lo ves en otra esquina, observando al nosferatu judío, ¿normalmente nadie suele prestar atención a Salomón?, al menos no en la corte, ¿qué asunto se traerá entre manos?.

-¿Y vos?- dice sin dejar de mirar al frente -¿cuales son vuestros deseos?- pregunta en un susurro

Notas de juego

Lo siento no doy para más :(

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12/07/2010, 20:51
Constanza de Montcada

Notas de juego

No te apures, hombre, que estas resacoso ;)))

Cargando editor
13/07/2010, 01:28
Constanza de Montcada

 

Constanza aguardó, expectante, las palabras de Cneo, respondiendo a lo que le dijera un momento antes o bien un gesto dándole su permiso para bajar y reunirse con el resto de Vástagos presentes... bueno, no todos, claro, sino con aquellos que a ella le interesaba hablar. Ni por asomo había esperado que casi todos estarían reunidos... pero mejor, así no tendría que molestarse en buscar a algunos o mandarles notas.
 
El tiempo pasaba y el Príncipe seguía mudo. Cierto era que había asentido, pero tenía los ojos puestos en sus vasallos, era como estar con un halcón al acecho. Cuando le vió fruncir el ceño poco le faltó para echarse a temblar. ¡Oh, Dios mío!. ¿Pero que había dicho que pudiera disgustarle?. Pensaba que al Príncipe no le gustaba que se andaran con sutilezas con él y dándole vueltas y vueltas a las cosas, que prefería que se le hablase de forma directa y... Si, había pecado de poco sutil, pero...
 
Empezó a mordisquear su labio inferior y cuando por fin el viejo Lasombra habló su sangre casi se congeló en sus venas. ¿Petimetres?. ¿Iba por ella o por alguno de los reunidos?. De repente los ojos de Cneo se clavaron en Constanza y ésta se sintió aliviada tras escuchar lo que le decía. Aliviada en principio, y preocupada en segundo término. No tenía a su Sire por un hombre dado a ceder ante otros excepto, naturalmente, si no tenía más remedio o si le convenía hacerlo.
 
-A veces, Alteza, es preciso ceder un poco para conseguir lo que se desea respondió, como antes, en voz muy baja o se corre el riesgo de perderlo todo... Constanza no iba a dejar que dudase de los esfuerzos de Roldán. No conozco los términos del tratado, pero estoy segura de que mi Sire no habrá cedido tanto como para dejar a Aragón y a su Señor en desventaja, nunca lo habría permitido.
 
De eso, la de Montcada, estaba segura. ¿En que habría cedido?. ¿En el número de hombres que enviar, de armas, de tierras a repartir si la victoria, Dios mediante, les sonriera?. La atención del Príncipe, de nuevo, recaía sobre su corte, y los ojos de Constanza buscaron, discretamente, el foco de su disgusto. ¿D’Aguilar?. ¿Por qué?. Como tantos aleteaba alrededor de Leonor, con poco éxito, por cierto. Pero él era así, como tantos caballeros, buscaban además de fortuna ganarse la admiración de sus congéneres, el aplauso de hombres y mujeres, y en esto no había demasiada diferencia entre humanos y cainitas.
 
Tuvo que forzarse a sí misma a volver sus ojos a otro lado, antes de que el odio que destilaban fuera demasiado evidente. Salomón estaba apartado y vigilante, no era de extrañar, pocos se acercaban a hablar con él, Constanza nunca entendería porqué, y el italiano le estaba observando... Aquello era curioso. Cesc, como siempre, a sus negocios, en esta ocasión con Cinçao. La última vez que le viera abandonó la sala con precipitación, claro que no era para menos... Con un poco de suerte, si Cesc lo entretenía lo suficiente, aquella noche podría hablar un momento con el brujo.
 
Aún esperaba el permiso del Señor de Barcelona para retirarse de su lado, o nuevas palabras, y serían éstas últimas las que llegaron. Los ojos de Constanza volaron en un segundo hacia Leonor, pero un segundo después dejó caer la mirada a sus manos que empezaban a jugar con los anillos que llevaba. ¿Qué deseaba ella?. Que Leonor desapareciera de la faz de la tierra... o de Aragón al menos, que la Corte volviera a ser como antes, que no llegaran nuevos Vástagos a la ciudad si no eran gente agradable que no trajeran con ellos nuevos problemas... Pero la de Montcada sabía que aquello era como pedir la luna.
 
