Partida Rol por web

No me puedo creer mi mala puntería. ¿Los dioses de Egipto se alían con estos chacales? Y lo peor no es solo eso, sino que Evelyn tampoco acierta sus disparos.

La cosa se tuerce. Pero no pasa nada, igualmente voy a patear el culo a estas desgraciadas ratas de agua dulce. -A mi señal, Eve, me agacho y disparas.- le susurro a mi mujercita.

-Vamos, muñeco de feria, a ver qué sabes hacer -provoca con palabras y sonrisas al que parece su jefe. Y ahí que vamos, esquivando, bloqueando su brazo y deteniendo el avance de ese cuchillo asesino. -¡Ahora, Eve!

Rick logra aguantar el envite del enemigo y no sufre daño.El pirata no logra acabar con el aventurero y ahora parece que Eve tendrá la oportunidad de disparar con su escopeta y luego le tocará el turno a las dos pistolas de Rick. 

En el resto del barco se hace el silencio, parece que ahora toda la emoción está en vuestro lado. Si el líder de los piratas cae seguramente huirán aterrorizados. Si triunfa puede que la mayoría de hombres que abandonan ahora el ataque regresen para seguir el ataque y entonces todos los del barco estaríais en verdadero peligro.

Por suerte para vosotros, los marineros acaban de poner en marcha los motores del barco a mayor potencia, es cuestión de minutos que logréis acelerar lo suficiente para que no puedan seguiros, pero antes debéis acabar con los que quedan sobre la cubierta.

No estoy muy atento a lo que sucede en el barco. Concentrado en esquivar el acero cruel del jefe de las ratas de río. Cerca está de degollarme, un suspiro más cerca, y adiós Rick. 

Pero es mi momento, un salto a un lado, un puñetazo aquí, un empujón y gano espacio para poder disparar contra el tipo y las sabandijas de sus secuaces. No valen las palabras de nada contra esta gente, no entiende más que de plomo y de hierros. Pues que así sea. Se van a tragar toda mi furia y la de Evelyn, que es mayor que la mía.

Inconmensurablemente mayor.

La verdad es que he estado un poco  lenta al ver como se desarrollaban los acontecimientos y reprimo un grito al ver como el filo del cuchillo pasa tan cerca del cuello de mi maridito.
Trago saliva apuntando a uno de ellos sin miramientos y apretando el gatillo de la escopeta, como se levante le dare un buen golpe con la culata hasta que le reviente los sesos. Dios, estoy asalvajandome 

Parece que tras el lapsus momentáneo del matrimonio O'Connell la situación se endereza. Evelyn dispara con la escopeta y el pirata sale volando por la borda con un agujero en el pecho. Rick no pierde el tiempo tras el disparo y comienza a golpear a los pocos que quedan y lanzarlos por la borda, para luego disparar un poco y acabar con los valientes que aún intentaban asaltar el barco.

Los marineros gritan de júbilo mientras los últimos piratas saltan al agua para escapar del barco, los motores rugen y el barco ya tiene suficiente velocidad para que las falucas se vayan quedando atrás en la oscuridad. En unos minutos el peligro habrá quedado atrás, habréis logrado salvar el barco y la vida de los que viajan en el mismo.

El contramaestre se acerca a vosotros y dicen que os desplacéis al salón, ya que se abrirán unas botellas para festejar la victoria contra los piratas.

Aún hay cuerpos de los asaltantes en la cubierta del barco, sus ropajes son negros y rojos. No los habéis visto nunca en las tribus de la zona, de eso estáis seguros.

En los brazos de algunos de los caídos, puedes ver escrito en antiguo egipcio: j m ḥtp.

La victoria se decantó finalmente hacia nuestro favor. Eve destrozó con la escopeta al jefe, y luego ya fue coser y cantar. En un plis plas nos cargamos al resto de asaltantes o logramos que se largaran con el rabo entre las piernas.

Lo primero fue abrazar y besar a mi mujercita -¿Todo bien? Eres una amazona increíble, cariño.

Luego examiné los ropajes de los piratas de agua dulce, sus armas, abalorios, algún detalle delator de quienes se trataba.-¿Evelyn, ¿te suenan de algo estas ropas? -¿Quedaría alguno con vida?

Después escuché la propuesta del contramastre. - ¿Algún herido en el pasaje o la tripulación?- pregunté, interesado. 

No podemos tener ni cinco minutos de tranquilidad por lo que parece, le sonrió devolviéndole el beso.
— Si, pero debería practicar un poco más. Aún no soy tan buena como mi adorado esposo - le guiño un ojo mientras sujeto la escopeta y miró a los atacantes, la verdad es que la ropa no me suena nada hasta que. Pongo los ojos en blanco y  murmuró algo bastante malsonante que se me ha pegado de Rick sin lugar a dudas. Una dama nunca dice semejantes palabras. —  Esa marca de su brazo, es el nombre de un viejo amigo nuestro al que esperaba no ver ni en una fotografía 

-A ver...

Cojo uno de los brazos de los muertos y aparto mas la ropa mostrando unas marcas, escrito en antiguo egipcio

- Significa Imhotep, o es una secta que le sigue o son un grupo de tontos que se han puesto el nombre por que les gustaba. Rick la respuesta es no, no pienso volver a la Ciudad de los Muertos a ver si sigue bajo tierra.