-Alteza, mis deseos carecen de importancia, Aragón es lo que importa respondió levantando los ojos hacia el hombre que, sentado en su trono, vigilaba la corte pero puesto que me preguntáis,yo deseo lo mismo que mi Sire y que mi Clan, y en este caso todos coincidimos, pues se trata de conseguir lo mejor para el reino, o vuestro Senescal no se habría esforzado tanto, ni habría... cedido en alguna cuestión. Pero no creo necesario que yo le lóe, pues bien conocéis sus virtudes en el arte de la guerra.
 
Su Senescal... Senescal... Pere, claro, hablaría con él, y con Guerau, no le costaría trabajo convencerles de que Roldán era el hombre apropiado. Y con el Rey, cuando acudiera a su corte. Cuantos más apoyos pudiera conseguir para su Sire, mucho mejor... aunque fuera Cneo quien decidiera en último extremo. *

 

Notas de juego

* Pues... es que no me queda muy claro como funciona esto, aunque Constanza si que lo sabría, claro. Quiero decir, eso de dirigir las tropas de Aragón, ¿son las humanas?. Porque no parece que haya muchos vampiros en Aragón como para mandar varias partidas de guerra ¿no?. Bueno, si no se trata de dirigir, supongo que "desde las sombras", las tropas humanas, por favor, obvia el último párrafo, el que empieza con "Su Senescal..." y que se refiere a los aliados de Constanza. Si el párrafo es válido ¿tenemos que rolearlo?. Lo pregunto porque a Constanza se le empieza a acumular el trabajo, o sea, las escenas :PPP Quiere hablar con Cesc, que supongo será algo breve... y con Xavier, que tampoco creo que sea muy largo, pero bueno, todo lleva su tiempo.

Te lo posteo ahora porque mañana, entre las horas infames a las que me estoy levantando y que tengo lío a la hora de comer y tarde de compras, no creo que cuando llegue a casa tenga mucha ganas de escribir :)))

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15/07/2010, 00:20
Cneo Escipión

El príncipe asiente a tus palabras más no responde, al menos no al momento, su cabeza bajo el mentón, con su mirada recorre la sala, un suspiro escapa de sus labios, abatido ... cansado, tal vez por el peso de los años, se echa hacía atrás acomodándose en el trono.

 -Bien ... muy bien joven Ventrue, ¿queréis una oportunidad para demostrar tu valía?- el negro infinito de sus ojos se posa de nuevo en ti - os la concederé de buen grado, puesto que vuestro sire está ocupado vos seréis la encargada de organizar a los vuestros, Aragon necesita de sus caballeros tanto mortales como inmortales-.

-Servidme bien y seréis recompensada en su justa medida, no os entretengo más, reuniros con los demás si os place- añade por último haciendo un ademán con la mano a modo de dispensa.

Abajo, el brujo y el comerciante parecen haber llegado a un arreglo, uno asiente el otro sonríe. La risa de Leonor suena forzada, cansada despide al caballero, seguramente con la excusa de "demasiadas emociones para una noche ... ".

Salomón te mira desde su rincón, ¿sonríe? ... tal vez sí tal vez no, nadie puede asegurarlo bajo esa capucha que oculta su deformación, marca visible de su linaje. El autodenominado artista acude junto a su primogénito, salvandola como un caballero andante del incordio del valenciano.

Preparar a los tuyos ... ¿cuantos efectivos?,¿caballos?, ¿suministros? tal vez Ponç pueda aconsejarte en este asunto, sin embargo lidiar con tus mayores será harina de otro costal, ¿como se tomarán el que tú una neonata, sea la encargada de organizarlos?, con casi toda seguridad mal, ¿pero se atreverían a desobedecer a su señor?, pues son vasallos de Cneo y su palabra es ley.

¿Cuantos hombres podrías tomar?, ¿partirían los señores a la guerra dejando a sus chiquillos a cargo de sus dominios o por el contrario mandarían a estos a combatir sus guerras? ... ¿quién sabe?, ¿qué harías tú?.

Mentalmente cuentas a los miembros de tu clan,al menos que tú sepas en toda Cataluña sumáis una docena, a salvedad de Cesc todos son señores, guerreros consumados muchos de ellos datan de tiempos de la marca hispánica, Alexander al igual que su homologo mortal, repartió dominios entre neonatos prometedores, a la muerte de Alexander e independencia de Cneo, la mayoría juró lealtad al príncipe de Barcelona y señor de Aragon, los que no lo hicieron eligieron entre marcharse o la muerte definitiva.

¿Cuantos residirán en el resto de Aragon?, Valencia es una gran ciudad, hace setenta años que fué conquistada por el que fuera tu suegro, tal vez D´Aguilar pueda arrojar algo de luz, sin duda dice provenir de allá.

Aquellos que residen en el norte tienen mayores problemas, pillaje, hombres lobo, mantener las fronteras, los que residen en el sur están menos presionados por los lupinos, o al menos eso tienes entendido, por desgracia la mayoria de tus hermanos se concentran en el norte, en la zona "conflictiva", tan solo dos señores residen al sur, uno en MontBlanc y otro en Cambrils.
 

 

 

Notas de juego

Normalmente se sigue el orden feudal, el señor feudal vampiro ataca junto con su sequito, o ejercito personal poniendose a las ordenes de aquel de mayor rango.

Los nobles mortales son manipulados apoyando con sus ejercitos como un noble más. Aquí, muchos cainitas son señores y tiene ejercitos a su servicio, si no lo dirige él, lo dirige alguien bajo su influencia.

Las cuadrillas de cainitas suelen ser jovenes sin recursos, que buscan renombre cometiendo alguna hazaña personal, con la esperanza de que su señor repare en él y le adjudique un dominio, convirtiendolo en caballero, tal vez con el tiempo se conviertan en señores, principes de provincias, pero solo los más astutos y afortunados lo logran, la ascendencia por supuesto tambien importa.

Esto suele darse en los altos clanes, en los bajos ... ya se sabe, con suerte se te reconoce, pero darte un dominio, va a ser que no, los gangrels se lo ganan a lo bestia, no en conquista de señores, hay pocos principes nosferatus, la mayoria son ashirra, los usurpadores pueden darse con un canto en los dientes si son aceptados en una corte. Los Malkavian, estan locos, nadie confia en ellos, son monjes apocalipticos, o caballeros errantes la mayor de la veces. Assamitas, tan solo en los ashirra, assamita en reino cristiano o está cumpliendo un contrato para un patrón cristiano o va contra él, si se sabe lo que es muerte.

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15/07/2010, 01:14
Constanza de Montcada

Notas de juego

La verdad... Esto es una broma ¿no?. Porque si no conozco más que a Roldán, un Cesc que ni he hablado con el, un señor de Figueres que es lo mismo, y ni siquiera conozco a los Ventrue del reino, ni de que van edades, dominios, como me llevo con ellos... vamos, que si ni siquiera conozco a los vampiros de Barcelona y tendría que hacerlo bastante después de 50 años, que voy a saber de los otros, ni numero ni nombre ni poder ni nada.... :OOO Y además una neonata de 50 años que es una cortesana (en el sentido de una dama que vive en la corte)... venga ya, por favor.

Pues nada, mañana más tranquilita, que ahora estoy como un poco... de aquella manera, mandaré a Cneo a la porra con un parrafito y ya está, a casita que llueve. 

O en otras palabras... me mandas un pantalla de cada ventrue que haya, lo que sabría de ellos, como me llevo, que hay... y ya aprovechamos la ocasion y lo mismo de los vástagos de Barcelona. Me parece que te has pasado un poquito, lo siento., esto no tiene ni pies ni cabeza, ni off topic siquiera.

Buenas noches.

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15/07/2010, 01:38
Constanza de Montcada

Notas de juego

Jo, y es que para más inri, lo que Cneo contesta no tiene nada, pero nada de nada que ver con lo que Constanza ha dicho, bueno, si sería todo lo contrario, si es que ni quiere probar su valía ni ocho cuartos. Es que hasta parece otra escena. Y el príncipe mas que lasombra parece malkavian, hoy te salgo por un sitio y mañana tambien, sin coherencia alguna para un antiguo y por muy paranoico que esté por su edad. Lo poco que habla, claro, que anda que también da conversación...