-Mon Dieu! -exclamé. Me fijé con atención, era correcto, como siempre, mi pequeña mujercita tenía razón. 

-E...Me has leído el pensamiento... ¿Tú crees que pueden ser nuevos seguidores? - Otra vez la pesadilla.

-Tienes razón. No es suficiente motivo para imaginar y sospechar. Está enterrado y bien enterrado. Sigamos diafrutando de nuestro viaje, cariño.

Si ese sueño era posible.

-Ni lo se, ni me importa. Esto tiene que ocuparse otra persona con turbante y tatuajes faciales. Si se les ha vuelto a escapar, que lo encierren en otro lugar - suspiro mientras le rodeo la cintura con mi brazo y me apoyo en el - Tengo miedo, pero se que estas a mi lado y que volverias desde la mismisima muerte para salvarme. 

El vapor sigue avanzando por el río y cada vez las falucas y el resto de piratas quedan más y más lejos. En la terraza están sirviendo licores para los pasajeros asustados y de paso para celebrar la tripulación la victoria ante los asaltantes.

El capitán se acerca a vosotros y os saluda formalmente aunque para vuestro gusto con demasiada pompa. Él no estaba presente en la confrontación, al menos en primera fila como su contramaestre pero parecía que había combatido durante horas.

- Muchas gracias por vuestra ayuda, han salvado muchas vidas y nos han ayudado a acabar con la amenaza de estos piratas de río. Mi segundo me comentó que usted tiene experiencia militar, ¿en qué unidad de los ejércitos de nuestro glorioso país ha servido? ¿Y usted señora, dónde aprendió a disparar? No es algo normal de ver en una dama.

Parece que está interesando en conocer algo más de vosotros. El último comentario no le hizo gracia a Evelyn, aunque la sociedad sigue siendo muy poco progresista.

-Sí, tienes razón, como siempre, cariño. Pero...también se que tenemos un imán para los problemas. El mundo no puede pasar sin nosotros -dije, con cierta arrogancia enmascarada en la broma.

Después celebración y bebidas. Casi temí que montaran un baile. Mira, el capitán, me dije.

-Gracias, capitán. Usted también se debatió con auténtico denuedo, ¿era usted? Lo mismo que su contramaestre. Él si fue excepcional en su comportamiento. 

Sonreí, mirando a Evelyn , y dejé que ella respondiese como creyese oportuno al capi. -Si le digo la verdad...(se la diría?), estuve en la Legión Extranjera Francesa, con el grado de capitán. Buenos tiempos, en realidad. -Crucé miradas con Evelyn.

-Los actuales son mejores, por supuesto. -No deseaba recibir las iras de mi maravillosa esposa. 

Solo sonrio a mi marido mientras se comporta politicamente de manera correcta con el capitan, al que no hemos visto en ningun momento. 

-Me enseño mi marido, una dama tiene que aprender a defenderse si esta sola o se encuentra arrinconada - mantengo la sonrisa y la compostura mirandolo, carraspeando. - La vida da muchas sorpresas, nunca espere casarme con alguien como Rick y aqui estamos

Seguís disfrutando la noche en compañía del capitán, contramaestre y el resto de los pasajeros del crucero. El barco se aleja del lugar del incidente. Tras el bullicio os alejáis un poco de la gente y disfrutáis de la noche, en ese momento el contramaestre se acerca a vosotros. 

- Quiero agradecerles la ayuda prestada esta noche, la Corona necesita gente como ustedes.  

Os entrega una carta sellada con un sello que no habéis visto nunca.

- Si están ustedes interesados en servir a su majestad, tras su luna de miel vayan hasta Watford Manor. En esta carta están las indicaciones que serán necesarias para llegar allí. En dicho lugar les indicarán como ayudar a la Corona.

Me sorprendo por la inesperada "invitación" del contramaestre. Miro el sobre, miro al hombre a los ojos, y le doy unos toquecitos al sobre contra mi otra mano. "Inteligencia Militar". Hum.

-Lo...estudiaremos. Vamos primero a intentar disfrutar de nuestro viaje. Que apenas empezado y ya está lleno de sobresaltos.

Y yo que quería dejar atrás mi carrera loca de aventuras y dedicarme a una vida hogareña con Evelyn. ¿De verdad? ¿A quién pretendo engañar?

Cuando tengamos un momento aparte, le pregunto a Eve -¿Qué te parece el asunto, mujercita? Ayudar a la Corona. un eufemismo de salvarle el culo.  -Luego, a su lado, abrimos la carta, y leemos su contenido. 

Mientras charláis sobre si ayudar o no a la Corona, el barco se acerca a puerto y la noche va dejando poco a poco pasó al día. Una aventura más para vosotros que será especial al ser la primera como matrimonio.

Finalmente la noche pasa tranquila, apagados los nervios en aun poco de alcohol ambarinos y con mi gatita acurrucada entres mis brazos. Aunque no pude pegar casi ojo, pensando en lo sucedido, con el cuerpo activado y meditando acerca de la oferta. Una proposición cuanto menos interesante pero...trabajar para el gobierno...no resultaba bueno especialmente a la larga. 

Me quedé eso, reflexionando. Eve era más responsable, y sería quien tomaría la decisión que ambos seguiríamos.