Yo no se como jugarás tu, ni que másters habrás tenido, pero yo estoy acostumbrada a jugar cosas "normales" y situaciones "normales", con PNJs "normales", y a ir profundizando y desarrollando mi personaje con el tiempo, en vez de ir hacia atrás como los cangrejos destruyendo la propia historia que escribí, que te has saltado y cambiado muchas cosas que escribí y tu aprobaste, empezando por la noche de bodas y acabando por lo guay que es su Sire y como la trata, o mejor dicho la maltrata. También estoy acostumbrada a que si hago algo bien mi personaje se lleve una recompensa, y si hago algo por lo que tuviera que ser castigada, le caiga un marrón encima, pero no de este modo tan aleatorio y alegre al que no le das importancia. Y sobre todo estoy acostumbrada a jugar con seny, con sentido y lógica.... Bueno, buenoooo... una neonata de 50 años que le cae semejante tarea, por dios, eso como poco es cosa del senescal, y encima sin tener ni p**** idea ni de lo que hay en el reino ni en la ciudad..., es que sé una lista de nombres de Barcelona y ya está... por favor...

Para finalizar, yo venía a jugar con "normalidad", no a participar en una carrera de obstáculos que, nada más empezar, te los ponen demasiado altos y sin venir a cuento, nada más empezar ¡zaca!, pero hasta eso asumí, pues bueno, para ver si mejoraba el tema. La verdad, pensaba que la partida iba de otra cosa, totalmente diferente a lo que estoy jugando, bueno, es que no tiene nada que ver... Para mí, lo de "comenzar una crónica en la que explorar la psique de los personajes, la mella que hace el paso del tiempo" tiene otro significado y otro desarrollo.

Y es por ello que he decidido abandonar la partida antes de que empiece y creo que será mejor que le des mi plaza a otro jugador que apreciará más que yo este tipo de rol que ofreces, ya que decididamente no es lo mío, ni lo que yo buscaba cuando mandé mi historia para entrar en la partida. Es una pena que llegara a cruzar 3 o 4 miniturnos con Andrei, pero siempre se puede asumir que Constanza se ha ido a vivir a otra parte, o que estaba de viaje y la han destruido, esas cosas pasan.

Gracias por todo y buena suerte.

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15/07/2010, 07:04
Director

Notas de juego

Ummm, me has pillado un poco en frío. El senescal tardará al menos un mes en llegar de viaje, serás una neonata, pero eres la Ventrue de mayor posición en la corte.

A ver ... ¿cuantos vampiros crees que había en Barcelona antes de la llegada del personal?, pues enumerando : Cneo, Roldan,Salomon , Aitor y tú. No hay más así de sencillo, estos cainitas son antiguos todos a excepción de tú, lo que se traduce en más de 300 años cada uno. Estamos hablando de una ciudad que tendría cuanto ¿40000 habitantes?, Barcelona no era por entonces lo que es hoy en día, ni de lejos ... , de hecho Zaragoza era mucho más importante que Barcelona, ahí se coronaban los reyes de Aragon, despues de la revuelta de los nobles de Zaragoza y "apaciguamiento" por Pedro el Ceremonioso, comenzo a perder importancia en beneficio de Barcelona, que en este tiempo empezaba a deslumbrar gracias al tráfico por el mediterraneo.

¿Marrón? ... ¿por donde?, el LaSombra tiene por delante una guerra, y como señor que es reclama la asistencia de sus vasallos. Sabes lo que hay en Cataluña, no solo en Barcelona, más abajo pues no , no tienes ni idea.

Sabe un LaSombra todos los "hermanos" que tiene en la peninsula ... pues no, creo que no, menos en la Edad Media, con los caminos tan malos y las comunicaciones asi..

Un LaSombra a lo Malkavian pssss ... los Malkavian no son los únicos que tienen trastornos mentales, es un magister ... no sabes por donde te va a salir, además un magister que data de un tiempo y cultura diferente a la de ahora.

Como te sentirias si mañana todo se volviese caos, el modo de vida que conoces se va a freir puñetas, hasta el punto de ver, que todo aquello por lo que luchaste se ha desmoronado. Imaginate que tú eres la unica que sabe leer y escribir en tu comunidad, que tú eres la única con inquietudes intelectuales que no puedes compartir con nadie.

La Edad Media significa un retroceso cultural y social brutal para con la Edad Clásica, y por ello el imperio romano.

Sí te sientes así, sí ... decididamente es lo mejor, una lástima ... pero bueno que se le va a hacer. En fin ... un abrazo. Si cambias de opinion aqui estamos, pero no puedo estar lidiando con posibles bajas cada dos por tres, necesito compromiso por parte de los jugadores, no puedo estar con estos altibajos, me echa abajo todo lo pensado e incluso me quita las ganas de postear :(.

Mucha suerte en tus partidas.